Según datos de la Organización Internacional del Trabajo, debido a la interrupción de la

actividad económica por el COVID 19, millones de empleos han tenido una reducción de horas
de trabajo, lo que implicará ingresos más bajos. Por otro lado, un 60% de los trabajadores
informales se han quedado sin ingresos y en el sector formal, cada vez se están perdiendo
cientos de miles de empleos. Esto mismo está causando ansiedad y depresión, lo cual pone
sobre el escenario una Gran Pregunta: ¿Cuál es la solución al desempleo y la disminución de los
ingresos?

La Biblia, a través del Ápostol Pablo en Felipenses 4:12, “Sé vivir con casi nada o con todo lo
necesario. He aprendido el secreto de vivir en cualquier situación, sea con el estómago lleno o
vacío, con mucho o con poco”.

Esto, claramente nos muestra dos importantes acciones a seguir para salir adelante ante este
desafío.

1. Somos invitados a confiar en Dios, a creer que él cuida de nosotros y siempre nos dará
lo necesario
2. Somos invitados a ajustar nuestro estilo de vida a nuestra realidad. En caso de
desempleo o la reducción de nuestros ingresos, entonces debemos ajustar nuestros gastos a un
estilo de vida según esa realidad. Ya otros lo han hecho, tú también puedes hacerlo.