Un gato enamorado.

Había una vez un gato que se llamaba Manchitas, él era un gato muy activo y
desastroso, pero siempre veía por su ventana una linda gatita que lo hacía,
sentir mariposas en el estómago.Un día tuvo la valentía de acercarse y
decirle a aquella linda gatita lo que sentía por ella .
La gatita aceptaria su propuesta a cambio de que le regalara un ratón para
poder entretenerse, Manchitas aceptó la condición y salió en busca de un
ratón para su amada, a cabo de unas horas Manchitas se sentía triste ya que,
no era capaz de atrapar un ratón, hasta que alzó la mirada y Carita cambió su
expresión.
Vio a lo lejos una ratoncita muy linda de pelo blanco,manchas se sentía
confundido, no sabía cómo acercarse a aquella ratoncita ya que, su intención
no era atraparla, si no, conocer a la linda ratoncita y poder conquistarla para
que después aceptara ser su novia.
La ratoncita se percataria de la presencia de Manchitas atrás de ella, tenía
miedo de ser atrapada por él, pero se comportaba de manera torpe y
distraído, lo cual le hizo sentir la inquietud por que la seguía desde un buen
rato?
Manchitas al estar frente a la ratoncita se paraliza y su corazón late tan fuerte
como nunca antes; la ratoncita rompió el silencio hablando sobre su pregunta,
a lo cual Manchitas con tartamudez, respondió: eres una ratoncita muy linda y
me gustaría que aceptaras salir conmigo; la ratoncita impactada y sonrojada
aceptó salir con el.
Manchitas se dio cuenta de una cosa, la ratoncita había aceptado salir con él
sin pedir nada a cambio, se sentía muy feliz.Sin embargo, Manchitas aprendió
una gran lección de esta situación “Las personas que de verdad te quieren,
van a estar sin pedirte nada a cambio ”.
Y así fue como Manchitas y la ratoncita tuvieron su primera cita.