Está en la página 1de 13

Ingeniería

Industrial
Análisis de la Realidad Nacional

Janeth Muñoz Ortiz


Javier selvas López
Alan Bonilla Jaques
Obed Bailón Cisneros
Edgar Bustamante Medina
Aldair Soto Hernández
Jesús Armando Landeros García

Ingeniería Industrial y de Sistemas

1
Contenido
3. Proyección socioeconómica de la industria en México..................................3

Introducción..........................................................................................................3

3.3 Pequeña y mediana empresa....................................................................5

3.4 LA GRAN INDUSTRIA NACIONAL....................................................................9

La pobreza y su medición.....................................................................................11

2
3. Proyección socioeconómica de la industria en México

Introducción

La industrialización es la creación de industrias con carácter predominante en la


economía de un país. El proceso de industrialización describe el periodo transitorio
de una sociedad agrícola a una industrial.

La industrialización en México inicia en el Porfiriato, en 1880 se inició el proceso


de la expansión económica con la construcción de ferrocarriles financiados por
inversiones extranjeras que también facilitaron el acondicionamiento de los
puertos, la explotación de las minas, operaciones de establecimientos bancarios,
transportes y grandes casas de comercio.

Este trabajo nos habla sobre varios aspectos de la industria en México del estado
en que se encuentra nuestro país respectos a las microempresas y la pequeña y
mediana empresa de como diferenciarlas, de su importancia en nuestro país,
ventajas y desventajas que ellas tienen y del futuro que nuestro país tendrá con
respecto a la industria, también de las estrategias de crecimiento de otros países.

Es imprescindible constituir un organismo que elabore, evalúe y dé seguimiento a


la política en materia industrial. El carácter de dicho organismo, su composición,
sus
funciones y su capacidad de decisión en los componentes de la política industrial,
son aspectos que deberán puntualizarse mediante estudios. Obviamente algunos
contenidos no podrán definirse si no tenemos claridad respecto a los instrumentos
y los objetivos de la estrategia industrializadora.
En segundo lugar, la experiencia revela que es imprescindible dejar atrás los
elementos negativos que presentó la política industrial durante el proceso de
sustitución de importaciones. En esta línea de investigación, algunas ideas que
deben ser superadas se refieren a las que le atribuyen a la industrialización
capacidad para resolver todo tipo de problemas. Con la posición de industrializar a

3
toda costa, se propició la participación del Estado mediante apoyos
indiscriminados. Se entiende ahora que los apoyos y los subsidios deben ser
temporales y deben asimismo estar sujetos a respuestas productivas y de
exportación por parte de las empresas. ¿Cómo medir la temporalidad? ¿Cuáles
son los límites mínimos aceptables para mantener los respaldos estatales? Estas
y otras cuestiones se deberán esclarecer mediante indagaciones específicas.
En tercer lugar, el establecimiento de una política industrial debe vislumbrar dos
ámbitos simultáneamente. El largo plazo, que implica fomento a la inversión
productiva, y por tanto al desarrollo científico-tecnológico, y el corto plazo, cuya
preocupación central es la utilización eficiente de los recursos existentes. En el
manejo de algunos instrumentos, la estrategia de largo plazo puede resultar
contradictoria con la política reactivadora de la actividad industrial. Por ejemplo, la
presencia de grandes capacidades ociosas no concordaría con la ampliación de
créditos blandos para incentivar la inversión fija. Esto es parte de lo que un trabajo
de investigación tendría que resolver. Por último, la medición de las ventajas
comparativas sociales es un instrumento imprescindible para impulsar la política
industrial en una economía abierta. Cuando esta medición se efectúa de manera
muy agregada, no se pueden detectar las empresas con diferente productividad. A
su vez, el cálculo, de las ventajas comparativas sociales para el mediano y largo
plazos, toma en cuenta de manera más realista la potencialidad productiva de un
país. La desagregación y el mediano plazo se deben incluir en el estudio de la
eficiencia social de la industria.
Estas cuatro líneas de investigación acerca de la política industrial tienen como
trasfondo, ya insinuado en la primera línea, la concertación de los organismos
implicados. Los programas no son realizables por sí mismos, se requiere de la
presencia activa y convencida de los organismos productivos.

4
3.3 Pequeña y mediana empresa

Las micro, pequeñas y medianas empresas forman un segmento importante de la


economía, particularmente a nivel nacional, pues generan un gran aporte en
cuanto a productos y servicios. Así como también poseen una capacidad única de
adaptarse a las nuevas tecnologías, la sociedad y los cambios de tendencia.
Es por esto por lo que en México el gobierno crea programas para aumentar la
participación de las PyMEs en el mercado nacional e internacional. Las PyMEs
promueven el desarrollo económico, la expansión del mercado, la generación de
empleos y una distribución de riqueza más equitativa.
En el caso de la economía mexicana, las PyMEs representan una gran cantidad
de las empresas del país, como se verá a continuación. Por ende, también
representa una gran parte de la actividad económica de la nación

1. Microempresas
Ocupan menos de 10 personas empleadas y un volumen de negocios que no
supera los 4 millones de pesos en ventas anuales.
2. Pequeña empresa
Su personal laboral varía entre los 15 a 100 empleados y suele alcanzar un
balance general anual de 100 millones de pesos.
3. Mediana empresa
Con un personal que ronda entre los 100 a 250 empleados, las empresas
medianas pueden lograr ventas valoradas anuales hasta los 250 millones de
pesos.
De hecho, en la actualidad el término PyMEs ha pasado a incorporar a las
microempresas, siendo usado también el término MIPyMEs.
Ya que entendimos la división de las PyMEs de acuerdo con su número de
empleados, ahora podemos categorizarlas conforme el tipo de recursos que tienen

5
disponibles. Dentro de esta modalidad existen tres categorías que permiten definir
a una empresa como PyME o no:

El panorama de las PyMEs en México


En el caso de México, las pequeñas y medianas empresas representan el motor
económico del país, con casi 4.1 millones de PyMEs de acuerdo con
la investigación realizada por el Instituto Nacional de Estadística, Geografía e
Informática (INEGI). Las PyMEs aportan un 42% del Producto Interno Bruto (PIB)
y generan el 78% del empleo nacional.
Específicamente, dentro del porcentaje de las MIPyMEs en México, el 95,4%
representan microempresas, mientras que un 3,6% se relaciona con pequeñas
empresas y otro 0,8% a los comercios medianos.
Así, siendo un motor importante para México, las pequeñas y medianas empresas
abarcan diferentes sectores y necesidades para la población, siendo las más
relevantes las del sector de comercio, industrias y servicios.
Y es que, debido a su cercanía con grandes potencias económicas como los
Estados Unidos, México es un atractivo para aquellos que buscan emprender en
nuevos mercados que generen un impacto económico a nivel local y que permitan
el intercambio comercial internacional.
Importancia de las pymes en México
Las pymes tienen un papel muy importante en la economía mundial, ya que logran
hacer cosas que empresas colosales nunca podrían conseguir con la misma
facilidad, rapidez y dinamismo. No obstante, para cada territorio existen
particularidades que es importante tener en cuenta a la hora de entender a estas
empresas.
La relevancia de este tipo de empresas en México está relacionada con dos
aspectos fundamentales: su contribución a la estabilidad económica del país y su
papel como empleadoras de los trabajadores mexicanos.
Las pymes son una importante fuente de riqueza en el país, pues sus actividades
económicas representan más del 52 % del Producto Interno Bruto (PIB) de la

6
nación. Esto significa que los negocios pequeños contribuyen con más de la mitad
de las operaciones financieras en el territorio.
El conjunto de las micro, pequeñas y medianas empresas en el territorio nacional
emplea a cerca del 70 % de las fuerzas trabajadoras y productivas en el país. Esto
se traduce en que, sin pymes, los niveles de desempleo serían aún más elevados
en México y, por tanto, también los índices de pobreza.
Ahora que sabes por qué son tan importantes estas empresas para el país,
veamos cómo se comportan las pymes nacionales y cuál es su actualidad en la
economía mexicana.
¿Cuántas pymes hay en México?
En México existen más de 4,1 millones de pymes que, de acuerdo con el INEGI,
representan el 99,8 % de los establecimientos económicos del país. Esto significa
que, de cada 1000 empresas, solamente dos son grandes compañías, mientras
que 998 son pymes.

Estadísticas sobre las pymes en México


El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) es la entidad responsable
del monitoreo y análisis de los datos recabados sobre la actualidad de la actividad
económica en el país. Revisemos algunas de las estadísticas más importantes
presentadas en su informe de 2020:
Datos de empleabilidad
El 37,2 % de los trabajadores en el país son empleados por microempresas.
El 14,8 % son empleados por pequeñas empresas.
El 15,9 % por medianas empresas.
63 % de los empleados en pymes son hombres y 37 % mujeres.
Datos de crecimiento
Desde el año 2005 ha habido un crecimiento del 60 % en el número de pymes en
el país.
Durante el 2009 se crearon más de 600.000 nuevas pymes en México.
Datos de sector comercial

7
El comercio minorista representa la actividad preferida por las pymes en el país,
con más del 19 % de ellas en el sector.
La minería es la actividad que menos pymes realizan, con menos de un 0,5 %.
Datos por entidad
La Ciudad de México es hogar de la mayor concentración de pymes en el país,
con un 14 %.
La Ciudad de México, Jalisco, el Estado de México, Nuevo León, Guanajuato, Baja
California y Veracruz son las entidades con mayor número de pymes.

8
3.4 LA GRAN INDUSTRIA NACIONAL
La industria en tanto en nuestro país como en el mundo ha pasado por una serie
de etapas como consecuencia de los diferentes avances tecnológicos suscitados
como la Revolución Industrial, la invención de nuevas tecnologías y herramientas
para el trabajo.

En nuestro país, la industria ha evolucionado paralelamente a los avances que se


fueron dando a nivel mundial. La situación de protección a la industria y las
exigencias de informe tecnológico puestas por el gobierno para aprobar las
reinversiones, crearon un ambiente en el que se podía experimentar con la
tecnología industrial sin correr grandes riesgos.

Esto ha resultado en una cierta preparación, para evaluar, a nivel de empresa, las
condiciones tecnológicas requeridas para la competencia internacional. En
general, sin embargo, el cambio técnico se ha orientado a adoptar la tecnología a
las características de la materia prima industria, a satisfacer especificaciones
estrictas a clientes ya a lograr que las instalaciones almacenen niveles de
rendimiento cercanos a los específicos para otras escalas de producción, tipo de
materias primas, etc.

El hombre, desde los albores mismos de su existencia, siempre buscó la manera


de transformar y elaborar los productos brutos de la naturaleza a fin de
aprovecharlos mejor. Sus primeras armas, herramientas y utensilios de uso
doméstico nacieron de este afán creador. Hoy son innumerables los objetos
fabricados por él que dan mayor bienestar y seguridad a su existencia. Todo esto,
ya se trate de un simple botón de una camisa o de un tren, representa el progreso
material que ha alcanzado la sociedad en la cual vivimos. Constituye el fruto de la
inteligencia y del trabajo del hombre que, a través de los siglos, ha venido

9
sumando sus conocimientos y experiencias hasta formar nuestra actual
civilización.

Cuando la elaboración y transformación de los productos naturales se realiza en el


hogar o en un taller, en forma individual o por un grupo reducido de individuos,
constituye la actividad económica llamada artesanía. Sus herramientas e
instrumentos de trabajo son tradicionales; es decir, que no han variado a través
del tiempo. Así, por ejemplo, decimos que el zapatero, el carpintero, el herrero o
alfarero practican la artesanía.

Cuando esta actividad se realiza en grandes establecimientos en forma


organizada y con medios mecánicos, recibe el nombre de industria y constituye el
aspecto más importante de la economía de los países más desarrollados.

Cuanta más actividad industrial haya en un país habrá mayor bienestar para sus
pobladores. La producción manufacturera se vende también al exterior. De los
beneficios de capital o dinero se harán inversiones en otras fábricas y obras
públicas y privadas. El país se llama desarrollado. Muy pocos países en el mundo
han alcanzado esta condición. La mayor parte: no tienen una industria adelantada
y basan su economía en actividades extractivas y agropecuarias. Se llaman
países subdesarrollados. Sus materias primas tienen que ser vendidos a los
países desarrollados para que en sus fábricas los transformen. Los productos
elaborados retornan a precios mucho más elevados.

Compuesto por el dinero, moneda o capital de inversión, factor fundamental para


la instalación y desarrollo de una industria, mediante el cual se adquieren los
diversos elementos para conformar o desarrollar una industria. Es utilizado para la
adquisición de materia prima, compra o alquiler de bienes inmuebles (terrenos,
fábricas o locales donde se instalará la industria); bienes muebles conformados
por toda la maquinaria e infraestructura requerida, el pago de personal profesional,
técnico, mano de obra, etc. y todo gasto general.

10
Para el desarrollo efectivo de una industria, se requiere de grandes inversiones de
Capital, el cual permita contar con los recursos necesarios para llevar a cabo el
proceso de producción y venta de determinados productos. La administración del
Capital, es de enorme prioridad, su aprovechamiento permitirá que sea reutilizado
o capitalizado en la misma industria u otras.

La pobreza y su medición

En México hay muchas definiciones de pobreza. La más utilizada es la llamada


pobreza multidimensional que se calcula a partir de la información que el Inegi
recaba cada dos años a través de la ENIGH. Una persona se encuentra en
pobreza multidimensional cuando tiene al menos una carencia social y sus
ingresos son insuficientes para adquirir los bienes y servicios que requiere para
satisfacer sus necesidades.

Las carencias sociales se refieren a la falta de acceso a la salud, a la seguridad


social, a la educación, a una vivienda, a servicios básicos en la vivienda y a la
alimentación. En lo que hace a los ingresos, se definen dos canastas: la
alimentaria básica y la ampliada que contempla otras necesidades adicionales. A
partir del cálculo de la pobreza multidimensional se estima otro conjunto: el de
pobreza multidimensional extrema. En este grupo se encontrarán quienes tengan
tres o más carencias y tengan un ingreso tan bajo que, aunque lo dedicaran por
completo a la adquisición de alimentos no podrían tener los nutrientes necesarios
para una vida sana.

La última lectura de este indicador mostró que en 2020 se encontraba en


pobreza multidimensional 43.9% de la población, 55.7 millones de personas, y en
extrema 8.5%, equivalente a 10.9 millones de personas. El incremento en la
carencia de acceso a la salud fue la que mostró un salto importante ese año,
pasó de 16.2% de la población en 2018 a 28.2% en 2020.

11
Además de esos indicadores usuales de pobreza, Coneval publica cifras sobre la
población vulnerable por ingresos y aquella vulnerable por carencias sociales.
Hemos hecho de la medición de la pobreza toda una ciencia.

Hay un indicador más frecuente de pobreza. La pobreza laboral sale de la ENOE


y muestra el porcentaje de la población que no puede adquirir la canasta
alimentaria básica con el ingreso proveniente de su trabajo. Hay varias
consideraciones que hacer a esta métrica. En primer lugar, la medición del
ingreso está subestimada. La gente suele mentir a la baja cuando se le pregunta
cuánto gana. En segundo, el ingreso del trabajo representa alrededor de 65% del
total de los ingresos que recibe un hogar porque también existen ganancias de
capital, remesas o transferencias.

La pobreza laboral del último trimestre de 2021 captura la recuperación del


empleo que se vivió el año pasado posterior al choque por la pandemia. En los
últimos tres meses del año se sumaron más de 700 mil empleos —formales e
informales— lo que contribuyó a un descenso de la población que se ubicó en
pobreza laboral. En el tercer trimestre de 2021, este porcentaje fue 40.7% y al
cierre de 2021 había disminuido a 40.3%.

Sin embargo, esta reducción no es suficiente para ubicarnos en las cifras de


pobreza —que no eran positivas en sí mismas— de los meses previos a la
pandemia. En el primer trimestre de 2020, el último periodo que podríamos
considerar pre-covidiano, la pobreza laboral fue 36.6% de la población. Al cierre
de 2021 había 5 millones 511 mil 194 personas en pobreza laboral más que las
que había hace poco más de año y medio.

Una política fiscal contracíclica hubiera ayudado a que estas cifras de pobreza
fueran menores. Más bien, hubiera ayudado a millones de mexicanos a sortear
mejor —en términos económicos por lo menos— una de las mayores crisis de la
historia reciente. Primero el pobre quedó solo en palabras. Un eslogan de
campaña. Uno más.

12
13

También podría gustarte