Está en la página 1de 8

DESPIERTA TU IMAGINACIÓN

Dios te puso aquí con un propósito. Tiene un plan para tu vida. Tiene un sueño para tu vida. Dios quiere usarte
para un gran propósito mayor de lo que te puedes imaginar. Por eso te hizo Dios. Te hizo para poder usarte en
esta Tierra.

El problema está en tu cabeza. Tienes bloqueos mentales. Tienes barreras emocionales que te mantienen
diciendo, ¿cómo me va a usar Dios? Así que para que Dios te use, para que Dios bendiga tu vida como Él
quiere, tiene que haber cambio en tu pensamiento, en tu imaginación.

Todas las grandes visiones o sueños que sucedieron en la historia empezaron como una idea en la imaginación
de alguien. Empieza con un pensamiento en tu mente antes de hacerse realidad. Los sicólogos nos dicen que si
realmente quieres vivir, tienes que aprender a tener un sueño. Tienes que tener un sueño en la vida, de otro
modo no estás más que existiendo.

Eso es bueno, pero no llega lejos. Necesitas más que un sueño. Necesitas encontrar, todavía más importante, el
sueño de Dios para tu vida. ¿Por qué te puso Él en la tierra? ¿Para qué te quiere usar? Por qué, si Dios no te está
usando, ¿para qué está usando tu vida ahora?

“Ningún ojo ha visto, ningún oído ha escuchado, ninguna mente ha imaginado lo que Dios tiene preparado
para quienes lo aman.” 1 Corintios 2:9

El sueño de Dios para tu vida es demasiado para tu mente. Es tan fantástico que ni siquiera lo puedes imaginar.
No puedes imaginar lo que Dios puede hacer con tu vida si se te dio total, completa e irrevocablemente a Él. No
tienes ni idea de lo que Dios puede hacer de tu vida.

“(Dios) puede lograr mucho más de lo que pudiéramos pedir o incluso imaginar mediante su gran poder, que
actúa en nosotros..” Efesios 3:20

Uno de los grandes dones que Dios te ha dado es la imaginación. La habilidad de imaginar es una de las cosas
que diferencía a los seres humanos de los animales. Fuiste hecho a imagen de Dios. Así como nuestro Creador,
eres creativo. Tienes la habilidad de imaginar. Napoleón dijo: “La imaginación dirige al mundo”. Einstein
señaló: “La imaginación es más importante que el conocimiento”.

Lo que quiero realizar hoy es expandir tu imaginación porque eso es lo que Dios quiere hacer. Quiere que te
imagines cómo puede Dios usarte en formas que nunca pensaste. Vamos a mirar la vida de Josué, un hombre en
la Biblia que revela cuatro secretos para ser usado por Dios.

Si quieres ser usado por Dios, si quieres la bendición de Dios en tu vida, si quieres Su sueño para tu vida…
IMAGINA CÓMO TE PUEDE USAR DIOS
Josué 1:1-11

1. DEJA IR LA DUDA .

La duda es un gran enemigo del sueño de Dios para tu vida. La duda limita tu potencial. La duda causa la
postergación. La duda hace que te pierdas lo mejor de Dios. Dices: “Dudo que Dios pueda usarme para algo
grande, ¡mírame! Y sales con todo tipo de excusas y de dudas.

“Porque una persona que duda tiene la lealtad dividida y es tan inestable como una ola del mar que el viento
arrastra y empuja de un lado a otro. Esas personas no deberían esperar nada del Señor” Santiago 1:6-7

Así que antes de que puedas ser usado por Dios en una forma grandiosa tienes que arreglar el asunto de la duda.
Que de hecho dudas acerca de que Dios pueda usarte para algo grande.

Josué tenía un problema con la duda. En el Antiguo Testamento hay una historia de un individuo llamado Josué
y tenía un problema de confianza en sí mismo. No se sentía muy seguro por dos razones:

1. Era el sucesor de Moisés. ¿Cómo sería ser sucesor de la actuación de Moisés? Cómo decir: “¡Aquí está
Moisés!”, de quien Deuteronomio dice que fue el mejor hombre que ha vivido nunca y ahora, “¡aquí está
Josué!” ¡Grande! Yo tendría un poco de inseguridad siendo sucesor de la actuación de Moisés. No sólo
eso, sino el trabajo que Dios le asignó. Le dijo, “Josué, vas a ser el individuo que va a entrar y a guiar a
esta pequeña banda de esclavos que ha estado corriendo alrededor del desierto con miedo por cuarenta
años, los vas a guiar a apoderarse de la tierra prometida, el área de Palestina. Sólo hay un problema
Josué. Palestina está habitada por siete naciones enemigas, cada una de las cuales es más grande y más
fuerte que ustedes. Pero ustedes se van a apoderar de ella”.

2. Por consiguiente, tenía mucha duda, mucho miedo. No tenía mucha seguridad en su vida. Así que justo
al borde de empezar su campaña, que iba a ser una batalla por muchos años, estaban en los bancos del
río Jordán y van a cruzar el río y a empezar la tarea de apoderarse de Palestina que estaba ahora donde
está el Israel de hoy. Y en esa campaña, la noche anterior, dijo Dios: “Deja que te dé una charla
preparatoria”. En Josué 1 dice cuatro veces: “Sé fuerte y valiente”. Dijo: “Josué, la primera cosa que
tienes que hacer, si voy a usarte, es dejar de dudar”.
“Mi mandato es: “¡Sé fuerte y valiente! No tengas miedo ni te desanimes, porque el Señor tu Dios está contigo
dondequiera que vayas”” Josué. 1:9

¿Qué significa eso? Significa desecha, destruye, quita de tu vista el desánimo. Y si Dios te va a usar, lo
primero que tienes que hacer es dejar las dudas. Piensas: “Es bastante difícil”. No, no lo es. No es muy
difícil dejarte de dudas. ¿Por qué? Porque la duda es una elección. Cada vez que dudas estás escogiendo
dudar. Es una elección, lo mismo que cualquier otra actitud. La fe es una elección, la duda es una
elección. Sea que estés dudando de Dios, de tus habilidades, o de otra gente, estás eligiendo dudar.

No entiendo la lógica, pero mucha gente cree en sus dudas y duda de sus creencias. No tiene sentido. Es
como ilógico. Quiero sugerir que tú dudes de tus dudas y creas en tus creencias. Tiene mucho más sentido.
Y cuando vienen las dudas y dices: “Dios no me podría usar”, piensa: “Tengo esa duda, pero dudo de la
duda”. En vez de eso, voy a creer en mis creencias. Dios dijo: “Te voy a ayudar, te voy a usar, quiero
actuar en tu vida”.

¿Qué ocasiona que yo dude?

¿Por qué dudamos tanto de nosotros acerca de que Dios nos use? Hay dos cosas que causan duda en tu vida.

A. Comparación.
Comparar mis habilidades me causa dudas de mis habilidades. En vez de mirar a Dios como debo de hacer,
empiezo a mirar alrededor a todos los otros. Miro alrededor y veo a otra gente. Tienen más talento. Tienen más
habilidades. Tienen más educación. Tienen más experiencia. Lucen más. Tienen mejor trasfondo. Y más y más
y más. En el momento que empieces a compararte con otra gente, vas empezar a llenarte de dudas de ti mismo.
Dios dice que no hagas eso. De hecho, la Biblia dice que es tonto compararse con otra gente,

“pero solo se comparan el uno con el otro, empleándose a sí mismos como estándar de medición. ¡Qué
ignorantes!” 2 Corintios 10:12

Cuando lo haces empiezas a mirar alrededor y a decir: “Soy simplemente una persona normal, soy una persona
ordinaria”. Dios usa a personas normales. Si Dios sólo usara gente perfecta, no se iba a hacer nada porque no
hay gente perfecta. Dios usa gente normal. Dios usa gente débil. Dios usa gente con problemas. Dios usa gente
con motivos mixtos. Dios usa gente disfuncional. Puede usar gente extrañísima, todo tipo de gente. Dios no
quiere que te compares a nadie más. Quiere que seas único. Quiere que tú seas tú. Así que no te compares.

B. Recordar.
La otra cosa que causa duda de uno mismo es recordar tus fracasos. Acordarnos de nuestro pasado, nuestros
fracasos, es como hacer una película de todas tus equivocaciones y repetirla en tu mente. Y la repetimos y la
practicamos, y ahí vamos una y otra vez.

Dios no quiere que te enfoques en tu pasado. Si te mantienes enfocado en las equivocaciones del pasado, en
tus fracasos, nunca vas a ocuparte del presente y Dios no te puede usar en el futuro. Dios dice que olvides el
pasado. Si miras al pasado y a todas tus equivocaciones (y todos nosotros tenemos muchísimas equivocaciones
en nuestro pasado) entonces vas a pensar: “Dios no me puede usar. Mira todas las cosas que he hecho. Mira mi
pasado con equivocaciones. Si la gente supiera mi pasado no me seguiría o no me escucharía o no les gustarían
mis ideas”.

¿Has leído la Biblia últimamente? La mayoría de los líderes de la Biblia no tienen exactamente un historial de
plata. El pasado de cada uno de ellos fue bastante accidentado y lleno de muchas cosas malas. Moisés fue un
asesino antes de ser un gran líder. Jacob robó la herencia familiar. David fue un adúltero y después mató al
marido de su pareja. ¡Eso no está bien! No es bueno. ¡Abraham dio a su mujer dos veces! “¡Salva mi vida,
toma a mi mujer!”. ¡Qué gran hombre de fe! Pablo fue un terrorista religioso antes de que Dios se hiciera cargo
de él. Pedro un perro de mar que trabajaba duro, bebía duro, blasfemaba duramente. Era un marinero que juraba
por arriba y abajo. Tenía un genio irrefrenable y siempre andaba metiendo la pata. Sin embargo Dios le dijo:
“Pienso usarte”.
Lo que estoy diciendo es que Dios usa a gente con pasado accidentado. ¿No te alegras de ello? Dios dice:
“No me importa dónde has estado. Lo que realmente importa es la dirección a la que se dirigen tus pies
ahora mismo”. Eso es lo que importa”.

¿Dónde puso Dios los ojos en tu cabeza? ¿Frente de tu cabeza o detrás de ella? Los puso enfrente de tu
cabeza para que miraras hacia adelante y no hacia atrás. Cuando Dios añadió las orejas al cráneo ¿las puso
mirando hacia adelante o hacia atrás? Las añadió hacia adelante para que pudieras escuchar las promesas de
Dios en vez de escuchar lo que la gente dice a espalda tuya. Quiere que enfoques hacia adelante. Cuando
Dios añadió los brazos a tu cuerpo, los puso para que fuera más fácil alcanzar hacia adelante que alcanzar
hacia atrás. Porque quiere que alcances lo que está frente a ti, ayudando a otra gente. Cuando puso tus pies
en los tobillos, ¿los añadió mirando para adelante o para atrás? Los colocó mirando hacia adelante. Quiere
que andes hacia adelante con fe y no hacia atrás con miedo. De hecho, en toda tu anatomía, sólo hay una
parte de tu cuerpo que mira tu pasado. No se le llama “el trasero”, solo porque sí, jejejejejeje.

2. BUSCA UNA PROMESA DE DIOS .

Busca una promesa de Dios. La palabra “Promesa” es una palabra muy importante en la vida de Josué y es la
clave de su éxito. La palabra “promesa” se usa 13 veces en el libro de Josué. Si fueras a resumir la vida de
Josué sería “Apodérate de la tierra prometida”. Dios se la prometió a él. Y al principio, cuando estaban en la
orilla del río Jordán preparándose para empezar esta gran campaña, Dios le recordó: “Simplemente acuérdense
de la promesa que hice”.

“Te prometo a ti lo mismo que le prometí a Moisés: “Dondequiera que pongan los pies los israelitas, estarán
pisando la tierra que les he dado” Josué. 1:3

Encierra en un círculo la frase “yo les he dado”. Dios no puede mentir. Si Él te hace una promesa la cumple. Si
dice que te va a usar, lo hará. Si dice que te va a bendecir, te bendecirá. Si dice que te va a proteger, te
protegerá. Porque Dios no puede mentir.

Al terminar la vida de Josué muchos años después, cuando ya era muy viejo y estaba a punto de morir, miró su
vida y vio que habían conquistado toda Palestina. Al final de Josué 23 dice así:

“Ustedes saben que cada promesa del Señor su Dios se ha cumplido. ¡Ni una sola ha fallado!”
Josué. 23:14

¿Quieres ser usado por Dios? ¡Ve a este libro, la Biblia! Es el libro de promesas de Dios, la Biblia. Hay más de
7,000 promesas en este libro. Son como cheques en blanco esperando que los metan en el banco. Si vas a crecer
en la fe, has de construir en las promesas de Dios.
¿Qué promete Dios si decimos “quiero ser usado, quiero que me uses para el propósito por el que me pusiste en
el mundo?”, ¿qué promete Dios? Te promete tres cosas. Las tres se encuentran en Josué 1.

3 Promesas para los que viven para Dios

1. DIOS TE DARÁ FUERZAS Josué 1:5

Promesa uno. Fuerza. El versículo 5, “Nadie podrá hacerte frente”. En otras palabras, te va a dar poder para
hacer lo que te pide. Te va a dar la fuerza para hacerlo. Donde Él lleva, Él paga.

2. DIOS TE DARÁ ÉXITO Josué 1:7


Promesa dos. Éxito. En este versículo dice, “te irá bien en todo lo que hagas”. Dios quiere que tengas éxito
sirviéndole. No quiere que seas un fracaso. Quiere que tengas éxito. Dos veces en este capítulo dice “Vas a
tener éxito”. Puedes contar con ello.
Ahora, no está prometiendo que vas a ser un éxito en lo que tú quieres hacer. Por eso fallas. Por eso caes. Por
eso tropiezas, porque muchas veces estás haciendo lo que tú quieres hacer, no lo que Dios quiere que hagas. Si
quieres ser un éxito en la vida, es muy sencillo. Empieza por hacer aquello para lo que Dios te hizo y te
garantiza que vas a ser un éxito. Dios no garantiza tu éxito en cosas que tú piensas que van a ser divertidas. Dios
garantiza tu éxito en las cosas por las que te puso en la tierra para que seas y hagas. Si no estás triunfando
necesitas cambiar el curso y entrar en lo que Dios planea que tú hagas.

3. DIOS TE DARÁ APOYO Josué 1:9


Tercera Promesa: Apoyo. Vas a tener el apoyo del Señor. En el versículo 9, Él dice: “Estaré contigo
dondequiera que vayas”. A la palabra de Dios hecha a la manera de Dios no va a faltarle el apoyo de Dios.

¿Te gustaría cambiar la depresión, el desánimo, el fracaso por la confianza y la aceptación de Dios? ¿Hay
forma? Apodérate de una promesa de Dios. Dios tiene muchas, muchas promesas para ti en este libro pero tú
tienes que descubrirlas.

“Estudia constantemente este libro de instrucción. Medita en él de día y de noche para asegurarte de obedecer
todo lo que allí está escrito. Solamente entonces prosperarás y te irá bien en todo lo que hagas.”
Josué 1:8

¡Vaya promesa! Encierra en un círculo cinco palabras en este versículo -“estudia”, “medita”, “obedecer”,
“prosperarás” y “te irá bien”-. ¿Cuántos de ustedes dirían que quieren prosperar en la vida? ¿Cuántos de ustedes
dirían que quieren tener éxito en la vida? La Biblia te dice cómo aquí mismo. Date cuenta que las promesas de
Dios de tener éxito no están basadas en tu habilidad. Están basadas en tu compromiso con la Palabra de Dios.
Date cuenta que te dice que hagas tres cosas: acuérdate de la Palabra, estudia la Palabra y obedece la
Palabra.
3. APÓYATE EN EL SEÑOR .

Deja las dudas, busca una promesa y apóyate en el Señor. Apoyarse es más que creer. Significa depender de Él.
¿Qué haces cuando te apoyas en algo? Cuando te apoyas en algo estás confiando que te va a sostener. Eso es lo
que significa apoyarse -confiar que algo te soporte-. Cuando te apoyas en Dios significa más que solamente
“Yo creo en Dios”. Significa, “Estoy esperando que Él me sostenga”.
En Josué 1:5 Dios dice,

“Nadie podrá hacerte frente mientras vivas. Pues yo estaré contigo como estuve con Moisés. No te fallaré ni te
abandonaré.” Josué 1:5

Dios te lo dice a ti también. Dice que te puedes apoyar en Él. Y si Josué se apoyaba en Dios era invencible.
Venció todas las batallas en donde se apoyó en el Señor. Josué consiguió lo imposible cuando increíblemente
existían pocas posibilidades, porque estaba apoyándose en el Señor. Dios dice cuatro veces en este pasaje,
“Está seguro de... no dudes... sé fuerte... sé decidido...”, porque pierdes el miedo cuando Dios está cerca. Y Él
dice: “No te voy a dejar nunca. Te puedes apoyar en mí”.

Una pregunta importante: ¿En qué o en quién te apoyas para obtener fuerza? ¿Cuál es la fuente de tu fuerza?
¿Otra persona? ¿Estás apoyándote en la aprobación de otra gente para darte fuerza? Es una base bastante
insegura. La gente te va a desilusionar. Nadie te puede mantener todo el tiempo porque son seres humanos. Y si
pones toda tu confianza y toda tu fuerza, esperando que ellos te apoyen, se van a cansar y un día te van a dejar.
No necesariamente porque quieran, sino porque ya se cansaron. Así que no puedes confiar en que otra gente te
sostenga todo el tiempo. Ni siquiera puedes confiar en ti mismo. ¿Has descubierto que a veces tú mismo quedas
mal contigo mismo? Lo haces. Te prometes a ti mismo algo y luego no lo cumples. Te desilusionas. Te
desapruebas. Así que si piensas: “¡Yo sencillamente dependo de mí mismo!”, te vas a desilusionar al hacer eso.
No puedes depender de otra gente y no puedes depender de ti mismo para sacar todas tus fuerzas. ¿Qué haces?

“Confía en el Señor con todo tu corazón; no dependas de tu propio entendimiento. Busca su voluntad en todo lo
que hagas, y él te mostrará cuál camino tomar..” Proverbios 3:5-6

Apoyarse en el Señor da miedo. Es incómodo muchas veces. “¿Dios va a hacer acto de presencia? ¿Me va a
apoyar?”. Pero de eso se trata, apoyarse con fe. Descubres que te va a apoyar.
El cuarto secreto de ser usado por Dios.
4. ACTIVA TU VISIÓN.

Llega un momento en la vida cuando tienes que dejar de discutirlo, de hablar de ello, de pensar en ello, de orar
por ello. Tienes que dar el paso a pesar de lo que sientas. A pesar de tus miedos, de tus dudas. No tiene que ser
algo grande pero haces algo que deje ver la fe en tu vida.

“Luego Josué les dio la siguiente orden a los jefes de Israel: «Vayan por el campamento y díganle al pueblo
que preparen sus provisiones. En tres días, cruzarán el río Jordán y tomarán posesión de la tierra que
el Señor su Dios les da»’’ Josué 1:10-11

Este fue el momento de la verdad. Tenían que hacerlo. Tenían que avanzar. Tenían que zambullirse.
Literalmente. Porque iban a cruzar el río allí.

Después de haber cruzado el río Jordán iban a empezar la batalla para apoderarse de las naciones. El Jordán no
es un río muy grande. Sólo tiene alrededor de los 100 pies de ancho y 20 pies de profundidad. Pasó que estaban
allí durante la época de inundaciones. Es típico de Dios ponernos justo delante de las inundaciones.

Dijeron, “¿Cómo vamos a cruzarlo?”. No había puentes sobre el río Jordán. No tenían ninguna bote para cruzar.
¿Cómo se las va a arreglar Josué para cruzar este río torrencial con todo un grupo de gente? Dios dice: “¡Voy a
hacer un milagro! ¿Recuerdas que hace cuarenta años hicimos esto en el mar Rojo?, ¿Donde yo partí el mar en
dos y ustedes atravesaron por el medio? Vamos a hacerlo otra vez, pero diferente en esta ocasión. En el Mar
Rojo yo abrí las aguas y ustedes cruzaron por el medio. Esta vez quiero que empiecen a atravesarlo ustedes
primero y después yo voy a detener el agua 27 kms. río arriba, pero quiero que entren ustedes primero. Es una
prueba”. Así que los líderes espirituales se pusieron en el frente y empezaron a entrar en el agua. Y Dios hizo el
milagro y detuvo todo el río arriba. Las aguas bajaron y la gente cruzó al otro lado.

Pregunta: ¿Cuál es tu río Jordán? ¿Cuál es la barrera que crees que nunca vas a superar, que bloquea el camino?
Dios nunca va a poder usarme por culpa de ella. Nunca voy a recibir las bendiciones del Señor a causa de esto,
¿qué está en tu camino?

Tienes que darte cuenta que el primer paso es siempre el más difícil. Meterse en el río y mirar a Dios hacer el
milagro. ¿Qué haces cuando sabes que algo es la voluntad de Dios, sabes que es lo correcto, pero tienes un
miedo mortal a hacerlo? ¿Qué haces? ¡Hacerlo de todos modos!

Si sabes que es lo indicado, lo haces a pesar del miedo. Avanzas en contra del miedo. Haces lo que más temes.
Luchas contra el miedo. Eso es valentía. Valentía no es la ausencia del miedo. Es avanzar a pesar del miedo. Es
hacer algo que sabes que tienes que hacer aunque no tengas nada de fe. Una vez que das ese paso, la fe viene. El
milagro viene una vez que das el paso. Dios no hace el milagro primero. No. Quiere que des un paso adelante,
que despegues por fe.
Seguramente algunos de ustedes piensan: “Estoy muy viejo para eso de despegar mi fe”. ¡Josué tenía 80 años!
Así que no tienes ninguna excusa. No eres nunca demasiado viejo para hacer del resto de tu vida lo mejor de
ella, para despegar en fe. Decir, “Dios, cuantos años me queden los voy a usar para lo que Tú me pusiste a hacer
en esta tierra. Quiero que me uses”.

¡Puedes empezar modestamente, pero empezar! Enfréntate con tus miedos.

“¡Si esperas las condiciones perfectas nunca vas ha terminar nada!” Eclesiastés 11:4 (The Message)

Entiende esto:

“Sabes que Dios puede hacer cualquier cosa–¡mucho más de lo que te puedes imaginar o adivinar o pedir en
tus sueños más atrevidos! Lo hace sin empujarnos sino actuando dentro de nosotros, Su espíritu profunda y
gentilmente dentro de nosotros.” Efesios 3:20 (The Message)

OREMOS

También podría gustarte