Capítulo III

EL OBJETO DE LA RELACIÓN JU

Sección I

DEL OBJETO DE LA RELACIÓN' JURÍDICA

13-1- IMPORTANCIA DE LA NOCIÓN DE -OBJETO- DE LA

La de "objeto de la relación jurídica" es
más a menudo presupuesta que rigurosamente e
siquiera en nuestros manuales clásicos, se la de
Hay quien se contenta con decir que "objeto" d
lo que no es el "sujeto"; y la mayoría parte si
nición de "cosas".
No hay duda de que la "cosa", no teniendo
' a la intuición el primero y más importante "ob
del derecho. Pero esta pura y simple identifi
• que no agota todo el ámbito de lo que puede
laciones jurídicas", no da la noción de esta cate
por otra parte, es importante captar con la má
' que, si el presuponerla sin detenerse a definirla p

° Por las razones que se indican en el texto, mien

literatura concerniente a la distinción de las cosas, es, en
escasa la literatura acerca del objeto del derecho com
Esta exigencia fundamental se va gradualmente sintiendo
autores, entre los cuales recordamos: Maiorca, La cos
Toririo, 1937; L'oggctto del diritto, Milano, 1937 (con tesi
Cabneluth, Teoría genérale, pág. IS6 (breve observa
sionl fondamentali del diritto privato, pág. 93 (del cual
PvcuATTt, Istituti del diritto civile, pág. 2S9; C.uokaN',
di dir. priv., pág. 219 (con quien finalmente, no coinc
Biondi. / beni, en el Trattato, de Vassalli, 1953; Fra
del rapporto giuridico, en Riv. trim. dir. proc. civ., 1957,
 LA BELACION* JCBIDICA
ncorde, esta concordia no existe en absoluto, y para
o ejemplo, sigue todavía en el día de hoy en la brecha
no muy atrás dominante, según la cual el objeto de
ía "prestación" de deudor1, mientras que según otra
lleva camino de prevalecer o ha prevalecido ya) es,
el "bien"2.
disputa, la noción de "objeto de la relación jurídica"
decisivo.
Y "CONTENIDO" DE LA RELACIÓN JURÍDICA.
a bien: "objeto de la relación jurídica" es la entidad
inmaterial— sobre la cual recae el interés implicado
n, y constituye el punto de incidencia de la tutela ju
ón jurídica, según sabemos, es la expresión de una po
iva del orden jurídico respecto de un sujeto. El su
lado en orden a la actuación de un interés suyo; este
os más acérrimos asertores, véase Veneziaj*, Dell'usufrutto,
1936, I, pág. 13; y todavía, Allaba, 6b. cit., pág. 94, y Stolfi,
ga que los negocios no patrimoniales puedan tener un objeto,
l sería la «coío» que en hipótesis es el objeto del matrimonio";
ello la iilentificación entre "cosa" y "objeto del derecho"
ozio giuridico, Padova, 1947, pág. 15). Ahora bien, cuál sea
o del matrimonio, tampoco yo lo veo; pero no por ello el
trimonio carece de objeto, estando éste representado por los
m.
á representada por Giobcianni, L'obbligazionc, Milano, 1951,
tcs.; pero, aunque las argumentaciones sean más conscientes
o me parecen, sin embargo, convincentes. Y de nuevo, más
or Fbaxcesciielli (L'oggctto del rapporto giuridico, en Rio.
. ció., 1957, pág. 53), quien, sin embargo, me parece que no
las críticas formuladas precisamente por Nicoló, citado dos
l considerar como objeto de derecho una vez (en cuanto a
es) al bien, la entidad objetiva, y otra vez (en cuanto a las
torias) el elemento de contenido, subjetivo e instrumental (y
eso sustituiblc) en \ista de la consecución del "bien" (ob
Vadcmpimcnto dcWobbligo altrui, pág. 77, donde me parece,
ses por nosotros superadas, que está la mejor puesta a fuego
roblema.
a Menooxi, L'oggetto dcll'obbligazione, en Jus, 1952, pág. 158,
e a la tesis de que objeto de la obligación es la finalidad de
ma.
EL OBJETO DE LA BELACION JVBID1CA
interés es suscitado y atraído por una entidad distin
a la cual aspira el sujeto: será una cosa (un fundo,
un traje, un lápiz), será el resultado de una idea (un
técnico, una composición artística), será una persona
el hijo), será la utilidad proveniente de un servicio
tener una cosa en un lugar más bien que en otro:
veniente del servicio de transporte); en una palabra
del cual la relación extrae su razón de ser para el su
Esa entidad, ese quid, cualquiera que sea, es el
relación jurídica".
II. Del objeto de la relación debe distinguirse
do". El "contenido de la relación jurídica" es la
"comportamiento", que en la relación está destinado,
de medio, a la satisfacción del interés del sujeto sob
así, es el agere licere en los derechos (según la amplit
raleza de cada esquema singular), la "prestación" en
obligatorias.
III. La diversa noción del objeto y del contenid
ción jurídica patentiza que el "objeto" puede ser idén
tintas relaciones: el "contenido" es necesariamente
mismo fundo puede ser objeto, a la vez, de propiedad,
y de crédito. Las tres reladones se diferencian precisa
del "contenido": el propietario puede hacer en él lo
el usufructuario puede gozar de él según su destino,
no puede más que aguardar su traspaso a él por part
El interés de los dos primeros se realiza mediante e
un "agere" de ellos sobre el fundo, el del acreedor de
por la "prestación" del deudor.
El "contenido" de la relación de propiedad y de l
usufructo es un agere licere al cual corresponde un ge
de abstención en todos cuantos no son ni propietario
tuarios del mismo bien; el "contenido" de la relació
es una expectativa tutelada, a la cual responde el de
tación por parte del deudor.
El objeto, repetimos, puede ser idéntico: el mism
misma cosa. De manera que entonces la prestadón no

282 LA BELACION JÜBIDICA
del crédito (y el crédito no se diferencia de la propiedad por la
diversidad del objeto), sino que forma el "contenido" de la deuda,
que hace de medio respecto de la, realización del interés tutelado
en el crédito: tan es así, que, según lo veremos en su lugar (infra,
n. 620), puede sersustituida por el cumplimiento de un tercero, con
satisfacción legítima del acreedor, con tal de que consiga el bien
que es objeto de su crédito.
136. LA NOCIÓN DE "BIEN'- EN FUNCIÓN DE LA NOCIÓN DE "OBJETO" DE
LA RELACIÓN JURÍDICA.
El objeto de la relación, esto es, conceptualmente, la entidad
que atrae el interés del sujeto, se expresa también, a la verdad,
bajo otro aspecto, en función de "bien", bajo el cual precisamente
es apetecible para el sujeto3.
Pero esta noción, para una vasta categoría de objetos, debe
ser ulteriormente circunscrita. También la luz del sol, el aire de
la atmósfera, el agua del mar, tienen consideración de "bien". Pero
estas cosas (que los romanos denominaban res communcs omnium),
no constituyen, en su estado natural, "objeto de relaciones jurídicas",
porque todos las encuentran en tal abundancia, que satisfacen todas
sus necesidades sin sustraer nada a la satisfacción de toda necesidad
idéntica en los demás, y no puede, por otra parte, apropiárselas en
medida superior a la necesidad actual, a fin de economizarlas.
La característica del "bien" en función de "objeto jurídico"
debe ser puesta en reladón con su limitación respecto de los inte
reses que puede satisfacer: limitación que existe siempre que se
trata de los bienes estrictamente personales (ejemplo: la vida, la
integridad física, la libertad, el honor, etc.; efectivamente cada cual
3 Sobre el "bien jurídico" es muy varia también la literatura, pero casi
toda ella de carácter ocasional y fragmentario. Con enfoque sistemático, el
problema atrajo particularmente la atención de los penalistas; véase A. Roce©,
7 concetti di "bene" e dTinteresse" nel diritto pénale e nella teoría genérale
del diritto, en Rio. in. per le scienze giur., 1910, pág. 59; Antolisei, II pro
blema del bene giuridico, en Rio. ital. di dir. pen., 1938, pág. 1; Cabneujtti,
Teoría genérale del reato, Padova, 1933, pág. 245 (breve observación). En
el derecho privado: Pucuatti, ob. cit., pág. 292; Maiorca, La cosa in senso
giuridico, pág. 10; Baiussi, I diritti reali. Milano, 1943, pág. 116; Poro, Con
tributo alia teoría giuridica dei beni, en Rio. trim. dir. e proc. ció., 1948,
págs. 825 y sigtes.; Biondi, ob. cit., págs. 14 y sigtes.
EL OUJtTO DE LA BELACION JURÍDICA 283
tiene su vida, su integridad, su libertad, su honor); pero que, en
cuanto a todos los demás bienes, existe solamente en cuanto ellos
sean economizables, esto es, pasibles de administración con miras
a la concurrencia de distintos intereses.
De este modo, claro está, pueden venir a ser objeto de rela
ciones jurídicas incluso bienes que en el Estado natural no lo son
(como el aire atmosférico), cuando llegan a ser reducidos a un
estado en que no se encuentren más que en medida limitada: así,
el aire en estado líquido, el oxígeno encerrado en tubos o garra
fas, etc.
137. EL "OBJETO JURÍDICO" EN EL TIEMPO EN OllDEN A LA "FIELACION".
En orden a una determinada relación jurídica el objeto puede
ser presente o futuro4. En general, estas calificaciones del objeto
se ponen a base de una distinción de las cosas: y precisamente se
habla de cosas presentes o cosas futuras 6. lVro esto es totalmente
inexacto, no sólo ni tanto porque las cosas no agotan el ámbito de
los objetos jurídicos, sino que constituyen solamente una especie
de ellos (como lo veremos inmediatamente), cuanto y porque el
ser presente o futuro no es más que un aspecto mitológico del
"bien" en sí (el bien futuro no es un bien actual), sino que es un
aspecto funcional del "objeto" en orden a la dinámica de la relación
jurídica.
Ahora bien, precisamente el objeto de la relación jurídica puede
ser actual y puede considerárselo como de existencia futura: por
ejemplo, se negocia hoy sobre los frutos de la estación venidera,
o sobre el producto de una pesca que está por emprenderse o habrá
de emprenderse.
* Véase Maioüca, La cosa in senso giuridico, pág. 246: Id., II pegno di
cosa futura e il pegno di cosa altrui, Milano, 1938; Salís, La compracendita
di cose future, Padova, 1935. „ , » t-
• 6 Se distingue, sin embargo, entre "cosa futura" y "bien futuro , refi
riendo la futuridad de la "cosa" a la existencia de la cosa misma en sí, y la
del "bien" a su entrada en un determinado patrimonio (Maiorca, 7/ pegno di
cosa futura, etc., pág. 4; Pccliattt, ob. cit., pág. 339). En sustancia,^ con
ello se viene a decir que la expresión "bien futuro" (a diferencia de la ^cosa
futura", que quiere decir cosa no existente todavía) equivale a la de "cosa
ajena" (y aquí véase Cabiota-Ferbaiu, 7 negozi sul patrimonio altrui, Pa
dova, 1936).
 LA BELACION JURÍDICA
a de la relación en su desenvolvimiento y cumpli
xa y está condicionada a la existencia del objeto
ás, hay que poner aquí atención a identificar exac
jeto: que, a veces, sólo en apariencia es futuro,
d es actual. A este propósito los romanos habían
guir sutilmente la emptio spei de la emptio rei
la "emptio spet' y en la relación que de ella se
es actual: es la misma esperanza de la cosecha
ucto futuro de caza o de pesca, que tiene un valor
l independientemente del resultado prometido. Por
ando la cosecha venga mal, la pesca o la caza no
erado, hay que pagar igualmente el precio conve
lo había convenido por un objeto actual, la espe
cto, no por el producto mismo.
objeto en la "emptio rei speratae", que tanto da
as obligaciones de entrega de la cosa y de pago
anto y si realmente hay un producto o una cosecha.
N DE I.OS "OBJETOS JURÍDICOS".
que pueden constituir objetos de relaciones jurí
istintas naturalezas y susceptibles, por tanto, de
ación preliminar nos indica las dos más amplias
bienes personales (comprendidas las personas mis
bienes económicos o patrimoniales; estos últimos
n bienes materiales (o cosas) y bienes inmateriales.
lteriores, es decir, subdistínciones, se presentan
po de las "cosas" y de los "bienes inmateriales".
categorías fundamentales son tres: personas y
, cosas, bienes (económicos) inmateriales.
" y "bienes personales". —a) La misma "persona
nstituir objeto de relaciones jurídicas: relaciones
s precisamente personales, como, por ejemplo, la
a tutela, el coniugium. No hay que pensar que el
ob. cit., cap. I.
EL OBJETO DE LA BELACION JURÍDICA
asumir una "persona" como "objeto" de una relación
disminuirla u ofender en cualquier modo su condició
desconocer su "personalidad humana". Todo depend
raleza de la relación: es dertamente inadmisible co
"persona" como objeto de reladones jurídicas patrimo
ocurriría con los esclavos7; pero si la relación tiene
consonancia con la naturaleza humana (como ocurre
con la patria potestad, la tutela, etc.), no hay ya raz
derse o experimentar repugnancia alguna por ello.
b) Se habla también de bienes "estrictamente
bienes de los cuales, rigurosamente hablando, no es t
ficable una distindón real respecto de la misma "p
cual se refiere y de la cual expresan un aspecto o u
se trata, sin embargo, de aspectos y situaciones que
prácticos del derecho, es decir, de la disdplina de
jurídicas inherentes, pueden ser útilmente considerad
jetos específicos de la tutela jurídica. La vida, la inte
el honor, no existen separada y distintamente de la
íntegra y honrada; pero, a los fines prácticos del der
considerarse provechosamente como objetos específic
tela en lo que respecta a su vida, a su integridad y a s
eso, aun en esta su configuradón esendalmcnte prác
sentan como complemento de la persona en cuanto p
tanto, de cualquier persona: nacen con ella y son
sin ella, como partícipes, en una palabra de la person
7 Estamos, por tanto, muy lejos de la opinión de Cabne
cual los trabajadores están en la hacienda como objetos, no
entendiendo que el trabajador, mediante el contrato de trabaj
rarum: véase,, en cambio, infra, n. 784) arrienda su propio cuer
quier otro sujeto podría arrendar su propio asno mediante contr
(locatio rcrum): cfr. Usucapione aclla proprictá industríale,
pág. 38; y ya antes en Studi svlle encrgic como oggctto di ra
en Rio. dir. comm., 1913, I, pág. 383. La refutación de este
entre original y paradójico, para nosotros está exactamente en e
posible, según diremos, separar en el hombre dos seres, la pe
es decir el espíritu, y la cosa u objeto, es decir el cuerpo, po
mientras está con el espíritu, forma'con él la totalidad única
humana (infra, n. 140). Se puede considerar, en cambio, la
na, bajo diversas relaciones, ya como sujeto, ya como objeto.

288 LA RELACIÓN JURÍDICA
y, por tanto, no subsumibles, a manera de objetos, más que en
relaciones jurídicas cuyas metas estén de acuerdo con la perso
nalidad.
II. Las "cosas". —Vienen luego las "cosas", categoría der
tamente la más común de los objetos patrimoniales, y que responde
al concepto de "entidad material, impersonal'.
III. Los "bienes inmateriales". — Pero además de las "cosas",
en esta misma categoría de los objetos patrimoniales, hay todavía
entidades inmateriales que tienen razón de "bien", pero no con
sisten en materia ni son por otra parte personas ni bienes estricta
mente personales: productos del espíritu, pero no ya espíritu ellas
mismas. Tales, la idea de un inventor, el contenido literario o
artístico de una obra (idea y contenido que no deben confundirse
con su fijadón o realización concreta en una determinada materia,
sino que son el tipo ideal con el cual aquella materia fue y puede
ser indefinidamente elaborada, impresa, plasmada), la utilidad pro
veniente de un servicio.
De esta categoría (como de las otras) hablaremos más amplia
mente después (véanse ns. 148 y sigtes.).
139. "ESFERA JURÍDICA" Y "PATRIMONIO" 8.
I. El conjunto de las relaciones jurídicas que culminan, con
un "objeto" propio, en un "sujeto" determinado, sugiere la imagen
de una esfera en la cual el sujeto ocupa el centro, y a la cual con
fluyen los distintos hilos de aquellas relaciones. Es la que común
mente se denomina la "esfera jurídica" del sujeto, comprensiva
de toda relación posible, personal o económica.
II. Aislando en esa esfera solamente las relaciones económicas,
es decir, las que tienen por objeto "cosas" o "bienes inmateriales",
se identifica una esfera menor, que por una larga tradición toma el
nombre de "patrimonio''.
La idea del "patrimonio" atañe, en el campo del "objeto", a
la pluralidad material (el conjunto de los "bienes") y llega en el
campo del "sujeto" a la unidad ideal: pluralidad y unidad que la
8 Cfr. Barbero, Universalitá patrimoniali, págs. 273 y 385.
EL OBJETO DE LA RELACIÓN JURÍDICA 287
imagen de una esfera representa admirablemente por medio de
la extensión cuantitativa de su perímetro y la identidad inextensa
de su punto central.
III. Estos dos aspectos, objetivo v subjetivo, de la "esfera
jurídica" y del "patrimonio", no están en antítesis, sino de acuerdo,
no se excluyen, sino que se reclaman irreductiblemente y se com
pletan mutuamente. Lo cual no siempre lia sido debidamente ad
vertido, de manera que cada uno de esos aspectos lia sido asumido,
separadamente, como punto de partida para concepciones antitéticas
y unilaterales del "patrimonio", que ya se presenta bajo el aspecto
hiperbólicamente subjetivo de una emanación inmprimiblc y, por
tanto, necesaria de cada sujeto °, ya en su aspecto meramente obje
tivo y en su estructura puramente cuantitativa ,0: por lo cual se ha
llegado, por una parte, a la idea contradictoria de un "patrimonio
sin sujeto" y, por la otra, a la idea vacia e inconsistente del patrimo
nio como mero nomen iuris, susceptible de ser incluso un "patri
monio sin bienes"11. Cada una de esas concepciones (objetiva y
subjetiva) del patrimonio comete el error de ignorar el aspecto afir
mado por la otra.
La verdad es que los dos aspectos se completan, y sin sujeto
no hay patrimonio, sino bienes de nadie, como no hay patrimonio
sin bienes, sino solamente potencialidad subjetiva (acaso una misma
cosa con la propia capacidad jurídica) de formación del patri
monio.
Sccciónll
LOS "BIENES PERSONALES"
140. NOCIONES Y DISTINCIONES.
a) De lo que llevamos ya dicho se extrae el concepto de que
el "bien personal" es tan inherente a la persona humana, que debe
considerárselo como directamente inmanente. No sólo es algo que
9 Así, sobre todo, Aubry y Rau, Cours de droit civil frunzáis, IL pág. 3,
K, pág. 333.
io Coviello, Manuale, pág. 254; Ferraba, Trattato, pág. 871.
11 Véase ampliamente el debate en Barbero, ob. y loe. cits.