Está en la página 1de 4

LECCIÓN

La iglesia como
comunidad terapéutica
« ~ -------------- £ ^9 --------------
Mateo 5:16; Juan 4:35; Hechos 4:32-35

VERDAD CENTRAL
El llamado de la iglesia como comunidad terapéutica viene del cielo, y es con la certeza del Espíritu Santo,
ante la urgencia de la hora, que se debe obedecer para ser lo que Cristo dijo que es: una luz que alumbra en
lugar oscuro.

O b je t iv o s
Construir una visión bíblica de la iglesia como sierva de la comunidad. Amar y entender a su comunidad para
servirle con gracia de Dios. Buscar y aplicar las estrategias pertinentes para subsanar necesidades descubier­
tas en su entorno social.

INTRODUCCIÓN
Uno de los grandes desafíos de las iglesias locales en la posmodernidad es salir de la huida y del descorrí-
promiso (Bauman), para responder a las grandes preguntas paulinas: ¿Cómo, pues, invocarán a aquel
e n el .cual n o h a n creído? ¿Y cóm o creerán e n aquel de quien n o han oído? ¿Y cóm o oirán sin
haber q u ie n les predique? (Romanos 10:14).
Ahora, con respecto a la sanidad, se puede parafrasear la última pregunta del texto bíblico: ¿Cómo serán
sanados si no hay quien les aplique el bálsamo que los restaure? Existen principios bíblicos, pautas socio­
lógicas y filosóficas para tal encomienda. En esta lección se dará un esbozo de ellas.

DESARROLLO DE LA LECCIÓN
I. Comunidad terapéutica por un llamado divino
Com entario adicional
Una comunidad es aquella que tiene algo en común, puede ser el idioma, los hábitos, los valores o su
cosmovisión. Se mueve en su cotidianidad, fluye en su quehacer y se acepta mutuamente. Cada iglesia
local está plantada en un tipo de comunidad, es trabajo de sus líderes y servidores descubrir los puntos de
contacto para ser bendición a ellos y pertinentes en el mensaje del evangelio.

1. Descubrir el llamado en la Biblia


El sentido de permanencia de la iglesia en la tierra debe estar presente, sin olvidar la promesa de la segunda
venida de Cristo. En un mundo hostil, la iglesia como pueblo de Dios debe aplicar los principios bíblicos para
ser una comunidad terapéutica. Un ejemplo claro se encuentra en Jeremías 29:5-7 donde Dios les da instruc­
ciones claras para que su pueblo, en medio de una cautividad que duró setenta años, hiciera planes de largo
plazo para ser bendición en la ciudad donde habían sido deportados; les ordena que oren por ella, que busquen
el bienestar de la ciudad porque, asimismo, ellos serían bendecidos. Contextualizando este llamado, se en­
tiende que Dios les estaba llamando para ser una comunidad sanadora, que buscara los puntos de encuentro
para contextualizar el mensaje y la manera de hacer ministerio, de tal manera que fuera atractivo y pertinente.

25
I
Sugerencia didáctica: Reparta una hoja a cada uno de sus alumnos. Pida que escriban tres maneras
diferentes en la cual la iglesia puede descubrir su llamado para ser una comunidad terapéutica: 1. A
través de la Biblia, 2. A través de la imaginación sociológica. 3. A través del análisis de lo cotidiano.

2. Descubrir el llamado en el entorno cercano


La imaginación sociológica tiene que ver con la capacidad de ver las cosas socialmente y cómo éstas interac­
túan e influyen entre sí... En este sentido, cada iglesia local está plantada en un determinado núcleo social
que le hace singular e importante.
El apóstol Pablo es un claro ejemplo de la vivacidad de un pastor para descubrir su entorno social y hacer
ministerio aplicado a la necesidad de la gente. En Hechos 17:16-34 se enseña cómo, después de recorrer
la ciudad de Atenas, descubrió el hilo conductor que lo dirigió para predicar la palabra de Dios: Varones
atenienses, en todo observo que sois muy religiosos... (v. 22). Pablo descubrió que eran muy religiosos, al
encontrarse con un altar con una sola inscripción: AL DIOS NO CONOCIDO. La contundente respuesta de
Pablo muestra su sagacidad y la guianza del Espíritu Santo: Al que vosotros adoráis, pues, sin conocerle ,
es a quien yo os anuncio (v. 23).

PREGUNTA DE REFLEXIÓN o APLICACIÓN: Lea Hechos 17:16-34 en distintas versiones. ¿Cuáles son
los elementos sociológicos que Pablo identificó en Atenas para ministrar a la ciudad?

II. Comunidad terapéutica por una convicción del Espú


ritu
Com entario adicional
La iglesia que acepta el llamado para ser una comunidad terapéutica lo hace en virtud del reconocimiento
del Espíritu Santo como eje rector de tal llamado. El Espíritu Santo no sólo está activo en el libro de los
Hechos, sino en toda la Biblia, desde Génesis hasta Apocalipsis.

1. El Espíritu Santo como gestor de una comunidad terapéutica


La Zona Cero donde se inicia la nueva comunidad de sanidad para las naciones sin duda se registra en
Hechos capítulo 2. Todas las profecías citadas por los protagonistas de este libro refieren un tiempo, un pro­
pósito y sin duda la democratización del Espíritu para todo ser humano que haya invocado a Jesucristo como
Señor y Salvador. Sin embargo, una comunidad centrada en sí misma debía convertirse en una interesada en
las demás. Jerusalén es el modelo centralista y Antioquía el modelo federalista; el primero, como lo muestra
la historia, se encargó de mirar por sí misma y ser legalista; el segundo modelo, el antioqueño, fue abierto,
amoroso, servidor y empático con las diferentes comunidades helénicas de su tiempo. Con motivo de la gran
persecución el evangelio llegó a Antioquía, y esta comunidad eclesiástica llegó a ser el tipo de iglesia de acuer­
do al corazón de Dios, para que se cumpliese lo dicho por Jesús en Mateo 20:26-28.
Cuando Jesús le dice en Marcos 5:34 a aquella mujer que padecía flujo de sangre, tufe te ha hecho salva,
la estaba declarando con la salvación total, alma y cuerpo, ya que la palabra “salva” en el idioma original denota
librar o proteger, incluso preservar, salvar o sanar. En este tenor, como Cristo envió a sus discípulos, así la
iglesia es enviada para ser la embajadora y ejercer ese dominio en la vida sencilla del diario vivir.

Sugerencia didáctica: Reparta una hoja a cada uno de sus alumnos. En Mateo 20:20-26, pida que
“l M r descubran y anoten los principios del reino del Espíritu que enseñó Jesús a sus discípidos para esta-
7 g p blecer una comunidad de servicio sacrificial.

26
2. El Espíritu Santo como realizador de una comunidad terapéutica
El Espíritu Santo es el consolador (paracletos) por excelencia prometido por el mismo Señor Jesucristo. La
iglesia como comunidad terapéutica no funciona sin la ayuda del Espíritu como consolador y dulce compañero
del camino. Los tiempos de refrigerio prometidos en Hechos 3:19 se refieren, de acuerdo con el significado
de la expresión en su idioma original, a un rejuvenecimiento, a revivir, a recuperar el aliento, a descansar;
realmente eso es para una sociedad cansada y llena de temor hasta el hartazgo.
Cuando las personas se dan cuenta de que el evangelio encarnado en una iglesia local funciona como un
bálsamo sanador, es un oasis para sus vidas. Es la recuperación del aliento, es volver a vivir y a revivir, es real­
mente un refrigerio, un alivio y consuelo para sus vidas cuando el evangelio llega de forma directa, amorosa y
pertinente, respaldado por vidas llenas del Espíritu que es el guiador y ejecutor de este precioso trabajo.
En el libro de los Hechos, la labor del Espíritu Santo es principal. Es notable el proceso que llevó a cabo
para dejar bien plantada la visión de una comunidad que sirviera a los demás. El testimonio de Pablo —años
más tarde— lo dice todo: Porque no osaría hablar sino de lo que Cristo ha hecho por medio de mi para
la obediencia de los gentiles, con la palabra y con las obras, con potencia de señales y prodigios, en el
poder del Espíritu de Dios; de manera que desdeJerusalén, y por los alrededores hasta Ilírico, todo lo
he llenado del evangelio de Cristo (Romanos 15:18,19). También en Hebreos se menciona la obra divina en
la intervención del Espíritu Santo. Por ejemplo, en Hebreos 2:4 narra: ...testificando Diosjuntamente con
ellos, con señales y prodigios y diversos milagros y repartimientos del Espíritu Santo según su voluntad.
El Espíritu Santo proporciona dirección, como sucedió con Ananias y Pablo; guía a toda verdad; convence al
mundo de pecado, de justicia y de juicio, y abre y cierra puertas para predicar el evangelio. Así que, a cualquier
comunidad que se precie de ser terapéutica, le conviene depender de él, ser guiada por él y confiar en él como
el principal ejecutor de su obra.

PREGUNTA DE REFLEXIÓN o APLICACIÓN: ¿Cree usted que es necesaria la realización de una vela­
da de oración para buscar el bautismo en el Espíritu Santo y su llenura para recibir guianza para llegar
a ser una comunidad terapéutica en su comunidad?

III. COMUNIDAD TERAPÉUTICA COMO UNA NECESIDAD URGENTE


Comentario adicional
No se puede hablar de una comunidad terapéutica sin reconocer el contexto sociocultural. Todo el trabajo
de la iglesia del primer siglo se desarrolló en medio de un estado de cosas que incidieron en la manera de
hacer iglesia y ministerio. Dentro de ello se pueden mencionar el imperio romano, el idioma griego, la
coyuntura social y religiosa de la nación judía, así como los tiempos proféticos de parte de Dios marcados
en las Sagradas Escrituras. Asimismo, en los tiempos actuales, se debe entender que la teología no corre
sola, junto a ella están todas las ciencias y prácticas del mundo contemporáneo.

1. Ama y entiende a su comunidad para servirle con gracia


Cuando el Señor Jesucristo dijo: Nadie tiene mayor amor que éste, que uno ponga su vida por sus ami­
gos (Juan 15:13) dejó claro que nadie, de ninguna forma, puede amar tanto a la raza humana como él. Si algo
hay de bueno en la iglesia local, es porque el mismo Señor Jesucristo lo ha colocado por su Espíritu Santo.
Para entender a la comunidad circundante a la iglesia local, llámese colonia, fraccionamiento, barrio, ciudad o
estado, los siervos-líderes de cada iglesia local han de aprehender lo que John Stott llama: Escuchar dos voces
al mismo tiempo, la voz de Dios por medio de la Escritura, y la voz de los hombres y mujeres que nos rodean.
Es probable que esta escucha sea contradictoria, pero es trabajo de la iglesia terapéutica descubrir cómo se
relacionan entre sí.

27
Sugerencia didáctica: Lea Mateo 9:36 y ore a Dios para que le muestre el significado contemporá­
neo de este versículo aplicado a su vida y congregación.

2. Elabora y aplica las estrategias para subsanar necesidades en su entorno


Primero es el impacto espiritual, es el principal llamado de la iglesia, segundo es el impacto social, este
último debe ser consecuencia del primero. El evangelio encarnado en una comunidad eclesial es el principal
llamado de Dios para ella. Así como se le demanda que escuche con sus dos oídos, también existe el impera­
tivo para que sea un pueblo llamado a salir del mundo y nuevamente ser enviado a dar testimonio y servir al
mismo. Como Jesús, la iglesia es llamada a mezclarse libremente con las personas necesitadas, sin comprome­
ter su identidad como sierva de Cristo. Sin duda que existen iglesias que tienen la semana completa llena de
actividades para sí mismas, lo cual es loable, pero el imperativo de ir a todas las culturas es urgente.

V ^V Sugerencia didáctica: Solicite a su pastor su consentimiento para elaborar una estrategia de alcance
'\XfjJ~ evangelístico y terapéutico a través de dos sondeos, uno de la comunidad local y el otro de la iglesia
S local: ¿Qué clase de gente vive en nuestra localidad? ¿Cuál es su origen étnico, su nacionalidad, reli­
gión, cultura; su preferencia en cuanto a los medios de comunicación y su trabajo? ¿Qué proporción
hay de familias nucleares, de familias con un solo padre/madre, de personas solas, de ancianos, de
gente joven? ¿Cuáles son las principales necesidades sociales, relacionadas con la vivienda, el em ­
pleo, la pobreza, la educación en la zona? ¿Ha cambiado la comunidad local en los últimos diez años,
y qué cambios se pueden predecir para los próximos diez? ¿Ha habido suicidios en su localidad? ¿Está
en realidad la iglesia organizada sólo para sí misma, para su propia supervivencia y conveniencia y
para la preservación de sus privilegios? ¿Está organizada para servirse a sí misma, o para servir a Dios
y a la comunidad?

PREGUNTA DE REFLEXIÓN o APLICACIÓN: ¿Será importante hacer un sondeo de la comunidad y de


la iglesia local para una estrategia evangelística y terapéutica?

C o n c l u s ió n
El llamado del Señor Jesucristo a su iglesia es natural y semejante a lo que él mismo practicó: Así alumbre
vuestra luz delante de los hombres, para que vean vuestras buenas obras, y glorifiquen a vuestro Padre
que está en los cielos (Mateo 5:16). En el Antiguo Testamento el llamado comprendía vengan y vean, en el
Nuevo Testamento cambia a vayan y vean. La cultura religiosa de ser auditorio y espectadores ante un clero
profesional cambia hacia la inclusión de toda la iglesia como sierva de la comunidad, esto es, la materialidad
de la salvación.
El mundo está herido, confundido y enlutado. La iglesia como comunidad terapéutica, sanadora y liberadora
tiene los recursos espirituales y materiales para llevar a cabo la fenomenal tarea de ser la embajadora que Dios
dice que es. Hagámoslo ya.

FIJACIÓN DEL APRENDIZAJE


1. ¿Está de acuerdo en que su iglesia sea una comunidad terapéutica?
2. ¿Cuáles son las partes o los rasgos de una iglesia como comunidad terapéutica?
3. ¿Cómo podría su iglesia local hacer la transición con las herramientas de esta lección, hacia una co­
munidad terapéutica?

También podría gustarte