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La sociedad que imagino.

El cambio no proviene de otras personas, somos el cambio


que esperamos que suceda. Honorables miembros del
jurado, maestros y compañeros. Mi nombre es Daine Denise
Santiago Hernández, tengo 11 años, estoy en 6to grado y me
presento ante ustedes para abordar el tema “la sociedad que
imagino”, una sociedad en donde predominan los valores del
respeto, igualdad y bondad.
Imagino una sociedad ideal donde todas las personas son
tratadas con igualdad y respeto sin importar de donde vienen
o como se ven. Todos por igual tendrían una casa y comida
sobre la mesa, seguridad y estabilidad en sus vidas. Desearía
vivir en una sociedad en donde todos podemos acceder a la
educación, aprender cosas nuevas todos los días y que el
conocimiento sea la clave para un futuro lleno de
posibilidades.
En la sociedad que imagino, la naturaleza es valorada y la se
tiene en cuenta la importancia de los árboles, los animales y
el aire limpio para poder seguir viviendo con calidad.
Anhelo una sociedad donde todos los niños pueda recibir
amor y respeto, que sean cuidados y protegidos de todo mal,
donde haya muchas oportunidades de jugar y divertirse, en
parques y áreas verdes.
En la sociedad idealizada que imagino la creatividad y la
expresión artísticas son valoradas y apoyadas, a través del
arte, la música y la literatura.
Para lograr una sociedad con todas estas características
además de mucha dedicación de las personas, deben existir
programas para apoyar a las familias y a las instituciones que
pueden llegar a lograr estos objetivos.
Me gustaría resumir mi participación en un poema con el que
intentare ilustrar la sociedad que imagino en pocas palabras.

En una sociedad perfecta, donde los niños son el estandarte,


todos son tratados con igualdad, sin importar su proceder,
el respeto es la norma, en cada relación,
y el amor es el motor, para la unión.

La naturaleza es valorada, como un tesoro escondido,


se protege y se cuida, para que todos puedan disfrutarla,
con aire y agua limpios, y vida salvaje a su alrededor,
crecen sanos y felices, con la biodiversidad a su favor.

Gracias.

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