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7 Desafíos para el movimiento de DDHH venezolano para el corto plazo (2023-

2024)

1) Usar la experticia acumulada para documentar en situaciones de crisis para registrar


violaciones de DDHH en el contexto pre-electoral, cuando la conflictividad aumente.

2) Comprender la permanente evolución de los patrones de violación a los DDHH y


tomar medidas al respecto (por ejemplo el aumento de la censura en temas vinculados
a DDHH ¿Cómo divulgar nuestros informes y denuncias ante una mayor hegemonía
comunicacional?)

3) Mantener de manera pública una narrativa que combine el derecho a vivir en


democracia con el derecho a salir de la pobreza, es decir, la necesidad de regresar a la
democracia, paralelamente, con mitigar los efectos de la emergencia humanitaria
compleja. Se mantendrá la tensión por mejorar algunos indicadores económicos a
costa de postergar el ejercicio de derechos civiles y políticos por parte de la población.

3) Un escenario de alta probabilidad, en este momento, es la “relección” de Nicolas


Maduro en la primera magistratura por 6 años más, en el 2024. Entonces:
- Cómo ayudar en la definición de una estrategia gradualista, y a largo plazo, que utilice
asertivamente ese hito electoral para estimular la reorganización del campo
democrático y la conquista de algunas condiciones electorales de partida que sirvan de
base para futuros esfuerzos de recuperación de los derechos políticos de la población;
- Cómo procesar ese resultado sin caer en el pesimismo y la depresión individual o
colectiva
- Cómo mejorar las sinergias y articulaciones entre los defensores que se encuentran
dentro y fuera del país
- Cómo explicar a la comunidad internacional este resultado, mitigando la
“normalización” de la crisis venezolana

4) Preservar los mecanismos de financiamiento en un contexto de cambio de las


tendencias y énfasis de la cooperación internacional, permeando recursos a las
organizaciones más pequeñas y organizaciones de víctimas.

5) Si los organismos internacionales de protección son disuasivos del abuso de poder,


¿podemos identificar oportunidades y promover la adopción o creación de nuevos
mecanismos de abordaje a la ruptura de la institucionalidad democrática y las
violaciones sistemáticas a los DDHH?

6) Compartir la experiencia del movimiento de DDHH venezolano con otros países que
comienzan a transitar el debilitamiento de sus instituciones y ataques contra el espacio
cívico, realizando alianzas de trabajo.
7) Estimular la conformación de organizaciones de víctimas, independientes y
autónomas, recreando lazos de cooperación horizontal comunitaria

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