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ALMA
Psicografía de Hercílio Maes
espíritu ramatís
resumen
Explicación preliminar, 2
introito, 7
Explicación preliminar
Querido lector:
Mis hermanos:
¡En los planos erráticos del Más Allá, es muy común encontrar espíritus
que se apegan tan fanáticamente a los restos de animales, que
comienzan a reproducir ciertas caricaturas circenses, con visibles
aspectos animales fusionados por el astral inferior!
No dudamos que usted pueda, un día, llegar al nivel del ridículo aún
conmemorando los aniversarios de instituciones terrenales, para la
protección de animales y pájaros, bajo un festivo y suculento asado de
carne sacrificada el día anterior, y donde brillantes oradores pronunciará
discursos sobre la Ley de Caza o el amor al animal, mientras el
carnicero prepara el “apetitoso” filete en una brocheta, con el sazón
aliño.
PREGUNTA: - "¿Con qué fin concedió Dios a todos los seres vivos el
instinto de conservación?"
No hace falta entrar en muchos detalles sobre este tema tan claro, en el
que el espíritu cuestionado subraya la gran responsabilidad de tener que
mantener la vida de todos los seres, porque “todos tienen que contribuir
al cumplimiento de los designios de la Providencia”. La necesidad de
vivir, que debe ser “respetada y protegida”, es una de las conclusiones
lógicas y decisivas del espíritu que se comunicó con Kardec, y que
implica, por tanto, una nueva censura doctrinal del exterminio del
animal para ser devorado en las mesas suntuosas de los espiritistas!
No era posible que Dios creara para el hombre la necesidad de vivir sin
darle los medios para lograrlo. Por eso hace producir la tierra, para dar
lo necesario a los que la habitan, pues sólo lo necesario es útil. Lo
superfluo nunca es superfluo”.
A la pregunta hecha sobre lo que debe pensarse del hombre que busca
en los excesos de toda especie el refinamiento de los placeres, el espíritu
dio la siguiente respuesta, bajo el n° 714:
Este último concepto tiene una relación más directa con los espíritas y
espiritistas en general, pues constituye realmente un abuso, frente al
sentido más puro de la vida, el hecho de que, ante la prodigalidad de
frutas, verduras y hortalizas, los hombres, ya conscientes de tal
concepto, aún insisten en devorar el botín de sus inocentes sirvientes. Y
los espíritas que han compelido las obras sensibles y progresistas de
Alian Kardec quedarán muy agobiados ante la justicia sideral cuando,
después de haber recibido enseñanzas que piden frugalidad, equilibrio,
piedad y pureza, contradicen el esfuerzo por liberarse de la materia
continuando en ¡el festín morboso de vísceras asadas o epicúreamente
cocinadas para la morgue del estómago!
¿Por qué tal sensación de pavor, amigo mío? Sal de ti mismo, rompe el
caparazón de la interpretación personal y sal al amplio campo de la
justificación. ¿No visitamos los dos las carnicerías más diversas de la
esfera de la Corteza? Recuerdo que en mi antiguo hogar terrenal
siempre había una gran familia regocijándose por la matanza de los
cerdos. La canal de carne y grasa significaba abundancia de la cocina y
comodidad del estómago. Con el mismo derecho, los desencarnados,
tan inferiores como lo fuimos, se acercan a los animales muertos cuya
sangre humeante les ofrece vigorosos elementos vitales.
No vemos razón, por tanto, para que tales seres se preocupen por el
cuidado profiláctico de su salud, por la mejor combinación de
alimentos, cuando ni siquiera les importa saber masticar.
RAMATÍS: — Aunque hay casos de criaturas que viven hasta los cien
años, fuman y muestran buena salud, como en el caso de los campesinos
y esclavos africanos en el Brasil colonial, el tabaco es siempre un
terrible enemigo de la criatura humana. Sin duda, la mayoría de la
humanidad no puede inmunizarse satisfactoriamente contra sus efectos
perniciosos. No vemos ninguna razón sensata para fumar y sufrir las
consecuencias del tabaco sólo porque se notan algunas excepciones en
criaturas que, aunque fumen en exceso, todavía gozan de salud. Es de
sentido común que la resistencia orgánica varía de un individuo a otro,
por lo que lo más sensato es ¡no fumar! Todas las lesiones orgánicas se
ven afectadas por los venenos del tabaco; el corazón, en particular, es
una de las mayores víctimas de la nicotina y de los ácidos venenosos
del tabaco, ya que su respiración, perturbada por la insuficiencia del
trabajo del corazón, se ve aún más perturbada por las sustancias tóxicas
volátiles que afectan sus bronquios y pulmones. Los hepáticos —cuyo
hígado trabaja con dificultad para filtrar hasta las sustancias más
inofensivas— son tantas víctimas de la acción insidiosa del tabaco,
como éste, con su carga de nicotina, amoníaco, extractos nitrogenados,
sustancias minerales, sustancias aceitosas y grasas, el málico , ácidos
nítrico y oxálico, requiere un trabajo anormal que agrava aún más la
salud del paciente. ¡Es lamentable que muchos de los que ignoran o
restan importancia a la nocividad del tabaquismo, ya enfermos de un
hígado confabulado por una intoxicación alimentaria, sigan practicando
la tontería de, en las etapas de convalecencia, fumar cigarrillo tras
cigarrillo!
Pero, en el futuro, aparecen otros efectos de las toxinas del tabaco y que,
de la naturaleza aguda de las primeras intoxicaciones, las transforma
inadvertidamente en casos crónicos en el fumador empedernido, aunque
con un mejor control de su organismo frente a los venenos. Luego están
los dolores de cabeza periódicos, que suelen provenir del monóxido de
carbono; irritaciones de los bronquios, garganta y pulmones, producidas
por el amoníaco o la piridina, y también de las fosas nasales, por el calor
de la brasa del cigarrillo, que quema las sensibles mucosas de las fosas
nasales. También están los efectos nocivos de los derivados
alquitranados del tabaco, que también actúan durante mucho tiempo,
atacando los pulmones y ennegreciendo los dientes.
No creemos que la perniciosa absorción del gas del tabaco pueda traer
inspiración de ningún tipo o incluso normalizar el sistema nervioso, ya
que los nervios son la extensión viva del periespíritu mismo que actúa
en el mundo físico. Y la serenidad del periespíritu no depende de la
contención tóxica e hipnótica, sino fundamentalmente del control sano
y psíquico del alma.
PREGUNTA: - Usted alguna vez dijo que las mujeres que fuman sufren
mayores daños que los hombres. ¿Puedes explicarnos este asunto en
detalle?
Los neófitos sin cuerpo físico, que aterrizan en el Más Allá ardiendo
bajo el deseo alcohólico, pronto aprenden de los veteranos
desencarnados cuál es la mejor manera de mitigar parcialmente la sed
alcohólica. Como ya hemos dicho varias veces, después de
desencarnadas, las almas buscan y sintonizan, atraídas por los mismos
vicios, ideas, sentimientos, hábitos e intenciones. Como resultado de
esta ley, las personas encarnadas que se vuelven adictas a las bebidas
alcohólicas son acompañadas también por espíritus desencarnados de
alcohólicos, aún esclavos del mismo vicio degradante, que hacen de
todo para convertir a sus víctimas en “tazas vivientes”, para satisfacer
sus deseos.
PREGUNTA: - Cuando los espíritus nos dicen que la muerte del cuerpo
físico no extingue la voluntad de ingerir alcohol, nos confundimos
porque, si el cuerpo es físico, todo lleva a creer que el sepulcro terrenal
sella la frontera definitiva de las sensaciones físicas ! ¿Estamos
equivocados en nuestro razonamiento?
De ahí la razón por la que muchos alcohólicos insisten en que una fuerza
oculta les obliga a beber más y más, hasta que caen al suelo
inconscientes. Saturados entonces de alcohol, como miserables
andrajos humanos exudando los vapores repelentes de la embriaguez
total, pasan el resto de sus existencias transformados en víctimas de sus
obsesores, que astutamente se esconden en las sombras del Más Allá de
la Tumba.
¡Qué valiosa enseñanza pueden legar al mundo los poetas, los filósofos
y los artistas cuando, para donar algunas obras brillantes a la
humanidad, comienzan precisamente por escribir el cobarde drama del
abandono de sus familias! ¡Qué gloria se le puede atribuir a quien bebe
decenas de litros de alcohol, en la bohemia más irresponsable, cuando
aún no se revela capaz de conseguir un litro de leche para sus hijos!
¡Cuáles son las prestezas, rimas, conceptos, pensamientos y gracias
literarias de aquellos que, cantando la epopeya de la vida humana,
incapaces de sostener la alegría de su propia casa valen para el mundo,
sedientos de guiones espirituales!
Por eso, ciertas criaturas que vivían esclavas de los vicios más
deplorables, e incapaces de toda recuperación moral, se levantaban del
lodo cuando podían sentir la llamada espiritual o el grito de advertencia
de su propia conciencia superior, logrando reajustarse a su antiguo ser
humano. dignidad, inmunizándose así contra los viles ataques del Más
Allá. Muchas de estas regeneraciones han sido posibles bajo la
influencia del espiritismo y de las instituciones religiosas, a través de
las cuales muchos infelices “jarros vivientes”, luego de ser
adoctrinados, han logrado inmunizarse contra la acción de sus ocultos
dueños en el mundo invisible. Los obsesores saben esto; por tanto, así
como protegen a sus víctimas para mantenerlas en el repulsivo papel de
exóticos alambiques vivientes, también las mantienen en el más
completo desconocimiento de los peligros de la bebida alcohólica. Si
bien reconocen que así reducen la vida de sus vasos carnales en la
Corteza, impiden que las fuerzas del Bien intervengan en su conciencia
despierta y logran alejarlos de la degradación alcohólica. Trabajan,
pues, para que los desdichados alcohólicos no se queden demasiado
tiempo en posesión de su razón, para no prestar atención a la voz oculta
de su propia alma oa los adoctrinamientos religiosos.
Hay casos en que los tentadores de las Tinieblas ven frustrados sus
oscuros propósitos de obtener una “jarra viviente”, ya que interviene la
ayuda espiritual en virtud del crédito que la probable víctima aún tiene
de su vida pasada o, entonces, cuando por Ley del Karma algún
accidente benefactor la inmoviliza en la cama o incluso la libera de la
carne. En otros casos, también se frustran los intentos obsesivos hacia
el alcoholismo, si alguna comunidad religiosa o espiritista interviene y
logra modificar la tendencia viciosa del candidato a “taza viviente”.
Basta visitar las instituciones de cura del alcoholismo, del mundo físico,
para conocer los espantosos sucesos de que son víctimas los
desdichados adictos cuando tratan de curar este mal. Más bien parecen
bestias enjauladas que amenazan con desmoronarse, entre aullidos y
clamores, incapaces de resistir el ardor incontrolable del vicioso deseo
que los agota en toda su vitalidad. Se amontonan en el suelo, como
trapos vivientes exangües, sudando por cada poro las emanaciones acre
de la embriaguez alcohólica.
¡Las nefastas consecuencias del abuso del alcohol, que perjudica a las
naciones, a las familias ya los individuos, son mucho peores que la
disminución de los ingresos presupuestarios obtenidos a costa del
impuesto alcohólico y el envenenamiento del pueblo! El alcohol está
devorando el delicado organismo de la raza humana, y ningún gobierno
saldría perdiendo con su extinción industrial y la consiguiente caída de
los ingresos fiscales. Una nueva vida ordenada, con la consiguiente
recuperación de la salud humana, remplazaría las fabulosas cifras
gastadas en subsidios y gastos con hospitales, asilos, prisiones, policías,
puestos de socorro, recuperación de jóvenes descarriados y otras cargas
derivadas casi todas del alcoholismo actual.
Cuanto más débiles son ciertos órganos o regiones del cuerpo físico de
estos individuos, más se desarrolla en ellos el estado canceroso. Y,
como el alcoholismo debilita las defensas orgánicas, la energía áspera
y latente, aún incrustada en el periespíritu, como residuo nocivo de la
vida del pasado, baja la vibración y se condensa en la carne, atraída por
la fuerza gravitatoria de la materia. Es por esto que el cáncer de
estómago es más frecuente en los alcohólicos, ya que es el órgano más
directamente afectado por la adicción corrosiva.
Lo mismo ocurre con el caso de la cirrosis hepática, porque, aunque
también tiene su origen en causas distintas al alcohol, ya que niños,
mujeres y hombres abstemios ya han sucumbido a esta enfermedad,
entre los bebedores es causada fundamentalmente por el alcoholismo.
René Laennec, el descubridor de la auscultación médica y fundador de
la anatomía clínica, descubrió que el 90% de los casos de cirrosis
hepática eran causados por el alcoholismo. El alcohol penetra casi por
completo en la delicada estructura del hígado, que luego se degenera y
se hincha debido a la proliferación grasa que comienza a constreñir las
venas provenientes del intestino; bajo tal opresión, la sangre se ve
obligada a filtrar su parte líquida en la región del vientre, apareciendo
así “ascitis”, enfermedad más conocida como “vientre de agua”. Los
casos más frecuentes de hidropesía también se deben a la dificultad del
organismo para eliminar la orina a tiempo. Luego, el líquido se filtra a
través de los tejidos del cuerpo y sobrecarga la sangre con toxinas que
luego no se pueden drenar, lo que provoca uremia. Y el alcohol es uno
de los factores para que eso suceda.
Antiguamente era más difícil para los espíritus adictos, del Más Allá,
llevar al cabeza de familia a la bodega o hacer beber alcohol a la familia,
pero en el siglo atómico, donde hay tanta prisa por los descubrimientos
científicos como para el refinamiento de los vicios, no sólo los
periódicos y las estaciones de radio hacen una intensa propaganda del
alcohol, así como también se distribuyen coloridos carteles que invitan
a la gente a ingerir los más variados tipos de bebidas alcohólicas. Es
indudable que la alegría y el éxito de los espíritus del astral inferior
aumentan, pues protegidos por esta imprudencia de los habitantes de
vuestro orbe, ya no les cuesta prender fuego a sus comunes pasiones.
Los miembros de la familia humana, bajo constantes libaciones
alcohólicas, pueden ser fácilmente influidos por el astral inferior; asunto
de menor importancia puede irritarlos y romper sus defensas fluídicas.
¡La adicción a la bebida, como dice el refrán, apenas comienza!
4. Salud y enfermedad
Así, todas las partes del ser humano se ven afectadas por la influencia
de la mente, que actúa con fuerza a través de los diversos sistemas
orgánicos, como el nervioso, linfático, endocrino o circulatorio.
Investigaciones médicas recientes, bajo la guía de la medicina
psicosomática, están confirmando que la psique altera profundamente
la composición y el funcionamiento de los órganos del cuerpo físico.
En consecuencia, por su penetración infinitesimal, la homeopatía es la
terapia más certera capaz de operar e influir de raíz en las emociones y
pensamientos perturbadores, modificando los efectos nocivos que luego
se manifiestan en la organización carnal.
Son principalmente los estados de enfermedad derivados de cambios en
el sistema glandular los que son más particularmente sensibles al
tratamiento homeopático, ya que tienen su principal base para perturbar
las condiciones mentales del espíritu. Las dosis infinitesimales
potenciadas por el proceso homeopático alivian la psiquis del potencial
peligroso, generado por la mente desgobernada, y que sobrecarga al
periespíritu con la carga morbosa de desechos tóxicos que surgen de sus
contradicciones. En el caso de un hígado agotado, debilitado por una
excesiva carga mórbida, que emerge “de adentro hacia afuera”, es decir,
“del espíritu a la materia”, este órgano precioso, filtro heroico y
responsable de la producción de hormonas nutritivas, necesita alivio.
ayuda inmediata y enérgica, en lugar de ser azotado violentamente por
la medicación tóxica que, viniendo de fuera, todavía lo obliga a realizar
un trabajo excepcional.
5. La evolución de la homeopatía
De ahí que el mayor éxito del homeópata dependa mucho del tipo de su
convicción espiritual porque, además de su tarea de científico,
psicólogo y buen "lector de almas", también debe ser un eficiente
filósofo de las leyes. de la vida y del espíritu sobreviviente. .
PREGUNTA: — ¿Cómo podríamos apreciar mejor esta profunda
relación entre la Ley Kármica y el tratamiento empleado por la
homeopatía, al que usted se refirió hace un momento?
Por eso los niños pequeños, por ser menos capciosos y más
espontáneos en sus manifestaciones infantiles, se curan más
fácilmente con la homeopatía.
Aunque para muchos científicos y académicos la idea de que incluso
una creencia vehemente en la inmortalidad del espíritu pueda influir en
el éxito de la terapia homeopática parece ridícula, lo cierto es que el
espiritista nutre una disposición magnética más positiva en su contexto
espiritual. El hombre que cree sinceramente en su supervivencia
espiritual hace los mejores esfuerzos para elevarse a frecuencias
vibratorias psíquicas superiores, y así contribuye al éxito de una
medicina cuya función es dinamizar las energías del cuerpo físico.
PREGUNTA: Nos gustaría saber las razones por las que se requiere
agua destilada para usar gotas homeopáticas. Algunos homeópatas más
rigurosos incluso condenan el uso de cucharas o utensilios de metal,
objetos de polvo de piedra, vasos de vidrio con esquinas interiores, así
como vasos descoloridos o que huelan a jarabes, esencias o restos de
comida. ¿No es una reivindicación tan purista demasiado fanática?
También hay que tener en cuenta que los ataques de ira, celos, odio
y las irritaciones reducen mucho el éxito homeopático, porque son
violentas explosiones mentales, que siembran partículas nocivas y
bombardean el aura de energías vitales despertada en el organismo
carnal.
De ahí, pues, los innumerables éxitos que hasta ahora se han verificado
en la práctica de la homeopatía, aun prescrita por hombres con menos
conocimientos científicos, ya que, siendo una terapia muy elevada, atrae
la influencia benéfica de los bienhechores desencarnados. Muchos
espíritus médicos, que se encarnaron en la Tierra con la misión especial
de propagar la homeopatía, estudiaron primero la medicina alopática y
sus leyes específicas, con el objetivo de llegar a conocer todos sus
compartimentos y recursos, adquiriendo así un mayor cuerpo de
conocimientos sobre ella. ¡dosis infinitesimales, de las que más tarde se
convirtieron en intrépidos defensores!
RAMATIS: — Karma es una palabra que deriva del sánscrito (kri) que
es “hacer”. Los hindúes son quienes más la utilizan, considerándola la
palabra técnica más adecuada para designar la acción y su
correspondiente efecto en las sucesivas encarnaciones de los espíritus
en la Tierra. Para ellos, toda acción es Karma; cualquier trabajo o
pensamiento que produzca algún efecto posterior es Karma.
Por eso decimos que la misma sabia Ley que rige el mecanismo
del Universo también se forma y se ramifica gradualmente para regular
el movimiento de electrones dentro de los átomos. Los astrónomos
conocen la infalibilidad de ciertas leyes que regulan el curso de las
estrellas; los químicos saben cuáles son los factores reactivos exactos e
indiscutibles que guían la afinidad de sus combinaciones de costura; los
matemáticos reconocen la precisión de los cálculos que geometrizaron
el Universo, mientras la humanidad empieza a comprender que el
hombre es también el plan matemático del futuro ángel!
¡Hay una ley ineludible, una ley kármica que regula la causa y el
efecto, que transforma una bellota en un roble, una oruga en una libélula
y un villano en el ungido del Padre! En efecto, una Voluntad Directora
se extiende sobre todo y sobre todos, como imperativo de seguridad y
de armonía cósmica, teniendo como único fin la Belleza y la Perfección.
El karma, como ritmo sumiso de esta voluntad superior, es el pulso
mismo del Creador actuando en ciclos disciplinantes, desde las órbitas
de los electrones hasta las órbitas de los sistemas solares. Es por esto
que, ante el equilibrio y el orden absoluto en la manifestación creadora
del Universo, el conocimiento iniciático desde tiempos prehistóricos
garantiza que “lo que está arriba también está abajo”, y “lo que está en
el átomo también está en el Universo”. ”
Es por esto que el próximo evento profético del “Juicio Final” o “Fin de
los Tiempos”, que ya se está desplegando en la superficie de vuestro
orbe, es todavía un efecto de acción irreductible de la ley kármica, que
tanto busca reajustar el orden planetario. misa para mejores condiciones
astrofísica, en tráfico sideral, cómo encaminar almas rebeldes a
objetivos superiores. El karma, por tanto, como ley que actúa
ininterrumpidamente en eventos progresivos entre seres y orbes, actúa
tanto en el macrocosmos como en el microcosmos, pero su único
propósito es impulsar todas las formas de vida hacia expresiones cada
vez más elevadas y refinadas.
No hay otra solución al problema del odio, pues es ley sideral que
todo esté en armonía y amor; Que las estrellas se armonicen a través de
la cohesión cósmica, que las sustancias se acerquen a través de la
combinación simpática y que los seres se unan a través de la
reciprocidad del afecto espiritual.
PREGUNTA: — ¿Qué causa kármica hizo que un niño naciera con
dos cabezas en un cuerpo físico?
Precisamente por las leyes que regulan la plastia del periespíritu es que
los suicidas del pasado renacen con los estigmas resultantes de los tipos
de muerte con que fueron masacrados y que luego se acentúan, dando
lugar a sus deformidades y desgracias allá en el mundo físico.
Generalmente, el que se ahorca plastifica la figura del jorobado en la
próxima encarnación; el que ingiere el ácido corrosivo daña también la
contraparte etérica de su periespíritu y se moldea en la carne con laringe,
esófago o estómago ulcerado; el que se apuñaló, apenas logra vivir en
la carne en el futuro, causándose una grave herida en el corazón; lo que
es destrozado por una bala en el cráneo vuelve sordomudo, y lo que es
destrozado bajo los vehículos o en caídas deliberadas transita por el
mundo arrastrando un cuerpo desgarrado.
PREGUNTA. — Aunque son raros los casos de niños que nacen con
dos cabezas, hemos notado que nunca sobreviven. Por lo tanto, nos
gustaría saber cuál es el propósito de la ley kármica que permite un
nacimiento teratológico, ya que el ser no sobrevive y, además, se pierde
todo el trabajo gestacional, ya que el espíritu que encarna apenas puede
ver la luz del ¡mundo físico! ¿Cómo os puede beneficiar una vida física
deformada y tan fugaz ?
El espíritu que renace en un cuerpo físico con dos cabezas sólo sufre
el efecto de la ley kármica que eludió en el pasado, y siega según su
propia siembra. Divinity no hace uso de intervenciones extemporáneas
para producir una prueba tan crucial; el fenómeno es sólo el resultado
de alguna violencia mental en el campo de las fuerzas de la vida eterna
contra el sentido noble y progresivo de la vida misma. La ley kármica
sólo actúa a través de la acción del mismo agente que la perturba.
Cuando el espíritu, por su descuido mental, provoca una configuración
adversa a su propio contexto periespiritual, sólo le queda una solución
benéfica, que es plasmar en la carne el insólito fenómeno, hasta que cese
su última vibración perturbadora en el letargo de la materia. . Cuando
más tarde, por la muerte, el cuerpo físico sea devuelto a la sepultura fría
del cementerio, la forma teratológica imprudentemente creada y nutrida
en el mundo astral se disolverá en el seno de la tierra, aliviando al
periespíritu de su carga morbosa.
Pero hay casos en que los padres de tales niños pueden ser almas
amigas y benefactoras que, castigadas por la desgracia ajena, aceptaron
la misión de acoger en su casa a quienes necesitan de la vida física para
liberarse del agobiante peso de su abandono mental. . No olvidemos que
Jesús desencarnó en la cruz del sufrimiento, pero realizando una
sublime misión salvífica para la humanidad terrena, y no porque haya
crucificado a alguien. El nacimiento de niños deformes no siempre
indica recuperación kármica por parte de los padres; muchos de éstos
tienen un corazón muy bondadoso y un sentimiento espiritual angelical,
por lo que aceptan gustosos la tarea de procrear dentro de su familia al
hijo o hija que necesite materializar en la carne sus terribles aflicciones
del pasado. ¡Cuántos padres atentos, y que incluso se alegran por ello,
rodean a sus hijos deformes de un afecto excepcional, intuyendo en el
prisionero de una silla de ruedas o de un lecho de sufrimiento el alma
que le suplicaba apoyo para cumplir su prueba de rectificación
espiritual!
Durante mucho tiempo, por tanto, han existido los guiones más eficaces
para la curación definitiva del espíritu; sólo resta que los médicos sean
más comprensivos en su misión terapéutica, liberándose un poco más
de la compleja exclusividad del preciosismo académico y de sus
abultados libros de texto médicos, para confiar también en las
enseñanzas dejadas por Jesús, que son medicinas admirables de la más
alta contenido sideral.
Mientras la Medicina libra una lucha titánica contra el flagelo del cáncer
de pulmón y lo considera más como consecuencia de los venenos del
tabaco, ¿no fuman en exceso ciertos médicos?
A pesar del éxito del médico sobre el cuerpo físico, las toxinas del
periespíritu no desaparecerían, pues la cantidad embalsada antes del
plazo fijado para su descenso total seguiría afligiendo aún al espíritu en
el mundo astral, después de su desencarnación.
PREGUNTA: - En consecuencia, ese espíritu de nuestro ejemplo aún
tendría que ser tuberculoso, en su próxima encarnación, por otros 20
años; ¿no es así?
RAMATIS: — Son las criaturas que, aunque afectadas por las más
terribles enfermedades, quedan resignadas, apacibles, blandas y
conformadas. Pasan por la vida física transformando su dolor en
verdaderos himnos de belleza espiritual, animando con su valentía
incluso a los que sufren mucho menos y permanecen rebeldes y
desanimados. En general, son profundamente devotos de las enseñanzas
de Jesús, extrayendo de él la fuerza que tanto necesitan para no
sucumbir o incurrir en nuevas faltas kármicas.
Pero, si bien hay espíritus que prefieren descargar las sustancias tóxicas
incrustadas en su periespíritu de una sola vez —lo que les resultaría
menos ofensivo y atroz si lo hicieran gradualmente en varias
encarnaciones sucesivas—, existen también otros portadores de
venenos psíquicos tan violentos que, aunque reducen al mínimo su
tendencia a la carne mortificada, sufren terriblemente desde la cuna
hasta la tumba.
Haz un buen uso de tus experiencias espirituales, tal como lo hacen los
buenos estudiantes en el currículo escolar. Aunque el dolor y el
sufrimiento son desagradables, su función es transformar la vestidura
periespiritual derivada de las energías telúricas del mundo animal en la
delicada textura de la túnica angélica. La encarnación del espíritu en los
mundos planetarios es una bendita providencia, que desarrolla vuestra
conciencia y os brinda la oportunidad de alcanzar la felicidad por el
mérito del esfuerzo personal. Su demora en el contacto con la materia
proviene del deseo siempre insatisfecho y de la excesiva apelación a la
gran ilusión de la vida física, como si ésta fuera la verdadera vida. Los
entretenimientos ilusorios de la materia y las pasiones peligrosas,
cuando son altamente adorados, debilitan la voluntad y la hipnotizan de
regreso al linaje animal que constituye la base del periespíritu. Pero es
ley divina que todas las almas acaben saturadas por la mediocridad de
los sentidos físicos y modifiquen sus planes y destinos, para buscar
definitivamente las compensaciones superiores de los mundos
espirituales.
“Bienaventurados los mansos, los que lloran; los que tienen hambre y
sed de justicia; el Misericordioso; los puros de corazón; los pacíficos;
los que sufren persecución; los pobres de espíritu; los que han sido
agraviados, porque serán consolados, alcanzarán misericordia, y de
ellos es el reino de los cielos.”
19. La influencia del psiquismo en las enfermedades digestivas
RAMATIS: — Sin duda, usted sabe que el tan famoso sistema nervioso
vagosimpático es una poderosa red de neuronas muy sensibles, que
desde el cerebro se extiende por todas las vísceras y tejidos del cuerpo
humano, penetrando profundamente por todas las regiones carnales,
hasta llegar al células de la piel en las yemas de los dedos y llegan a los
capilares de las plantas de los pies. En este doble sistema nervioso que
se origina en la intimidad del cerebelo, tanto las células de los centros
cerebrales, que controlan el metabolismo general, como las de los
ganglios, despachan dos tipos de corrientes nerviosas: las células
simpáticas envían la corriente excitante y las parasimpáticas. Las
células, o vagus, emiten los impulsos inhibidores o de desaceleración
del organismo.
Este trabajo tan delicado de ambos sistemas, por ley biológica, debe
realizarse siempre de la forma más armoniosa posible, a fin de mantener
el perfecto equilibrio de la salud psicofísica del hombre. Es su función
biológica que, mientras las células simpáticas excitan al organismo para
que trabaje, las parasimpáticas tienen la función de hacerlo descansar.
El nervio simpático es el autor de todas las reacciones dinámicas y
laboriosas del cuerpo; tiene que acelerar la actividad del corazón,
estrechar los vasos y dilatar las venas respiratorias, así como aumentar
la cuota de oxígeno en la sangre, movilizando el azúcar almacenado en
el hígado y administrando el combustible necesario para que los
músculos puedan trabajar satisfactoriamente .
El animal salvaje o el bugre puro, del bosque, aunque tienen una vida
rudimentaria, son portadores de organismos bien dispuestos, como
preciosas máquinas estructuradas en carne que trabajan tan de cerca
como si fueran valiosos cronómetros de precisión. Indudablemente, esto
sucede porque viven lejos de las preocupaciones mentales de las
personas civilizadas, sin experimentar perturbaciones psíquicas que
puedan alterar la armonía de las fuerzas electrónicas responsables de la
cohesión molecular de la carne.
Cáncer, como karma resultante del daño a los demás, reúne bajo sus
temibles garras, tanto a quienes actúan directamente bajo la forma de
agentes de la magia malévola, a sus contratistas o representantes
intelectuales, como a todos los espíritus que en pasadas encarnaciones
han sido acumulando toxinas por la subversión del elemental primario
en el uso de hechizos mentales o verbales.
Esto justifica que haya seres santificados por su heroica forma de vida
y que, habiendo sembrado bendiciones y ayudado a los demás,
desencarnen bajo el dolor atroz del cáncer, como contradiciendo la
bondad de Dios y la convicción de que ¡el Bien vale la pena! La miasma
cancerígena que pesa sobre las vestiduras del periespíritu cuando es
purgado, provoca siempre proverbiales lesiones cancerosas, ya sea que
le suceda a un ser rebelde a su prueba kármica, ya sea a una criatura
decidida, útil y buena, que decidió extinguir su residuo morboso. Lo
cierto es que, mientras el espíritu rebelde, durante su purga obligada,
sigue produciendo nueva carga enferma para sufrir futuras purgas
dolorosas, el alma conformada realiza su purga tóxica ejercitándose
bajo la bondad, el cariño, la humildad, la renuncia y el amor. para otros,
evitando volver a contraer la misma deuda que le causó tanto
sufrimiento.
Por tanto, no basta que la ciencia del mundo analice sólo los elementos
químicos que componen la sustancia material del organismo físico; es
hora de escuchar y conocer también el contexto del periespíritu,
evaluando su peso, densidad y la energía etéreo-astral que de él emana
e interpenetra el edificio atómico de carne. De ahí que las emisiones de
tristeza, odio, ira o revuelta, que emanan de vuestra red bioeléctrica,
perturben vuestra organización física, mientras que la alegría, la
mansedumbre, el amor o la resignación favorecen vuestro equilibrio
energético.
No cabe duda, sin embargo, que los científicos terrestres aún tienen que
aislarse o identificar el "agente patógeno" del cáncer cuando, por la
mayor sensibilidad de sus futuros equipos y el dominio de las fuerzas
ocultas, también pueden actuar en el umbral de la astral donde, en
realidad, escenifica el elemental cancerígeno.
Unos, pues, cuidan la salud del cuerpo carnal; otros aparecen en vuestro
orbe dedicados exclusivamente a la restauración de la salud espiritual y
demostrando realmente que los efectos nocivos observados en el
organismo físico desaparecerán cuando se extingan las causas
patológicas arraigadas en el fondo del alma. Es por esto que las
enfermedades pueden ser cambiadas, sustituidas o aparentemente
eliminadas, sin que la morbosa energía psíquica que las alimenta sea
eliminada o incluso modificada en su molesta esencia, de la misma
forma que cambiar las bombillas de colores no altera la naturaleza de la
fuerza eléctrica. .
Incluso entre las mujeres afectadas por el cáncer, las reacciones más
favorables contra la enfermedad se ven en las más resignadas, cuyo
espíritu no es torturado por el miedo o la desesperación, manteniendo
la fe y la confianza en las metas superiores de la vida creadas por Dios.
Los que son más cariñosos, amables, alegres, generosos y enemigos del
chismorreo o la quizilia cotidiana mantienen un estado de ánimo
positivo y resistente a muchos sucesos desagradables.