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PAUTAS PARA LA REALIZACIÓN DE UNA REDACCIÓN FILOSÓFICA.

La redacción se propone a modo de TÍTULO, que responde a unos contenidos


teóricos que hay que desarrollar: el alumno, en principio, sólo tiene como punto de
partida el título de la redacción, pero posteriormente utilizará un esquema y los
contenidos teóricos de los que dispone en relación con el título de la redacción. La
Redacción debe tener tres partes: INTRODUCCIÓN, DESARROLLO Y
CONCLUSIÓN.

1) INTRODUCCIÓN:

No tiene que ser muy extensa, como mucho un cuarto de la exposición total. En ella
situamos y aclaramos el tema o problema a desarrollar dentro:
-Del contexto histórico y filosófico del autor y/o de su teoría filosófica.

● Una forma interesante de empezar es comentando quién es el autor, cuáles son los
objetivos que pretende con su teoría y la relación que tienen estos objetivos con el tema
a redactar, y por supuesto, situar al autor y su teoría en el contexto histórico y
filosófico de su época.

2. DESARROLLO:

Es la parte más extensa, el “cuerpo” de la redacción, y no debe suponer menos de dos


cuartos de la exposición. Aquí es donde tenéis que desarrollar y explicar los contenidos
teóricos en relación con el título que se pide. Aquí se deben visualizar LOS
CONOCIMIENTOS QUE TENÉIS SOBRE EL TEMA (APOYÁNDONOS EN LOS
MATERIALES DE LOS QUE DISPONEMOS).

CONSEJOS:
-Es muy recomendable comenzar esta parte, (una vez que hemos acabado con la
introducción), formulando el problema o tesis que plantea el autor acerca de la cuestión
del título de la redacción A TRAVÉS DE UNA PREGUNTA RETÓRICA, la cuál nos
servirá como base argumentativa para justificar la conclusión, en la que haremos
referencia a dicha pregunta.
-Las distintas partes del desarrollo conviene conectarlas con recursos lingüísticos del
tipo (por una parte…, por la otra…, respecto a este tema…, en primer lugar, en
segundo, por último, así pues, cabe decir, no obstante, sin embargo, además,
también…).
-Releed lo que vayáis escribiendo para ver si es coherente y sigue un hilo argumentativo
claro y examinad cada párrafo, su coherencia interna y su conexión con el párrafo
siguiente. Aseguraos que utilizáis los conceptos y palabras con PRECISIÓN Y
PROPIEDAD, es decir, utilizar una terminología técnica. Cualquier concepto mal
aplicado, expresado, y explicado o que no tengáis claro puede cambiar todo el sentido
de la argumentación y nos conduzca al error.
3.CONCLUSIÓN:

( NO SE TRATA DE REDACTAR LA OPINIÓN PERSONAL)

No debe suponer más de un cuarto de la exposición. Es el espacio dónde se cierra el


tema. Para concluir tenemos varios modos:

A) RECAPITULACIÓN DE LO EXPUESTO ANTERIORMENTE. Esto es;


realizar un pequeño resumen de lo expuesto en la introducción y el desarrollo.

B) PROBLEMATIZAR LA CONCLUSIÓN; esto es, formular el problema o tesis


que plantea el autor, RESEÑANDO CON CLARIDAD LA SOLUCIÓN que el autor
propone (si acaso propone alguna).. En la conclusión también se pueden utilizar algunos
recursos lingüísticos como: En conclusión…, así pues…, para terminar, finalizar,
acabar…

*RECOMENDACIONES:
◦ La extensión máxima de la redacción será de un folio por ambas caras, pero siempre
dependiendo del tamaño de la letra, del espacio entre líneas, la profundidad de los
contenidos etc… En la redacción es muy importante, en primer lugar, ajustarse al
título (a lo que se pide). La estructura argumentativa (el hilo conductor), así como la
coherencia y el orden de la redacción son FUNDAMENTALES; es decir, no deben
haber saltos y digresiones innecesarias. Si se estructura como un colage, cuanto mejor
estén conectadas las diferentes partes mejor estará la redacción.

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