+6 Nombre: Puerto, fortalezas y conjunto
‘monumental de Cartagena de leis
(Colombia)
+ Declaracién Patrimonio: 194
+ Situacién: en i costa nore de
(Combi, rence
10" 25’ de atid noe ylos 75°32 de
mar Cane; en kos
longtud cote.
Ili se encontraron con el tr6pico
en toda su dureza de selvas y Ilu-
vias, y sobre todo con las feroces tribus
caribes, las mismas que habian mante-
ido aterroriza
jos a los indios antilla
nos antes de la Conquista. La primera
fundacién destinada a ser definitiva se
Hev6 a cabo en 1533, por el madrileao
Pedro de Heredia, sobre el emplaza
miento de un poblado indigena llamado
Calamari, cuyos habitantes habian ofte-
cido encarnizada resistencia a la Con-
quista. Recibié el nombre oficial de San
Sebastian de Cartagena, pero muy pron-
to se generalizé el uso de otro mis po-
4
CARTAGENA
DE INDIAS
COLOMBIA
6s primeros pasos de los espafioles en América fueron engartosamente ficiles,
En las Antilla
someter; en M
‘encontraron indios pacificos
nistosos, a fos que no fue dificil
-xico, un gran imperio en el que bast6 sustituir al poder central
para hacerse con el control de un extenso tertitorio, Animadlos por el éxito
obtenido, los conquistadores se lanzaron a nuevas empresas, esta vez en las
costas caribeftas de lo que son hoy Colombia y Venezuela
pular, con el que ha llegado hasta nues
‘ros dias: Cartagena de Indias,
EL on0 DE Los MUERTOS
«a primera ordenacion urbana de Car-
L gena se reali26 ene 1535 y 1537,
cargo de Juan de Vadillo. La ciudad fue
arrasada por un incendio en 1552, y no
ssabemos hasta qué punto la reconstruccion
se ajust6 al ta
ado original, ya que el plano
ims antiguo que conservamos es posterior
a ella: data de 1595 y fue levantado por el
ingeniero Juan Bautista Antonelli, como
base para trazarel sistema de fortficaciones
que le habia sido encargado por el rey
Felipe Il, Para entonces, Cartagena ya haba
crecido mucho. A su falgurante ascenso no
fueajeno el saqueo de tumbas de la cultura
sing, que el capitin Francisco César de
Canagena habia encontrado en el cercano
valle del Cauca gracias lasindicaciones de
‘unos indios. Los sind eran una de las llama
das “culturas del oro” colombianas, y acos-
‘tumbraban enterrara suscaciquescon ticos
ajuares funerarios, El expolio de tumbas
fue, de hecho, una prictica tan usual en la
region durante el siglo xv1, que lego inclu-
soamerecer un tibio decreto de li Coronaespafola, declarindola contraria a la mo:
ral cristiana,
Si saquear tumbas era p
0, los car:
tageneros no tardaron en pagarlo con el
infierno de las incursiones piratas, que me-
nudearon desde los sonados ataques de
Hawkins y Drake en 1568, A la riqueza de
la ciudad se sumaba el hecho de ser uno de
Jos principales puertos de atraque de la fota
de Indias, que funcionaba desde 1561 con
el fin, precisamente, de proteger de ata
ques corsarios a los barcos que traslada-
bana la Peninsula el oro y la plata proce
Fi
TES ¥ MURALLAS.
Cire por yren as opine
jones dadas a Pedro de Heredia se ha
blaba de construir un fuerte para proteger
el puerto, y en 1565 sabemos que existian
los de la Calet
y el Boquerén, Cuando el
rey Felipe Ilse decidié a poneren marcha
n plan de fortificacién de los puertos
del Caribe, éste quedaria para siempre
ligado al nombre del ingeniero Juan Bau.
sta Antonelli, fundade
3 saga fa
miliar que durante largos afos estuvo al
servicio de la Corona espafiola
En Cartagena, Antonelli opt6 por en
cerrar integramente la ciudad, a excep-@
cin de un arrabal, dentro de una pode
rosa muralla de piedra jalonada de ba
luartes, segtin los principios de la ingenie
ria militar vigentes por entonces en
Europa. El fuerte de San Felipe de Baraja
y la bateria de San Fernando de Bocachi
cca, emplazada frente al mar, presiden
conjunto. Todas estas fortficaciones han
legado hasta nuestros dias pricticamente
integras, a excepciOn del fuerte de San
Felipe, muy deteriorado. Se conserva in.
cluso el cerco casi completo de las mura
llas y buena parte de sus cafones origina:
les, caso Ginico en el contexto americano,
que convierte a Cartagena en uno de los
enclaves fontificados mas espectaculares
ARQUITECTURA CIVIL ¥ RELIGIOSA
regiones americanas y cuyo «
cuentra en una curiosa real cédula de 1
0
que prohibe expresamente tales alardes en
Ja Nueva Granada.
La catedral tuvo, al parecer, modestos
origenes de cafizo, incluso después del
incendio de 1552, y su priment traza de
piedra fue casi destruida por Drake
de ser terminada, Su aspecto actual pare
ce corresponder con bastante fidelidad
no obstante, a este primer diseft.
8
Ta ciudad de Cartagena no solo es
junto my completo de fortificactones,
‘como ls slidas murals que la vodean
(amr), sino también un conjunto de
‘cuales ros muestra las fotCARTAGENA DE INDIAS 0
Durante el siglo Xv, las Ordenes reli
_giosas que mayor arraigo tuvieron en Co:
lombia fueron los dominicos, francisca
ros y agustinos. Todas ellas tuvieron en
Cartagena importantes conventos de los
que s6lo subsiste la iglesia de Santo Do-
mingo, cuya fabrica actual data del siglo
xv, Presenta planta de una sola nave con
cruceroy capillas laterales, y una elegante
fachada de conte herreriano. Ya en los
siglos xvut y xvi, el extraordinario auge
de la Compania de Jesis eclips6 en las
colonias a las demas Ordenes, hasta su
ena d
expulsién en 1767. En Carta jaron
los jesuitas una espléndida iglesia: San
Pedro Claver. Su estructura esti inspirada
en la iglesia romana del Gest, modelo
muy utilizado por la Compaiia en sus
fundaciones americanas, con un segundo
piso sobre las capillas laterales.
El mas notable edificio civil que se
conserva en Cartagena, el Palacio de la
Inquisicion, pertenece también a esta til
tima €poca colonial, estando fechadc
en 1770, Su espléndida portada barroca
destaca poderosamente sobre el blanco
luminoso del resto de la fachada, que
responde al modelo tipico de las vivien
das cartageneras, con rejas de madera tor
neada en la planta baja y balcones com
cen la primera, todo ello encalado,
Madera y cal son dos constantes del
paisaje urbano de Cartagena, al que pre
porcionan un singular sabor andallus La
madera fue utilizada abundantemente en
techumbres de alfarje, herencia del are dra
be espaol, que se convinieron en el siste-
rma mas comtin de cubrir iglesias y palacios
en toda Colombia. Pero en Cartagena la
madera fue sobre todo un elemento de la
arquitectura popular, profusamente utiliza
da en balcones y rejas, siempre encalados
‘como el resto de la fachada, que decoran
innumerables viviendas en barrios como
San Diego 0 Geisemani. Este estilo perma
necié vigente, pricticamente sin cambios,
durante los tres siglos de dominio espanol
°