8 junio 2022.

Decidí hacer este comunicado por el siguiente medio para poder expresarme de mejor
manera y plasmar todos mis pensamientos respecto a la situación que me encuentro en estos
momentos.

Con toda sinceridad yo puedo decir que tome una decisión abrupta al cambiarme de
colegio, fueron los últimos meses del año pasado y las únicas cosas que recorrían por mi
cabeza era la angustia de salir de mi antiguo Colegio, estoy diciendo la verdad en que en
esos momentos me encontraba en un punto muy bajo y creí que la única manera de escapar
de lo que sentía era salir de donde me encontraba, todo a mi alrededor lo veía con
negatividad, no encontraba más que solo eso.

Para dar contexto me gustaría agregar más detalles sobre todo lo que sucedió con mi
persona durante esos días, pensaba que si tenía un cambio eso me podría hacerme sentir
mejor y ayudar a mi salud mental progresará. Mi anterior Colegio realmente no era tan
malo ahora que lo pienso, todo el cambio que quería realizar era para poder huir de algo
ridículo, los comentarios de los profesores que ni siquiera iban dirigidos a mí, o
compañeros de clases que hacían comentarios sexuales sobre uno, hay que recalcar que
todos ellos ya se habían ido del Colegio, siento que puse excusas para salir de algo que
estaba dentro de mi como la tristeza y la negatividad.

El final del año 2021 recuerdo sentirme sola, no sabía la razón exacta de porque me sentía
de esa manera, en esos momentos estaba tratando de convencer a mis papás de que me
validaran el cambio, por primera vez sintiendo el mundo entre mis manos al tomar una
decisión que pensé que me iba a llegar a beneficiar. Todo pasaba muy rápido y podía ver
que realmente llegue a convencer a muchas personas sobre el cambio y que creían en mí,
pero la persona que jugaba el papel principal no tenía la misma seguridad que había
compartido con los demás, ni siquiera se lo tomo en serio por el mismo hecho que solo
quería acabar con lo que había comenzado, sin ver opciones solo salir rápido de esto, ya no
importaba donde quedaba si era un colegio o escuela con solo graduarme y tener mi
bachillerato estaba bien.
Todo lo que yo “quería” se estaba haciendo realidad y mis dudas empezaron a crecer más
de las que tenía, recuerdo hacer el examen sin ganas de ver si me aceptaban, solo me sentía
muy mal por como lo había desarrollado y ver que luego si me admitieron fue muy irónico.
No tenía de otra opción que aceptar hasta a donde había llegado y enfrentar todo lo que
había creado.

El fin de hablar de esto no es para evidenciar en que me equivoque y luego arrepentirme,

mi punto es ser sincera con lo que realmente paso desde mi perspectiva y si llego a tomar
una decisión que va a hacer de gran cambio en mi vida deseo sentarme y pensar lentamente
sobre cada paso que haga en adelante, no me siento mal al recordar el pasado ya que me
sirve a mi para darme cuenta de mis fortalezas y debilidades.

El día de hoy me encuentro sentada en mi escritorio escribiendo la verdad sobre como estoy
llevando a cabo toda la situación del cambio de colegio, y puedo dejarlo claro diciendo que
mi estado mental está en un declive muy grave. No soy capaz de contener todo esto y es
momento de poder platicarlo, de mi parte he reflexionado y primordialmente ya no puedo
estar huyendo de todos los problemas que tengo, estoy cansada, no debo de tener miedo y
pensar en lo que me digan los demás.

Los últimos meses han sido muy fuertes para mis padres y sobre todo para mí por todo esto
de la adaptación del colegio, yo al principio sentía la motivación de querer estudiar y poder
salir adelante, desde el fondo de mi alma llego a decir que hice mi mayor esfuerzo para
poder terminar el colegio. Mientras pasaba el tiempo mi motivación caía profundamente
hasta que se perdió por completo, preguntándome para que hacía todo esto si no tenía
ninguna razón después de terminar mis estudios, como una cadena todo siguió, lo que me
quedaba de autoestima desapareció por completo, la apatía se volvió fuerte al punto de
darme igual todo lo que hacía en mi vida y lo más tedioso fueron la importancia que le di a
los demás.

No hago nada, no puedo engañar a las personas diciendo que trabajo o que ahorita estoy
haciendo mi mejor esfuerzo, me siento perdida y muy dañada. No tengo idea de cómo
seguir adelante y eso me hace sentir miserable, no encontrar respuesta a nada. En esto es
invertido el dinero de mis padres como su tiempo y me hace muy mal desperdiciándolo,
pero necesito priorizar mi salud mental porque estoy al borde de la muerte, quiero vivir,
pero no de esta manera, necesita ayuda urgente para poder salir de esto.

Yo agradezco en la manera que se abrieron las puertas en el colegio La Asunción, me

pareció muy bien el hecho de que, si podían llevarme a un ritmo diferente al de mis demás
compañeros y fueran consciente de mi condición, pero no todo es como uno quiere. El
colegio es grande y tiene una gran capacidad de tener demasiados alumnos, la metodología
es diferente como la mayoría de los trabajos son en grupos y si ni siquiera puedo trabajar
con mi persona no entiendo como esperaban que trabajara con otras, se me dificulta
establecer relaciones con los demás.

Muchos pueden decir que vuelvo a lo mismo o que no avanzo, pero prefiero avanzar a mi
manera y que mi salud mental se encuentre en un mejor estado que del que presento ahora.

Llego a darme cuenta de que nunca hubo un “Que hay de mi” en mi vida, me refiero que
siempre puse a los demás en primera línea, sus acciones, comentarios, entre otras cosas, me
desarrollé en un entorno en que no sabía que existía el amarse a uno mismo, tenía en mente
que si mis padres me habían dado la vida era para que yo se las devolviera, haciendo lo que
ellos quisieran y si yo llegaba a salirme de toda esa idea que me había creado estaba
decepcionando a mis papás. Nunca pude soñar porque siempre me despertaban en la
realidad, sin darme cuenta prioricé a los demás cuando la persona que realmente vale la
pena ser escuchada es a mí misma, es hasta ahora que aterrizo que me doy cuenta de que
soy yo quien debo de amar en este mundo, no es tarde para amarme a mí misma y si puedo
hacerlo.

Durante todo el proceso de ver mi vida hacia atrás solo veía lo malo, pero realmente caigo
en pie y puedo observar la fuerza mental de la estoy hecha y eso me hace sentir orgullosa
de mí misma, me da puerta a poder ver quien es Natalia y como es ella.

Quiero tener sueños y poder lograrlos, sentir la emoción de que estoy haciendo algo que me
va a ayudar alcanzar lo que quiero, disfrutar todos los días en los que estoy viva y amarme
por quien soy, yo Natalia Beatriz Corleto Cruz merezco ser feliz.