Está en la página 1de 3

vida de perros

Escrito Por:
Mateo Salcedo

Julio de 2022
version 1
+573503939171
1. EXT. CALLE PRINCIPAL. NOCHE.
Vemos a Luis (50) barba desaliñada y sucia, son visibles
algunas canas, su pelo largo y sucio con señales también de
canas. Viste un chaquetón desgastado y mugriento color verde
militar llegando a un tono beige. Usa un gorro para el frío
que hace contraste con su vestimenta. Tiene uñas largas,
sucias y amarillentas que se pueden ver gracias a que usa
unos guantes de lana color negro sin dedos. Utiliza un jean
azul oscuro muy desgastado y sucio. Luis está acompañado de
sus dos perros al lado izquierdo de él.

(Alimenta a sus dos perros partiendo una pechuga broaster


con ambas manos. Con su mano derecha engrasada y sucia le da
de comer el pollo en el hocico a uno de sus perros para
luego hacer lo mismo con el otro. Luis prende la radio con
sus manos sucias y engrasadas, para luego acomodarse y comer
algo él. termina y se dispone a dormir).
RADIO
Buenas noches Bogotá, las noticias
de hoy fueron patrocinadas por
incondicional alimento, su mascota
se lo agradecerá. Con ese último
tema nos despedimos, recuerden que
mañana domingo la ciclo vía empieza
a las 7:00 am...
FUNDIDO NEGRO AÚN CON RUIDO DEL RADIO.

2. EXT. CALLE PRINCIPAL. DÍA.


SIGUE FUNDIDO NEGRO.

Suena estruendo muy fuerte. Patada de policía (38), hombre


de baja estatura, de contextura robusto con botas
institucionales. Luis
entre abre los ojos y aún medio dormido escucha.

POLICIA
(ojos entre abiertos de luis)
Nos fuimos hermano, bueno, bueno,
se me para mijo.
El policía lo toma del brazo muy brusco. Confundido agarra a
sus perros quienes ya están muy inquietos y los abraza con
ambos brazos uno al lado del otro.
POLICIA
Parece, parece, o esos perros
también llevan.

(CONTINUED)
CONTINUED: 2.

LUIS
Ya, ya, ya, ya, gonorrea, ya.
Luis se para aturdido y muy ansioso, lagrimea porque sabe
que les esperan a sus perros los cuales se quedaran ahí.
Intenta solucionar.

LUIS
(Se devuelve para intentar
desamarrar a sus perros, pero
el policía lo alcanza y lo
vuelve a jalar del brazo. )
No, todo bien ya me abro.
POLICIA
No, ni mierda Hijueputa, usted ya
sabe.

El policía empieza a patearlo de nuevo, hasta lograr


montarlo en el camión parqueado en la esquina, al montarlo
en la parte de atrás, los perros empiezan a ladrar y
estresarse al ver lo que le están haciendo a Luis y observan
cómo se lo llevan. Al montarse al camión Luis saca los
brazos en medio de las rendijas y con mucha desesperación y
tristeza ve cómo se aleja de sus perros cada vez más.
LUIS
(grita y solloza)
Mis perros, mis perros, mis perros,
no, no.
SALEN CRÉDITOS MIENTRAS LUIS SIGUE LAMENTANDO POR SUS
PERROS.
FIN.

También podría gustarte