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I

DEDICATORIA

La presente monografía está dedicada a Dios por

acompañarnos a diario y darnos la fortaleza para continuar

formando nuestros conocimientos.

A nuestros padres, quienes son nuestro apoyo y motivación

para lograr nuestras metas académicas.

A nuestro profesor Mg. Rolando Balarezo, por brindarnos sus

conocimientos en la materia para que en el futuro podamos

aplicarlos para contribuir con el correcto ejercicio de la

abogacía en nuestro país.

ÍNDICE

1
DEDICATORIA..............................................................................................................................1
INTRODUCCIÓN...........................................................................................................................3
I. ANTECEDENTES...................................................................................................................4
II. DEFINICIÓN.......................................................................................................................6
III. FINALIDAD DE LA ANTROPOLOGÍA FORENSE.........................................................7
IV. OBJETIVOS DE ANTROPOLOGÍA FORENSE................................................................9
V. TIPOS DE ANTROPOLOGÍA FORENSE........................................................................10
1. Antropología física forense....................................................................................................10
2. Antropología social forense....................................................................................................10
VI. PROTOCOLO PARA LA INVESTIGACIÓN FORENSE EN EL PERÚ........................11
1. Investigación Preliminar.........................................................................................................13
2. Protocolo de Inspección.........................................................................................................15
3. Protocolo para la recuperación de evidencia..........................................................................16
4. Protocolo de Morgue..............................................................................................................19
4.1 Procedimientos Generales..................................................................................................21
4.2 Análisis preliminares..........................................................................................................22
4.3 Examen externo..................................................................................................................22
4.4 Examen interno...................................................................................................................23
4.5 Elaboración del Informe Pericial........................................................................................24
5. Protocolo de Identificación....................................................................................................25
6. Base de Datos Antropológica Forense...................................................................................27
VII. CONCLUSIONES..........................................................................................................29
BIBLIOGRAFÍA...........................................................................................................................31
ANEXOS.......................................................................................................................................32

II

2
ANTROPOLOGÍA FORENSE

INTRODUCCIÓN

El registro de muertes clandestinas y violentas en nuestro país va en aumento con el paso de

los años. Los cuerpos sin identificar son fruto de un alto índice de criminalidad, de falta de

valores y de políticas estatales ineficaces que no permiten la plena vigencia de los derechos

fundamentales y la consolidación de la paz en nuestra sociedad.

Las familias que reportan a sus seres queridos como desaparecidos sufren el rompimiento

abrupto de sus lazos y, a medida que transcurre el tiempo, son presas de la angustia por no saber

cuál es el paradero.

La Antropología Forense ofrece un singular servicio humanitario. Los profesionales que se

desempeñan en esta ciencia acuden al lugar donde se reportó un hallazgo y mediante la

aplicación de sus conocimientos realizan la investigación correspondiente del cuerpo o restos

humanos encontrados para finalmente lograr la identificación de personas asesinadas, ocultas

durante el tiempo suficiente para asegurar la impunidad de quienes acabaron con su vida; de

homicidios de mujeres que previamente fueron violadas; de niños que fueron también abusados

de sus cuidadores y enterrados en terrenos alejados de la ciudad para no ser descubiertos.

Una vez identificada la víctima y a quien cometió el homicidio, los familiares también cierran

una dolorosa etapa y recuperan las fuerzas para exigir el cumplimiento de la pena al culpable y

una reparación civil que pueda de alguna manera reparar la pérdida.

3
En el presente trabajo se relatan los antecedentes históricos de la antropología forense, su

definición y tipos. También explica de forma resumida como se debe llevar a cabo la

investigación antropológica forense. Se desarrolla el Protocolo para la Investigación Forense en

el Perú, explicando cómo se debe llevar a cabo la etapa de Investigación Preliminar, el Protocolo

de Inspección, el Protocolo para la Recuperación de Evidencia, el Protocolo de Morgue, el

Examen Externo e Interno, la elaboración del Informe Pericial y el Protocolo de Identificación.

Finamente, se exponen las conclusiones y la bibliografía.

I. ANTECEDENTES

Según Alejandro Arteaga Saucedo (2014) 1, uno de los primeros estudiosos de los restos

humanos asociados a crímenes fue Thomas Dwight, reconocido como padre de la antropología

forense en Estados Unidos, quien escribió el libro “The Identification of the Human Skeleton: A

Medico-Legal Study” publicado en 1878. Posteriormente Harris Hawthorne Wilder y George

Dorsey quienes trataron por primera vez la importancia del estudio de los huesos humanos para

su identificación.

Sin embargo, el gran impulso de la antropología forense tuvo lugar entre los años 1939 a

1972. En este primer año, 1939, el antropólogo físico Wilton Marion Krogman impactó con la

aplicación de los conocimientos de la antropología para el estudio de los elementos óseos en las

ciencias médico-legales, describiendo sus resultados en su libro “Guide to the identification of

Human Skeletal Material”.

1
Cfr. Arteaga Saucedo, Alejandro (2014) Antropología Forense Integral: Principios para el análisis del contexto
desde una perspectiva arqueológica. Tesis encontrada en el repositorio de la Universidad de Zacatecas, México, p.
60-61

4
Respecto al uso de la antropología para la investigación en casos forenses destaca Lawrence

Angel, reconocido como uno de los investigadores que mayores contribuciones hizo al desarrollo

de la antropología forense e instructor de futuras generaciones de antropólogos forenses.

En 1942, Thomas Dale Stewart, Harry Shapiro, F. E. Randall y Charles Snow asesoraron

regularmente al FBI durante la Segunda Guerra Mundial y Keith Mant se interesó y documentó

entierros, las condiciones en las que se encontraban los cuerpos y su relación con las condiciones

del depósito.

Ellis Kerly y Charles Warren también asesoraron regularmente al FBI durante la Guerra de

Corea. Posteriormente, en 1962 se publicó el primer tratado de antropología física forense “The

human skeleton in forensic Medicine” escrito por Wilton Marion Krogman.

En torno a la aplicación de la antropología forense en los tribunales Karen Ramey Burns

(2007)2 describe que por primera vez en el caso Webster vs. Parkman, de 1850, Oliver Wendell

Holrnes v Jeffries Wyman, fueron instados a examinar unos restos humanos que se creía que

correspondían a George Parkman. Un profesor de Química de Harvard, John W. Webster, había

sido acusado delito de asesinato en su contra y a pesar de que ya existían pruebas aplicadas sobre

la cabeza quemada de Parkman encontrada en su horno, pedazos de su cuerpo hallados en su

laboratorio privado, y prótesis dentales de la víctima entre las cenizas, fueron Holrnes y Wyman

quienes testificaron que los restos hallados coincidían con la descripción de Parkman.

2
Cfr. Ramey Burns, Karen (2007), Manual de Antropología Forense, editorial Bellaterra, Barcelona, España, p. 27-
30.

5
Otro caso relevante es el ocurrido en 1897 en Chicago. George A. Dorsey, fue llamado para

examinar algunos fragmentos óseos extraídos del sedimento del contenedor de desechos de una

fábrica de embutidos. Se creía que podían pertenecer a Louisa Luetgert, ya que ella era

fabricante de salchichas y había desaparecido, siendo su esposo había sido acusado de asesinato.

Dorsey no demostró que los huesos encontrados en esos desechos eran humanos y no porcinos.

El testimonio del antropólogo Geroge Dorsey fue entonces relevante para que el juez diera un

fallo con certeza.

En el Perú, durante los años 1980 a 2000 se gestó un conflicto armado interno asociado a

grupos violentos y subversivos como a gobiernos dictatoriales. Hubo desapariciones forzadas y

las ejecuciones extrajudiciales, ejecutadas tanto por el lado subversivo como por las fuerzas

armadas del Estado. Posteriormente, con la restitución de la democracia, surge el establecimiento

y desarrollo científico de la Antropología Forense, pues el Gobierno creó la Comisión de la

Verdad y Reconciliación quien se encargó de realizar las investigaciones correspondientes con

profesionales del área para descubrir cómo sucedieron los hechos, identificar los restos

encontrados y si corresponden a las personas desaparecidas para después devolverlos los

familiares quienes se deshacían de la incertidumbre y duda, podían enterrar a sus seres queridos

de acuerdo a sus costumbres y exigir justicia ante la Corte.

II. DEFINICIÓN

La antropología forense nació como un sub campo de la Antropología física, pero con el

transcurso del tiempo ha evolucionado a un cuerpo de conocimientos que abarca principalmente

6
a la Arqueología, pero también incluye en menor medida instrucciones sobre a la Biología y las

Ciencias Físicas.

Dale Stewart señala que la antropología forense es definida como la rama de la antropología

física que con finalidades legales “trata de la identificación de restos, más o menos

esqueletizados, humanos, y de posible pertenencia humana”3

Por tanto, la Antropología Forense es la disciplina que aplica los conocimientos de la

antropología y otras ciencias físicas para recoger y analizar evidencia legal para determinar si se

tratan o no de restos humanos, describirlos y atribuirles identidad. Actúa en casos individuales,

desastres colectivos, restos históricos y evidencias internacionales de transgresión de los

derechos humanos.

III. FINALIDAD DE LA ANTROPOLOGÍA FORENSE

La antropología forense contribuye “en la localización, liberación, registro y análisis del

contexto de deposición de los restos humanos, ya sea en superficie, cualquier tipo de contenedor,

cuerpo de agua o inhumados en fosas clandestinas”4

En otras palabras, la finalidad de la antropología forense consiste en identificar, describir y

exponer las relaciones entre el cuerpo humano y el contexto, para luego interpretar las acciones

3
Centro Andino de Investigaciones Antropológicas Forenses (2005), La Investigación Preliminar Antropológica
Forense en casos de Graves Violaciones a los Derechos Humanos, Lima, Perú. p. 45.
4
Ob. cit. Ramey Burns, Karen (2007), p. 26-27.

7
expresadas entre el mismo como el posible comportamiento violento, los objetos encontrados en

el cuerpo como la ropa o alrededor del cuerpo como elementos pertenecientes a rituales, la

desintegración, la forma de entierro, entre otros.

Así, cuando el fiscal se encuentre con la Policía Nacional de Perú en la escena de un crimen y

encuentre restos humanos no identificados de procedencia desconocida, puede solicitar el apoyo

de un antropólogo forense, quien se encarga de utilizar sus conocimientos para identificar a la

víctima y posible asesino, la causa y forma de muerte que puede ser natural, accidental, suicida,

homicida o indeterminada, y tiempo transcurrido desde la muerte y deposición. Con el resultado

de su investigación, el perito aportará un nuevo medio de prueba que sustentará la acusación o

sobreseimiento del fiscal y será considerado por el juez al momento de impartir justicia.

Ahora bien, “el uso de la antropología forense también ha sido requerido por La Organización

de las Naciones Unidas, ONGs y Asociaciones civiles en Latinoamérica debido a la situación de

violencia, represión, crimen, e inestabilidad social que han vulnerado derechos humanos

fundamentales.” 5
Por eso, el trabajo de los antropólogos forenses está enfocado a la

identificación de restos óseos y personas desaparecidas en casos observados en Argentina,

Guatemala y Colombia.

En nuestro país también se ha recurrido a la antropología forense como consecuencia de los

crímenes perpetrados durante el conflicto armado interno para la búsqueda y recuperación de

restos, su análisis e identificación.

5
Ob. Cit. Arteaga Saucedo, Alejandro (2014), p. 21.

8
Cabe resaltar que en todos los casos también se tiene como finalidad la restitución de los

restos encontrados a los familiares de la víctima para acabar con el círculo de duelo y otorgarles

la información necesaria para exigir la pena al culpable y la reparación del daño causado.

IV. OBJETIVOS DE ANTROPOLOGÍA FORENSE

El Manual de Antropología Forense de Karen Ramey Burns (2007) 6 señala que los objetivos

de la Antropología Forense son los mismos que los de la investigación médico-legal sobre una

persona recientemente fallecida, es decir, la identificación, determinación de la causa y forma de

la muerte, estimación del momento del suceso y captación de toda evidencia física en apoyo de

las conclusiones o que conduzca a una ulterior información.

El antropólogo recaba toda la información posible de los restos humanos esqueletizados en la

escena del crimen, a fin de llevar a cabo la identificación del individuo mediante el sexo, edad,

raza, talla, físico rasgos esqueléticos o anomalías que puedan facilitar una identificación tentativa

o positiva.

También descubre las circunstancias de la muerte, es decir, cuándo ocurrió, si la persona

murió en el lugar de enterramiento o fue objeto de traslado después, cuál fue la causa de la

muerte, cuál fue la forma de la muerte y quienes fueron los perpetradores.

V. TIPOS DE ANTROPOLOGÍA FORENSE

6
Ob. cit. Ramey Burns, Karen (2007), Manual de Antropología Forense, editorial Bellaterra, Barcelona, España, p.
36.

9
La Antropología Forense distingue entre dos tipos conforme al marco aplicado de

conocimientos que cada una desarrolla. Tenemos:

1. Antropología física forense

La antropología física forense, conocida como antropología criminal, “se apoya

fundamentalmente en la osteología, aunque los huesos no son el objeto de estudio sino que se

vuelven objeto e instrumento de análisis para llegar a esclarecer un crimen.”7

Por tanto, la antropología física forense constituye aquella sub rama que se encargada de

analizar los restos óseos que se involucran en asuntos de carácter legal, con la finalidad

contribuir en el esclarecimiento de la identidad mediante la determinación de sexo, estatura,

edad, filiación racial, etc; así como la determinación de la causa de muerte, tiempo desde la

muerte y circunstancias que rodearon el deceso del individuo.

2. Antropología social forense

La antropología social forense se ocupa del “estudio de los comportamientos socioculturales

originados por acciones criminales y violentas.”8

De acuerdo a las evidencias físicas, entrevistas, imágenes, videos y cualquier elemento de

comunicación o expresión al que recurran las personas involucradas en asuntos ilegales se puede

comprender el comportamiento de los grupos sociales violentos y con tendencias criminales.


7
Lagunas Rodríguez, Zaid, La antropología física forense, una especialidad necesaria, Revista Científica
Multidisciplinaria de Prospectiva CIENCIA ergo-sum. Disponible en: http://www.redalyc.org/articulo.oa?
id=10413213 p. 213. Consulta realizada el 27/06/19
8
Ob. Cit. Arteaga Saucedo, Alejandro (2014), p. 25.

10
El tema de estudio de la antropología social, enfocado en fenómenos de muerte violenta, se

concentra en los actores, es decir, en el asesino, el asesinado y los testigos, pues dentro de esos

tres grupos se encuentran inmersos los miembros de la comunidad involucrados en actos ilegales

y violentos. En el primer grupo, las víctimas; en el segundo grupo, los victimarios, y en el tercer

grupo quienes visualizan los hechos cometidos a través de los medios de comunicación o de

manera directa.

VI. PROTOCOLO PARA LA INVESTIGACIÓN FORENSE EN EL PERÚ

La Comisión de la Verdad y Reconciliación 9 fue creada para esclarecer los hechos suscitados

durante el conflicto armado interno que vivió nuestro país durante los años 1980 a 2000, así

como las responsabilidades derivadas de las múltiples violaciones de los derechos

fundamentales.

Ante la presencia de cuerpos sin identificar en lugares afectados por dicho conflicto armado

interno, se produjo una intervención de los mismos sin los criterios técnicos necesarios y sin el

personal calificado para la investigación antropológica, lo cual generó diversos problemas, tales

como, la ausencia de resultados y ante la existencia de éstos, la duda acerca de su confiabilidad.

A fin de evitar que estos lamentables accidentes puedan ocurrir en el futuro, la Comisión creó

el Plan Nacional de Investigaciones Antropológicas Forenses10 como política eficaz para no


9
Página Web Oficial de la Comisión de la Verdad y Reconciliación. Disponible en: https://www.cverdad.org.pe/.
Consulta realizada el 28/06/19.
10
Comisión de la Verdad y Reconciliación, Plan Nacional de Investigaciones Antropológicas Forenses. Disponible
en: www.cverdad.org.pe/ifinal/pdf/.../2.3.%20PLAN%20NACIONAL%20FORENSE.pdf. Consulta realizada el

11
volver cometer los errores mencionados y ejecutar una mejor búsqueda ante la desaparición de

peruanos, obtener la verdad, concretar la justicia y la reparación de daños a los familiares.

El Plan Nacional de Investigaciones Antropológicas Forenses tiene como objetivo general

“producir los lineamientos necesarios para el desarrollo de las investigaciones eficaces

relacionadas con graves violaciones a los derechos humanos, específicamente concernidos al

problema de las ejecuciones extrajudiciales y la desaparición forzada.”11

La recuperación adecuada de los restos humanos, permite la identificación y la determinación

de los hechos, las causas de muerte y los presuntos autores para resolver un proceso de

investigación, devolver los restos de la víctima a los familiares y asegurar una reparación.

Dentro de los objetivos secundarios se encuentran plantear un Plan de Intervención

Antropológica Forense integral a nivel nacional que se aplique a los procesos judiciales con el

fin de contar con equipos multidisciplinarios que apliquen los criterios necesarios y logística para

recuperar restos humanos y vincular la información sobre las víctimas, hechos y sitios de

entierro, para la identificación. Por otro lado, brinda a los familiares la información sobre el

análisis efectuado a la víctima, le restituye sus restos, y les da la oportunidad de ejercer una

reparación justa.

A su vez, el Plan Nacional de Investigaciones Antropológicas Forenses incluye el Protocolo

para la Investigación Forense en el Perú12, el cual describe paso a paso los procedimientos y

técnicas que debe seguir el antropólogo forense, así como el Ministerio Público, Defensoría del

26/06/19
11
Ídem. p. 210
12
Ídem. p. 233-287.

12
Pueblo, médicos legistas, entre otros, desde el inicio de la Investigación preliminar hasta el

registro de toda la información recabada en la Base de Datos.

A continuación, un breve resumen sobre los aspectos más relevantes del Protocolo para la

Investigación Forense en el Perú.

1. Investigación Preliminar

La investigación preliminar tiene como objetivo la reconstrucción histórica social y judicial

de los hechos. Para ello, se debe recuperar información sobre el contexto del sitio de entierro, de

las víctimas y de los procesos sociales y de violencia que se dieron en determinado momento.

La información a obtener dentro de la investigación preliminar puede dividirse en tres clases.

La primera clase es la relativa a los hechos sucedidos y que generaron la desaparición de la

víctima. La segunda clase de información es la necesaria para llevar a cabo la prospección y

por ende el proceso de exhumación o recolección de los restos. Para ello resulta útil estudio

logístico del área y del poblado cercano; en el que deben tomarse en cuenta los factores como los

tiempos de salida y llegada entre los poblados, el recorrido mediante la toma de kilometrajes, las

facilidades de acceso, condiciones climáticas y seguridad del área.

La tercera clase de información es la referida a las víctimas a identificar, incluye la

información biológica, certificado de nacimiento, acta de matrimonio, fotografías, árbol

genealógico de parientes, e incluso información genética como muestras posibles a procesar para

una futura identificación a través de análisis de ADN, información del entorno socioeconómico y

13
cultural. Durante la fase de análisis de los restos humanos en morgue la información podrá ser

complementada.

Merece especial cuidado la toma de información biológica antes de la muerte de la víctima,

pues demanda una interrelación eficaz entre el entrevistador y el entrevistado para la obtención

de la información por lo que se recomienda el seguimiento de los lineamientos propuestos por la

Defensoría del Pueblo y el Equipo Peruano de Antropología Forense.

En consecuencia, para llevar a cabo esta etapa de manera correcta se necesita una adecuada

planificación que contemple la participación de profesionales de distintas disciplinas, como

abogados, antropólogos, arqueólogos, médicos, entre otros y una necesaria capacitación en

técnicas de levantamiento de información y trabajo de campo.

Se debe considerar además los sistemas de almacenamiento, conservación y custodia de toda

la información, uso y manejo de muestras biológicas, partiendo de las consideraciones éticas

existentes al respecto.

2. Protocolo de Inspección

La inspección es el procedimiento por medio del cual se recorre el área a investigar mediante

un análisis detallado de las características del terreno con el fin de ubicar el o los sitios donde

hay posibilidades de que se encuentren restos humanos.

14
Este procedimiento posibilita el registro de lugares de enterramiento tales como fosas,

tumbas, nichos, en general lugares de deposición y la recolección de la mayor parte de la

información.

Para llevar a cabo el protocolo de inspección se necesita de logística que comprende recursos

humamos conformados por los profesionales peritos en distintas ramas como antropólogos,

arqueólogos, abogados, entre otros. También se requiere de la presencia de cámaras fotográficas,

materiales para el levantamiento de planos, GPS, equipos portátiles para el registro in situ.

Posteriormente, se procede a precisar qué evento o qué hecho ocurrió en el lugar determinado

y qué tuvo como consecuencia la generación de un sitio de entierro. Entre los eventos a

considerar tenemos la desaparición forzada, ejecución extrajudicial, ejecución pública, masacre,

incursión, explosión, incendio u otras categorías explicativas de los hechos.

Luego, se debe tomar en cuenta el tipo de área donde ocurrieron los hechos, los cuales

podrían ser poblados, casas aisladas, chacras, graneros, establos, fábricas, caminos, valles,

cerros, laderas, bosques, playas, tierras públicas, privadas, comunales, áreas militares, policiales,

etc.

A continuación, se sigue con las personas o grupos de personas que de manera organizada

cometieron las capturas, torturas, desaparición y ejecución de personas. Puede ser un individuo,

una banda, una organización criminal, grupos subversivos, fuerzas armadas, policiales, civiles,

entre otros.

15
Después, se establecerá la procedencia cronológica de los sitios, con fines de establecer

ocurrencias en los distintos períodos de la investigación y se procede al proceso de codificación.

Este sistema corresponde a una combinación de elementos alfanuméricos que hacen referencia a

un sitio determinado. La combinación está formada por dos letras que corresponden a una serie

alfabética pre establecida y dos números del 1 al 9, van siempre precedida de un cero y

representa el número de sitios presente en un área.

La codificación señalada será antecedida por dos siglas que harán referencia al departamento

donde se ubica el sitio en mención, constituyéndose de esta manera en un registro departamental

de todo el país.

3. Protocolo para la recuperación de evidencia

Una vez recaudada la información que permitirá una mejor planificación en el proceso, se

procede a la recuperación de la evidencia.

Se debe considerar que cualquier sitio de entierro donde se encuentren restos humanos es

parte de la escena del crimen y por tanto brinda la oportunidad de reconstruir parcial o totalmente

una serie de eventos. En él se conservan los elementos que permitirán llegar a una conclusión

sobre lo sucedido con las personas y objetos que allí se encuentran. La recuperación de los restos

es un proceso que debe seguir los métodos y técnicas propios de la arqueología, la criminalística

y la antropología en general, lo cual permitirá recuperar adecuadamente toda la evidencia física

16
y de esta manera, reconstruir en forma precisa y fidedigna las condiciones y eventos que

rodearon la muerte y destino final de las víctimas.

Las exhumaciones pueden referirse tanto a entierros individuales como a entierros colectivos,

debiendo definirse la naturaleza de los eventos que le dieron origen. Por otra parte podría

también darse el caso que los cuerpos hayan sido depositados en lugares diferentes como por

ejemplo al interior de una cueva o en el fondo de una quebrada.

Este protocolo aconseja seguir las recomendaciones del Manual sobre la Prevención e

Investigación Eficaces de las Ejecuciones Extralegales, Arbitrarias o Sumarias de las Naciones

Unidas13 y en el Protocolo Modelo para la Investigación Forense de Muertes Sospechosas de

haberse producido por Violación de los Derechos Humanos.14

La recuperación de restos humanos es un proceso destructivo, en tanto que una vez

comenzadas las tareas de excavación o recolección, se alteran los elementos dispuestos

originalmente, por lo que es importante mantener y garantizar la integridad y asociación de las

evidencias; esto es, el cuerpo en sí y sus elementos asociados tales como ropas, objetos

personales, artefactos.

13
Organización de las Naciones Unidas (1991), Manual sobre la Prevención e Investigación Eficaces de las
Ejecuciones Extralegales, Arbitrarias o Sumarias. Disponible en:
https://www.ipomex.org.mx/recursos/ipo/files_ipo/2013/1/7/33c62947b4c7288893f3192df5837e20.pdf. Consulta
realizada el 27/06/19.
14
Oficina del Alto Comisionado para los Derechos Humanos de las Naciones Unidas (2001), Protocolo Modelo para
la Investigación Forense de muertes sospechosas de haberse producido por violación de los Derechos Humanos
Disponible en: https://www.academia.edu/5892893/PROTOCOLO_MODELO_PARA_LA_INVESTIGACI
%C3%93N_FORENSE_DE_MUERTES_SOSPECHOSAS_DE_HABERSE_PRODUCIDO_POR_VIOLACI
%C3%93N_DE_LOS_DERECHOS_HUMANOS. Consulta realizada el 27/06/19.

17
Es necesario contar con sistemas de registro documental, topográfico, gráfico, fotográfico y

fílmico que deberán aplicarse durante todo el proceso. Todos los documentos producidos, así

como los elementos recuperados durante el proceso de investigación se constituye en evidencia;

por tanto debe estar estrictamente resguardada y protegida de robos, alteraciones o destrucciones,

generándose una cadena de custodia para continuar con el desarrollo de la investigación.

El Oficial encargado de la Escena del Crimen se encargará de que todas las evidencias

recolectadas queden debidamente registradas en las fichas diseñadas para este fin, quien a su vez

se encarga de que la evidencia sea debidamente transportada y almacenada hasta que sea

entregada para su análisis y finalmente devuelta a sus familiares o inhumada según sea el caso.

El equipo humano va a variar dependiendo del sitio a exhumar, pero debe ser integrado

básicamente por un arqueólogo, un fotógrafo y un dibujante, se puede requerir la presencia del

antropólogo y de personal de apoyo suficiente según las necesidades como algunos obreros. Sin

embargo, en cada intervención se debe contar con la representación de las instituciones del

estado encargadas de legitimar, permitir, observar y vigilar el proceso, es decir, se debe contar

con presencia de la Policía Nacional del Perú, Ministerio Público, Defensoría del Pueblo y al

menos contar con la presencia de un representante de los familiares de la víctima a fin de

garantizar la imparcialidad y objetividad del proceso.

Todo el proceso debe ser registrado adecuadamente, describiendo y tomando nota de los

pasos seguidos. Para tal fin se rotularán los restos siguiendo la codificación propuesta

anteriormente, la cual deberá quedar consignado tanto en diario y fichas de campo, como

18
fotográfica, fílmica y topográficamente y los documentos como fichas fotográficas, planos y

fichas de recuperación de evidencia.

Los sitios objeto de intervención deben tener una codificación en base al modelo propuesto

anteriormente. Una vez se cuente con la denominación para el sitio, se debe establecer una

numeración correlativa para cada uno de los elementos de evidencia, esto es, sitios, cuerpos,

objetos como la ropa, artefactos como proyectiles, documentos que surjan durante la

recuperación de los restos y que se constituyan como evidencia, los cuales deben ser rotulados y

organizados adecuadamente. Este rótulo, acompaña a todo informe, croquis, gráfico o foto que se

realice.

4. Protocolo de Morgue

Luego de la exhumación sigue el trabajo de morgue en la cual no debe haber contacto directo

de los peritos con los familiares ni con testigos, para permitir y lograr la total objetividad e

independencia en el trabajo.

Los objetivos de la autopsia médico-legal son establecer la causa de muerte, las circunstancias

y el tiempo en que ésta ocurrió, la manera cómo se produjo, es decir, si se trata de un homicidio,

suicidio, accidente, natural o indeterminada, así como el probable mecanismo que se utilizó en la

comisión del hecho; aportando toda la información necesaria para la expedición del certificado

de defunción, como también aclarar las circunstancias en que el deceso se produjo.

19
En casos donde se han presentado violaciones a los derechos humanos, es vital aclarar en qué

circunstancias se produjo la muerte así como conocer con precisión otras situaciones que podrían

haber afectado a la víctima antes de su muerte como torturas u otros tratos crueles.

En el caso de víctimas identificadas previamente, los análisis efectuados pueden sostener o

contradecir la presunta identificación. En aquellos casos donde haya víctimas no identificadas, se

debe procurar obtener la mayor cantidad posible de información que pueda cotejarse con la

información antes de la muerte.

El responsable de autopsia será un médico legista pero contará con el apoyo de un equipo

multidisciplinario que permita llevar a cabo una labor completa y organizada. Es recomendable

que el equipo esté conformado por antropólogos forenses, odontólogos forenses, radiólogos,

fotógrafos forenses y técnicos de autopsia. También deberá disponerse de un Oficial Encargado

de la Escena del Crimen para el manejo de la evidencia.

Los especialistas que hacen el trabajo de morgue contarán con una serie de fichas para

agilizar la recuperación y el análisis de la información. Al final del trabajo de morgue una de las

personas a cargo de los equipos técnicos participantes, el Médico o Antropólogo, reunirán toda la

documentación y una vez finalizado el informe final deberá entregarse a la autoridad encargada,

para el trámite correspondiente.

20
4.1 Procedimientos Generales

El médico legista debe estar presente tanto en el examen de los cuerpos con tejido blando

como en el de los cuerpos esqueletizados. Se recomienda que en ambos casos trabaje en estrecha

colaboración con el antropólogo forense sobre todo en los casos donde el cuerpo se encuentra en

descomposición o esqueletizado.

En la medida de las posibilidades los cuerpos deben ser examinados con la ayuda de un

aparato de Rayos X, quienes escribirán un informe corto de los hallazgos, incluyendo objetos

personales como llaves, encendedores, lapiceros, así como objetos que puedan ser peligrosos al

momento de acceder al cuerpo como cuchillos o artefactos explosivo. Asimismo, es importante

detallar la presencia de proyectiles, casquillos y esquirlas que puedan hacer parte de los objetos

asociados al cuerpo o que puedan haber sido puestos en él en el periodo anterior a la muerte.

Una autopsia por lo general consta de tres etapas. La primera es el examen externo del cuerpo

en busca de heridas, cicatrices y en general elementos útiles para establecer tanto las causas de

muerte como la identidad del individuo. El segundo paso es el examen interno del cuerpo, el

cual implica la disección y examen de los órganos con el fin de establecer la existencia de

fenómenos patológicos, como también recabar evidencia de destrucción violenta, estableciendo

claramente las causas y consecuencias de la misma. El último paso es el examen microscópico de

tejidos y fluidos para establecer la presencia o ausencia de tóxicos y sustancias extrañas en el

cadáver, así como de estados patológicos previos.

21
4.2 Análisis preliminares

Todo el procedimiento debe contar con fotografías generales y de detalle. Una vez el cadáver

se encuentra en la mesa de autopsia y después de la foto general, se procederá al examen externo

del cadáver a fin de identificar los agujeros que puedan relacionarse con proyectiles de arma de

fuego u otro tipo de artefactos, la presencia de vendas y artículos similares.

A medida que la ropa y los efectos personales son removidos del cuerpo el OEC deberá

asignarles un código y colocarles la etiqueta correspondiente. Luego este derivará las prendas

para su limpieza, descripción completa y registro. En esta etapa podrá participar también el

legista si es que desea ubicar orificios o daños que se puedan relacionar con el mecanismo de

muerte. El mismo procedimiento se seguirá cuando se trate de restos óseos.

4.3 Examen externo

El siguiente paso es el examen externo de todo el cuerpo desnudo. El cuerpo será lavado para

observar si hay otras heridas; se palpará la cabeza, torso y miembros para determinar la

existencia de posibles fracturas.

En este proceso se observa y describe las lesiones que se puedan haber producido como

consecuencia de graves violaciones a los derechos humanos tales como quemaduras en diferentes

partes del cuerpo con diversos agentes, hematomas como consecuencia de golpes, cortes, huellas

de violación, huellas de asfixia, entre otros; con fines de identificación.

22
También se debe tomar nota de todas aquellas características que se puedan definir con

mediana claridad, tales como el color del cabello y su longitud, los bigotes, la barba, posibles

cicatrices o tatuajes, presencia de genitales externos y otros rasgos significativos. Si es posible,

se debe tomar la longitud del cadáver en la mesa para una estimación de estatura. Si el estado de

preservación del cuerpo lo permite, se deben tomar huellas digitales del cadáver para comparar

con registros existentes antes de la muerte.

4.4 Examen interno

La autopsia también deberá incluir el examen interno de todos los órganos serán removidos y

analizados, tratando de obtener elementos que permitan establecer lo sucedido con la víctima.

Para ello, es relevante observar la presencia de elementos extraños en las vías respiratorias en

general, así como en vías digestivas, verificar el estado nutricional del individuo tanto que en las

detenciones durante largos períodos es frecuente la mal nutrición y la deshidratación.

En los casos donde el cuerpo se encuentra momificado, se recomienda proceder con la

autopsia, tal como cuando se encuentran con tejido blando fresco, pero contando con el apoyo de

un antropólogo forense. Con fines de identificación se debe revisar si es que existe la posibilidad

de tomar huellas digitales o hacer rehidratación de pulpejos.

Todos los objetos relacionados al diagnóstico de la causa de muerte como proyectiles,

esquirlas, y otros materiales son recuperados por el Médico Legista y entregados al oficial

23
responsable quien se encarga de establecer y verificar su organización, clasificación,

fotografiado, inventariado y almacenamiento como parte de la cadena de custodia.

Un punto básico en todo el proceso de descripción de lesiones es el de establecer el número

mínimo de lesiones presentes en un cuerpo y fotografiarlas. Una vez que la autopsia esté

terminada y todos los especímenes reconstruidos, se volverá a tomar las fotografías

correspondientes.

Finalmente, se recomienda realizar un procedimiento para la estimación de la edad,

determinación del sexo, estimación de la estatura, un análisis odontológico forense y la

obtención del ADN de familiares para compararlos con el ADN de la víctima.

4.5 Elaboración del Informe Pericial

El Médico Legista y el antropólogo encargado elaboran un informe final. El legista

completará una ficha de resumen de autopsia al final cada intervención, donde se especifique lo

relativo a la toma de muestras. Adicionalmente deberá emitir los protocolos de necropsia y

certificados de defunción correspondientes al concluir el trabajo de morgue con el fin de efectuar

la entrega de los cadáveres a los familiares, cuando sea procedente.

El informe deberá seguir un formato lo suficientemente completo aunque conciso, donde se

consigne la información relativa a los datos individualizantes de cada una de las víctimas así

como las conclusiones, debe mencionar el Número Mínimo de Lesiones y las estructuras

24
anatómicas que habrían sido afectadas durante la producción de las mismas. Consignará la causa,

forma y mecanismo de muerte. Se debe incluir además el odontograma, la descripción de las

prendas, y otras conclusiones a las que se haya llegado durante el análisis.

5. Protocolo de Identificación

El proceso de identificación tiene como finalidad reconocer de quién fue el cuerpo o restos

encontrados. De esta manera, se determina quienes formaron parte de un grupo familiar y social,

y se esclarece la incertidumbre que dichos grupos vivían ante las dudas, se consolida la pérdida

de derechos y nacen nuevos a favor de los herederos de la víctima.

Para iniciar este proceso de identificación, se debe tener en cuenta que el ser humano es

producto de la variabilidad sexual, ontogénica y filogenética que lo hace individualmente

diferente pero a la vez le otorga características comunes a toda la especie. Desde este punto de

vista, lo que se pretende es establecer aquello que es común a todos y diferenciar lo que es

propio y único en cada uno.

Si el cadáver ya se encuentra identificado pero por diferentes razones no se legalizó esta

identidad o la inhumación, el perito debe verificar los datos existentes y reconfirmar o en caso de

que haya incoherencias, establecer esa identidad.

Si no se cuenta con la identidad de la víctima, debe recabarse toda la información,

características más individualizantes, de prendas de vestir, objetos, asociados, a fin de poder

25
cotejarlos con datos de desaparecidos aportados por familiares, allegados o autoridades, para

llegar a una identificación fehaciente.

También se recurre a la dactiloscopia, la cual se basa en la identificación a partir de las

huellas digitales que pueden quedar impresas en cualquier superficie lisa, bien por la sudoración

natural del cuerpo, cuando están sucias o cuando se toman deliberadamente con tinta sobre un

papel. Estas marcas son debidas a la presencia, en la piel de los pulpejos de los dedos, de una

serie de surcos y crestas cuya distribución relativa origina una enorme variedad de dibujos o

figuras.

Asimismo, se usa la odontoscopia, que estudia los dientes de la víctima y que ofrece

características similares a las que presentan las huellas dactilares. Los dientes son la estructura

más dura del cuerpo humano, resistiendo diferentes situaciones de destrucción, inclusive el

fuego, soportando temperaturas mayores a los 1000 grados centígrados. Cada dentadura tiene

características genéticas particulares y cuyas transformaciones naturales o artificiales nos hacen

personas únicas.

Finalmente, el método de identificación de ADN, sea nuclear, mitocondrial o cromosoma Y

es el más costoso económicamente hablando, sin embargo, uno de los más acertados. Al

momento de identificar restos esqueletizados donde se cuenta con poca información; aunque

requiere como condición sine qua non la presencia de al menos una muestra de cotejo, sea propia

o de familiares en primer grado de consanguinidad.

26
Para llegar a estos análisis es necesario haber realizado con antelación la posible

individualización correcta de la víctima, para reducir el universo de víctimas a cotejar con

familiares con el fin de ahorrar tiempo y costos.

6. Base de Datos Antropológica Forense

Una Base de Datos que contenga la información requerida y las diferentes fases o etapas de

investigación permite el seguimiento adecuado de cada uno de los casos, desde sus inicios hasta

los resultados últimos logrados. Esto genera que la reconstrucción de los hechos sea factible y se

posteriormente se logre identificar a la víctima.

La Base de Datos debe constituirse en un producto que permita la continuidad de los procesos

de investigación, abiertos durante el período de vigencia de la Comisión de la Verdad y

Reconciliación, involucrando los procesos que mantienen instituciones como el Ministerio

Público y la Defensoría del Pueblo.

Dicha Base de Datos recopila toda la información existente para cada caso, recurriendo a toda

fuente documental accesible y que se encuentra en poder de otras instituciones como

la Defensoría del Pueblo, Ministerio Público, Coordinadora Nacional de Derechos Humanos

(CNDDHH), Cruz Roja Internacional (ICRC), Organismos e Instancias de Derechos Humanos

nacionales y extranjeros , así como otros que alberguen documentación relacionada como la

información recopilada por la Comisión de la Verdad y Reconciliación, fuentes bibliográficas,

periodísticas y de cualquier otro tipo que colabore en la elaboración del caso.

27
La información recopilada en la Base de Datos deberá contemplar aquellos datos relacionados

a la detención, desaparición, secuestro, ejecución de las víctimas; circunstancias en que

ocurrieron los hechos, cuándo, dónde y cómo ocurrieron; quiénes fueron los perpetradores,

testigos y testimonios existentes; lugares en los que se presume se encuentran los restos de estas

personas, cuáles son sus características, naturaleza y condiciones actuales, considerando todo

aquel evento que pudo haberlas alterado desde un inicio al presente, familiares y amigos de las

víctimas que puedan brindar información antes de la muerte, documentación que demuestre la

pre-existencia de los individuos en cuestión y si el caso ha sido presentado o trabajado con o ante

otras instituciones y el estado en que se encuentra.

La siguiente etapa corresponde a la Recuperación de la Evidencia, considerando la ubicación

exacta de los sitios, tipo, naturaleza y características de las escenas de crímenes, registro de los

trabajos, evidencia recuperada de cuerpos y artefactos asociados, personal e instituciones

participantes y la cadena de Custodia.

Finalmente la información correspondiente con el Análisis de la Evidencia considera la

procedencia de la evidencia, las víctimas y su perfil biológico, el análisis antropológico forense,

las condiciones, circunstancias y causas de muerte, la identificación de las víctimas, el análisis de

los artefactos, el análisis auxiliares efectuados como por ejemplo el examen de ADN, informe de

balística, entre otros, personal e instituciones participantes, cadena de Custodia, restitución o

ubicación final de los cuerpos.

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El aporte de la base de datos radica en la recopilación de la información obtenida durante todo

el proceso que permita abordar los casos desde los diferentes momentos de investigación y

proporcionar la información requerida para construir, consolidar y desarrollarlos y apuntar a una

reconstrucción de los hechos, a conocer qué es lo que sucedió con la víctima y quienes son los

responsables y conseguir a través del tribunal la justicia que sus familiares tanto anhelan.

VII. CONCLUSIONES

PRIMERA: La antropología forense es una disciplina que aplica los conocimientos de la

antropología y otras ciencias físicas como la arqueología, biología, entre otras; para recoger y

analizar evidencia legal para determinar si se tratan o no de restos humanos, describirlos y

atribuirles identidad. Actúa en casos individuales, desastres colectivos, restos históricos y

evidencias internacionales de transgresión de los derechos humanos.

SEGUNDA: La antropología forense recaba toda la información posible de los restos humanos

en la escena del crimen, a fin de llevar a cabo la identificación del individuo mediante el sexo,

edad, raza, talla, físico rasgos esqueléticos o anomalías que puedan facilitar una identificación

tentativa o positiva. También descubre las circunstancias de la muerte, cuando ocurrió, donde

persona murió en el lugar de enterramiento, cual fue la causa de la muerte, cual fue la forma de

la muerte y quienes fueron los perpetradores.

TERCERA: El Perú ha desarrollado un Protocolo para Investigación Forense en el cual describe

cómo debe actuar el antropólogo forense en cada etapa de la investigación. De esta manera, el

29
perito puede obtener un resultado certero que permita identificar a la víctima y a quien la

asesinó, y su informe pericial puede constituirse en medio de prueba idóneo en un proceso

judicial para determinar la culpabilidad de quien le quitó la vida y la reparación del daño causado

a los familiares de la víctima.

30
BIBLIOGRAFÍA

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del contexto desde una perspectiva arqueológica, Tesis encontrada en el repositorio de la

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Perú.

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Ramey Burns, Karen (2007), Manual de Antropología Forense, editorial Bellaterra, Barcelona,

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ANEXOS

Número de palabras: 6480

32

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