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Espacios Públicos

ISSN: 1665-8140
revista.espacios.publicos@gmail.com
Universidad Autónoma del Estado de México
México

Mazabel D., Davison G.


Organización social y "pequeño riego" en México. Un acercamiento a la región Centro
Espacios Públicos, vol. 10, núm. 20, 2007, pp. 201-215
Universidad Autónoma del Estado de México
Toluca, México

Disponible en: http://www.redalyc.org/articulo.oa?id=67602010

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Mercedes Ramírez Rodríguez
Silverio Hernández Moreno

Organización social y “pequeño riego” en México.


Un acercamiento a la región Centro

Fecha de recepción: 17 de octubre de 2006


Fecha de aprobación: 8 de marzo de 2007

Davison G. Mazabel D. *

RESUMEN
En este trabajo se abordan algunas dimensiones analíticas de los siste-
mas de riego, en particular sobre la organización de tipo comunitario e
intercomunitario; se describe la estructura social agraria relacionada
con los usos del agua en la región centro de México, vista a partir de la
tenencia de la tierra e infraestructura hidráulica. Se identifican la hete-
rogeneidad y el minifundismo como elementos característicos de la re-
gión, y se plantea que en algunos de estos sistemas de pequeño riego,
la acción colectiva y de la organización comunitaria han promovido y
podrían seguir promoviendo la eficiencia.
PALABRAS CLAVE: organización social-comunitaria, unidades de riego,
pequeña irrigación.

ABSTRACT
In this work some analytical dimensions of the irrigation systems are
approached, in particular on the organization of communitarian and
intercommunitarian type; the agrarian social structure related to the
uses of the water is described in the region Center of Mexico, from point
of view the land possession and hydraulic infrastructure. The
heterogeneity and the small property like elements characteristic of the
region are identified, and it considers that in some of these systems of
small irrigation, the collective action and of the communitarian
organization has promoted and could continue promoting the efficiency.

* Profesor-investigador de tiempo completo del Centro de Investigaciones Humanísticas de la Univer-


sidad de Guanajuato. Área: Desarrollo Regional.

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Organización social y pequeño riego en México.
Un acercamiento a la región Centro

K EY WORDS : social organization- México cuenta actualmente con alrededor


communitarian, units of irrigation, small de seis millones de hectáreas de las cuales
irrigation. cerca de la mitad son unidades de riego en
tanto que el resto corresponde a los distri-
tos de riego. Dicha cifra da idea del esfuer-
INTRODUCCIÓN zo constructivo de los distritos y de la in-
Los estudios sobre la organización social y fraestructura nada despreciable de las
la agricultura de riego tienen sus bases en unidades.
los estudios de algunos antropólogos y Asimismo, cabe señalar que el interés por
arqueólogos, quienes se abocaron al estu- los sistemas de pequeño regadío ha vuelto
dio de la relación sociedad-estado en las a hacerse notorio, dado que a nivel mundial
culturas mesoamericanas a partir de la “hi- la “Gran Irrigación” ha sido puesta en tela
pótesis hidráulica” de Wittfogel (1966) y de juicio respecto a las posibilidades reales
de la “revolución urbana” de Childe (1954).1 que ofrece. Durante décadas de
Muchos de estos trabajos ofrecieron una desarrollismo5 –desde los años treinta has-
atractiva propuesta teórica y documentaron ta la segunda mitad del siglo XX (ver cua-
la evidencia física de infraestructura hidráu- dro 1), grandes represas fueron construi-
lica en el centro y sur del país;2 infraestruc- das con el propósito de solucionar los
tura que, por cierto, fue refuncionalizada problemas de la pobreza, el atraso, la falta
durante la época colonial y fases posterio- de energía eléctrica, las deficiencias en los
res de nuestra historia. sistemas de riego y la insuficiencia de agua
Con la construcción de la gran obra hidráu- potable, sin que las metas planteadas ha-
lica y la expansión de la frontera agrícola yan sido alcanzadas (Oswald, 2003).
en el norte del país durante la primera mi- En este apartado quiero llamar la atención
tad del siglo XX, la infraestructura del cen- sobre la importancia de estudiar la organi-
tro quedó un tanto opacada y se generó un zación para el manejo de sistemas de rega-
intenso debate sobre la participación del dío en sistemas locales o de pequeño riego,
estado en la dirección y realización de la dado que pueden ofrecer lecturas diversas
obra.3 No así en la administración, la que o alternativas al manejo del recurso, no sólo
se suponía iba a dejarse en manos de los en términos de las diferencias respecto a la
regantes, sin embargo, dicha transferencia gran irrigación, sino también respecto a las
no se ejecutó sino hasta fechas recientes.4 modalidades o variantes regionales; asimis-
A partir de la Ley de Aguas de 1972, en la mo pueden estudiarse, como se pretende en
que se reconoce la importancia de registrar esta investigación, si existen cambios en la
la infraestructura, superficie de riego y nú- organización social como consecuencia de
mero de regantes, en las llamadas unidades la ampliación del sistema de riego a partir
de riego es cuando la agricultura de riego de la inclusión de agua subterránea y la
del centro y sur vuelve a adquirir relevan- manera en que esto incide en el cambio
cia (Palerm, 2000a). sociocultural. Para ello partiré en primer

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Davison G. Mazabel D.

lugar con una presentación y reflexión ini- Aunque existen algunos trabajos sobre la
cial sobre aspectos conceptuales y enfoques interrelación comunidad organizada y rie-
teórico-metodológicos relativos a la relación go (Millon et al., 1997) (Gelles, 1984)
organización social y riego, y terminaré en (Wade, 1988), aún se requieren trabajos
segundo lugar, con una descripción y aná- sobre cómo los regantes administran y ma-
lisis de las características de la pequeña irri- nejan el agua. Recientemente, algunos in-
gación en la región Centro de México. vestigadores del Colegio de Postgraduados
(Campus Puebla) han realizado algunos
aportes significativos al nivel de estudios
ASPECTOS CONCEPTUALES Y TEÓRICOS de comunidad, al señalar que las comuni-
SOBRE ORGANIZACIÓN SOCIAL Y RIEGO dades con conocimientos tradicionales de
Para abordar esta temática nos remitimos riego cuentan con una gran capacidad téc-
a dos trabajos o vertientes fundamentales. nica y social del manejo de agua de riego,
En primera instancia quiero señalar que en tanto que la administración de nueva in-
los textos de Maass y Anderson (1976) fraestructura hidráulica en comunidades de
constituyen una guía básica para la com- temporal requerían de un alto costo de
prensión de la dinámica de lo colectivo o aprendizaje.
comunitario en la organización de los sis- Otra preocupación reside en la organización
temas de riego, comprenden siete estudios multicomunitaria, a la que se le ha presta-
de caso en España y Estados Unidos en el do poca atención y presenta un nivel analí-
que se plantea que: a) la organización para tico que pocas veces se puede hallar o ver
el regadío de estos regantes tiene una ad- en el ámbito comunitario.
ministración democrática, b) que la or-
ganización es cohesiva y el individuo se
somete a la colectividad, y c) que el rega- LAORGANIZACIÓN
dío es inevitablemente fuente de conflicto MULTICOMUNITARIA
y que la organización sustentable se an-
Jacinta Palerm (2000a) ha llamado la aten-
toja como una alternativa para su con-
ción sobre dos perspectivas analíticas que,
tención.6 La segunda vertiente parte del
me parece, ayudan a esclarecer la relación
trabajo de Hunt (1997), quien aporta ele-
entre organización social y manejo del agua
mentos para la definición y el desarrollo
para regadío. La primera se refiere a los
de conceptos tales como: sistema de rie-
“niveles organizativos” dado que se reco-
go, tamaño del sistema de riego, organi-
noce un nivel organizativo comunitario y
zación autogestiva o en manos del estado
otro multicomunitario sobre el que conoce-
y propone una lista de tareas a ejecutar
mos poco y que rara vez se detecta al nivel
en los sistemas de riego (mantenimiento,
de la comunidad.
distribución, conflicto, rendición de cuen-
tas, ampliación, rehabilitación y construc- La segunda plantea que la administración y
ción de obra hidráulica). manejo del sistema de riego podría ser

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Organización social y pequeño riego en México.
Un acercamiento a la región Centro

asumida por los regantes y/o por el estado pendiente como parece plantearse. Asimis-
en uno u otro nivel organizativo o que por mo, me parece interesante indagar sobre
tareas podría haber alguna presencia o in- el papel de los actores en la dinámica y en
tervención del estado. la estructura de la organización
multicomunitaria.
Uno de los aspectos que dificultan la obser-
vación de la organización multicomunitaria Para el caso de mi investigación, en el Valle
en el ámbito de la comunidad reside, según de Texmelucan (Puebla)7 (mapa 1), he com-
Palerm, en que “los canales involucrados probado que a nivel del cuadro de aguas, por
están lejos de la comunidad, las asambleas lo menos en el alto Cotzala, al que pertene-
están en un foro que está en otra comuni- cen varias localidades (comunidades), exis-
dad y que en esa comunidad no es evento te una organización entre las mismas y ob-
de la comunidad, y no tienen oficinas” servo que existen repercusiones al interior
(Palerm, 2000a: 19). Es más, de lo poco de la comunidad y que existe un mecanismo
que se ha encontrado en el nivel de rotación entre las localidades para asu-
multicomunitario se han obtenido resulta- mir la dirección del “cuadro de aguas”. 8
dos pesimistas y que reflejan una débil or-
Es interesante señalar que este mecanismo
ganización en este nivel (Millon, 1997a)
de rotación en la dirigencia del cuadro de
(Millon et al., 1997b) (Palerm, 1995).
aguas en el Alto Cotzala fue promovido
Para empezar tendríamos que definir qué por uno de los miembros de una de las co-
entendemos por organización multico- munidades, quien se inconformó con que
munitaria, ¿cuál es el carácter de la mis- la dirigencia del mismo recayera en una
ma? Y ¿cuál es el radio de acción de ésta? sola comunidad, por lo cual solicitó que
Pero sobre todo debemos preguntarnos so- fuera abierta la posibilidad de que otros
bre qué bases se da tal tipo de organiza- pudieran asumir la dirección y en la ac-
ción, es decir, ¿se da a nivel de subcuenca, tualidad el cargo se va rotando cada dos
al nivel regional o micro regional (y sobre años entre las localidades que conforman
qué parámetros se define lo regional) o tie- el cuadro de aguas.9
ne una base socio-política específica? Pen-
Otro aspecto que resulta interesante para el
sando en que quizás alguna de estas nocio-
estudio de la organización social y agricul-
nes sea elemento clave para entender el
tura de riego, es precisamente la relación
contexto sobre el que se despliega la orga-
entre organización social y escasez del lí-
nización multicomunitaria.
quido. Sobre este punto, Wade (1988) plan-
Por otra parte, cabe señalar que aunque tea que en situaciones críticas o de escasez
las autoridades en los niveles organizativos de un recurso, la organización es mucho más
cambien, así como la jurisdicción o ámbi- impulsada en aquellas comunidades que la
to geográfico, habrá que profundizar en la padecen que en otras que tienen una situa-
interacción entre dichos niveles para ver ción más ventajosa.
si realmente funcionan de manera inde-

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Davison G. Mazabel D.

MAPA 1

Al respecto quiero comentar un estudio so- plo los turnos suelen ser de menos horas en
bre el caso del río Cuautla, Morelos (Palerm los ejidos ubicados “aguas abajo” (6 horas
et al., 2000b), en el que se confirma lo an- en los ejidos de abajo y 12 en los de arriba).
terior para el caso de los ejidos situados
No obstante las diferencias señaladas, se-
aguas abajo (del Canal San Esteban) quie-
gún la posición en el sistema de riego, exis-
nes son los que experimentan en mayor
ten acuerdos entre los ejidos que se surten
medida la escasez de agua, tienen jueces de
del canal general de San Esteban, a partir
aguas y una normativa estricta respecto a
de la asamblea del canal general para la
los que se encuentran aguas arriba, quienes
vigilancia y recorridos nocturnos para evi-
no tienen jueces de aguas sino que es el
tar el saqueo ilegal del líquido.
mismo canalero el que distribuye el recurso
a los usuarios. Las sanciones y/o multas, En una escala más amplia, en el nivel de la
así como los turnos varían según la posi- Asociación de usuarios del río Cuautla que
ción de los ejidos en el sistema, así por ejem- implica un nivel mayor en términos de caudal

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Organización social y pequeño riego en México.
Un acercamiento a la región Centro

y de usuarios se han dado también escena- glo XIX, concretamente desde 1888, en don-
rios de organización cuando por ejemplo en de hay un interés manifiesto por el gobier-
ocasión del periodo de estiaje de 1998 los no de tener una ingerencia significativa so-
usuarios acordaron “tumbar” los bordos y bre la construcción de la obra hidráulica y
melgas a pesar de la reticencia de la directi- su manejo, desconociéndose en muchos ca-
va de la propia asociación y de la Comisión sos, la larga tradición tanto constructiva
Nacional del Agua. Estos bordos son aprove- como administrativa de los diferentes nive-
chados para el cultivo del berro, bajo permiso les organizativos en torno al manejo hidráu-
de algunas instancias gubernamentales, pero lico (Sánchez: 2002).
sus productores no cuentan con derechos Aunque efectivamente el reparto agrario
formales o legales sobre el agua. Sin embar- tuvo repercusiones en la distribución de la
go, en otras circunstancias no se han logra- tierra y el agua, me atrevo a plantear que el
do poner de acuerdo, por ejemplo, en el pro- panorama es diverso y heterogéneo en el
rrateo del agua en situaciones de disminución nivel local y regional. Salvo las nuevas pro-
del caudal del río (Palerm et al., 2000b). yecciones de gran obra hidráulica ejecuta-
Para una mejor comprensión de los proce- da durante el siglo XX sobre todo en el norte
sos organizativos habrá que observar con del país –lo que nos habla de una nueva
mayor detalle el peso y las características historia en términos de los nuevos usua-
de las instituciones sociales o recursos so- rios–,10 en diversos casos del Centro y Sur,
ciales de las comunidades, así como las si- se ha dado cierta continuidad en el manejo
tuaciones de escasez que se encuentren pre- de los sistemas de riego, en términos de ma-
sentes en contextos locales o regionales. nejo empírico y/o de memoria histórica.
Ciertamente, en el nivel de sistemas de rie-
go ha habido cambios durante las últimas
LA RUPTURA: NUEVOS décadas, sobre todo por la proliferación de
USUARIOS DEL AGUA
pozos para la extracción del agua subterrá-
Uno de los aspectos que se plantean como nea, lo que ha desplazado a otros sistemas
elemento causal u originario del porqué la (antiguos) basados en derivaciones a partir
organización multicomunitaria en el caso de corrientes superficiales o manantiales,
mexicano resulta débil y limitada, se ubica pero esto forma parte de una historia recien-
en el reparto agrario, como el punto de par- te que está por escribirse y que será aborda-
tida de una reestructuración del manejo de da en próximos capítulos. Pero aún así y con
la tierra y el agua, que se reflejó en la todo lo que implica esta nueva irrigación,
disrupción de los sistemas de manejo y de buena parte de la organización social alre-
organización multicomunitario. dedor de la construcción y operación de es-
tos nuevos sistemas de riego, se basa en las
En todo caso, sabemos que este nuevo vira- formas de organización previas que se han
je sobre el control del agua, por parte del construido socialmente sobre el territorio y
estado, puede rastrearse desde fines del si- sobre todo en el peso de las instituciones

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Davison G. Mazabel D.

locales que intervienen en las formas de aso- de los sistemas hidráulicos de pequeño rie-
ciación y colaboración colectiva, así como go en México y de su actual carácter
en la percepción que sobre el territorio y los autogestivo, hay una ausencia de organiza-
recursos tienen los grupos humanos. ciones tradicionales fuertes a nivel de siste-
ma equivalentes a aquellas de Valencia,
Algunos de estos sistemas de riego, inclu- España y otras regiones del mundo (…).
so, han mostrado su eficacia, o tienen la Esta carencia se finca en el hecho de que
capacidad para realizar un manejo susten- que, aun siendo sistemas milenarios o cen-
table del recurso si les incorporamos siste- tenarios, los usuarios (los regantes) son
mas de ahorro del agua, claro que a partir nuevos y/o estuvieron marginados de la ope-
ración global de los sistemas (Escobedo,
de escenarios de participación social que
2000: 35).
tengan como eje la información y la toma
de decisiones responsables que se reflejen Esta reasignación del agua, como conse-
en aspectos como servicios ambientales y cuencia del reparto agrario, produjo una
formas de acción colectiva que tengan im- nueva situación en la que nuevos usuarios
pacto positivo en las condiciones de vida accedían a un insumo que mejoraría su pro-
de las poblaciones involucradas. ducción a partir de una red hidráulica que
no conocían de manera sistémica. No obs-
Tanto en el pasado como en el presente te- tante, hay que señalar que: 1. El propio
nemos numerosos ejemplos del manejo de reparto agrario fue diferencial tanto en el
sistemas de regadío de tamaños diversos que tiempo como en el espacio y 2. Las condi-
nos llevan a la consideración de que antes ciones locales y regionales en términos polí-
que implementar nuevas figuras o mecanis- ticos y culturales marcaron las característi-
mos de regulación y/o manejo del agua de- cas de la organización social para el manejo
bemos examinar los tipos y niveles de or- del agua en la práctica. De esta suerte pode-
ganización alrededor del manejo de este mos hablar de escenarios regionales en don-
recurso, dado que no sólo resulta más eco- de el control del agua, por parte de medianos
nómico empezar sobre la base de lo que ya y grandes propietarios, continuó siendo sig-
tenemos, sino que hay toda una experiencia nificativa –a pesar de la reforma agraria– en
de autogestión nada despreciable.11 detrimento de los pequeños productores cam-
Algunos autores (Escobedo et al., 2000) pesinos, no se diga del mundo indígena.
señalan que aunque la pequeña irrigación Claro, si tomamos en consideración la expan-
ha recibido una parte muy pequeña del pre- sión irrigada durante los gobiernos revolucio-
supuesto nacional destinado al riego, la in- narios (ver cuadro 1), se confirma que en efec-
tervención del estado sobre ésta ha sido cla- to gran parte de ésta se realizó durante el
ve, dado que una parte importante de los siglo XX, por lo que el planteamiento de “nue-
usuarios de estos sistemas son beneficiarios vos usuarios” se podría sostener; sin embar-
del reparto agrario: go, hay que señalar que mucha de esta obra
Este hecho histórico es fundamental para está referida a obras de cierta magnitud y
explicar por qué, a pesar de la antigüedad concentradas en los Distritos de Riego.

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Organización social y pequeño riego en México.
Un acercamiento a la región Centro

CUADRO 1

([SDQVLyQKHFKDSRUHOJRELHUQRGHOiUHDLUULJDGDHQHOSHULRGR 
0LOHVGHKHFWiUHDV 
,55,*$&,Ï1 &$0%,2
3(5,2'2 $&808/$'$
18(9$ 325&(178$/

   


   
   
   
   
   
   
   
   
 FUENTE: Martínez, 1996: 209.

Ahora bien, si observamos el área irrigada, forma de contrafuegos frente a la incendia-


en términos regionales, tenemos que de los ria mecha de los imperativos mercantiles y
78 distritos de riego que existen en el país, de su concomitante acción depredadora de
el 54% de la superficie se encuentra en 18 los recursos sociales y naturales.
distritos en los estados de Sinaloa, Sonora,
Hagamos ahora una lectura de esta com-
Baja California y Michoacán; otro 17% se
plejidad enfocándonos sobre las condicio-
encuentra en 10 distritos del Centro-Norte,
nes y características de una irrigación que
como La Laguna. El restante 29% se en-
ha tenido como base la organización social
cuentra repartido en 50 distritos ubicados
y la acción colectiva como derrotero de su
en 24 estados.
existencia. Leamos algo de lo que la región
Es más, hay que señalar que, incluso para Centro Sur tiene en el marco de la pequeña
el caso de la obra para pequeña irrigación irrigación, que en su mayor parte constitu-
construida durante el siglo XX, la mayor ye la mayor experiencia de aprendizaje en
parte de ella se ejecutó en las regiones Cen- el manejo del agua de la región.
tro Norte, Norte y Occidente.
No obstante, la persistencia de las comuni-
LA “(PEQUEÑA) IRRIGACIÓN” EN LA
dades rurales para el caso de la región Cen-
REGIÓN CENTRO DE MÉXICO
tro Sur nos muestran otro escenario de gran
complejidad sobre el que tenemos que pro- Una de las características de la pequeña irri-
fundizar, ya que pese a la convulsionada his- gación es la heterogeneidad, lo que puede
toria agraria de estos territorios aún encon- verse desde los tipos de obra como en los
tramos mundos rurales que resurgen en la sistemas de organización social, de ahí que

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debamos hablar entonces no de una “peque- diverso tipo, a conflictos por el control del
ña irrigación” sino de formas regionales de agua con núcleos urbanos e industrias, pero
riego. En esta línea, llama profundamente también cerca de mercados de consumo y
la atención precisamente la región centro vías de comunicación importantes.
sur, localizada en lo que fue el núcleo cen-
Como puede verse en el cuadro 2, estos ocho
tral de Mesoamérica, en donde tenemos que
estados integran alrededor de 4 659 obras que
la tenencia de la tierra presenta un carácter
irrigan unas 298 mil hectáreas y benefician a
minifundista, con una superficie promedio
más de 200 mil productores. En esta región
por usuario menor a dos hectáreas, lo que
se localiza el 40% del total nacional de
deriva en que los grupos de usuarios tien-
usuarios de obras del “pequeño riego”, quie-
dan a ser numerosos; que estando en la re-
nes tan sólo controlan una sexta parte del
gión más densamente poblada del país es-
total de las obras y de la superficie irrigada
tén sujetos a procesos de contaminación de
que se incluye en este tipo de irrigación.

CUADRO 2

(VWUXFWXUDItVLFD\VRFLDOGHODSHTXHxDLUULJDFLyQHQODUHJLyQ&HQWUR6XUGH0p[LFR

7RWDO 7RWDO 6XSHUILFLH 8VXDULRV 7HQHQFLD 8VXDULRVSRU


(VWDGR 5HJDEOH 3URPHGLR
8QLGDGHV GHREUDV PLOHV  XQLGDG
PLOHVKD  KD 
+LGDOJR      
0p[LFR      
7OD[FDOD      
3XHEOD      
0RUHORV      
*XHUUHUR      
2D[DFD      
<XFDWiQ      
7RWDO      
GHOWRWDO
QDFLRQDO      

 F UENTE: Palacios, 1997.

Otro rasgo que distingue a esta región res- corresponde al 40% de lo que tienen los
pecto al resto del país, se refiere al número usuarios en el ámbito nacional, sin embar-
de usuarios que en promedio integran las go, el número de usuarios por unidad equi-
unidades de riego, que van desde 34 en vale al 238% del promedio nacional, lo cual
Yucatán hasta 120 en el estado de México. expresa una relación inversamente propor-
De tal suerte que aunque la superficie pro- cional respecto al conjunto.
medio por usuario de la región centro sur

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Organización social y pequeño riego en México.
Un acercamiento a la región Centro

Respecto al tipo de obras que existen en la manantiales que seguramente han sido uti-
llamada “pequeña irrigación”, es interesan- lizados desde épocas tempranas del desa-
te señalar que aunque en proporciones va- rrollo agrícola mesoamericano hasta obras
riables, todas están presentes en cada uno contemporáneas de extracción de agua sub-
de los estados de la región, lo que nos ha- terránea basadas en la incesante perfora-
bla de estructuras estatales mixtas o ción de pozos y plantas de bombeo cons-
híbridas en las que tenemos sistemas de truidas durante las últimas cuatro décadas
aprovechamiento como derivaciones o (cuadro 3).
CUADRO 3
(VWUXFWXUDGHULHJRSRUWLSRGHREUDVHQOD³SHTXHxDLUULJDFLyQ´HQODUHJLyQ&HQWUR6XUGH
0p[LFR
7RWDO 3R]RV 3ODQWDV
(VWDGR $OPDFHQDPLHQWR 'HULYDFLRQHV 0DQDQWLDOHV
GHREUDV SURIXQGRV GHERPEHR
+LGDOJR      
0p[LFR      
7OD[FDOD      
3XHEOD      
0RUHORV      
*XHUUHUR      
2D[DFD      
<XFDWiQ      
7RWDO      
GHOWRWDO      
QDFLRQDO
 FUENTE: Palacios, 1997.

CUADRO 4
&DUDFWHUtVWLFDVGHODWHQHQFLDGHODWLHUUDHQOD³SHTXHxDLUULJDFLyQ´HQODUHJLyQ&HQWUR6XUGH
0p[LFR
(VWDGR 6XSHUILFLH GHODWHQHQFLD 8VXDULRV GHXVXDULRSRUWLSR
 PLOHVKD  3HT3URS (MLGDO PLOHV  3HT3URS (MLGDWDULRV
+LGDOJR      
0p[LFR      
7OD[FDOD      
3XHEOD      
0RUHORV      
*XHUUHUR      
2D[DFD      
<XFDWiQ      
7RWDO      
GHOWRWDO      
QDFLRQDO
FUENTE: Palacios, 1997.

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Davison G. Mazabel D.

Otro aspecto que resulta de sumo interés a las políticas y su praxis frente al manejo
para el caso de la “pequeña irrigación” es y apropiación del territorio.
el relativo a la tenencia de la tierra, pues Estos sistemas organizativos existentes en
mientras en el ámbito nacional la tenencia los espacios rurales están basados en el
ejidal representa el 56.5% del total de la manejo de recursos escasos y vitales para
superficie irrigada, en la región centro sur la supervivencia de campesinos e indígenas
encontramos que este tipo de tenencia arro- –y que ahora también se reconoce, para las
ja el 63.7% del conjunto regional, lo que sociedades urbanas– y comprenden una es-
habla del carácter ejidal de esta estructura trategia de vida basada en buena medida en
minifundista (ver cuadro 4). el manejo colectivo de los recursos, trátese
Estos datos hablan de los alcances del re- de sistemas de riego, pastizales y/o bosques.
parto agrario a nivel regional y por otro Aunque en algunos estudios se reconoce un
lado, en contrapartida, nos hablan del atrac- mal manejo de algunos recursos, muchos
tivo mercado de tierras que se abrió a par- otros casos plantean realidades que
tir de las reformas de 1992, al artículo 27 ejemplifican el cómo estas formas de orga-
constitucional. O en todo caso habría que nización colectiva pueden ser eficientes o
estudiar y analizar las posibilidades y opor- tienen capacidad para serlo (García Barrios,
tunidades que el Procede ofrece a los 1997).
ejidatarios de la región.12
Habrá que estudiar con profundidad la di-
námica de estos sistemas de riego, para ana-
CONCLUSIONES lizar hasta qué punto han sido o son social-
mente viables y en qué medida sustentables.
Como han señalado diversos autores, en En este sentido la investigación social so-
México existe una larga tradición y expe- bre la organización del territorio deberá to-
riencia en la administración local y manejo mar en consideración los aspectos
del agua desde el nivel local y regional, y socioculturales que intervienen en los pro-
fue a partir de 1888 cuando se pretendió cesos de cambio.
centralizar el manejo y control del recurso.
Ahora poco más de cien años de esta ini-
ciativa de centralización nos encontramos COMENTARIOS FINALES
en un debate sobre el futuro manejo del agua
En particular, para el caso de la región cen-
en el que a pesar de que las nuevas políti-
tro integrada por los estados de Hidalgo,
cas plantean una redefinición del papel del
México, Tlaxcala, Puebla y Morelos, hay que
Estado en torno al recurso, se ve difícil que
preguntarse entonces hasta cuándo este con-
la administración local pueda sentar sus
junto geográfico y cultural se mantendrá con
bases sobre lo social o colectivo, es por ello base en esa “relación original, mantenida
que este tipo de estudios pueden ayudar a por siglos o incluso por milenios, entre la
esclarecer el papel de las comunidades frente ciudad y el campo” (Bataillon, 1975).

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Organización social y pequeño riego en México.
Un acercamiento a la región Centro

Esta ruralidad soportada a través de los si- ción humana sobre el espacio físico y bio-
glos, está sustentada: 1. En unas condicio- lógico y viceversa.
nes físicas particulares que han favorecido
En otras palabras el análisis del manejo y
y aún favorecen la práctica de una agricul-
gestión del agua con base en el modelo de
tura permanente y diversa y 2. En una den-
cuencas no debe hacerse sólo sobre la base
sidad histórico-cultural reflejada en la con-
de realidad física, es decir, no sólo con base
tinuidad de un gran número de
en una lectura gravitatoria o de espaciali-
asentamientos que presentan una larga per-
dad hidráulica de la relación aguas arriba
manencia en el territorio.
vs. aguas abajo, sino que también debe in-
A lo anterior habría que agregar que la pre- cluir los procesos socioeconómicos y cul-
sencia de ciudades produjo una suerte de turales que intervienen en los usos y apro-
relaciones de diversas características entre vechamiento del agua a través del tiempo y
la poblaciones urbanas y rurales que han en donde lo que sucede abajo, en la planicie
devenido en una configuración de tipo re- o valle, afecta de manera primordial lo que
gional en que los flujos de intercambios pasa arriba, en las laderas o en la montaña.
sociales, mercantiles, e institucionales han Es importante, entonces, que para estudiar
influido sobre la conducta de los grupos y/ tal complejidad, integremos y/o relacione-
o comunidades rurales para quienes su lo- mos los sistemas de riego con los sistemas
calización alrededor de importantes núcleos sociales involucrados, y aproximarnos a un
urbanos les ha conferido oportunidades y análisis dinámico e integral de la cuenca.
problemas, pero sobre todo grandes retos,
dado que ellas irradian buena parte de la
memoria secular y conservan una relación NOTAS
particular con el ambiente en una región en 1
En estos trabajos, la agricultura de riego es
la que se encuentran varias cabeceras de
vista como la base material para la produc-
cuenca y que alberga una biodiversidad ción de excedentes y la muestra fehaciente
excepcional. de la capacidad de coerción para producir
Por otro lado, el examen y análisis de estas tales excedentes. Estos trabajos seminales
estructuras de organización, así como las propiciaron la investigación hacia la bús-
queda del fundamento material de grandes
estrategias que se despliegan de ellas, nos
civilizaciones, haciendo énfasis en la evi-
sirven para entender un fenómeno comple- dencia de la construcción monumental –las
jo y más amplio sobre el que actualmente pirámides y ciudades– a través de la exis-
se discute y se pretende planificar y que está tencia de canales y sistemas de riego aso-
basado en el manejo de la cuenca ciados a estos grandes asentamientos. De
hidrológica. Al respecto sería interesante esta forma, la hipótesis hidráulica hacía
comprender la dinámica del comportamien- hincapié en la importancia de una agricul-
to humano y las características del aprove- tura de regadío capaz de producir exceden-
chamiento de los recursos del entorno para tes, y que, a su vez, permitía y obligaba a
entender la incidencia de la diversa condi- una organización despótica, considerada

212
Davison G. Mazabel D.

como la única organización capaz de mo- co, no límites al espacio, al crecimiento, que
vilizar grandes contingentes de trabajado- en realidad descansa en el soporte de un
res para la construcción de las pirámides y neocolonialismo o es sostenido por divisio-
otras obras monumentales (Wittfogel, 1966; nes coloniales: entre centros y periferias,
Childe, 1954). hombres y mujeres, áreas urbanas y rura-
les, sociedades modernas e industriales del
2
Esto puede verse fácilmente en las obras de
norte y sociedades tradicionales del sur;
Ángel Palerm: Distribución geográfica de
pero cuya razón económica reside en la
los regadíos prehispánicos en el área cen-
externalización de costos hacia los mundos
tral de Mesoamérica (1992); Agricultura y
colonizados.
civilización en Mesoamérica (1992); y A
small irrigation system in the valley of 6
Existen varias referencias a este trabajo en:
Teotihuacan (1956). Palerm y Martínez (eds.), Antología sobre
pequeño riego, 2000.
3
Es preciso señalar que entre los coetáneos
hubo muchas visiones, unas coincidentes y 7
El valle de Texmelucan es la porción occi-
otras divergentes, sobre los problemas de dental del valle de Puebla, comprendida
la agricultura mexicana y, en consecuen- entre la margen oriental de la Sierra Neva-
cia, sobre los cambios que se creían nece- da y el río Atoyac, se extiende desde las
sarios que no nos es posible reproducir aquí estribaciones del Iztaccíhuatl hasta los al-
por cuestiones de espacio, pero que queda- rededores de San Martín Texmelucan, Pue-
ron sobre el papel (Herrera, 1994: XXX- bla.
XLII; Kroeber, 1994: 15-107). De todas 8
El río Cotzala es afluente del Atoyac e irriga
formas, en términos generales, se creía que
una parte considerable del valle de
la modernización agrícola pasaba por la ca-
Texmelucan.
pitalización de los latifundios y su
reconversión en empresas agrarias mediante 9
Información proporcionada por Noel
el acceso a tierras irrigadas, tecnología Domínguez de la localidad de San Agustín
moderna y fuentes de financiación adecua- Atzompa (actual tesorero del Cuadro de
das (Oñate, 1991: 43). Aguas).
4
El cambio en materia administrativa y la con- 10
Recordemos que este Norte carece de cultu-
secuente transferencia se derivan de la Ley ras agrícolas tradicionales y que además son
de Aguas Nacionales de 1992, que se con- regiones áridas o semi-áridas.
cretó un poco después en el Plan Nacional 11
Por autogestión, se entiende el conjunto de
de Desarrollo 1995-2000 en un modelo que
prácticas sociales que se caracteriza por la
continúa vigente.
naturaleza democrática de las tomas de de-
5
He retomado “desarrollismo” el término del cisión, que favorece la autonomía de un
cuestionamiento al mito del desarrollo, “colectivo”. En un ejercicio de poder com-
planteado por María Míes en la obra partido, que califica las relaciones sociales
Ecofeminism, quien sostiene que en cierta de cooperación entre personas y/o grupos,
visión del desarrollo subyace la idea independientemente del tipo de estructuras
esquizofrénica o creencia de recursos ili- organizativas o actividades, dado que ex-
mitados, no límites al progreso tecnológi- presan intencionalmente relaciones socia-

213
Organización social y pequeño riego en México.
Un acercamiento a la región Centro

les más horizontales. Presenta un carácter Herrera y Lasso, J. (1994), Apuntes sobre irri-
multidimensional (social, político, econó- gación. Notas sobre su organización eco-
mico y técnico). nómica en el extranjero y en el país. Una
posible solución al problema de la irriga-
12
En efecto, durante los últimos años y meses
ción nacional que facilita su desarrollo sin
se observa un interés muy marcado por parte
que resulte favorecido el capitalismo agrí-
de ejidatarios de los estados de México y
cola, México, Centro de Investigaciones y
Puebla por participar en el Procede. Esto se
Estudios Superiores en Antropología Social
ha detectado incluso en ejidatarios que son
/ Instituto Mexicano de Tecnología del
usuarios del agua, independientemente de
Agua.
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