La Alqui',nia

a Alquimia es una ciencia que resulta del

L conocimien to de Dios, la Naturaleza y el

Hombr e. No puede obtenerse un perfecto
conocimiento dt>ninguno de dios sin el conocimiento
de los otros dos, pues estos tres son uno y son insepara-
bles. La AlqLúmía no es meramente una cienciaintelec-
tual, sino una cienc ia espiritual; porqu e aquello que
pertenece al esp íritu sólo puede ser conocido espir itual-
mente. No obstant e, es una ciencia q ue trata con las
cosas materiales, pues e~piiitu y materia no son más
qu e dos manifestacioi,cs opuesta s, o «polos»,del Eterno.
La AJquimia ~s un arte y, dado que todo arte exi-
ge ser practicado por un nrtista, asi también, esta cien-
cia y este arte divino~ sólo pueden ser practicados por
aquellas personas que estén en pose~ión del poder
divino necesario para tal propósito. Es cie rto que la

7
m anip u lación exte rna requerida para la producción
de ciertas preparaciones alquímicas puí'de ~er cns<'ña-
da, co rno un p roceso químico corrient e, a 1.-ua
lquier
persona capaz de razonar; pero los rei.ultados que ésta
consegu irla e,.tarían carent es de vida, pues sólo aqud
en qu ícn la a,11
tén lica vida ha despertado p uede des -
pertar la d<-su suciio er\ la Pri ma tvlatcri a, y hacer t[ue,
d el Caos de la Natu ralez a, smjan form as visib li::s.

John French, 'I'he/Jrt of clistil/(ltio'II.Lond res, 16 5 1

La Alq uimia, es sus aspectos más e levad os, se oc upa

d e la regeneración esp iritu al d el hombr e, y enseñ a
cóm o pu('dte hacerse un d ios de un ser humano 01

para expresarlo con mayor corrección, cómo ei.table-

cer las condicio nes necesa rias par a el desarrollo de
los poderes divinos en el hombre , para que un ser

8
humano pueda con vertirse en dios po r el poder de
Dios, en el mismo sentido e n qu e una sen1illa se con-
vierte en p lanta con la ayuda de los cuatro elemento~
y la acción del quinto invisible. La Alquimia, en ~u
aspecto mós materia l, enseña cómo pueden gcnl'mr-
se minerales, metales, plan tas, anima les y hombres a
¡partir de sus «semil"las»; o, en otras palabrn~, cómo
dicha generació n, que se consigue en h1rgos pe riodos
de tiernp o e n e l cu rs() de acción adec uado de las lcy<'S
natu rales, pued e consegu irse en un tiempo compa ra-
tivamente' breve si el conocimi ento csplrit ual del
hombre guia a dichas leyes y les proporciona mate-
rial. ~o cabe duda en mi mente de que se puede
b acer crecer oro po r medios alquímicos, pi>ro t'~

n ecesario que haya un Alquimista que haga el expe-

i-i mcnto y que tenga éxito; y aquel q ue esté atraído
p or e l pod er de l o ro no obtend rá la poses ión del
poder espiritual necesario para pra cticar este artt'.
El objrto de estas páginas no es aporta r p ruelxis de
la verdad de la Alquinlia al escéptico , ni ofrecer argu-
n1entos sobre la fuerza con la cu al puede convencerse
al incrédu lo de que crea en su posibilidad. CrC'Cr
!'n
algo sobre lo c.ual uno no tiene ningún conocimi ento
seria de poco bcncndo; pero aquellos que tengan

9
algún co nocimiento espiritu al d e la 1\lq uimia, lltl sen-
tido intuitivo de 1nmism a, p ueden recib ir dg ún bene -
ficio de !a lectura cuida dosa de este capftulo, ya que
puede scrvil'les para Uevar a la con1prcn96n de s us
mentes aqudlo q ut' ya conocen e!>-piritualme
n te.
Es un erro r co nfun dir i\l q uinúa con Quí mica. l.a
Qu ím ica mo de rna es una cien ci:i qu e trnLa rnera me.n -
te co n las forn1as exte rn as en q ue d d cm(mto de la
ma te ria ~,· manifJesta . Pode rnos rner.chir y l:Omponer
y descompo ner dos o 1n ás cu e rpos q uím.icos u n
núme ro ilimitado de veces, y haceF que aparezc an
bajo diversas formas, pero, al f111
al, no te ndremos ni1l-
gún aumento de la sustancia, ni nin guna cosa que no
sean combinaciones de las sustancias que han sido
empleadas en un ptinci pio. La Alquimia no n1ezda ni
coropo11enada, hace que aquello qu e ya exi.i,teen un
estado Lüent e se vuelva más acti vo v crezca. La
'
Alq uimi~ es, po r lo tant o, n1ás co1np arablc a la bo tá-
nica o a 1(1agricu ltura que a la Qu ímica; y, de he1.. ho,
el crecim iento de una planta, 'llll árbo l o u:i animal es
un procts<1 alq u ím ico que Lie ne lugar en d laborato-
rio alquímico de la nat ura leza, y que es rcJli:zado por
el gran Alquimista, el poder de Dios act1..andoen la
naturaleza.

10
 Mich,1clMoicr, 1lwlo,iu, F11yiens
. Oppenheim, "161.8

La natura le7.a de la Alquimia es explicada con clari-

dad por Johannes Tothemius, quien dice:

<Dios es un fuego esencia l qu e está oculto

en todas las cosr•s,y especialn1en te en el hom-
bre. Este fLtego gene ra to das las cosas.
,Las ha generado y fos gene rará e n <>
I futu-
ro, '/ aq uello que es generado es la ,·erdadera
lul'. divina de la. eternidad. Dios es un fuego;
p('fl) no hay ningún fuego que pueda arder y
ninguna lu'l. c¡ue pueda aparecer en la natura-

11
 leza sin que se añada aire para provocar la
co mb ustión.
»Asimismo, el Espíritu Santo en ti debe
act uar como el "aire" o aliento di virio, salien-
do del fuego díYino y 1/oplandosobre el·fucgo
que h ay d~nt ro d eJ alm a, para que ap arel.c a la
luz, pu es la luz debe ser alim entada por el
fuego. Esta luz es amo¼ alegría y dicha den tro
de la deidad ete rna . fl.sta luz. es Jesús, que ha
emanado de la eternidad, de Jehová.
»Aquel que no tiene esta luz, se encuen tra
en el fuego sin lu z; pero si la luz está en él,
enlonc.cs el Cristo está en él y toma forma en
él, y esta person a conocerá esta luz ta l como
e.'tiste en la naturalc7..a.
»To<l~
1slas cosas que vemos son, en su intc·
rior, fuego y luz, donde se oculta la esencia del
esp íritu. Todas las cosas son una trinidad de
fuego, luz y aire. En otras palabras, el ú.-púitu,
el Padre, es una lu:.i divina sohrecs en ,cial; el
Hijo es In luz manifiesta; el Espíritu Santo, un
aire y movimiento sobreesencial y divino. El
frie go reside den tro <le! cor azón ,' en vía su s
rayos a través del cuerpo dcl hombre, badén-

12
 dole vivir; pero ninguna luz pu ede nacer del
fuego sin la p resencia del espírit\1 de santi dad,. .

Para expresar esto en o tras palabra s, pod ríamo s decir

que: tod as las cosas nacen del pensamiento, y exist en
en. la mente univ~.rsal (la luz astral) , y d entr o d e c,1da
una de elfos está latente la voluntad, por cuya acción
se puede <lesarrollar ~·sus pode res se pu e<len dc.~ple-
gnr. E~to tien e lugar en circunstancias favorables
mediante la acción lenta e inconscien te de la vo lun-
tad uni versal qu e actú a en la natu raleza, y p uede
conseguirse en llll periodo de tiempo muy b reve con
la ayud a de la v()!untad cons cien te del alquün ista.

fakob Socluue ,
'/h>S<tphisdté
Worke,
Ams1erdam. '1682

13
 Pero, para que la voluntad d e un:i perso n a pueda
realizar estas :na ravillas en sust an cias cxten 1as, a n tes,
su volun tad ~ku e dev e nir con scie n te d e sí mi~m;i
en S1.1 interior; la luz que brilla desde e l cen tr o d e s u
corazón deb e estar viva 'Y radiante para q ue p u eda
actuaJ sob re aque llas sustan cias co n las que el Alqui-
•
mista trata .
La persona en la cual esta luz divina d el Cristo no
ha despertado a la vida está prácticamente dormida en
esp íritu, y no puede actua r sobre las cos as ele.! es píri tu
rnás de lo qu e un homb re pod rfa1tr atar co n sustancias
materiales mient ras d\1crme. Este hecho difkilme,1ne
ser.i reconocido o comprendido por el racionalista,
quien imagina qu e está completamen te dc&pier to y
pa ra qui e n, por lo tanto, los secretos d e la aJq uim ia son
un m isterio inex plicable, y s11ún ica manera de dispo-
ne r de ellos es negándolos o burlándose.
La Alquimia se conoce desde lo.~ tie mpos mós
anti guos. Ne era niJ, gún secret o para los ini d ad os qu e
h abía en tre kis bra hman es y los eg ipcios¡ y, si uno lec
la Biblia bajo la luz de la Cá bala , descubrirá que se
trot :1 de la descrip<'ión de un pr oceso alquímico. El
1\.leph, ~, representa trc:'Sllamas ardien tes, p ero es
s,ilamente una letra.

14
r

Jakob Boehmt!. 1'twsu¡,hiscl,~ \,~¡,,-!..e,Ái11,(.,.dftm, 1602

En Magia significa AOH, el Padre, aquel a partir del

cual todos los demás se originan, el Alpha y también el
Omega, el principio y también el fin. Dcl mismo mo<lo
que el aire hac e qu e el fuego ,,rcla y em ita un a luz, tam -
bién d E~piritu San to (sin cuya presen cia no se pued e
alcanzar cosa alguna), al alimentar el fuego divino con
el alma, hace que la luz viviente del Cristo 5(: manifies-
te. Esto está tambi én indicado en las tres primeras letras
de la palabrn r ,''L'<ln:i, puf'~ :i sii:,'lliílca «l:!cn»,el hijo; el
AOH, el Padre; y .., significa Rua ch, o Espíritu. &ta,

15
entonc.:e~.es la lrinidad de p<1
dre, hijo y Espírit u Santo,
y su cualidad está indkada pnr la silaba siguiente, i l'ID,
qu~ inrlic.aIn vc•rcfarlcm
generación, pues la 'V es la letra
que simboliza el fuego,y la ' simboliia la luz. La pro-
nwu:iación de la prim~m es como el sis:eode la llruua,
pero la última surge suavemente del fuego,ya que tam -
bién nace dt!bily suavemente dl'ntro del alma humana,
mientras que la r simboliza el espíritu y el poder de la
palabra pronunciada con flrme;,,a.
El Camarde los Cnmares,en el Antiguo Testamen-
to, es una descripción dt' los pCOCl'SOS de la alquimia. En
este Camar de los Cantares,el Subjectttmes descrito en
el Cantar1, 5; el Liliumartisen CantarIT,1; la Prepara-
ción y Purificación en Ccmtar11, 4; el F,1cgo en Cantar
lll, l ; la Sublimacióny la Destilación en Cantar m, 6; la
Coagulación y el Cambio de Color en Cantar V, 9 a 14;
la Fijación puede encontrarse en Cantctr Jl, 12, así como
en Cantar Vlll, 4; la Multipllcadón en Cantar VT,7; la
Aum ent :ició n y la Proyección en Cantar VTll,8, etc.
Con todo esto, no debe suponerse q ue la práctica
de la J\Jq u irniA cons ista me rame nte en el ejercicio de
la volUJ1tady la imaginación,o que los productos obte-
nidos son simplemente imagi11arios e mtangibles o
invisibles a los ojos de los mortales.

16
 Michacl Maier, 1,to.la11ta , Op pcoheim, 1 618
Pu!Jia11s

Por e l contrario, ningún pro ceso alquími co pu ede

realizarse sin la prcsc11cia de mat eria visible y tan -
gible, ya que es, por así decirlo, una esp irituali za-
ción de la m ate rio. No hay transform, l ción de ma -
te ria en espíri tu , como creen algunas personas,
pues cada uno de los siete principios de la natura-

17
leza eterna es inalterable, y permanece eternamen-
te en su pr opio ce ntr o, en el m ism o sent ido en qu e
la osc uridad 110 pued e ser co nvert ida e:1. Iuz, ,mu-
que pu ede ence nd er se una luz dent r o de la osc uri-
dad y, en consec uencia , la oscuridad dc,aparecerá.
Asimi smo, dentro de cada forma material duerme
'
el esp íritu divi no, la luz, que pu ede se r despe rtada
a la v1d,1 y a la act ividad , e ilum inar d cue rpo y
ha cer lo vivir y crece r. La qui mica de n uestro tiem-
po no tiene conoci mient o de las cualidad es de los
poder~s de dicha luz, ni siquiera de su existencia,
ni tiene nombr es para describirlas; pe ro están des-
crita s baj o dJversos nombre s en la Biblia, y e n
libros de Oriente todavía mtis antiguo s.
Ha y una sustanci a visible y una sustancia invi-
sible; un agua tangible y una que está fuero del
alcance de la pe rcepción a través de los se ntid os
físicos; un fu ego visible y un fuego mágico invisi-
ble. Ninguna de estas cosas puede realiiar nada SÜJ

la otra, pues en la práctica de la Alquimia , como

en la regene rac ión del hombre, aquello que está
arriba debe penet rar aqu ello que está abajo p:1ra
c¡u<' lo in l"e rlor pueda entra r en un estado su pcrlo r
de existencia.

18
la prima materia

Si desean1os co111oc:crla nat urale:i:adeben1os apren-

de r a co noce r a Dí os, y no pod c'•mns ro n nrPr ~ D iM
sin un conocimiento de nuestro propio ser divino.
La sustanciaespiritual, de la cual la naturaleza ei,._1:ef
-
na visible es una expresión y una manifestación imper-
f!!cta,ha sido llamada Prima lvfateria;es el material parn
la Fom1ación de un nuevo Cielo y una nueva Tierra. Es
como el agua o w1 •océano cristalino»;si se compa.i con
nucstm tierra inmensamente 1naterial, es a la vez fuego,
agua, aire y tierra, corpórea en su esencia y, no obstante,
incorpórea en relación con nuestras formas físicas.

llorem Coendm: """ Hd¡m11,lJEscalier1h<s.~"!!""·

Colo11ia.1693

19
 En dl I ll.: n o Cano;,,~s.'tán :ontenidos fo , gé:n ~r
ITIÍI 1 ) 1• r ci, ~ detodas la C'05.a' lj 'I 1 ] ,1

i "do, y de todo aque o qu

Jalma o

i:.:hl E· u
,ci1nl .rs~U l
1 tri ni - ad, de acueid ~011 sus S

SaL E 'tas t ~'i • s

·.nerales } metal
7 s., • •anima-
Ut"] o que respira; en su
e n uh toda a orm. ,
io d ·odas

o a..tral, y , qu~
[ mun O \'1-ib e ( e fa TI

l.1na uraleza ete :1 d la u 1 nac · odo

1 q
1 p r d po l et del e piritu u --t · en
·u in ri r.

_I
11 _!\ .s

-- 'l.. .I•
~
t
\'
'
.

21
 Desde ~u tierra fértil se pr od ucen frutos buenos
y malignos, plantas saludab les y nocivas, animales
inofensivos y peligr:>Sos, pues Dios no hace en
absoluto distincione~ entr e per sonas, oi favorece a
ningÚJl individuo en p.artkular. Cada uno recihe lo
que le toca en la vid~ de acuerd o con su capacida d
de rec ibir,' y finalme nte cada uno se conv ierte en
aqu ello que s~t ca rácter k destir1a a se r.
A contin uación, tomem os el Spirilus UniversalL~,sin
el cual el expe rimento alquímico no puede tener éxito.
Johanncs írithemius, abad y alquimista, c uyos
escritos son más daros y más comprensibles q,1e los
de cualquier otro alquimista,dice:

«Todas las cosas han sido hechas por cl poder de

la palabra divina, que es el espíritu o aliento
divino que,al principio, em,inó de la f1.1
enle divi-
na. Este aliento es d espíritu o aln1a del nittndo,
y se denom ina s¡nritus mundi. lnicialm imte, era
como el aire, pero se contrajo, con virtiéndose en
de niehla o sustancia nebular¡ y lue-
una <?Specie
go se convirtió en "agua». Al principio, esta
"agua" era toda espíritu y vida, porque t~;taba
<leespíritu y éste le c.labavida.Era
únp1·egnac.la

22
oscura en las profu ndida des; pero, a t ravés <le la
palabr a pronun ciada con fim1eza, se generó luz
ahí dentro, y entonces la oscuridad fue ilumina-
da por la luz, y el alma del mund o tuvo su
comien:1i>.Esta luz espiritual , a la que podemos
llamar Natura leza, es un cuerpo espirituaJ, e l
n.1al, a t ravé.~de la Al~uimia, pued e ha ce rse tan-
gible y visible; p~·ro, ~:orno ex iste en un e~-tado
inv isible, se le llarna espíritu .
»Se tn1ta d e un fluido universal v, vivo dif un-
dido por la Tota lidad de la Naturaleza , y que
impregna a todos los seres. Es la más sutil de
todas las sustancias, la más poderosa por sus
cualidades inherente!, pene trando en todos los
cuerpos y dan do vida a las formas en las está
activa. MedJante su acción, libera a las formas
de toda imp e rfeccióa, y hace qu e lo impu ro se
vuelva puro, lo in1p ::rfoct o pe rfecto y que lo
111ortol devenga inmcr tal al fijarse en su interior .
»Esta ese ncia o espíritu eman ó iniciah11en-
te del centro, y está incorporada dentro de la
sustancia de la que está hecho el mu n do. Es la
Sal de la Tierra , y sin su presencia la hi erbo
no crecería y los campos no estarían verdes.

2.~
 Cuanto más conde nsada , concenlrada y co a·
guiada cslé esta esencia en las formas, mas
p erdurab les serán. Esta sustan cia es la má~~'tl-
tiJ de todas las cosas, incorruptibl e e i naltera-
hle en su esencia,- impregn ando la· inflnidad
del espacio. El Sol y los planetas son simple -
'
me,itc estados condensados de e~te prln c ipiú
u,tive rsal, y dist rib·.1yen 1aab undan c ia dt! sus
corazo nes palpitantes, y la envían a los fo rm as
de los mu11clos inte rio res y a todo s los seres,
actuando a trav és de sus p ropios centro~ y
co nduci endo a las formas a un lugar mós ele-
vado en d camino hacia la perf ección. Las
formas en las que este principio queda fijado
d ev iene n per fec tas y pe rman entes, de mane ra
ta l qu e m) se corroerán ni se det eriorarán, ni
cambiarán al ser e:xpuestas al aire. Rstasfor-
mas tm11poco podrán ser dbueltas por el agua,
ni destru id as I"" d fueg o, ni devoradas por
. ntos de la tierra .
los eleme
»Este espíri tu puede obtenerse de la mlsrna
manera que es trnmmitido a la Tierra por las
estrellas;y esto tiene lugar por medio del agua,
que sirve co mo vehículo. No es la Picdni Filoso-

24
 fal, prro esta última p11edeser preparada a partir
de él haciendo que aquello que es volátil se fije.
•ÜS aconsejo que prestéis mucha atención al
agua que hierve, y que no permitáis que vuestras
mentes sean molestadas por cosas de menor
im pn rtancia. Tlacecl que hierva lenta1n entc y
dejad q ue se p udra hasta q ue adqui era el colnr
adecuado, pues e11 el agu a de la Vid a está co1.1tc·
nido el gcrn1eode la sabiduría . i\lfodiantt: d arte
del hervido, t'l agua ~e Lransformará e.o tierra .
Esta tierra ca mbiará convirtién dose en un Ru ido
puro y crista lino a partir del cual Se produce un
excelente füego rojo; pero esta agua y este fue-
go, al crecer juntos y convertirse en una esencia,
produ cen la gmn Panacea comp uesta de docili·
da d y fuer za: el co rde~o y el león en uno•.

El f uego secreto

En algún libro moderno el fuego sec re to de los

Alquimistas es descri to co mo Kundalini , el poder
«serpcntinOJO,o anuJar, en füncionamiento en el
cuerpo del a.sce\8.

25
 MichaelMaicr.Atalanla F11gic11s,
Oppenhcim, 1618

«Es un ardiente poder eléctrico oculto o Fohático, la

gran energía plistina qu e está en la base de toda m ate-
ria or6,ánica e inorgánica•; y, en otra parte: «Esuna
energia elect ro-espiritual, un poder creador que, cuan-
do despierta a la acción, e.~capaz de matar con la mis-
ma facilidad con que es capaz de crear...
Este punt o es la razón por la cual los secretos de
la Alquimia no son d ivulgados a los curiosos, y por lR

26
~
cual únicamente a aq uellos que han lograd o el poder
1
·,. de contro lar a su pr opio ser se les d irá cómo se
••
a puede desper tar este poder en el hombre.
fiJ En relación a este ttuego secreto•, los Rosacru-
ces afinnan:

•Las pote ncialidades que hay en la natura-

leza son despertad as por la ,1c:ción del fuego
secret o, asistido por el fuego element al .
~El fuego secreto 1•s invisible, y está con-
tenido en todas las cosas. Es cl fue go más
p ot e nciíll y má s poderoso , con e l cu al el f~,e-
go externo visib le no puede ser comparado.
Es el fuego co n el que Mo isés quem ó el
becer ro de oro, y del cual Jerem ías se ocu l-
taba, y el cual fue t!ncontrado setenta años
más tude por los conoce dor es, au nque para
enton ces se ha bía convertido en un agua
espesa. (Macabeos U, 1-2).
»Sin la posesión de este fuego mágico, no se
puedc realizar ningún proceso alq uímico, y, por
lo tanto, en Los símbolossecretosde Ú>s
Rosr1cru
-
ces se recom.ienda qlLC el estudiante de Alqui-
mia busque, por end ma de todo, el fuego.»

27
 Jl.Hrucgcl, El Aú¡uimi.sta
, Lomlres, 1651

Las reglas del /:rabl~fo alquúnico

Hay cuatro reglas esenciales para el desarr ollo de l

trabajo alquímico:

1. Si,q11e ti ln Na tu ra lc7.a,,
Es in útil que b usqu es <'l Sú l alumb rado por
la luz de una vela.

28
r
o cono ce, despu és ílCtrí o.
2. Pri111l"r
El v"nlm.lc , v un \ocimicn to cx-ísLc e n el tó-
:íngulo c ompues to po r e l ver, e l sent ir y d
com p re n der

3 . No utili ces p 1·oces <JS v ulg a res .

Utili za solamen Le -un rec:ipienLe, un fuego,
un instru mc11to. í.a p uerta dt'I fx ilo se en -
,.,,.,nt ra ,('n la unidad de la volunLad y el pro -
pósito y en la adaptación adecuada de los
medios par:1 un fin. Hay mu chos camino~
q ue conJ ucen al castil lo ce lestial. Aque l q ue
siga el se ndero elegido p uede lt:ner éxito,
mientras q\le aquel que in Len te can1inar por
muchos senderos se ret-rasará.

4. Nlantén el fuego antiemto cm1stant e:mente.

Si se p er m,tc q ue los rueta les fund idos se
enfríen ant~s de h ab er sido transformados
en meca les superiores, volvcrnn a endurecer-
se y todlo el proceso deberá repetirse desde
el prin ci pio. Usa una lám parn inexti nguihle.
Su luz no se apag ará a me nos q ut: sea retira-
da a la n1er1.a.

29
 MichaelMuier, 'IH11u
s A11re11s
, Fráncforc.1 (,1ll

La práctica de la alquíniia

Hay cinco corn.5que deben obser varse necesariamen-

te en la p rácnca de la alqui m ia:

1. Reconoce,· (a. venf1uler<i P1·i,ua t'l1aterill.

Se puede e ncontr ar en todas partes, pero, si
n o la enc uentras en tu p ropi,, casa, no la
encontrará~ en ninguna parte . Es una su.~tan-
cia vi,ientc que puede ser descubiert a (mka-
mente t!n lugares h abitados por e;[ hombre. Es

30
 la únic a sustancia a partir de la cual se puede
preparar la Piedra Filosofal, y sin e,ta sustan-
cia no se puede hacer plata u oro auténticos .
En treinta libras de mercurio comente, nor-
ma lmente. no hay más de una libra de sustan-
cia verdadera; y den libras del azufre co1Tien-
te no suden cont ener más de una lihra de
aquello que es útil . Sólo se puede hallar s,1bre
la Lierra, pero no debajo de ella. Está ante los
ojos de todo el mundo; nadie puede vivir sin
ella; todo el mundo la utiliza; los pobres sue-
len poseer más de esto que los ricos; los igno-
rantes la tienen en alta estima, per:i los erudi -
toS la suelen malgastar. Los niñosjuegan con
ella en la calle, per o eo invisible. Puede ser
percibida únicamente con el sentimiento, pe-
ro no pued e ser vista por el ojo hu mano.

1 cfo la. Pri 111

2. Pflra. la p, ·epa1·,1.ció1 a. i\ifnte1'ia,
utiliza únicamente la sangre color de rosa
de l León Rojo y el pu ro y blanc o gluten del
Agu[la. Qu e tu Volu ntad sea fue.rte, pero sin
ira, y que rus penS3mientos estén limpios de
aquello qu ~ infect a la capa m ás baja de la

5)
 atmósfera de la Tierra. Deja que el foego de
la Voluntad <livina pcnct:e profundamente
dentro de tu alma, y eleva tu mente hasta las
regiones sup eriores del p ensan lien to.

3. Obtén el F,w.qo sagrado .

' es obra del hombre; no p uede ser com -
No
prado , pero es entregado a cambio de nada a
aquellos que son merecedores de él.

4 . Euego siyu e la i\lf1tlti pli caC'ió11

...
y eJ aum ento, para lo cual son. nccesario5 el
peso y la medkb. Pesa tod as las cosascon la
balanza de la justicia, y midclas con la regla
de la razón.

5. La. qu.i11tttes la. .tlplicació n ...

es ·deciJ; la Proyección en los 111
etalcs. Es-
to será realizado por la
naturaleza, sin ayuda ar-
tificial.

'/h(<irrt of
John F1'c11ch,
distillatilm, 1ondl'CS,161>'1
32
 Ax-iornata herniética

1.
C ualqui er cosa q_uep ueda consegu irse con u n méto -
do sencillo, no d ebe inLen tarse con un mé todo com -
plicado .
Sólo hay un a Verdad , cuya existencia no ex.ige
ningun a pn1eba, porqu e ella misma es prueba si.,fi-
ci,•nte para aquellos qu e son capaces de pe rcibirla .
¿Porq\ 1é hab ríamo s de e.ntr~,· en la com plejidad para
busca r aq uello que es simp le? El sab io d ice: lg11i
s et
J\zoth tibi sufficiunt. El cue rpo ya está en tu poses ión .
Todo lo que necesitas es e l fuego y el aire.
2.
Ninguna sustancia _puede llegar a ser perfecta sin un
su~rimlcnto prolongado .
Grande es el error de aq ucllos que imaginan que
la Piedra filosofal puede ser endurecida sin ser
disuelta primero; su tiempo y su trabajo estarán des-
pe·diciados.

:~.
La naturaleza debe ser asistida por el arte siempre
qu~ esté falta de poder.
El arte puede ser la criada de la nalurnleza, pero
no pu ede suplantar a su señor -.. El arte sin la natura-
lcZ3e~ ~icmpre antinatu ral. La naturale,rn sin arte no
siempre es perfecta.

34
4.
La natu raleza no puede ser mod ificada, excepto en
~1.1 p1u piu ~1:1.

La naturaleza de un árbol no puede ser cambi:1da

mediant e 1npodoelesus ramas o la adición de omamen-
tos; puede ser mejorada únicamente mediante la n:ejo-
ra de la tierra en la que crece, o mediante el injertO.

5.
La natur :1leza d isfruta, com prende y sup era a la nat11-
raleza .
No hay otro co n,~cimiento que el conocimi«nLO
del ser. Todo ser puede realizar verdaderamente su
propia exi~'tencia, más no la de cualquier elemento
que le sea compl(•tarnente ajeno.
 ;'
¡

6.
Aquel qut) no conoce el movimien to, no conoce la
naturaleza.
La naturo leza t'S producto dd movimiento . En d
momento en que el movimi ento eterno cesara, toda
la naturale za clejatia de existir.
Aqu el que no conoce los movimie ntos qu e están
teniendo lugar en su cuerpo es un extraño en su pro-
pia casa.

36
;'
¡

7.
Cua lquier cosa que prc,du2ca el mismo efec to que el
producido por un compuesto es similar a este último.
El Uno es más grande que todos los demás mime-
ros, p ues de él pu edeu evolucionar 11navade dad infi-
nito de magnitud es matemátic as; pero ningún cam-
bio e~ posible sin la presenci a del Uno, q ue Lodo lo
impregna, y cuyas cualidades e:.'tán manifiestas en
todas ~us ma:ni.fostaciones.

37
8.
Nadi e · u.e.de pasar de un e. ' r mo a o ro, si no es a

·n lll'l ·mtl no p de dev,enir divino antes de con-

ertir ·e en hun ano. Aq u eUo que es antinr 1 ral deh -•
YolH:: natural p , q -e u n tttral za u
n.ir srpi..·tual

9.
Los m tlt, lcs . _o fü .den ser cm, vcrti o · en ot -os meta-
l ..s, in ha ber sido reducidos antes a prim . materia .
La ol nta ,. l ser, e n~r.ariaa ~a di •in , deb
c,~.,a · para 4u e la Voluntad divina entre e.n 1corazó n..
D ebemo s ser simples co,m nlños, pa rn qu ta. pala-
bra sahid _ 'a pue2.a ha .ar e .nu tr men e.
1
10.
to no madur uro.
i i, 1a crm ntadón debe ser i lu · a.
a ley de Ja Induc ció:n gobierna "11 tod< s k5
cl par _amen os e 1a.na ur leza.

11 ,
E- l Cal.'n ión, 1 o· ' • no s rcdu idor i o
_n :an :dád.
211..11nentado
El ve1d d e :renun ·i r a
,r > asce'"'·smo, cun ·iste
aqu 11 ue u 0
1 no a es ttés d b er recibj o
algo mejor.

3
 12.
En la Alq uim ia, nada puede dar fruto sin antes haher
sido morti ficado.
La luz no pu ede brillar a través de ] a materia a
menos que la materia esté sufic.iente rnen te rcfl.nada
como para permitir el paso de los rayos.

18.
Aquello que ma ta p roduce vida; aqu ello qu r. provo -
ca la muert e provoca la resurrección; aquel lo que
destruye crea_
Xada sale de la nada . La creación de una nueva
fonna e.stá condici onada por la de.strucción (transfor -
mación) de la antigua forma.

40
14.
Todo aquello q ue contenga una semilla puede ser
aumentado, p e ro no sin la asistencia de la natu raler.a.
Onicarnen te a travé s de h1semilla p uede el firu to
que contiene m ás sem illas llegar a existir.

15.
Cada ,:o~a es m ultip licada y aun1cn tad a por medio
d e \ 111 princi p io masculin o y fem enino.
La materia n o pro duce nada a men os que Sl'R

penetrada por el pode :. L'l naturJleza no crea nada a

meno s que esté impregnada de Espíritu . El pensa-
miento es impro duct ivo a menos que se torn e activo
media nte la Volun ta d .

41
1,6.
La virtud de cadJ se1nílla es.u n ir. e con c. d, cosa que
pertenece a su mi 1.no reino .
Cada cosa de la natura]eza es atraída por su pro-
pia natura le za representada en ot ·as <.:os~. os colo -
res y los sonidos de naturnl"Za similar forman 1.mi.dri-
des a:m1mriosas1 as sustai 1da . que ,está 1 relacio nadas
entr e eJlas pued ~1,ise1· combi nadas , los anirna] de
w n1ismo género se re!a ionan ent re ellos 1 y l( s
poderes espirituales se Ll en. con sus propio~ génne-
nes afines .
1'7.
Un.a n1 triz pu da a luz.un "i·uto puro.
Únicamen t e t:n e] :santuario más profundo dd
alma será revelado el rnister·,c,d 1jespir itu .

18',
f"l fuego y el ca or sólo pueden. ser produci dos por d
mo"\'i m :í.ento.
nmovilidad e mue rte . La piedra lan zad. al rigua
forma p rogresivainente e· Cti.fos que se exti :nden
dlesd el :entro, qne s,on prod ucidos poi el o i-
., to . El ahua que no 1 u""d s:er
m il:" 01 movida 1 o
pu ede ser de adla y e petrifica.

4
19.
1bdo hi k, y
'ni ~ fmaliz~ ~o po CN
sofo 11él ,do· l H vido.
E~ 'f'. An:un mr es un cspiri ,u celestial que des-
.end ,J, 1 _,ol1 J..J11.un a y 1a· eUas y qu 1 lleva-
do ci la J"lerfecc ·ón n -1 1hj cto s 1,tumíno
I 1 1, '•·liante Sll

he rvido ·on. mu hnsta qU· a : ~m.za eJ i; · ado d.

suhlima ión y d oJ , .r nec . ario p.ar.1ha fo111
1ar los
metal ~ b ' sk s oro. ~ st~ ,p~Tación s rc~lliz.ad.:1
p >r l fut:go hen néf o. La .s •parndl m d~ lo sutil d
lo es -so debe hace - con I i do, añaidi ndo agua
e ntimi men t e; pu •, cuan t 11.1,, Lerr('JU1
1 s :sc011los
11~üerial, s, más d be.n ser diluidos y torz. d,)15
, i1
movcts Continú· 1.: te pro , hast.i qu , 1 alma
separ . se eü na e n el, uer 1 1c ,
2 ..
mp:roces ,(1 tero e re 1·z. úni -ª y . ,¡ d u siva me- 1-
t , 'O l1 Agua .
.Es la mism ri gua sobre In cual e1 1: •_íri tu d io
s movió rn [ princip io, mmdl L o e ridad ( ·uh
. obre 1afaz cl' lo pn fu:ndo,

21.
:'ada cosa r >vieney urg l ~qu llo en ]o ual v ,l-
v a :s '.r r u lt.'I...
J,o t erre. · l p:rovicn el la ti.er a; Loque p ,r ' ~nt-
a las shr 11, · t"S' nllt ni _o de fas tr Has;lo s¡:i i-
u ·l provi ~- Jel Espiri 1, reg a a Dios.

45
22.
Ahí d prin ·pi · n u nt · ,
l I'

L 111·r·1.' imi :.t' ic p o

2 '
1 n un1ll·1a. 1::i d· dt
He k l·i na. mtl z,,
1

aq i, Uo 1ue In ,at ir1\ ,.,. . in r liz· , 'ÍI h

a ruda J

·6
 kli n una n
a 11·dad

n Í: d-
sotros
l . u ··ambiim s · u -; r t: r1 ad e n hl· 'la,

r,.
n 1' coi 1· u s p1.· · t • 1Ar: '{n:um ! h
im.:omhu:s "ble.
D beri. , ~t r libre le n mn e
rructible , r la d l i1 1 apaz

1fueg d L pasión .

47
 26.
No b usqu es la semilla de la Piedra Pilosofal en los
Elementos.
Dicha semilla puede hallarse únicamente en el
Centro del fruto.

27.
La sustancia de la Piedra f.'ilosofal es mercu rial.
Aqu ell os <.¡uc son sabios la están buscand o en el
merc urio; el tonto intenta crearla con su propio cere-
bro vacío.

48
211.
La scmUla de llos me tales está en los metales, y los
metales nacen de sí m ismos.
El crecimiento de los metales es muy ll·nto; pero
puede ser acelerado añadiendo Paciencia.

29 .
Utiliza única mente Metales perfectos.
El me rcurio crudo, como el que suele encont rar-
se en los países t,uropeos, es perfecta mente inútil
para este trabajo. La sabiduría mundana es tontería a
los ojos del Señor.

49
 ,10.
,i\q11d lo que es duro y espeso debe v<1
lvcrse sutil y
Hno mcdinntc fa calcinación.
Se tr:1tt1de ~,n proceso muy doloroso y tedioso,
porque:es rwccsorio retirar inclu so la roí;,.del rr1al, y
esto hoct· que d corazón sangre, y que la nalurnleza
torturad:, grite

31.
La hase c.k-csti' :irte es reduci r el Corpm·a 9 /\rge11/1111,
Vivwn.
1'·:srn,'s fa S,ilutio Sulph1,risSapie11tiu111fo Mercu-
rio. Uno ciencia sin vida es una ciencia rnucna; un
intt'k'cto sin espiritualidad no es más que una luz fal-
sa y tomada prestada.

so
w

32.
En la solución, el solvente y lo disuelto deben pcrma-
mecer j untos. Debe hacerse que el Pu~go y el ag1rnM.!
mezclen. El P('n~nmiento y el Arnor deben permnnc·
ce_r unidos para ~icmprc.

33.
Si la scmWo no e5 tratada con calidez y humcd~d,
r á inservible.
si:?
El rrio 1-ontr~;, y la sequedad endur~ce el co1·a·1.ón,
pero el fü,,go del amor divino lo expande, y el Agua
<le l pensamiento di~uelvc los residuos.

5)
3.
L it rra no produ i no es humcd~" ·da n
r p tid._~oca iones.
Ninguna revel ación ti , n l. gar en fa os tl ·id.ad i
1

n , a tra ·és , la luz,

El h Jm imie111toti r1 1 arpo medi o de l gu ,

1 tien la ·.R1'd d m~s e rama.
1:l .e rpo mimo e~ 11n ·~r ) uc del p" n:,
Ll y ne, por Lo an o, lt.i í lidad más -,ercan,1 o 'l
l· 1 t1 te.
3' .•
To o lo eco tiende, .iru lm nle a: ~.r la hum
'aJ uc ne ·tapa , a H ··o en u
ons i :ud n,
El ne, part ir del cual s pr -d\.u;:en t d. s las
oso , p de o: y, por 0 • nl:>~·o fas lasco . a o ,-
1

i n n n interio 1 t nJ e· • l posibilidad 1
la dón.

87,
na . . ni lla es in a mi.:u o u
ea
TI y progresar un
cu rro ·. cua do1 porqu,. cl q .
p por ion 1mat a 'al a l de s· rro lo.
- 8.
·1 _alor ~ itivo p uce ru:ra n a
húmedo; 11 aquel ,a que ~ itá ccc pr oduce blanc ra;
y en aq il qu , e blan o produc un lor amatillo.
Prim ro es }¡ mort.ific ,d ,ón, luc.go Ia ccl in.ación,
y despm s ~]res 1 ndor d radu , ro ducido por a l 11.
<l I ueg sagr,;d q ue ilu mi:rn al ahna pu rificada .

8 ,,
~¡ fú do, inin em - pido i :., to,
,g , ha •e ser mod r 1

igual h umedo, lHdo, , 1,neo igero , t:ompr en :.vo,

errado, p n - n:te1 \ri , ine:. :nguibi y el u ·li-
z do p or t• nat ur al,eza .
Es el -\ 1 uo qu esd de dd ·eJo ara ·,end iLr
'tol a a l un1arllid d.

- .1
40,
odas la oper: ·0 116 d ben t r lug ar en un único
rt!d h:nte y sin r tirarl , del fu )_
La su a:i -· utiliz da ar l p -ep r ción e la
Piedra Filosofal deb eri· ser · Ullida únic arnen · · en
un o y "' er is c-rsad n varios lu ar . i
si ,

el or ha p,er lido su b d]o una vez¡.es dificil rec"'tl-

p rarl
41 .
El recipicnle debe estar bien CC'rrado.para que el agua
no salga de él y el aire no se e-Scape.D ebería estar
sellado hem,é ticamente, porq ue si el espíritu eticon-
lrara un lugar por donde csc~pa1; el poder se pcrdel'ío.
Además, deberla estar bien cerrado para que nada
e.\."lrañoe impuro pueda entrar y mezclarse con él.
En la puerta del laboralorio debería colocarse
siempre a un centinela con una lanza llameant e para
que exa mine a tod os los visita ntes, y para que recha-
ce a aque llos que no sean dignos de ser admitido s.
JJ,2
.
No abras el rec:piente hasta que el humedecimiento
haya sido com pleta do.
Si el recipiente se abre prematuramente, se pier·
de la mayor parte del trah i1jo.

57
43.
uanto mas se aLl nda

tau·n la
la forma p~ a r ib .rl'a.

cy. [w 1.ipid1, PI lloimpl!t)l'Urti,1-1mburgo-, 1Gi6

5
l.
La Alquin ia •••• , •••••••••• ,, .... .. .......... ;¡¡ 7
L-aprhna m a.l .r· . ..... ... . ........... . 19
E~ 1ego ;~ cr o ....... . ..... .. ..... , . . 25
[.as reglasdeJtraJ· J ' 1,JUÍI ll . . . . , , , . , . . 28
L. prá., de J Alqli'I i . . . • • • • • . . . . . . . 3

2.
Ax iom ata her mé k(I . .... .. . . . , , , , . , , , , . , . 3·