Tercer round y mis “otros datos”

Más sangre, aumento en la violencia, mayor corrupción, incremento en el despilfarro de recursos

públicos, mayor violación a los derechos humanos, mayor cantidad de pobreza, una mala
definición de los problemas, caída en la economía y el consumo, desempleo, escasez de alimentos,
entre otras cosas.

El desconocimiento de la importancia de los datos estadísticos para dar a conocer una realidad,
denota una falta imperiosa de preparación y seriedad. Solo con decir que “todo está bien“ o
“requetbién” para desaparecer todos los problemas que nos aquejan a todos los mexicanos en
cualquier rincón del país.

El no medir tiene implicaciones en todas las áreas de injerencia del gobierno. Eliminar mediciones
y evaluaciones solamente genera incertidumbre del rumbo que se toma. Han sido múltiples las
ocasiones en las que los datos han sido demeritados por el actual presidente de la república,
Andrés Manuel López Obrador; ahí podemos ver, como ejemplo, las críticas perentorias del
intervención del actual gobierno, los enfáticos señalamientos que hace el Consejo Nacional de
Evaluación de la Política Social (CONEVAL) respecto a los efectos –positivos o negativos- que
tienen o tendrán los programas sociales, los “buenos deseos” de crecer al 2 por ciento (aun
cuando la misma Secretaría de Hacienda tenía un pronóstico pesimista del crecimiento
económico), un pésimo manejo de la pandemia, las confrontación directa con los órganos
constitucionales autónomos, con los Orga

Ayer, de nueva cuenta, el presidente utilizó esa frase que enoja, frustra y menosprecia el trabajo
de todos los inmiscuidos en la generación, análisis y divulgación de cifras estadísticas. La
confrontación entre el periodista Jorge Ramos y Andrés Manuel López Obrador, considero, es el
sentir de millones de mexicanos, que, tras ver una realidad, un sentir y un contexto distinto al
mundo utópico que señala el presidente, nos sentimos desprotegidos, una actitud de un gobierno
indiferente a los problemas de siempre.

El NO aceptar una realidad nos está costando a todos los mexicanos. NO queremos escuchar
falsedades, NO buscamos verdades a medias ni acusaciones a los principales enemigos del actual
gobierno, NO queremos más promesas que no podrá cumplir. Coincido que el actual gobierno

Por el bien de TODOS los mexicanos, y esperando que en los tres años restantes se haga una
reflexión razonada de lo que ambicionamos los mexicanos. SI queremos que defina políticas
públicas eficientes y efectivas, que sea posible medir el impacto de las decisiones, SÍ buscamos
empatía gubernamental al contexto actual en el que vivimos, SÍ pretendemos respeto a las
instituciones, estados, municipios, SÍ a las decisiones que brinden una vida digna, SÍ confiamos en
que se actué de manera profesional, razonada y calculada y SÍ, en definitiva, queremos un México
pensante.