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Criaturas del olvido.

Sinopsis: Es un clásico policial detectivesco, ambientado en un mundo retro futurista


plagado de criaturas fantásticas. El amnésico protagonista busca los rastros de su identidad
mientras intenta detener a la temida criatura del olvido . Por suerte, para ello cuenta con
Julien, su valiente asistente quién lo guiará en su aventura.

Dr. Jauregui:
Aspecto físico: Hombre, aparenta 30 años, alto, cuerpo estilizado y entrenado. Posee un
brazo mecánico.
Aspecto social: estética retro futurista, no usa el clásico sombrero ni el sobretodo de
detective. Se lo ve desalineado.
Aspecto psicológico y motriz: Este personaje fue atacado con una sustancia que afectó su
cuerpo y mente. Perdió completamente su memoria y se mueve con dificultad.

Julien:
Aspecto físico: mujer, aparenta 20 años, usa el pelo atado.
Aspecto social: está vestida como la clásica secretaria o asistente, con un atuendo muy
prolijo. Usa lentes y el pelo atado.
Aspecto psicológico: es segura y valiente.

Dark Oblivion:
Aspecto físico: es una criatura de más de dos metros, mezcla entre sombra y planta (
referencia a la cosa del pantano). Libera de su cuerpo unas esporas que pueden destruir la
mente de sus oponentes.
Aspecto social: al ser una criatura tenemos libertad para crear este personaje.
Aspecto psicológico: irascible y temperamental.

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La luz, otra vez, la luz quemándome las retinas. Mi rostro está aplastado con el suelo.
Siento que es mejor así, mi instinto me dice que me quede acostado, que todo lo que toco
se destruye. Pero, a su vez, tengo la extraña sensación de que dejé algo inconcluso de vital
importancia, si solo pudiera recordar quién soy.

Un cosquilleo eléctrico recorre mi cuerpo y logro ponerme de rodillas, toda una victoria
contra la gravedad. Mis ojos también hacen su parte y comienzan a domar la incandescente
luz. ¿Qué clase de lugar es este? parece un despacho detectivesco sacado de una mala
película policial. Pero eso no es lo mas inquietante, esta plagado de extrañas reliquias, casi
como trofeos de batallas ganadas. Por un lado, lucen flamantes, lo que parecen ser unos
colmillos de mantícora, junto a la garra petrificada de un licántropo. Por el otro, una docena
de mutaciones, asépticamente guardadas en frascos con formol. En el escritorio un viejo
cartel apenas legible, creo que dice Dr. Jauregui. Recuerdo ese nombre como un dolor de
cabeza. Acaso…

- Se encuentra usted bien? Una voz de mujer inunda mis oídos.Vamos lo ayudaré a
levantarse.
- Si fuera tan amable podría decirme quién soy y que hago aquí?
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Veo como sus lentes caen lentamente por su nariz respingada y deja entrever esos grandes
ojos que me miran extrañados.

- pero cómo? no recuerda nada?


- Nada. reafirmé.
- Por donde empezar, usted es el Dr. Jauregui, el mayor detective paranormal de esta
ciudad y yo soy Julien, su ayudante personal.

Detective!!? me saqué la lotería, por qué no podía ser un banquero, o algunos de esos que
tienen todo sin hacer nada.

- Aunque no queríamos reconocerlo, ambos sabíamos que era posible que le


sucediera un episodio como este, durante las últimas semanas estuvo tras al rastro
de una criatura infernal, capaz de afectar los sensores neuronales de sus víctimas.
Seguramente, se expuso a una dosis muy alta de su toxina. Es un milagro que haya
podido volver hasta su despacho en esta condición.

Aunque mi cabeza no funcione mi cuerpo recuerda la sensación brutal de esas esporas


ahogándome, incendiando poco a poco mis recuerdos.

- Usted es el único que puede detenerlo, su brazo es el arma más poderosa para
exterminar a estas abominaciones.

Mierda! recién me doy cuenta que tengo un brazo mecánico, en cualquier momento me va a
explotar la cabeza.

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Julien hurgó en el bolsillo de su saco y tomó una suerte de micro computadora. Mientras yo
luchaba para mantenerme en pie, ella luchaba para hacerme recordar. Veo que abre en su
dispositivo lo que parece ser una foto antigua, la amplía deslizando sus dedos sobre la
pantalla y me expone el rostro de la criatura.
- Mire esta imagen, el es Dark Oblivion, el demonio que buscamos.
- Recuerdo su cara… una difícil de olvidar, un rostro enraizado, más planta que humano.
¿en qué clase de mundo me desperté?
- Haga memoria, estoy segura que usted fue el único que descubrió donde se encuentra la
criatura. Déjeme que conecte mi dispositivo a sus redes cognitivas, estoy seguro que esto lo
ayudará a recordar.

Conectó unos cables a la terminal nerviosa de mi brazo. De pronto todo pasó muy rápido,
empezaron a llegarme furtivos recuerdos de la guarida.

-Creo recordar el camino! dije con una certeza que me sorprendió más a mi que a ella.
Sin dudarlo empezamos con los preparativos. nos equipamos rápidamente, mi asistente me
dio una máscara de gas, teníamos que protegernos a toda costa de esas esporas.
Avanzamos con agilidad, aun amnésico podía ver con claridad cada paso. Conocía el
recorrido perfectamente, era seguro que ya había estado aqui antes. Mi asistente se
sorprendió al ver como podía sortear cada trampa, aunque yo también estaba impresionado
de su valor. ¿qué hacia una jovencita, en medio de esta noche helada, siguiéndome por
este laberinto putrefacto?

- Tenemos el factor sorpresa, dijo susurrando- ahora solo resta buscar un lugar alto
para poder tener un ataque perfecto.

Asentí con la cabeza y le mostré unas ramas que podían ser útiles para treparnos sin ser
detectados. Por fin logramos llegar a una suerte de balconada por donde podíamos ver a la
criatura, reposando en un gran trono forjado de joyas y botines. parece que no soy el único
que guarda trofeos de batalla.

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Siento que mis latidos se aceleran, trato de concentrarme para dar una ataque certero, pero
mi corazón amenaza con salir de mi cuerpo.
- tranquilo, estás listo!- me dice Julien tomando mi mano.
- QUIÉN ESTÁ AHÍ?!, resuena el grito del monstruo, que ahora nos apunta con sus
ojos amarillos, filosos como dos puntas de lanzas saliendo de la maleza.
- JÁUREGUI!! grita enfurecido!!

Ya no hay tiempo, saltó con todas mis fuerzas y sin saber muy bien lo que hago, despliego
mi brazo mecánico como una gran espada.
Dark oblivion apenas se logra incorporar. Logro atravesar su pecho como si fuera de
mantequilla.

- lo logré!!! sigo su caída con mi brazo terminando la mortal faena, la bestia libera su
última lluvia de esporas, como un occiso que deja salir su última bocanada.
- Fue más fácil de lo que creía Julién, la criatura apenas se defendió!
- excelente trabajo!- me contesta sonriendo.

Finalmente trato de sacar mi brazo de las vísceras de mi enemigo, pero de su interior


surgen una lianas que se aferran a mi.
Sus ojos vuelven a enfrentarme una vez más, pero ahora apagados, llorosos.
En su balbuceo presiento su dolor. - ¿POR QUÉ TU… AMIGO? me dice con sus últimas
palabras.

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Miro detrás de mi, Julién se saca los lentes y la mascara de gas.

-No mentí cuando dije que tu eras el único que podía hacerlo, lamentablemente para tí, si
mentí en todo lo demás. Me presento, soy la doctora JÁUREGUI cazadora de monstruos y
seres de la noche, como tu y tu difunto colega.
Entre el desconcierto y la furia quise atacarla, pero solo con tocar un botón de su micro
computadora inhabilito mi brazo mecánico, haciendo que pese una tonelada.
Entenderás que no podía arriesgarme, en estos casos hay que dominar siempre a la pata
más débil, y usar sus fortalezas en su contra.

Los sujetos como tu se creen muy poderosos, pero son crédulos y torpes. Fue muy fácil
recopilar las esporas de Dark Oblivion y usarlas en tu contra. Teniéndote de mi lado sabía
que podría manipularte para que me llevaras a él… pero aún así quería estar segura.

No pude hackear tu brazo, asi que fue de gran ayuda que me dieras acceso a tus sistema
para vincular tus funciones vitales a mi dispositivo. Ahora, irás a prisión a pagar por todos
tus delitos, incluído el asesinato de tu pobre secuaz, al cual vi como masacraste.
Los recuerdos son un tornado en mi cabeza, ¿esa era mi última misión? ¿vencer a
Jáuregui?, si era así no solo fallé en el intento, sino que dejé que jugara con mi mente.
Y por si aún no recuerdas quién eres, me dice mientras me muestra por segunda vez la foto
de Dark Oblivion en la pantalla de su computadora, quizá esto pueda refrescarlo.
Estoy brutalmente mareado, pero se lo que viene, ahora recuerdo bien esa foto. La imagen
se aleja lentamente y deja ver un plano más amplio, en el cual aparezco yo, con unos
cuantos años menos, posando orgullosos, con mi amigo, mi hermano mutante celebrando el
éxito de nuestro primer gran atraco.

Fin.

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