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Universidad de Guadalajara (UDG),

Centro Universitario de las Ciencias de la Salud (CUCS)

Salud laboral

Ensayo película “La verdad oculta”


Alumna: Bernal Solís Eunice Alejandra: 216414468
B:8 Licenciatura en Médico Cirujano y Partero (MCPE)
Profesor:
Dr. José Figueroa Campos
Fecha de entrega: 17-Noviembre-2022
La encefalopatía traumática crónica se trata de un trastorno degenerativo producto
de traumatismos constantes de diferente índole, se le puede considerar en la
clasificación de síndromes cerebrales orgánicos ligados a deportes de contacto.
Lesiones cerebrales similares ya habían sido descritas de forma previa en el mundo
del deporte, retrospectivamente nos remontamos a 1954 donde aparece la primera
publicación sobre lesiones degenerativas sufridas por boxeadores profesionales y
aficionados. (Brandenburg y Hallervorden. 1954.) El hallazgo del Dr. Omalu no se
asemejaba a los cambios histopatológicos propios de la enfermedad por Alzheimer
temprano, cosa que le hizo preguntarse el porqué de muertes tan repentinas de ex
jugadores de futbol americano aparentemente sanos. Es en esta parte en particular
que nos preguntamos sobre que versa el nexo de este caso con la salud laboral, a
lo cual podemos ver que esta y otra clase de lesiones vienen implícitos como
riesgos laborales para los jugadores de futbol americano y como igualmente
aunque no fácilmente podemos identificar la metodología de la higiene industrial a
lo largo del filme, en donde el protagonista y su equipo se dedican a identificar el
factor de riesgo, que son los traumas craneales constantemente repetidos, lo miden
y evalúan por medio de investigación científica y lo controlan dando a conocer sus
resultados ante la comunidad científica y deportiva. Identificando los tipos de
riesgos a los que se ven expuestos los jugadores de la NFL podemos identificar en
físicos aquellos por vibración debido a una aceleración y desaceleración brusca en
los impactos craneales repetidos y temperaturas extremas, químicos en cuanto a
situaciones de toxicomanías secundarias y posible farmacodependencia por
consumo de fármacos para paliar las molestias o lesiones producidas por el juego,
en cuanto a peligros biológicos quizá no precisamente una patología laboral por
algún microorganismo en específico, pero sí diversas entidades patológicas
derivado del desgaste físico al que son sometidos, podríamos considerar que a los
agentes de mayor exposición podrían ser los ergonómicos como postura forzadas,
movimientos de repetición y de fuerza excesiva, posiciones estacionaria, presión
directa y estrés laboral.
Por otra parte, un aspecto igualmente importante es que los hallazgos de este
galeno marcan un hito en la medicina del deporte, forzando a la NFL a tomar cartas
en el asunto sobre la seguridad de los jugadores una vez se vieron expuestos y no
pudieron desacreditar el trabajo del Dr. Bennet como lo hicieron en ocasiones
anteriores, sin embargo hoy en día podemos seguir viendo de manera cuestionable
las “medidas” que haya adoptado la liga de futbol más tomando en cuenta el masivo
interés económico que representa para Estado Unidos y el aporte que tiene al PIB
nacional cada año. Volviendo nuevamente al Dr. Bennet Omalu podemos decir que
su trabajo ha contado con el reconocimiento de instituciones y academias médicas
reconocidas, algo que confiere un peso importante es que sus investigaciones han
tenido reproducibilidad en múltiples ocasiones en pacientes con condiciones
similares, varones, ex jugadores de futbol americano, de mediana edad y por
supuesto fallecidos en circunstancias dramáticas y repentinas, no obstante el
antecedente de trastornos neuropsiquiátricos al tiempo de haberse retirado del
campo de juego. Todo lo anterior como evidencia de que muy difícilmente el caso
de este primer jugador de futbol americano Mike Webster se tratase de un hecho
aislado, cosa que se planteó en la primera publicación sobre este caso en 2005
(Omalu. et al. 2005). Sin embargo, a pesar de que esta primera publicación en la
parte de conclusiones dice de manera explícita precisamente que ese estudio por
sí solo no representa un vínculo causal estrecho entre el futbol profesional y el CTE
y se requiere de investigación cognitiva integral, por lo cual dicho informe se
considera un caso centinela epidemiológico. Lo anterior me hace pensar que dicha
conclusión fue agregada posteriormente al conflicto con la NFL o que en su defecto
los ejecutivos de dicha liga cuenten con una comprensión lectora deficiente para su
nivel educativo. A manera de conclusión queda agregar que tristemente este caso
como muchos otros de divulgación científica tratan de ser censurados todos los
días debido a intereses que van más allá del conocimiento científico y la salud de
la población, esto por parte de organizaciones poderosas e influyentes, este a pesar
de haber tenido un desenlace satisfactorio no solo para el Dr. Omalu y compañía si
no para la comunidad científica, es uno de pocos que han podido ver la luz, ya sea
por lo contundente de las evidencias y por no quedarle de otra a la liga más que
aceptar su responsabilidad hacia sus jugadores. Quizá por el hecho de que hace
20 años aproximadamente el internet y las redes sociales no tenían el peso para
nuestra sociedad como hoy en día este caso en particular hasta nuestros días no
resulta ser del dominio público a pesar de su relevancia.

• Landesman P. (Director). (2015). Concussion (film). Columbia Pictures.


• Omalu, B. I., DeKosky, S. T., Minster, R. L., Kamboh, M. I., Hamilton, R. L., &
Wecht, C. H. (2005). Chronic Traumatic Encephalopathy in a National Football
League Player. Neurosurgery, 57(1), 128– 134. doi:10.1227/01.neu.0000163407.

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