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Dialogo con Simeón

Leonardo Castro
INTRODUCCION
Hace tiempo me venía dando vueltas la idea de escribir un libro acerca de los
temas esenciales de la vida. Dejar un legado para las generaciones futuras algo permita
contribuir al desarrollo de una sociedad mejor. No se trata de tener la razón en cada uno
de los capítulos, sino que los mismos permitan conocer cada ítem en cuestión.
La idea de ello es que a los 44 años de edad uno se encuentra lo suficientemente
maduro para poder abarcar distintas cuestiones esenciales de la vida, pero también con
la fuerza suficiente para poder plasmarlo en un papel.
Una mañana me encontraba de viaje por la Amazonia Boliviana, mas
precisamente en Trinidad cuando la idea de escribir el libro comenzó hacerse más
fuerte. Estaba en un hotel de estilo colonial unos 30 grados de temperatura y observando
sus galerías con grandes arcadas, típica de ese tipo de construcciones, cuando me cerro
la idea de cómo hacer este libro.
Fue así que empecé a ver cuáles serían los contenidos a tratar, la forma de
abordarlos y las conclusiones que podría sacar de cada uno de ellos. Me intereso la idea
de que fuera un libro donde existan personajes que hablen entre si sobre estos temas. De
los cuales uno seria el maestro y otro el discípulo. Donde el aprendiz haría las preguntas
y el sabio maestro respondería con el desarrollo del mismo, luego le daría el ejemplo en
un cuento y finalizaría con una conclusión y una frase final.
Para finalizar quiero agradecer al Espíritu Santo que me dio la Fortaleza y la
iluminación para poder escribir en estas páginas, a mis padres que me dieron las bases
para la educación y para no claudicar en los momentos de tempestad. También
al……….que me ayudo en la confección de estas páginas. Que este libro sea para
alimentar el alma y el espíritu de todo aquel que intenta superarse en esta vida.

La Paz, Bolivia 12 de Diciembre de 2016


Día de la solemnidad de Nuestra Señora de Guadalupe Patrona de América

LOS PERSONAJES
Los personajes de este libro son dos. Simeón el maestro y Efraín el discípulo.
Estos nombres tienen su significado que ahora voy a ir contando.
Simeón es un Maestro que ha sabido materializar su experiencia de vida con su
lectura apasionada por la Filosofía, Teología, la Santa Biblia y otros libros más que a lo
largo de su vida lo fueron enriqueciendo de sabiduría.
El nombre Simeón que bíblicamente significa Dios ha oído, fue elegido porque
hace muchos años leí un libro bastante interesante que me cambio la forma de ver a las
personas. Ese libro se llama la Paradoja de James Hunter y trata sobre el Liderazgo. En
ese libro un monje llamado Simeón en un retiro en un monasterio, enseña las técnicas
del verdadero liderazgo. Pero lo que más me impacto para ponerle este nombre es que
Simeón fue quien profetizo en el templo cuando vio a Jesús donde dijo que sus ojos
habían visto al Salvador, también le dijo a la Virgen María que una espada atravesara tu
alma.
Simeón siempre creyó que debía transmitir los conocimientos, pero como buen
sabio sabía que algún día Dios le uniría los destinos con quien estuviera en condiciones
de escuchar. Una mañana cálida del verano paso un joven con su carro ofreciendo leña.
Simeón al obsérvalo sintió que era el joven señalado.
Buenos días senior dijo el joven
Buenos días contesto Simeón
¿Me compraría leña?
¿De dónde vienes hijo? Pregunto Simeón
Vengo del Monte allí vivo con mi familia
Ese día Simeón le compro leña y le dijo que pasara dos veces a la semana. A pesar de su
entusiasmo Simeón se sintió frustrado dado que creyó que no solo era la persona
señalada sino también el día señalado. Pero como el hombre no maneja los designios de
Dios, Efraín marcho con solo el dialogo de una venta comercial
Durante algunas semanas Efraín paso vendiendo la leña como le había pedido Simeón.
Una mañana que debía llegar Efraín el joven no apareció como era costumbre y el
Anciano pensó que seguramente había tenido algún percance con la recolección de la
leña. Al cabo de varias semanas y que el Joven no volvía con su carro y la leña pensó
que ya no vendría.
Una mañana nuevamente el joven apareció por la casa del Anciano y este lo saludo
entusiasmado por el encuentro y le pregunto qué le había pasado. Efraín le contesto con
una pregunta ¿Dígame buen hombre las cosas suceden por causalidad o porque deben
pasar? Porque la casualidad no la entiendo, pero si hay cosas que deben pasar por algo
podría llegar a comprenderlas. En ese momento Simeón aprendió la primera lección.
Las cosas sucederán cuando deban suceder según el Plan de Dios y no como yo quiero
que sucedan. El vio el primer día a quien podría llegar a enseñarle sus conocimientos,
pero creyó ver en ese momento el mismo día, pero no fue así, fue cuando el
todopoderoso dijo este es el día, día en que la otra persona estará en condiciones de
escuchar lo que quiero enseñar.
Cuando escribía a los personajes recibí el llamado de una amiga de Buenos Aires que
me conto una linda experiencia. Ella una mujer de unos 60 años había enviudado hacia
más de dos. Me conto que luego de 45 años se había reencontrado con su primer novio.
Ella me conto que durante dos oportunidades su compañero de la adolescencia le había
enviado un correo para saludarla y saber que era de su vida. Pero esos correos no fueron
visto por ella, hasta el momento en que su hija al configurar su nuevo teléfono le dijo
que tenía aun dos correos sin abrir con diferencias de un año cada uno. Al
decepcionarlos constato que se traba de Humberto su primer novio. Tomo enseguida
contacto con Él y lograron verse y hablar cada uno de sus vidas. Entonces ella me dice,
me perdí todo este tiempo que podría haber aprovechado para hablar. Le conteste al
igual que la lección que aprendió Simeón, quizás en esos momentos que llegaron los
correos no estabas en condición de tomarlos tal cual los tomaste ahora y solo hubieran
sido unos correos más de todos los que no llegan a nada. Ahora estabas preparada para
leerlos, comprenderlo y poder aceptar una amistad que quizás antes estabas verde como
el fruto para poder saborear los buenos gustos de la vida.
Simeón le dijo a Efraín ven mañana y hablaremos.
Tras un breve dialogo comercial el Anciano y el joven comenzaron a dialogar sobre las
cuestiones de la vida. Días mas tarde Simeón y Efraín se encontraban en la ladera
superior del cerro para continuar con sus charlas.
Efraín un joven entusiasta interesado por aprender de la vida, extrovertido y de
carácter afable había encontrado quien le podría responder a las preguntas que durante
no muchos años habría querido obtener la respuesta.
El nombre Efraín nació cuando me encontraba leyendo la liturgia de las horas y
ese día el jueves 01 de diciembre de 2016, la segunda lectura del citado Oficio fue una
lectura de los dentarios de San Efrén. Comencé a buscar información sobre este Santo y
descubrí que en castellano Efrén es Efraín el nombre de mi abuelo paterno al cual no
conocí ya que falleció cuando mi padre tenía apenas 5 años.
San Efrén fue un Diacono, primer orden Sagrado de la Iglesia Católica, luego
siguen el Sacerdote como segundo orden y finalmente los obispos como tercer orden.
Efrén de ahora en adelante Efraín significa abundante en frutos. Este Santo es el único
sirio venerado. Fue Diacono de la Iglesia de Edesa. Dios le otorgo a través del Espíritu
Santo el don de la enseñanza y sus obras fueron famosas por lo inspirador de sus
sermones. Escribió alrededor de 400 himnos y por ello le valió el título de ‘Arpa de
Espíritu Santo”
San Efraín en sus primeros años de juventud pensaba que todo lo que sucedía era
por la casualidad, pero una circunstancia en su vida cambio su forma de pensar para
siempre. En una oportunidad Efraín fue acusado de robar ovejas y a pesar de ser
completamente inocente el juez de su pueblo lo hizo encarcelar. Durante su cautiverio
pudo apreciar en serios como por otros pecados estaba siendo castigado que si
realmente había cometido.
Pasado el tiempo Efraín fue liberado de la cárcel y comprendió que las cosas no
suceden por casualidad sino por él Senior. Cambio la casualidad por la providencia que
todo es obra de Dios. A partir de allí comenzó un profundo camino de transformación.
Nuestro Efraín hijo de Padres muy humildes e inmigrantes españoles se habían
radicado en Gualeguaychu Entre Ríos y dado que eran varios hermanos tuvo que salir a
trabajar de muy joven para ayudar en la casa.
Desde aquel día Simeón y Efraín se encontraban cada mañana para dialogar
sobre las cuestiones fundamentales de la vida, cuestiones que a Efraín durante largo
tiempo le venían haciendo ruido en su cabeza.
A pesar que fueron hablando el discípulo no le contó desde el principio que fue
lo que le hizo ausentar varios días de su recorrido llevando lena, algo que quizás Simeón
deberá ir descubriendo con el correr de las paginas.

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