Está en la página 1de 2

LEVITICO 5

Bienvenidos a esta nueva edición de reavivados por su palabra hoy meditaremos en el capítulo
número 5 del libro del levítico continuamos hablando acerca del tema de las ofrendas en esta
ocasión hablaremos de la ofrenda de la confesión y el perdón se le conoce también como la
ofrenda de la culpa la finalidad de esta ofrenda era que el pecador recibiera el perdón que la culpa
desapareciera de su corazón pero transferir esa culpa a un animal inocente y éste pagar las
consecuencias del pecado es decir la muerte tomemos nuestra biblia juntos y descubramos las
lecciones que nos deja el capítulo de este día notemos que el versículo 1 comienza con un juicio y
una persona testificando en favor o en contra de otra el versículo 1 nos dice si alguno es llamado a
testificar y peca por haber visto o haber oído algo no lo hubiera denunciado cargará su pecado
aquí estamos hablando de contar algo que vimos de otra persona permíteme resaltar un principio
cuando tú sabes algo de alguien no precisamente tienes que correr a contárselo a todas las
personas hay un principio que el señor estableció desde mateo capítulo 18 y es que el señor dice
que si tú conoces la falta de alguien de habla con esa persona en privado si continúa con su
pecado entonces después trae uno o dos testigos si éste continúa en el pecado entonces ahora sí
puedes mencionarlo al pleno de la iglesia y esto con el fin no de dañar a una persona sino de
restaurarla si hacemos volver de sus pecados a un hermano habremos ganado su alma para el
reino de los cielos pero es importante también que a la hora de que nosotros a mont estemos o
señalemos el pecado de alguien no para juzgarlos sino para ayudarlo tengamos la autoridad moral
y espiritual para hacerlo un segundo principio lo encontramos en los versículos 2 y 3 y habla que si
alguien sin darse cuenta toca algo se vuelve impuro hablando de algunos animales pero también el
versículo 3 dice que si alguien toca algo inmundo se contamina y después llega a saberlo este será
culpable hay un principio que dice que dios perdona mi ignorancia pero no perdona mi falta de
integridad no podemos justificar que no sabíamos que estábamos cometiendo un pecado sino
simplemente debemos reconocer que hemos cometido una falta pero cuando hicimos algo
deliberadamente o conscientemente y negamos haberlo hecho estamos faltando a la integridad y
es importante entonces que nosotros seamos íntegros al señor y reconozcamos nuestras faltas un
tercer principio lo encontramos en los versos 7 y 11 ambos versículos comienzan con la siguiente
frase si no tuviese suficiente para un cordero traerá dos tórtolas y el versículo 11 si no tuviera
suficiente para dos tórtolas entonces traerá dos pichones y el que pecó traerá si no tienen las
tórtolas o los pichones trae a la décima parte de una efe de flor de harina aquí podemos ver algo
importante y es que dios no excluye a alguien que no tenga los recursos para ofrecer algo es decir
al señor realmente no le importa tanto la cantidad sino la calidad recordemos que en alguna
ocasión una viuda colocó dos moneditas en la tesorería del templo los ricos daban muchísimo
dinero pero jesús dijo que esta mujer había dado lo único que tenía y había dado más que aquellos
que habían dado mayor cantidad al señor repetimos nuevamente le importa la calidad y no la
cantidad un cuarto principio lo encontramos en el versículo 5 el que peque en alguna cosa deberá
confesar aquello en que pecó cada vez que nosotros cometemos un pecado y queremos buscar el
perdón y el favor divino no debemos hacerlo buscando oraciones o palabras elocuentes para
justificar nuestra falta no debemos andarnos por las ramas recordemos que el señor sabe
exactamente lo que hicimos incluso lo que hemos de hacer simplemente reconozcamos
puntualmente en qué fallamos y confesémoslo al señor es importante que reconozcamos aquello
en lo que hemos pecado y un quinto principio lo encontramos en el verso 17 finalmente si una
persona sin darse cuenta peca o comete algo prohibido por el mandamiento del señor será
culpable y llevará su culpa cuántas veces nosotros hemos cometido un error y lo que hacemos es
justificar nos y muchas veces culpamos a otros recuerda que siempre tú y yo debemos cargar con
las consecuencias de nuestras propias acciones no culpes a nadie más finalmente el haber cedido a
la tentación y al pecado es única y exclusivamente tu decisión es por eso que debes hacerte
responsable de las acciones que has cometido y sobre todo de las consecuencias que ésto te
traerá así que es importante que hoy para finalizar recordemos que cada una de estas cosas nos
recuerdan número uno la confesión número dos nos recuerdan la expiación y número tres nos
recuerda la culpa cómo te sientes en este momento culpable por haber cometido algún pecado
sientes que de alguna manera estás sumido bajo la oscuridad de la culpa el señor en esta hora
desea que tú seas libertado de ella pero recuerda cuál era el principio que mencionamos cuando
comenzamos este capítulo de hoy el pecador transfería su culpa al animal inocente sabes que eso
es lo mismo que tú y yo hacemos cuando confesamos nuestros pecados y nuestras faltas
transferimos nuestra culpabilidad a cristo jesús quien murió por amor a cada uno de nosotros
siendo inocente él asumió la culpa de nuestras acciones definitivamente tú y yo no tenemos nada
que darle al señor como para pagarle lo que él hizo por cada uno de nosotros lo único que
podemos hacer hoy es decirle señor gracias muchas gracias regalarme el perdón y quitar la culpa
de mi corazón jesus recordemos es el cordero de dios que quita el pecado del mundo alabado sea
el nombre de dios por jesucristo no te parece tal si hoy hacemos una oración de gratitud a dios por
ese maravilloso don que nos dio a través de jesús oremos padre te damos gracias en esta hora
gracias porque tú eres un dios bueno un dios perdonador un dios paciente un dios que está
dispuesto a siempre perdonarnos cada vez que nos presentamos a ti con un corazón arrepentido
hoy queremos una vez más pedirte que quites la culpa de nuestras vidas y que nos otorguen el
perdón en cristo jesús te lo pedimos amén

También podría gustarte