Está en la página 1de 5

Batalla de Santa

Inés
Batalla venezolana

Est e ar t ículo o sección t iene referencias, pero necesit a más para complement ar su
verificabilidad.

La batalla de Santa Inés, librada el 10 de diciembre de 1859 en el est ado Barinas, Venezuela, fue
una de las acciones más import ant es y decisivas de la Guerra Federal, en la que t riunfaron los
federalist as al mando del general Ezequiel Zamora, las cuales se enfrent aron cont ra las fuerzas
del gobierno conservador dirigidas por el general Pedro Est anislao Ramos.[3] ​
Batalla de Santa Inés

Guerra Federal

Parte de Guerra Federal

Plano de la Batalla de Santa Inés

Fecha 10 de diciembre de 1859

Lugar Estado Barinas, Venezuela

Result ado Victoria federalista

Beligerantes

Rebeldes federales Gobierno conservador

Comandantes
Ezequiel Zamora Pedro Estanislao Ramos

Fuerzas en combate

2.500 soldados[1] ​ 3.200 soldados[1] ​

Bajas

800 muertos[1] ​y 1.400 heridos y prisioneros[2] ​ 200 muertos[1] ​

Antecedentes

Luego de ser proclamado comandant e en jefe de las t ropas insurrect as, ahora bajo el nombre
aut oproclamado de Ejércit o Federal, el general Ezequiel Zamora unió fuerzas con las t ropas del
general Juan Crisóst omo Falcón y se movilizaron hacia la población de Barinas. Las t ropas
federales venían perseguidas por el ejércit o conservador, comandado por el general Pedro
Est anislao Ramos, quien había recibido la encomienda del gobierno para “perseguirlos y
derrot arlos”.

Las t ropas combinadas de los generales Zamora y Falcón se concent raron en la población de
Sant a Inés, a 36 km de dist ancia de la ciudad de Barinas en lado est e del río Sant o Domingo. El 9
de diciembre de 1859 se consolidó en Sant a Inés el ejércit o liberal, y se t erminaron las maniobras
de reagrupamient o para plant ar cara a las t ropas del general Pedro Est anislao Ramos.

Preparativos

De cara a la inminent e bat alla, el general Zamora plant eó una est rat egia de “falsa ret irada” o
ret irada t áct ica. La idea del general Zamora era debilit ar la línea front al, fingiendo una ret irada,
para que las t ropas gubernament ales cargaran a t ravés de la aparent e debilidad, y luego lanzar un
cont raat aque envolvent e para dest ruirlas.

Para cumplir con est e plan el general Zamora t omó las siguient es medidas: se crearía una
t rinchera de avanzada en la zona de Las Palmas, comandada por los coroneles Jesús Hernández
Hernández y León Hernández. Det rás de ellos, cerca de un molino y un caserío, la primera línea de
t rincheras de infant ería sería organizada por el general Ignacio Ort iz, la segunda línea de
t rincheras est aría 900 met ros det rás de la primera y sería comandada por el general Rafael Pet it ,
la t ercera línea de t rincheras est aría 800 met ros det rás de la segunda, bajo comando del general
Pedro Aranguren, finalment e la reserva est aría a ot ros 800 met ros de dist ancia, en la población
de Sant a Inés.

Según el plan del General Zamora, al iniciarse las host ilidades en la línea más avanzada, la
t rinchera de Las Palmas, las t ropas liberales ofrecerían una leve resist encia a las t ropas
gubernament ales, y se ret irarían de inmediat o a la primera línea de t rincheras. Allí las fuerzas
combinadas de la avanzadilla y la primera línea de infant ería volverían a ofrecer una falsa
resist encia y se replegarían a la segunda línea de t rincheras. El proceso debía repet irse con la
t ercera y cuart a. Hast a que las t ropas cent rales llegasen agot adas y desprevenidas a Sant a Inés,
donde las fuerzas combinadas con la reserva les darían el golpe de gracia.[4] ​

Batalla

El 10 de diciembre de 1859 comenzaron las host ilidades. El at aque de las t ropas


gubernament ales fue dirigido por el Coronel Jelambi quién cruzó el río Sant o Domingo y abrió
fuego sobre la avanzadilla de t rincheras en Las Palmas. Allí las t ropas liberales ejecut aron el plan
del general Zamora, ofreciendo una falsa resist encia y replegándose hacia el sist ema de
t rincheras en la secuencia programada.

El plan salió de acuerdo a lo plant eado por el general Zamora. Las t ropas gubernament ales
avanzaron sin saber que las t ropas liberales se fort alecían al replegarse a cada nuevo sist ema de
t rinchera. No fueron t ampoco capaces, ninguno de los comandant es gubernament ales, de
percat arse del número real de efect ivos que amasaba Zamora. Cuando ent ró la noche y las
t ropas del ejércit o gubernament al t oparon con la últ ima t rinchera, el general Zamora dio la orden
de present ar verdadera bat alla. Las fuerzas liberales que se habían escondido y replegado en el
sist ema de t rincheras aparecieron envolviendo a las t ropas gubernament ales, causándoles
grandes pérdidas. Ni siquiera con el apoyo de la art illería las t ropas gubernament ales pudieron
t omar la últ ima línea de t rincheras. Temiendo que fueran aniquiladas por complet o, y viendo la
inut ilidad de luchar cont ra el ejércit o liberal que ahora les rodeaba, las t ropas gubernament ales
fueron ordenadas a desist ir y ret irarse.

Consecuencias

La vict oria en Sant a Inés le dio fuerzas a los generales Juan Crisóst omo Falcón y Ezequiel
Zamora para sit iar Barinas, impidiendo a las fuerzas gubernament ales saciar su hambre y sed, curar
a los heridos o reponer suminist ros. El 24 de diciembre ya sin posibilidades de resist ir y enfermos,
el ejércit o cent ralist a decide abandonar la ciudad sin ser vist os. Ent erados de la huida, los
federales iniciaron la persecución, alcanzándoles a t res leguas de Barinas, librándose allí el
combat e “El Carozo”, donde los federales sufrieron una derrot a t áct ica, pues se les acabaron las
municiones.

A la espera de refuerzos, el general Zamora, para impedir at aques enemigos a los que no podían
responder por falt a de municiones, prendió fuego a los pajonales que los separaban de ellos,
impidiéndoles at acar y permit iendo la espera de sus fuerzas de apoyo, con las cuales pudo
reiniciar la persecución. En las orillas del río Curbat í alcanzaron a los oficialist as, quienes se
dispersaron, presas del pánico.

Los federales ingresaron en Barinas y decidieron t omar Caracas, para lo cual se dirigieron primero
hacia San Carlos, pensando luego pasar a Valencia, para finalment e culminar en la ansiada capit al.
Zamora, t raicionado por sus propios hombres, posiblement e Falcón y Guzmán Blanco, fue
asesinado el 10 de enero de 1860. Aún no exist e claridad sobre est e hecho.

Cultura popular

Las novelas Cant aclaro (1934) y Pobre Negro (1937) escrit as por Rómulo Gallegos dan una
aproximación posit ivist a y realist a del alzamient o campesino de 1846-1847 y de la Guerra
Federal. En uno de los párrafos de la novela Cant aclaro, el diablo, que simula a la oligarquía
conservadora, ret a a Florent ino en verse en Sant a Inés para un cont rapunt eo.[5] ​

Bibliografía

Landaet a Rosales, Manuel (1903). Los héroes de Santa Inés. Caracas: Imprent a Bolivar.

Bencomo Barrios, Héct or. «Sant a Inés, bat alla de» (ht t p://bibliofep.fundacionempresaspolar.or
g/dhv/ent radas/s/sant a-ines-bat alla-de/) . Diccionario de Historia de Venezuela. Fundación
Polar. Consult ado el 15 de agost o de 2018.

Referencias

También podría gustarte