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El embarazo ha sido un problema mundial. Observamos que el 40% de los adolescentes ya han
tenido relaciones sexuales. Solo el 47% de los hombres y el 32% de las mujeres tienen un nivel
socioeconómico bajo (63%), medio (49%) y alto (17%).
Causa:
El embarazo adolescente se produce como consecuencia de las relaciones sexuales entre jóvenes sin
métodos anticonceptivos. De ahí que se considere un embarazo no planeado o no planeado.
El uso de bebidas alcohólicas y drogas también es una causa de embarazo precoz. Esto se debe a
que, cuando se toma por vía oral o se administra, reduce los efectos inhibitorios del cuerpo y de
alguna manera estimula la actividad sexual.
Disfunción en el núcleo familiar (puede huir del hogar; los adolescentes a veces se sienten
amenazados por la violencia y el incesto).
Problemas físicos:
Las niñas embarazadas corren el riesgo de padecer anemia severa y complicaciones durante el parto
debido a su excesiva juventud y falta de conocimiento y desarrollo. Debido al alto riesgo de aborto
espontáneo, también se considera un embarazo de alto riesgo.
La adolescencia nace con tasas muy altas de mortalidad neonatal, y los niños tienen más
probabilidades de tener defectos de nacimiento y problemas de desarrollo, tanto físicos como
mentales.
Problemas sociales:
Las adolescentes embarazadas a menudo no tienen la oportunidad de continuar su educación, ya
que se convierten en madres demasiado pronto y se ven obligadas a sostener a un niño recién
nacido en sus brazos. Los recursos económicos también son muy escasos y este es un futuro muy
difícil tanto para la madre como para el niño.
Otra consecuencia del alto riesgo de este tipo de embarazos. A esta edad no se conocen signos de
embarazo, lo que retrasa el diagnóstico y, una vez confirmado, el estigma que reciben les dificulta la
comunicación con la familia y otras personas.
Problemas psicológicos:
El embarazo a una edad temprana puede provocar problemas de salud mental debido a la depresión
y la depresión. Limita la imposibilidad de llevar una vida normal en función de la edad y los amigos.
También suelen sentirse muy culpables durante el embarazo, lo que puede provocar una pérdida
importante de autoestima, aumentando el riesgo tanto para ellas como para el bebé.