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Armaduras.

Lorica segmentata.
La lorica segmentata era un tipo de armadura utilizada principalmente
durante la República romana y también hasta el siglo iii en el Imperio
romano. El nombre latino, sin embargo, data del siglo xvi (se desconoce el
nombre que se le daba en la antigüedad).
La armadura consistía en una serie de bandas de hierro o acero atadas a
tiras de cuero internas. Las bandas se colocaban de forma horizontal al
torso del soldado, sobreponiéndose las unas a las otras en sentido
descendente, y rodeaban el cuerpo del soldado en dos mitades laterales que
quedaban atadas en la parte frontal y trasera. La parte superior del cuerpo y
los hombros quedaban protegidos por tiras adicionales para los hombros y
placas para la protección del pecho.
La forma de la armadura permitía que fuese almacenada de forma muy
compacta, puesto que era posible separarla en cuatro secciones. Durante la
época en que fue usada recibió también varias modificaciones, siendo los
tipos más reconocidos el Kalkriese (c. 20 a. C. a 50 d. C.), el Corbridge (c.
40 a 120), y el Newstead ((c. 120 a 250).
Hasta dónde se tiene conocimiento, solamente los legionarios, la infantería
pesada de las legiones romanas, y los soldados de la Guardia Pretoriana
utilizaban la lorica segmentata. Las tropas auxiliares solían utilizar la lorica
hamata, que era de cota de malla, o la lorica squamata, una armadura de
escamas.
Lorica hamata
Artículo principal: Lorica hamata

Actor equipado con la lorica hamata


La lorica hamata es un tipo de armadura de cota de malla utilizada durante
la república romana en sus últimos años, así como el tipo estándar de
armadura para las tropas de apoyo o auxiliares. Solían estar fabricadas con
bronce o hierro. Alternaba filas de anillos verticales y horizontales
entrelazados entre sí y que resultaban en una armadura muy flexible y
resistente. Cada anillo tenía un diámetro interno de unos 5 mm y uno
externo de unos 7.

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Los hombros de la lorica hamata estaban protegidos mediante unas
coberturas similares a los linothorax griegos que abarcaban desde la mitad
de la espalda a la parte frontal del torso, y conectadas con enganches de
metal similares a garfios. Una lorica hamata podía estar compuesta por
varios miles de anillos de metal.

La tecnología para la fabricación de este tipo de cota de malla es posible


que hubiese sido adquirida de los pueblos celtas. Había varias versiones de
este tipo de armadura que se especializaban en función del tipo de tropa y
sus actividades. Así, podía haber diferentes clases de armadura para los
exploradores, la caballería o los lanceros.

Aunque este tipo de armaduras implicaban un gran esfuerzo de mano de


obra para su fabricación, se cree que con un buen mantenimiento podían ser
usadas de forma continuada durante décadas. Sin embargo, los ensayos
modernos han demostrado que este tipo de armadura suponía una
protección muy débil frente a los ataques con flechas.

Lorica squamata.
La lorica squamata es un tipo de armadura de escamas utilizada durante la
república y en periodos posteriores. Estaba formada por pequeñas escamas
de metal cosidas para formar la armadura. Se suele ver en ilustraciones de
portadores de estandartes, músicos, centuriones, tropas de caballería e
incluso en imágenes de infantería auxiliar, aunque también podían portarlas
los legionarios regulares. Este tipo de armadura tenía la misma forma que
la lorica hamata, con la misma longitud y las coberturas de los hombros.
Las escamas individuales podían ser de hierro o de bronce, e incluso podían
alternarse los metales en la misma armadura. Podían recibir también algún
baño que les protegiese de la oxidación (nos ha llegado un fragmento de
armadura con escamas de bronce con baños de metal).
El metal no solía ser muy grueso: posiblemente entre 0,5 y 0,8 mm. Sin
embargo, y dado que las escamas se sobreponían unas a otras en todas
direcciones, las múltiples capas daban una buena protección al soldado que
la portaba. El tamaño de las escamas variaba entre 6 mm de ancho y 1,2 cm
de alto hasta unos 5 cm de ancho por 8 cm de alto, estando los tamaños más
comunes alrededor de 1,25 por 2,5 cm. Todas las escamas de la misma
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armadura solían ser del mismo tamaño, aunque las escamas de distintas
armaduras podían variar de forma muy significativa. Muchas tenían la parte
inferior redondeada, mientras que otras terminaban en punta o tenían la
parte inferior plana con cortes en las esquinas.
Las escamas se ataban con alambres en filas horizontales, siendo estos a su
vez cosidos o atados al forro interior. Cada escama podía tener entre 4 y 12
agujeros: dos o más a cada lado para coserlo al siguiente de la fila, uno o
dos en la parte superior para atarlos al forro y a veces uno o dos en la parte
inferior para asegurar las escamas en la siguiente fila.
Es posible que la armadura pudiese abrirse bien en la parte de la espalda o
en un lateral, para que fuese más fácil de poner. La abertura quedaba
cerrada con nudos.
Se ha escrito mucho de la presunta vulnerabilidad de este tipo de armaduras
con un ataque ascendente, aunque es posible que se trate de un punto de
vista algo exagerado.
No se han encontrado ejemplos de lorica squamata completos, si bien hay
varios descubrimientos arqueológicos de algunos fragmentos, y es muy
común encontrar escamas sueltas en las excavaciones, incluso en contextos
no militares.
Otras armaduras.
La infantería ligera, especialmente a comienzos de la república, luchaba sin
armadura. Si llevaban alguna sobre su túnica posiblemente habría
consistido en algún peto de cuero duro. Esto se hacía tanto para permitir a
estas tropas un movimiento más rápido como por cuestiones meramente
económicas. Durante gran parte del periodo republicano, la armadura
dependía del tipo que el soldado pudiera pagarse. Y las primeras filas
usaban una placa de metal, generalmente de bronce, que les cubría el
corazón y parte del pecho, sujeta con tiras de cuero. Aquellos con más
poder adquisitivo usaban la cota de malla. Y los más ricos, caras corazas
anatómicas de bronce, al estilo griego. Con el paso de los años, estas
corazas anatómicas siguieron en uso por los oficiales de alto rango.

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