En la región latinoamericana durante la última década se ha asistido a cambios
importantes en relación con el perfil demográfico y epidemiológico de la población y a transformaciones en la gestión y financiamiento de los programas de salud nacionales. Por lo tanto, en este texto se examina esos grandes cambios, así como la situación de salud de la población y los programas de atención de salud de los países latinoamericanos, sobre la base de la información de las respuestas de los Ministerios de Salud de los respectivos países a la encuesta que sobre el tema efectuó CEPAL. Se sintetizan las respuestas recibidas de Argentina, Bolivia, Brasil, Colombia, Costa Rica, Chile, Ecuador, El Salvador, Guatemala, Honduras, Nicaragua, Panamá, Paraguay, Perú, República Dominicana, Uruguay y Venezuela.
El hecho de que grandes sectores de la población de la mayoría de los países
de América sigan sin tener un acceso real a los servicios de salud y que este déficit de cobertura se produzca en medio de una restricción considerables de los recursos disponibles para el sector, presenta un gran desafío para la capacidad de organización y gestión de los sistemas nacionales de salud. Es por ello que se ha venido insistiendo en que para reducir los efectos de la crisis económica, resulta de vital importancia que los países utilicen de la manera más eficiente sus recursos para la atención integral de la salud y que, al mismo tiempo, se produzca una intensa movilización de recursos nacionales, complementada por una movilización de recursos externos para lograr la transformación de los sistemas de salud que permita atender las necesidades crecientes de la población.
El financiamiento de los sistemas de salud es un componente esencial de los
procesos de reforma sectorial en las Américas. Una de las razones que justifican este tipo de análisis es que a lo largo del tiempo los objetivos explícitos de la reforma en materia de financiamiento han pasado de buscar exclusivamente la sostenibilidad financiera a procurar simultáneamente el logro del acceso equitativo a servicios de calidad
II. DESARROLLO
CRISIS DE LOS SISTEMAS DE SALUD EN AMERICA LATINA Y EL CARIBE
En América Latina, con respecto al desarrollo de la práctica médica, los
resultados de la misma permiten afirmar que ésta se ha adelantado bajo una concepción asistencialista de la salud, dentro de un sistema de administración que funciona con base a deficientes procesos de planificación, organización y control de los recursos asignados al sub-sector público salud, que no está en capacidad de dar respuesta a la complejidad de la relación gobierno-gestión, sobre todo en un sector atravesado por tantos conflictos de poder.
Esta situación, junto a otros problemas, han conducido a la crisis de
gobernabilidad que el sector salud experimenta en la actualidad, en América Latina; donde los entes gubernamentales encargados de la gerencia y administración de la salud, han manifestado su incapacidad para solucionar los problemas de funcionamiento interno y satisfacer las demandas de salud de la población.
Se evidencia el colapso de los Sistemas de Salud públicos de la región, tanto
por las tendencias negativas de los indicadores de salud, como por los problemas de eficiencia, eficacia, cobertura, accesibilidad y legitimidad que confrontan las instituciones encargadas de la prestación de los servicios médico-asistenciales; manifestándose la pérdida de capacidad para gobernar el sector y dar solución a los innumerables problemas que se presentan hoy en día, y que atentan no sólo contra la salud de la población, sino además contra la estabilidad del sistema político existente en cada uno de los países latinoamericanos. DESPUES DE DOS AÑOS DE PANDEMIA EN AMERICA LATINA Y EL CAFRIBE
A dos años de que la Organización Mundial de la Salud (OMS) declarara la
pandemia de enfermedad por coronavirus (COVID-19), los países de América Latina y el Caribe continúan viéndose afectados por una profunda crisis sanitaria, social y económica. La región ha mostrado ser particularmente vulnerable a la pandemia; sus problemas estructurales se han agudizado y han quedado al descubierto las debilidades y brechas de los sistemas de salud y de protección social. El análisis de la evolución de la pandemia realizado en este documento contribuye a visibilizar la centralidad de la salud para el desarrollo social inclusivo y el desarrollo sostenible de las sociedades, así como la interdependencia que existe entre las dimensiones social, económica y ambiental del desarrollo sostenible. Asimismo, se destaca cómo la pandemia constituye una oportunidad para poner énfasis en la urgencia de invertir en sistemas de salud universales, integrales, sostenibles y resilientes ante las crisis que puedan surgir en el futuro, en estrecha articulación con los demás sectores y, en particular, con los sistemas de protección social.
REFORMA DEL SISTEMA DE SALUD DE AMERICA LATINA Y EL CARIBE
La velocidad y el contenido de las reformas del sistema de salud variaron en
los países estudiados, al igual que la forma en que la cobertura universal de salud fue creada e implementada. Analizamos las similitudes y los rasgos distintivos de estas reformas para cada función del sistema de salud organización y gobernación, financiamiento, gestión de recursos, y prestación de servicios destacando los cambios claves en los países con ejemplos, y describiendo brevemente los cambios en cada país. Organización y gobernanza En América Latina, existían cuatro áreas fundamentales de cambio en la organización y en la gobernanza de los sistemas de salud.
La primera involucró la reorganización de los sistemas de salud para
abordar la fragmentación estructural. La segunda involucró la descentralización de la toma de decisiones en los niveles de gobiernos provinciales, de Estado, y gobiernos municipales. La tercera hizo énfasis en el mejoramiento de las funciones regulatorias. La cuarta involucró la separación de las funciones de financiamiento (ejemplo, del comprador) y del proveedor para mejorar la eficiencia del sistema de salud. La primera área de cambio fue especialmente importante en América Latina, donde sólo Brasil, Cuba y Costa Rica han unificado los sistemas de salud y la mayoría de los sistemas de salud están organizados como varios subsistemas paralelos. Al principio de la década de 1990, los países sin sistemas unificados introdujeron programas de seguro y prestación de servicios de salud financiados por el gobierno para cubrir a los pobres y a los trabajadores informales.
La segunda área de cambio involucró la descentralización de las funciones
del sistema de salud a los niveles de los gobiernos locales. La descentralización fue motivada por el deseo de fortalecer la gobernanza local, delinear las funciones a los niveles de gobierno central y local, y fortalecer las capacidades y el desempeño en cada nivel.
En Brasil, Colombia, Perú, Uruguay y Venezuela, la sociedad civil dio impulso a
la descentralización, que también se utilizó como un mecanismo para profundizar la democratización y la ciudadanía mediante el fortalecimiento de la participación social.
La tercera área de cambio involucró el desarrollo de las funciones
regulatorias, en especial la regulación sanitaria, y la regulación de los servicios personales de salud, la organización del seguro, y de los proveedores de atención de salud.
Los países estudiados también han introducido regulaciones para mejorar la
calidad de los medicamentos utilizados en los sistemas de salud. Sin embargo, en América Latina, la regulación eficaz de las aseguradoras de salud y de los proveedores en los sectores público y privado han sido un desafío. Las aseguradoras privadas practican los llamados procesos de descreme inscribiendo a los segmentos de la población de bajo riesgo y alto ingreso, con efectos adversos para la equidad, el costo, la calidad del servicio y la idoneidad en Argentina, Brasil, Chile, Colombia, México, y Perú. La cuarta área de cambio, la cual involucra la separación de los roles del comprador y del proveedor, fue tal vez la más controversial, debido a que muchos miembros y profesionales de los servicios de salud pública lo asociaron con la privatización de los sistemas de salud.
En Colombia, Costa Rica y Perú, la separación de las funciones del comprador
y del proveedor permitieron la introducción de la contratación entre las aseguradoras y los proveedores, con incentivos para mejorar el rendimiento. En México, un objetivo fundamental fue introducir la transferibilidad entre las diferentes aseguradoras públicas y sus respectivas instalaciones, aunque limitada a los servicios obstétricos de emergencia. Mientras Cuba mantuvo un financiamiento público y brindó un sistema de salud integrado, Chile y Venezuela fueron objeto de reformas radicales del mercado por las dictaduras militares, con subsidios para fomentar la inscripción con las asegurado.
III. CONCLUSIONES
Se afirma que se han registrado en América Latina, importantes y
trascendentales procesos y experiencias dirigidas a mejorar la eficiencia, calidad y equidad de los Sistemas públicos de Salud en la región. En Latinoamérica se evidencian avances positivos en cuanto a la descentralización y participación en salud, pues en muchos países ambas estrategias se han logrado implantar y actualmente se registran cambios significativos en cuanto a la administración y gerencia de los servicios de salud. La implantación de la descentralización y la participación en salud, en América Latina es considerada muy positiva en función de mejorar el funcionamiento de los Sistemas de Salud en la región. Si bien tales procesos enfrentan muchos obstáculos de diversa índole para su puesta en marcha y desarrollo, es difícil pensar que después que en una realidad se desatan las fuerzas de algunas estrategias que estimulan la participación y la descentralización –independientemente de la fortaleza de su anclaje político– se les pueda imprimir otra dirección que anule totalmente la marcha de estos procesos. Por supuesto, la descentralización y la participación, en tanto procesos políticos, inevitablemente generan el aumento de los conflictos y de la resistencia al cambio por parte de muchos actores presentes en el sector salud, lo que complejiza aún más el proceso de reforma y transformación que tanto requieren los Sistemas de Salud de América Latina. En este contexto, el mejoramiento del funcionamiento de tales sistemas, que experimentan significativas transformaciones en la actualidad, debe ser observado con atención pues el éxito o fracaso de los esfuerzos orientados en esta dirección sólo se podrá reconocer a mediano y largo plazo si las estrategias implantadas logran profundizarse y consolidarse de manera definitiva. IV. REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
Alcántara Sáez, Manuel (1995). Gobernabilidad, Crisis y Cambio.
Elementos para el estudio de la gobernabilidad de los sistemas políticos en épocas de crisis y cambio. Fondo de Cultura Económica. México. Arroyo, Juan (2000). “La reforma del sector salud en el Perú 1990-98. En busca de nuevos modelos de políticas sociales”. En Revista de Ciencias Sociales. Vol. VI Nº 2. Mayo-Agosto 2000. Facultad de Ciencias Económicas y Sociales de la Universidad del Zulia. Maracaibo, Venezuela. Rifat Atun, et al (2014). La reforma de los sistemas de salud y la cobertura universal de salud en América Latina. Cuba. Disponible en: http://dx.doi.org/10.1016/S0140-6736(14)61646-9 Jesús, Lechuga Montenegro, et al (2014). Las reformas de salud en América Latina. Universidad Nacional Autónoma de México. OMS (2000). Informe sobre la salud en el mundo 2000. Ginebra: OMS. Recuperado de http://www.who.int/whr/2000