Sociedad del cansancio - Byung-Chul Han

Siglo 20: “Paradigma inmunológico”

Cultura que distingue entre adentro/yo y afuera/extraño.
El extraño es objeto de amenaza, simplemente por ser otro.
Se niega la negatividad del otro y por tanto se le reconoce como otredad.
Sociedad disciplinaria, donde uno vigila al otro para que cumpla con la norma y sino es
castigado.
Siglo 21: “Paradigma neurológico”
El enemigo no está afuera, vive dentro de cada uno. No es el otro que amenaza,
desaparece la otredad.

“Emprendedor”
- Sujeto actual
- Se explota a sí mismo
- Yo totalmente positivo
- Todo lo abarca y todo lo cubre
- Él mismo produce sus enfermedades neuronales como depresión, bipolaridad.
- Depresión aparece cuando el hombre ya no puede poder más y siente culpa de no
poder.

Sociedad del “sí puedo”

Enferma de positividad.
La biblia del emprendedor son los libros de autoayuda, que incitan a “sí poder”

Sociedad del rendimiento

En un tiempo de disuasión, comunicación y control.
Donde todo se expone, no hay intimidad y todo es transparente.
Hay que transparentar esa positividad.

Pasaje de sociedad disciplinaria a sociedad de control (Deleuze)

Es una sociedad de control no por vigilancia, sino por rendimiento.
El control viene y lo recibe uno mismo.
• Sociedad disciplinaria: sociedad de negatividad donde el factor sustancial era no hacer
lo que puedo sino lo que la norma dice.
• Sociedad de rendimiento: solo existe la noción de poder, debo de poder poder. No hay
prohibiciones o normas, se reemplazan por proyectos, iniciativas y motivaciones que me
indican lo que debo poder poder.

 “Libertad paradójica” el poder hacer me encarcela.

Multitarea
- Implica la activación de muchos niveles de percepción para la supervivencia. Se
relaciona a instancias de supervivencia animal, una regresión en la evolución.
- La hiperestimulación hace que se tenga poca tolerancia al vacío, al aburrimiento. El
aburrirse genera la capacidad contemplativa, por lo tanto es una virtud.
- La libertad es detenerse, convertir el presente en un presente prolongado.

Todo lo anterior mencionado produce agotamiento, por eso la sociedad del cansancio,
uno que fragmenta, aísla, agobia y destruye.