En esta carta escrita en el año 1920 podemos apreciar como el
empresario Hillyer V. Rolston con sus supuestas buenas intenciones de desarrollo a nuestro país, lo único que planeaba era apoderarse de nuestro territorio y sacar el mayor provecho posible de su inversión empresarial puesta en nuestro país. Vemos como el con sus ansias de riqueza se burla de nuestro pueblo que para él era un pueblo de ignorantes envilecidos por el alcohol, pueblo que se mató trabajando para hacerlos más ricos. Hicieron creer al pueblo y a los gobernantes que su inversión en nuestro país era para promover el desarrollo agrícola, cuando sus intenciones eran apoderarse de toda riqueza que se le hiciera posible.
Vemos como ellos obtienen sus objetivos ya que el gobierno y alguna
parte de la población les facilito su estadía en este país, haciéndoles concesiones, privilegios, franquicias, abrogación de impuestos aduaneros, exonerándolos de toda carga publica, y lo peor de estas compañías bananares es que cuando se fueron se llevaron todo, se llevaron el trabajo de nuestros campesinos que eran explotados puesto que los salarios eran bajos, se llevaron la ilusión de muchos que tenían puestas sus esperanzas de superación en ellos, y se llevaron todo cuanto pudieron. Ellos trabajaron de una manera manipuladora, engañando a quienes ellos necesitaban para solo utilizarlos y luego alejarse de ellos pues creía que de una uotra manera los iban a traicionar confesando sus verdaderos intereses. Es triste el saber que otras personas solo nos utilizaron y nos siguen utilizando a sus anchas, valiéndose de lo que sea para hacerse más ricos y hundirnos cada vez más; y lo peor es que nuestro pueblo solo agacha la cabeza y no hacemos nada para evitar que se sigan burlando de nosotros. Es triste ver como los demás quieren aprovecharse de la ignorancia de un pueblo, pueblo que no es el culpable de padecer de este mal, ya que el gobierno no se a preocupado por dar una excelente educación y gratuita, porque solo saliendo de la ignorancia se pueden dar soluciones a los problemas y buscar la luz para salir adelante, ya que antes y ahora nuestro país es como un barco sin rumbo y dirección, que no sabe qué camino tomar, nuestros “gobernantes” que supuestamente son los más preparados son unos ineptos que solo velan por interés propio y de sus allegados mientras hunden y explotan al pueblo. Como jóvenes debemos de pensar en instruirnos lo más que podamos y de ser críticos y analistas de lo que sucede para así tomar decisiones desde ahorita y cuando ya seamos mayores ser quienes dirijamos nuestro país, debemos de cambiar la mentalidad partidista e interesada que se ha manejado siempre, a una con valores y principios morales a dar lo mejor de nosotros por el bien de nuestro país y de los que más nos necesita.
Como hondureños debemos luchar por nuestro país y ver lo hermoso y
maravilloso que es, porque es triste que sean los de afuera los que lo sepan apreciar, pero apreciar para robárnoslo. Debemos cambiar nuestra mentalidad, educarnos lo más que podamos; y luchar por el bien de nuestro país, porque solo así podemos sacarlo adelante.