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Conociendo al Coronel Luis Burela y Saavedra

El valiente Chicoanista

Esc. N°4.636 “Cnel. Luis Burela y Saavedra”


Conociendo al Cnel. Luis Burela y Saavedra, el valiente chicoanista
Esc. N°4.636 “Cnel. Luis Burela y Saavedra”

¿Quién fue el Cnel. Luis Burela y Saavedra?


Nació el 24 de Agosto de 1.779, en
Chicoana, descendiente de una distinguida fami-
lia, originaria del marquesado de Santa María de
Burela, en la provincia de Lugo, España.
Se cuenta con el Acta Testimonial de
Bautismo, emitida y registrada en el Libro N°6,
folio 292, de la Parroquia de San Juan Bautista
de La Merced de la Ciudad de Salta; que dice:

“En esta Sta. Iglesia Matriz de Salta


en 27 días del mes de Agosto de 1.779 años, yo
el Cura Rector desta Sta. Iglesia exorcicé bautice
puse óleo y crisma a Luis criatura de tres días hijo
legítimo de Don Joseph Eduardo Burela y su es-
posa Doña Ramona Saavedra, fueron sus padrinos
Don Manuel Salvador Fernández y su esposa Doña Coronel Luis Burela y Saavedra
Cecilia Cuello y para que conste lo firmo. Venancio
Sánchez”.

Foto del Acta de Bautizmo

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Se lo conoció como un fuerte terrateniente y vecino de Chicoana, se casó con


Doña Teresa de Gauna (hija de Calixto Gauna y Manuela Bárcena)el 18 de Enero de 1.816
con quien tuvo dos hijas, Manuela Burela Gauna y Micaela Burela Gauna.,

Decidió empuñar las armas en defensa del pueblo de Chicoana, organizó el


escuadrón de gauchos local, sin más armas que las que se pudieran obtener atacando a los
enemigos de la Patria.

Este vecino ejemplar inició en marzo de 1.814 la “Guerra Gaucha”, en el Valle
de Lerma dando páginas de gloria a la historia latinoamericana. En Ia lucha por conseguir la
liberación definitiva de todo un pueblo.

Se destacó tanto en el Valle de Lerma, como Quebrada de Humahuaca, la Que-
brada de Escoipe, la Quebrada del Toro, el camino al Despoblado, El Bañado y la Quebrada
de León y elegía estratégicamente los lugares para atacar por sorpresa al enemigo.

El 29 de setiembre de 1.821 es ascendido a Coronel. Luis Burela sirvió en la


milicia hasta la terminación de la guerra, en 1.825.

Murió en Chicoana en 1.834 habiendo dado todo a la patria; su valentía y todos
sus bienes materiales.

Su viuda, doña Teresa Gauna, quedó en la mayor pobreza (en una oportuni-
dad los realistas saquearon su casa), debiendo ganarse la vida de costurera. En 1.872 vivía
en Salta y desde ahí solicitó pensión militar en razón de los servicios de su esposo en las
guerras de la independencia.

En 2.017 Félix Ramón Matos Burela, descendiente directo del Coronel, a sus
93 años recibió en su nombre la distinción de la “Medalla Tercera Defensa de Salta” que
le concedió la Comisión Provincial del Bicentenario de la Guerra Gaucha.

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El Heróe Chicoanista: de Terrateniente a Coronel

Después de su triunfo en Vilcapugio y Ayohuma, el


General Realista Joaquín de la Pezuela, decidió avanzar con
sus tropas hacia el norte de las Provincias Unidas del Río de
la Plata, rumbo a Córdoba. Llegaron al pueblo de Chicoana
en Marzo de 1.814. Los soldados realistas tenían órdenes de
tomar el ganado y los víveres.

Chicoana, 1 de Marzo de 1.814.

El domingo 1 de marzo cuando los vecinos de


Chicoana, después de oír la misa en el Templo de San Pablo,
siguiendo su costumbre, conversaban sobre los saqueos que
General Joaquín de la Pezuela estaban sufriendo por parte de una tropa realista; el joven
hacendado Don Luis Burela se pronunció por la necesidad de
organizarse para enfrentarlos.

-No hay más que alzarse contra esos canallas- dijo Luis Burela decidido.
-Pero ¿y con qué armas?- replicó un vecino.
-Con las que les quitaremos- contestó.

Don Luis Burela, se puso a la cabe-


za de un decidido grupo de patriotas y dio
comienzo a su plan de acción, al llegar al
pueblo la tropa realista de treinta hombres
de tercerola y treinta de sable, al man-
do del Teniente N. Ezenarro (originario de
Cuzco), sorprendida por Burela con sus peo-
nes y paisanos voluntarios, fue derrotada,
desarmada y envida prisionera a Tucumán. Ayohuma
Vilcapugio

Chicoana
Provincias unidas
del Río de la Plata

Córdoba
El Carril
Chicoana

Mapa de las Provincias Unidas del Río de la


plata
Mapa de Chicoana
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Con los elementos conquistados en esta primera y afortunada ac-


ción, Burela armó sesenta hombres, treinta de sable y treinta de tercerola. Estos
hombres constituyeron el primer núcleo de guerrilleros salteños.
La valiente y patriótica decisión de Don Luis Burela determinó la
iniciación de lo que los historiadores denominaron “Guerra Gaucha”, “Guerra de
Recursos” o también llamada “Guerra de Guerrillas”. Convirtiéndose en uno de
los más audaces y temibles guerrilleros de aquella guerra que contuvo el avance
del ejército realista cerrándoles para siempre el camino hacia Córdoba y Buenos
Aires.

El Carril, El Bañado. 9 de Marzo de 1.814.

Don Pedro José Zavala, hombre de avanzada edad y dueño de la


Estancia “San Agustin”, con un grupo reducido de peones y paisanos de Cerrillos,
inspirado por Don Luis Burela. Sorprende y vence a otra partida realista.

Estás dos tropas fueron las primeras en hacerle frente al ejército


realista vencedor de Vilcapugio y Ayohuma.

Ciudad de Salta, 29 de Marzo de 1.814.

En el Tuscal de Velarde, alredeores de la ciudad de Salta, Güemes


derrota una partida de realistas, dejando al enemigo encerrado en la ciudad.
Tercerola
La Merced, 12 de Junio de 1.814.

El Teniente Luis Burela y el Teniente


Salta
Manuel Gómez persiguen a una tropa de rea-
listas desde el Santuario Sumalao hasta Capilla
La Silleta
de La Merced, donde se retiran con sus tropas
vencedoras.
Cerrillos El 24 de Diciembre de 1.814 Bure-
la fue ascendido a Capitán de la compañía de
milicias del Rosario, por el General Rondeau.
San Agustín
La Merced
Rosario de Lerma
Al año siguiente, el 17 de Abril en el
Sumalao Puesto del Marqués (Jujuy), bajo las órdenes
Pulares de Alejandro Heredia, con sus gauchos atacó
El Carril
Chicoana El Bañado la retaguardia real, cooperando eficazmente a
la derrota del enemigo, tomando prisioneros y
armas.
Mapa del Valle de Lerma

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Después de la derrota de Sipe-Sipe


el consiguiente repliegue del ejército patriota,
fue necesario organizar la defensa de la Que-
brada de Humahuaca, que era el camino más
probable y el único seguro por donde bajaría
el grueso de realistas para la invasión.

El extremo superior, que terminaba


al Sur de Yaví, quedó a cargo de las fuerzas
del Marqués Coronel mayor Juan José Fer-
nández Campero, lo mismo que la entrada a
la Quebrada del Toro, que corre paralela más
al occidente. La primera terminaba en la
ciudad de Jujuy. Para guardar esta puerta se
Gral. Martín Miguel de Güemes destinó al bravo capitán Burela con sus ya
famosos escuadrones.

El comandante José María Paz de Urdinenea era jefe de la vanguardia


patriota establecida en la villa de Humahuaca, con servicio de comunicaciones con los
jefes de las tropas de vigilancia en los tres sectores en que fue subdividido el frente de
casi 100 leguas, que constituía el extremo Norte de nuestro territorio. Se hallaba Burela
a cargo de su puesto de vigilancia cuando tuvo lugar el desastre de Yaví, el domingo 15
de noviembre de 1816, en el cual cayó prisionero el mencionado Marqués y parte de su
tropa.

El 6 de febrero el comandante
Rojas obtuvo un sonado triunfo en San Pedrito,
lo que obligó a La Serna reconcentrar todas sus
fuerzas en Jujuy, al día siguiente. Finalmente,
pese a la decisión de las tropas de Güemes, La
Serna emprendió el 13 de abril su marcha sobre
Salta, dejando a Olañeta a cargo de de Jujuy,
siendo atacados en todo su trayecto por las
fuerzas patriotas, especialmente por las tropas
de José Apolinario Saravia.
Los días 17, 18 y 19 de abril,
salieron de Salta tres columnas expediciona-
rias mandadas por los coroneles Vigil, Castro y
Carratalá con el objetivo de obtener alimentos
y caballos, pero fueron atacadas por grupos de
gauchos y debieron regresar a la ciudad con
muy poco beneficio y con la pérdida de algunos General de La Serna
hombres.

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Por todas estas derrotas La Serna dispuso que el 20 por la noche saliera el
batallón “Gerona”, fuerte de 500 plazas; 180 jinetes y un cañón, al mando del coronel
Sardina, columna que debía ir a El Bañado, donde se hallaba Güemes con la mayoría de
sus tropas. Tan pronto emprendió la marcha este batallon, todas las guerrillas de la divi-
sión Burela se reconcentraron en Cerrillos, donde el 21 empezó el combate que duró dos
días, continuando Sardina su marcha, atacado constantemente.

Al llegar a la casa de Gauna, los


realistas fueron atacados por las fuerzas patrio-
tas de Ruiz de los Llanos y Pedro Zavala, cau-
sándoles confusión en sus filas. Al llegar a El
Bañado se enfrentaron a 500 hombres mandados
por Pablo Latorre, sorpresivamente fueron em-
boscados por un grupo de “Infernales” que man-
daba el sargento Mayor don Juan Antonio Rojas
y otra de gauchos a las órdenes del por tropas
de Alféres Leytes.

Como fueron intensamente per-


seguidos, reposaron sobre el cerro de Pulares,
donde pasaron la noche del 21, reanudando su
marcha al amanecer, en dirección a la Quebrada
de Escoipe. Las tropas de Burela y Zabala los
alcanzaron y atacaron, obligando al ejército rea-
lista a replegarse a volver a la ciudad, sin cesar
la persecución y fuego hasta que llegasen allí.

Los españoles tuvieron la pérdida


del coronel Sardina muerto en el ataque de Rojas
y Leytes, el que fue reemplazado por su cole-
ga Vigil, que fue el que inició la retirada desde
Pulares para la ciudad, sensible baja a la que
se agregaron otras 70 entre muertos y heridos;
mientras los patriotas solo tuvieron 6 muertos y
18 heridos, entre esas bajas el valiente Alféres Gaucho Infernal
Leytes.

Impresionado el general La Serna con este resultado y en conocimiento de


la victoria de San Martín en Chile, ordenó la retirada de Salta con un ejército; pero es-
caso de elementos de movilidad y comida, dispuso que el general Gerónimo Valdés saliera
con una tropa de tres armas, con 2 cañones, que sorprendiera a Güemes, y lograra así
conseguir ganado y caballos.

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Siguiendo ordenes, Valdéz salió de Salta el 29 de abril y marchó hasta La
Silleta, sosteniendo tiroteo todo el dia y con un centenar de animales de todas cla-
ses, regresó a la ciudad. En esta hostilidad se distinguió el comandante Burela como en
todas las demás oportunidades. Con las presas mencionadas, Joaquin de la Pezuela em-
prendió la retirada, siendo constantemente atacado durante la marcha por los gauchos
salteños.

Güemes en esta emergencia


Yavi
procedió con celeridad destacando nume-
rosas tropas al mando de los mejores jefes
a sus órdenes, para que con emboscadas,
dañaran al ejército en retirada, la noche del
4 de mayo de 1817 .
Humahuaca
En la noche siguiente, el cam-
pamento español fue alarmado por un ruido
extraño y una masa obscura que avanzaba
sobre el, a la que hicieron fuego, pudiendo
distinguir soldados patriotas que lanzaban
sobre el campamento realista manadas de San Salvador
yeguas ariscas con cueros atados a la cola, de Jujuy
que simulaban un ataque, causando espanto
Salta
entre la tropa acampada.
Mapa de referencial de Jujuy

El 6 llegaba La Serna a Jujuy y siete días después iniciaba también la re-


tirada desde este punto la primera columna real, compuesta de 2 batallones y 3 escua-
drones, con custodia del parque de artillería, al mando del general Olañeta, la que llegaba
seis días después a Tilcara, donde se fortificó. En el trayecto fue constantemente ataca-
do por las tropas de Güemes.

El día 21, el general La Serna también marchaba desde Jujuy para el Norte,
con su antes orgulloso ejército, profundamente desmoralizado y sin haber podido hacer
nada en esta invasión.

Durante su estadia en Jujuy, La Serna vio constantemente interrumpidas


sus comunicaciones con el Perú por la partida de Burela establecida en la Quebrada de
León.

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El 14 de enero de 1818 el general Valdés con 400 hombres, saqueó la ciudad


de Jujuy; pero fue atacado tenazmente, se retiró el mismo día, rodeado por los patriotas
hasta cerca de Yavi.

Las tropas gauchas atacaron


constantemente al enemigo cada vez que
intento tomar nuestro territorio, como sucedió
en marzo de 1819, en que los generales Can-
terac y Olañeta invadieron por la Quebrada
de Humahuaca, siendo batidos en numerosos
puntos: el 3 de abril en Huacalera y Tilcara;
el 12 de mayo en Iruya y Orán; el 9 de sep-
tiembre, en el Rosario, en octubre, en Orán y
Santa Victoria; el 28 del mismo mes, en San Humahuaca
Antonio de los Cobres; en diciembre, del 10
al 20, a Canterac en la Rinconada, a Lóriga
en la quebrada del Toro y a Gamarra en San Huacalera
Antonio de los Cobres. Burela, como de cos-
tumbre, tuvo participación decisiva en este Tilcara
resultado.

El 27 de agosto de 1.819, el Di- Purmamarca


rector Supremo Rondeau lo nombre Teniente
Coronel. En el curso de este año, Burela era
comandante del Escuadrón de Rosario de Ler-
ma. El 14 de noviembre del mismo año la Sala
Capitular de Salta le expidió un certificado de
Mapa de referencial de la
sus servicios.
Quebrada de Humahuaca

En Mayo de 1.820 fue nuevamente invadida la provincia de Salta por un


ejército de 4.000 hombres, al mando en jefe del General Ramírez de Orozco, secundado
por los Generales Canterac, Olañeta y Valdéz, y coroneles Gamarra, Vigil, Marquiegui y
otros: atacados en todo su trayecto desde el 8 de mayo, el 24 se apoderaban de Jujuy y
el 31 de la ciudad de Salta.

El 2 de junio combate contra Olañeta y Valdéz en La Pedrera, Quese-


ra, Cruz y Chamical; del 3 al 8, en Cerrillos, Chamical y La Troja contra Olañeta; y
en combate en Cerrillos contra Canterac, Clover y Ferraz, donde murió heroicamente el
célebre coronel Juan Antonio Rojas. El día 30 de junio, el ejército real inició la retirada a
Tupiza, evacuando el dia 5 de julio la ciudad de Salta.

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El teniente coronel Burela,


teniendo a sus órdenes fuertes desta-
camentos, mandados uno de ellos por el
capitán Juan Rosa del Castillo, defendió
por orden de Güemes, la capital de la pro-
vincia cuando se aproximaron los realistas.
Al fınal de esta campaña, Luis Burela fue
reemplazado por su hermano Alejandro en
el mando de la partida “Valor”, por haber
sido herido.

Cuando a fines de 1.820 y


comienzos de 1.821, el General Güemes
invadió la provincia de Tucumán para
castigar a Don Bernabé Aráoz, Gobernador
de la misma por titularse “Presidente”,
el Teniente Coronel Burela lo acompañó
en calidad de 2° Jefe, asistiendo al com-
bate del Rincón de Marlopa, el 3 de abril
de 1.821, en el cual las fuerzas salteñas,
unidas a las de Santiago del Estero, fueron derrotadas por el general de la República de
Tucumán, Coronel de cazadores Don Abraham González. Durante la invasión de Olañeta
en 1.821, en cuyo curso el heroico general Güemes perdió la vida, la casa de Burela fue
saqueada por los españoles. Contribuyó poderosamente al rechazo de esta invasión y por
sus méritos, fue ascendido a Coronel el 29 de septiembre de 1.821, de las fuerzas de los
departamentos de Rosario de Lerma y Chicoana; su Regimiento, por su valentía, heroís-
mo y notable número, era un pequeño ejército. Continuó sirviendo hasta la terminación
de la guerra de la Independencia, en junio de 1825.

Desde 1.814 hasta 1.821, los gauchos de Güemes vencieron seis invasiones
realistas, una cantidad promedio de unos 20.000 soldados.

Se retiró del ejército dedicándose de lleno a su finca, falleció en Chicoana


en 1834.

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Una familia de héroes


En la familia Burela y Saavedra no sólo se destacó en la lucha y defensa
de la patria el Coronel Luis Burela y Saavedra, también tuvieron una gran trayectoria
militar su hermano el Teniente Coronel Alejandro y su sobrino también teniente coronel
Manuel Serapio Burela (Hijo de Alejandro).

Teniente Coronel Alejandro Burela y Saavedra

Hermano del valiente patriota, coronel


Luis Burela, y natural de Salta como él, oriundo del
pueblo de Chicoana. Se incorporó a las fuerzas de la
patria en mayo de 1.812, como cabo de Voluntarios
de Caballería, ascendiendo a alférez en Noviembre de
1.814 y capitán graduado el 14 de Abril de 1.817 del
mismo cuerpo. El 12 de noviembre de 1.818 ya revis-
taba como capitán en el Primer Escuadrón de Gau-
chos de la jurisdicción de Salta, fecha en la cual el
General Güemes, desde la capital de aquella provincia
dirigió un oficio al Supremo Director del Estado, pi-
diéndole fuesen extendidos los despachos de aquella
jerarquía a Alejandro Burela, El Director general Ron-
deau otorgó tales despachos el 27 de agosto de 1.819,
como capitán de la segunda compañía del Escuadrón
de Gauchos de Salta. Teniente Coronel Alejandro Burela

Burela asistió a las numerosas acciones
que tuvieron por teatro las actuales provincias de Salta y Jujuy, en las varias invasiones
llevadas a cabo por las fuerzas reales, distinguiéndose especialmente, en la defensa de
Salta, en Abril -Mayo de 1.817; y sobre todo, en las acciones que tuvieron lugar en las
inmediaciones de aquella ciudad, en junio de 1.820, a cargo de tropa “Valor”, que coman-
dó interinamente por hallarse su hermano Luis, que era el jefe titular.

El General Güemes, en su parte fechado en Salta el 22 de Junio de 1.820, cita


el nombre de Alejandro Burela entre los patriotas que se distinguieron en la tenaz per-
secución de los enemigos en aquellas operaciones, que condujeron al desalojo del invasor
después de haber sufrido pérdidas tremendas. Se halló en las operaciones de mayo del
año siguiente, contra Marquiegui; y muerto Güemes, en las de julio del mismo que deter-
minaron al invasor Olañeta a retirarse del territorio de Salta y Jujuy, siendo aquella, la
última vez, que las huestes reales hollarían con su planta el suelo de la actual República
Argentina. En 1.821 ascendió a teniente coronel.

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Alejandro Burela continuó sirviendo en las fuerzas salteñas, siendo desig-


nado el 7 de Marzo de 1.824, teniente coronel-comandante del Escuadrón Gauchos de
Salta.

Sintiéndose gravemente enfermo, en la Merced, Salta, hizo su testamento


el 21 de Abril de 1.839, el cual no pudo firmar por la gravedad de su estado, fallecien-
do a los pocos días. Su esposa, doña Rosario Gauna de Burela le sobrevivió hasta el 19
de septiembre de 1859, fecha en la que falleció de meningitis, en El Carril, provincia de
Salta, siendo enterrada en el cementerio de la iglesia de San Pedro de Chicoana. Del
matrimonio del teniente coronel Alejandro Burela con Rosario Gauna, nacieron dos hijos:
Josefa, que el 14 de marzo de 1.874 recibió la pensión de su padre como guerrero de la
Independencia y Manuel Serapio Burela, que alcanzó la jerarquía de teniente coronel.

Teniente Coronel Manuel Serapio Burela


Nació en el pueblo de Chicoana,
provincia de Salta, en el primer cuarto de siglo
XIX, siendo sus padres, el teniente coronel D.
Alejandro Burela, campeón esforzado de la In-
dependencia; y doña Rosario Gauna. Carrera de
las armas con el empleo de alférez de la División
Salteña, el 1 de Enero de 1.840, asistiendo a la
campaña que llevó a cabo aquella, a las órde-
nes del coronel Solá, primero y del coronel Juan
Francisco Zamudio, después, en las operaciones
contra los ejércitos federales, actuando bajo el
superior comando del general Lamadrid, asistien-
do a aquella campaña hasta fines de 1.841.

Fue nombrado sargento mayor de


G. N., en enero de 1.851, y se halló en campaña
hasta diciembre de 1.853, a raíz de los impor-
tantes acontecimientos que tuvieron lugar en las Teniente Coronel M. Serapio Burela
provincias del Norte a consecuencia de la caída de
Rosas. En enero de 1.856 ingresó al Regimiento N
2 de G. N. de Salta, con el que estuvo en campaña hasta fines de 1.857; volviendo a
salir a operaciones en 1.862, permaneciendo en duro servicio hasta 1868.

El Gobierno Nacional le confirió despachos de sargento mayor el 28 de


enero de 1.879, y el 5 de abril del mismo año, de teniente coronel graduado, revistando
con destino en Buenos Aires hasta diciembre de 1.879, pasando a la sección Salta has-
ta septiembre de 1.881, en que fue destinado a prestar servicios en la Capital. El 1° de
enero de 1.883 pasó a la P.M.D. ., situación de revista que mantuvo hasta diciembre de
1887, en que ya viejo y achacoso, fue destinado a la Inactividad.
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Conociendo al Cnel. Luis Burela y Saavedra, el valiente chicoanista
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Dado de alta en la P. M. A. el 1 de febrero de 1889, se mantuvo en esta


situación de revista hasta el momento de su fallecimiento, que ocurrió el 3 de junio del
mismo año, en la ciudad de La Plata, a la edad de 70 años, víctima de una neumonía
catarral.
El teniente coronel Burela fue uno de los principales jefes que pelearon
contra la invasión a la provincia de Salta del caudillo Felipe Varela, distinguiéndose en
aquella oportunidad por su valentía, su actividad y por haber sacrificado, sus intereses
propios y de su distinguida familia en defensa de la capital salteña. Reveló en la opor-
tunidad, ser un digno hijo de su padre, no olvidando que también era sobrino del coronel
Luis Burela, uno de los más valientes soldados de la Independencia. También contribuyó
eficazmente a la represión de la revolución que estalló en Salta el 8 de mayo de 1.863,
defendiendo Burela la legalidad. Manuel S. Burela casó en Chicoana el 24 de noviembre
de 1.860, con Perpetua Balderrama, natural de este punto, hija de don Pedro Balderrama
y de doña Bautista Morales.

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Conociendo al Cnel. Luis Burela y Saavedra, el valiente chicoanista
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Bibliografía
Cartilla de recopilación de información de la Esc. “Cnel. Luis Burela y Saavedra” N°4.636

Edición e Ilustración:

12 de Agosto de 2.020, Chicoana. Salta.

Pág. 13

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