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Mildred Shiomara Patricio Rax, Ciencias Jurídicas y Sociales, Carne:

2138057.

VALORACION DE LA PRUEBA

Amarillo: legal o tasada

Verde: Sana critica

Turquesa: libre convicción

De acuerdo con mi investigación, lectura y análisis de cada una de las


valoraciones de prueba pude subrayar lo que considero que abarca cada
una de las valoraciones, Considero que el juez fallo a favor del
demandado ya que se inclino a la prueba de valoración de libre convicción
por los recursos de apelación expuesta por la parte demandada.

(espero que al momento de la revisión de mi análisis se me pueda indicar


los fallos que tenga mi trabajo para poder mejorar, soy consciente de que
me está costando mucho la aplicación de la lógica.)

EXPEDIENTE 42-2010

23/03/2010 – FAMILIA

SALA REGIONAL MIXTA DE LA CORTE DE APELACIONES DE COBAN. COBÁN, ALTA


VERAPAZ, VEINTITRÉS DE MARZO DE DOS MIL DIEZ.

En virtud del recurso de APELACIÓN interpuesto en contra de la sentencia de fecha


VEINTITRES DE DICIEMBRE DE DOS MIL NUEVE, dictada por el Juzgado de Primera Instancia
de Familia del Departamento de Alta Verapaz, se emite sentencia de segunda instancia,
en el sentido siguiente.

IDENTIFICACIÓN DE LAS PARTES:

PARTE ACTORA: La señora SABRINA ELIZABETH PERALTA CHAVEZ, quien actúa con el
auxilio de la Abogada DIANA DEL CARMEN PIVARAL GONZÁLEZ.
PARTE DEMANDADA: El señor ERWIN ADALBERTO CHOC CHUN, actúa con el auxilio de la
Abogada IRMA JUDITH ARRAZATE CENTENO.

CLASE Y TIPO DE PROCESO:

El presente proceso se refiere a JUICIO ORAL DE FIJACIÓN DE PENSIÓN ALIMENTICIA que


promueve la señora SABRINA ELIZABETH PERALTA CHAVEZ, quien actúa en nombre propio
y en Representación de sus menores hijos SWANY YARIBELY, JACKELYN SABRINA ELIZABETH
y ERWIN ALBERTO DE JESÚS, de apellidos CHOC PERALTA , en ejercicio de la Patria
Potestad.

OBJETO DEL PROCESO DE SEGUNDA INSTANCIA:

Conocer y resolver el Recurso de Apelación interpuesto por ERWIN ADALBERTO CHOC


CHUN, en contra de la sentencia de fecha VEINTITRES DE DICIEMBRE DE DOS MIL NUEVE,
dictada por el Juzgado de Primera Instancia de Familia del Departamento de Alta Verapaz.

RESUMEN DE LAS ACTUACIONES Y DEL FALLO RECURRIDO:

A) Hechos Relacionados con la Sentencia Apelada: Los hechos expuestos en el memorial


de demanda y en la contestación, aparecen resumidos correctamente en la sentencia
analizada. En la sentencia apelada, la Juez de Primera Instancia, resolvió: “I) CON LUGAR
LA DEMANDA DE FIJACIÓN DE PENSION ALIMENTICIA, planteada en la vía oral por SABRINA
ELIZABETH PERALTA CHAVEZ, en su calidad de esposa, y en representación y ejercicio de
la patria potestad de su (sic) menores hijos Swany Yaribely, Jackelyn Sabrina Elizabeth,
Erwin Alberto de Jesús, todos de apellidos Choc Peralta, en contra de ERWIN ADALBERTO
CHOC CHUN; II) El demandado deberá proporcionar la suma de TRES MIL QUETZALES
MENSUALES, (Q. 3,000.00), a favor de la actora Sabrina Elizabeth Peralta Chávez y de sus
menores hijos Swany Yaribely, Jackelyn Sabrina Elizabeth, Erwin Alberto de Jesús todos
de apellidos Choc Peralta, en la proporción de ochocientos cincuenta quetzales (Q.850.00)
para cada hijo y cuatrocientos cincuenta quetzales (Q.450.00) para la cónyuge, en
concepto de pensión alimenticia en forma mensual y anticipada a partir del mes de agosto
de dos mil nueve, monto que hará efectivo a la actora a la cuenta que será aperturada a
su nombre por el sistema implementado en el Organismo Judicial; III) Sin lugar las
excepciones de falta de capacidad económica del demandado para proporcionar la pensión
alimenticia en el monto solicitado, y existencia de otras obligaciones de prestar alimentos;
IV) La obligación alimenticia queda garantizada con los ingresos y bienes presentes y
futuros que obtenga el demandado ERWIN ADALBERTO CHOC CHUN, V) Se condena al
demandado al pago de las costas procesales; VI) El padre de los menores de edad, puede
relacionarse con sus hijos, conforme lo que convenga con la actora, en horas del día, en
estado de sobriedad y sin causarle problemas a la progenitora; VI) (sic) Al estar firme el
presente fallo extiéndase las certificaciones que requieran, sin previa solicitud escrita.
Notifíquese.”
B) De las Pruebas Aportadas: POR LA PARTE ACTORA: quien aportó como medios de prueba
los siguientes: UNO) Documentales, a) Certificación de las partidas de nacimiento de sus
menores hijos, b) Certificado de la partida de matrimonio, c) Libreta de ahorro del banco
de los Trabajadores a nombre de Erwin Adalberto Choc Chun, DOS) Presunciones Legales
y Humanas; TRES) Informe Socioeconómico, practicado por Wendy Elizabeth Gramajo
Pineda, Trabajadora Social dos adscrita al Juzgado de Familia de Alta Verapaz.
POR PARTE DEL DEMANDADO: UNO) Documental: a) Certificación de la partida de
nacimiento de los menores Erwin Estuardo Choc Bac, Dany Adalberto Choc Bac y Melany
Jimena Marisol Choc Murguía, b) Fotocopia simple de tres recibos extendidos por la señora
Jacqueline Munguía, c) Fotocopia simple de la escritura número doscientos setenta y
tres, d) Fotocopia simple de la boleta de pago, e) Fotocopia Simple del recibo de ingresos
varios. DOS) Informe socioeconómico, practicado por Wendy Elizabeth Gramajo Pineda,
Trabajadora Social dos adscrita al Juzgado de Familia de Alta Verapaz.
C) De los hechos sujetos a Prueba: La Jueza de primera Instancia sujetó a prueba los
siguientes hechos: a) El vínculo matrimonial entre las partes, b) El parentesco entre el
demandado y los menores Swany Yaribely, Jackelyn Sabrina Elizabeth y Erwin Alberto de
Jesús de apellidos Choc Peralta; c) El derecho y necesidad de reclamar alimentos; d) La
obligación y posibilidades pecuniarias del demandado de darles alimentos; d) La negativa
del demandado a proporcionarlos.
D) Trámite de Segunda Instancia: Recibidas las actuaciones en esta instancia, se le dio
trámite al recurso de apelación, habiéndose señalado audiencia para la VISTA, ocasión en
la cual ambas partes comparecieron a presentar su respectivo alegato.

CONSIDERANDO I:

La Constitución Política de la República de Guatemala en sus artículos 51 y 55 establece


lo siguiente: “El estado protegerá la salud física, mental y moral de los menores de edad…
les garantizará su derecho a la alimentación, salud, educación, seguridad y previsión
social.”; “Es punible la negativa a proporcionar alimentos en la forma que la ley
prescribe”. El artículo 283 del Código Civil establece: “Están obligados recíprocamente a
darse alimentos, los cónyuges, los ascendientes, descendientes y hermanos…”; Los
artículos 253, 278 y 279 del mismo cuerpo legal preceptúa que “El padre y la madre están
obligados a cuidar y sustentar a sus hijos, sean o no de matrimonio, educarlos y corregirlos,
empleando medios prudentes de disciplina, y serán responsables conforme a las leyes
penales si los abandonan moral o materialmente y dejan de cumplir los deberes inherentes
a la patria potestad..”; La denominación de alimentos comprende todo lo que es
indispensable para el sustento, habitación, vestido, asistencia médica y también la
educación e instrucción del alimentista cuando es menor de edad.”; “Los alimentos han
de ser proporcionados a las circunstancias personales y pecuniarias de quien los debe y de
quien los recibe, serán fijados por el juez, en dinero”. El artículo 209 del Código Procesal
Civil y Mercantil regula: “En este tipo de proceso sólo será apelable la sentencia. Por su
parte, el artículo 603 del mismo código regula que “La apelación se considera solo en lo
desfavorable al recurrente y que haya sido expresamente impugnado…”

CONSIDERANDO II:
Que para el día de la vista compareció el apelante argumentando que: no está de acuerdo
con lo resuelto en la sentencia de primer grado, específicamente con el monto de la
pensión alimenticia fijado, el cual no se encuentra apegado a derecho ni las constancias
procesales, ni dentro de sus posibilidades económicas su cumplimiento; tampoco está de
acuerdo con el inciso V) del por tanto de la sentencia por medio del cual se le condena en
costas, en virtud de que fue fijada una pensión alimenticia, la cual se encuentra fuera del
alcance de sus posibilidades económicas, toda vez que a la madre de sus hijos como quedó
demostrado, siempre le ha proporcionado DOS MIL QUETZALES mensuales ya que tiene
descuentos judiciales los cuales es ineludible su cumplimiento, y otra carga familiar como
lo es su otra hija, lo que le perjudica grandemente en los egresos, por lo que habiéndose
establecido con los documentos presentados dentro del juicio, esta en la disposición de
cumplir con una pensión alimenticia de dos mil quetzales mensuales, ya que quedó
demostrado dentro del proceso respectivo que tanto sus ingresos como egresos se
encuentran legalmente respaldados por lo que no quiere faltar a su responsabilidad de
padre, realizando los depósitos mensuales, por otro lado no esta de acuerdo con la
condena en costas toda vez que si bien es cierto se fijo una pensión alimenticia en ningún
momento fué vencido dentro del proceso ni hubo evidente mala fe, ya que la sentencia es
declarativa; y al momento de llevar el juicio en la audiencia respectiva se realizó un
ofrecimiento el cual estaba basado en las posibilidades económicas que tiene, tomando
en cuenta la obligación como padre, por lo que de conformidad con los artículos 573 y 574
del Código Procesal Civil y Mercantil no se dan los presupuestos legales para que haya sido
condenado en costas dentro del presente proceso. Por lo que solicita que la sentencia se
modifique en cuanto al monto de la pensión alimenticia fijado, y rebajar el mismo y ser
revocada parcialmente en cuanto al inciso V), asimismo se resuelva conforme a derecho
en la que se fije un monto de pensión alimenticia de DOS MIL QUETZALES MENSUALES e
indique que no se hace condena en costas.
La actora solicitó que al dictar la resolución respectiva, se tome en consideración lo
resuelto por la señora Juez de Primera Instancia, que se encuentra ajustado en derecho
en virtud de que los hechos sujetos a prueba fueron: EL VÍNCULO MATRIMONIAL ENTRE LAS
PARTES, el cual quedó plenamente probado a través de los medios de prueba aportados
en su momento procesal oportuno. EL PARENTESCO LEGAL ENTRE LA ACTORA, EL
DEMANDADO Y LOS MENORES, hecho que genera la obligación legal del demandado de
prestar alimentos a su cónyuge y con los hijos quedó plenamente comprobado a través de
los medios de prueba aportados en su momento procesal oportuno. EL DERECHO Y LA
NECESIDAD DE RECLAMAR ALIMENTOS: en el presente caso quedó comprobado que la
situación económica de la demandante es baja, ya que los menores por la corta edad con
la que cuentan, incurren en mucho cuidado y gastos relativos a su edad y crecimiento,
como vacunas, pañales leche, educación, transporte hacia su centro de estudio y otros
descritos, aunado a este hecho la actora no tiene parientes que puedan ayudarla con el
cuidado de los menores y ante la negativa por parte del demandado de brindarle una
ayuda económica acorde a las necesidades de los menores, ésta se ve imposibilitada de
conseguir un empleo; a través de los medios de prueba ofrecidos en el momento procesal
oportuno, queda plenamente comprobado el hecho que sí existe necesidad para cubrir
gastos de subsistencia tanto de la actora como de los menores en mención. LA OBLIGACIÓN
Y POSIBILIDADES PECUNIARIAS DEL DEMANDADO DE DARLES ALIMENTOS: quedó probado a
través de los distintos medios de prueba aportados, que los ingresos del demandado
superan los diez mil quetzales mensuales provenientes de su salario como oficial del
ejército; asimismo, el propio demandado manifestó que obtiene ingresos económicos
provenientes de un microbús de su propiedad del cual percibe la cantidad de tres mil
quetzales, los cuales generan una suma que oscila entre los doce y trece mil quetzales
mensuales; es cierto que el demandado tiene compromisos crediticios altos, también se
advierte que de la misma forma, tiene posibilidades económicas alta para responder por
dichos compromisos; los alimentos de los menores de edad son prioritarios y debe tomarse
en consideración el interés superior de estos. En conclusión los compromisos crediticios
no lo eximen de su responsabilidad como progenitor de proporcionar alimentos para sus
menores hijos y de su cónyuge. LA NEGATIVA DEL DEMANDADO DE PROPORCIONARLOS. El
demandado no ha cumplido con brindar lo necesario para satisfacer las necesidades
básicas de su cónyuge y de sus menores hijos, teniendo los medios suficientes para poder
hacerlo, ya que únicamente ha proporcionado una cantidad dineraria, que no es regular
ni periódica y que además no es suficiente para cubrir las necesidades en forma mínima
de tres menores de edad y de su cónyuge, de las cuales tienen derecho por ley. Por las
razones argumentadas estima que la sentencia respectiva se encuentra apegada conforme
a derecho y no debe modificarse, ya que debe considerarse que de acuerdo con nuestra
legislación, ambos cónyuges tienen la obligación moral y legal del sostenimiento de los
hijos, y en el presente caso, el demandado no ha cumplido con esta obligación, pudiendo
hacerlo, ya que no cuenta con alguna incapacidad para hacerlo sino por el contrario,
cuenta con una profesión y una gran trayectoria que puede explotar en bien de sus
menores hijos y su cónyuge.

CONSIDERANDO III:

Del estudio de las actuaciones y de la sentencia apelada, se establece que la señora


SABRINA ELIZABETH PERALTA CHAVEZ, en nombre propio y en representación de sus
menores hijos SWANY YARYBELY, JACKELYN SABRINA ELIZABETH y ERWIN ALBERTO DE
JESÚS, de apellidos CHOC PERALTA, promovió Juicio Oral de Fijación de Pensión
Alimenticia en contra de ERWIN ADALBERTO CHOC CHUN. De conformidad con el artículo
279 del Código Procesal Civil y Mercantil, los alimentos han de ser proporcionados a las
circunstancias personales y pecuniarias de quien los debe y de quien los recibe, y serán
fijados por el juez en dinero; quedando al prudente arbitrio del juzgador la determinación
de la cuantía, apreciando si el que los va a prestar tiene los suficientes medios para
prestarlos, y por otro lado, si el que exige los alimentos, tiene una necesidad real de
recibirlos. En el presente caso, de las pruebas aportadas y del estudio socio económico
practicado por la Trabajadora Social, se establece la real necesidad de los alimentistas, y
también que el demandado tiene la posibilidad de proporcionar la pensión alimenticia de
acuerdo a su capacidad económica; y con base en dichas pruebas, mismas que fueron
valoradas correctamente en primera instancia, se declaró con lugar la demanda, fijándose
la suma de Tres Mil Quetzales que en concepto de pensión alimenticia queda obligado a
proporcionar mensualmente el demandado.
Por no estar conforme con la sentencia dictada, el señor ERWIN ADALBERTO CHOC CHUN
interpuso Recurso de Apelación en contra de la misma, por lo que al comparecer ante esta
Sala a presentar su alegato en el día de la vista, expresó que no está de acuerdo con lo
resuelto en la sentencia de primer grado, específicamente con el monto de la pensión
alimenticia fijado, el cual no se encuentra apegado a derecho ni las constancias
procesales, ni dentro de sus posibilidades económicas su cumplimiento, ofreciendo
continuar proporcionando la suma de Dos Mil Quetzales mensuales. Al analizar los
antecedentes, sentencia impugnada y agravios expresados por el apelante, se establece
que dicho apelante tiene otros tres hijos menores a quienes también tiene obligación de
alimentar, que proporciona vivienda a la actora y sus menores hijos y que por la compra
del bien inmueble así como la remodelación de esa vivienda contrajo deudas que aún está
amortizando; se establece también que para los dos hijos de su primera pareja se le aplica
un descuento judicial de Ochocientos Cincuenta Quetzales, a razón de Cuatrocientos
Veinticinco Quetzales mensuales en concepto de pensión alimenticia para cada uno;
asimismo, acreditó estar proporcionando la cantidad de Cuatrocientos Cincuenta
Quetzales mensuales en concepto de pensión alimenticia para su última hija, procreada
con su actual conviviente. De los ingresos y egresos probados documentalmente en
primera instancia se establece que obtiene líquido Tres Mil Setecientos Treinta y Ocho
Quetzales con Treinta Centavos, más Tres Mil Quetzales mensuales que percibe por
utilidades que le genera un microbús, con lo que asciende sus ingresos mensuales a la
suma de Seis Mil Setecientos Treinta y Ocho Quetzales con Treinta Centavos, monto del
cual se debe descontar la cantidad fijada en primera instancia. A primera vista pareciera
que la cantidad fijada estaría dentro de un margen justo, pues representa el Cuarenta y
Cuatro punto Cincuenta y Dos por Ciento (44.52%) de los ingresos líquidos del obligado;
sin embargo, es importante tomar en consideración que el demandado se encuentra
amortizando una deuda para pagar el bien inmueble en donde actualmente vive la actora
con sus hijos, que le representa uno de los egresos comprobados, y con ello se establece
que el demandado está cumpliendo de esa manera en proporcionarles habitación, que es
uno de los elementos que incluye el concepto de alimentos (artículo 278 del Código Civil);
además, también quedó probado dentro del juicio que existen otros hijos menores del
demandado, a quienes también tiene que alimentar, y por quienes proporciona
actualmente la cantidad de Cuatrocientos Veinticinco Quetzales mensuales por los dos
primeros y la cantidad de Cuatrocientos Cincuenta Quetzales por la última hija, quienes
aunque fueron procreados fuera de matrimonio, de conformidad con el artículo 209 del
Código Civil, “…gozan de iguales derechos que los hijos nacidos de matrimonio; …”; y el
hecho de fijar una cantidad mayor en concepto de pensión alimenticia a favor de los hijos
de matrimonio dejaría en desventaja a los otros tres, y cuando éstos pretendan un
incremento a la pensión alimenticia, el obligado ya no estaría en posibilidad de soportar
ese incremento. Por estas razones, y por lo que argumenta el apelante, esta Sala considera
prudente modificar la pensión alimenticia fijada en primera instancia que permita en
primer lugar satisfacer las necesidades de los alimentistas, y en segundo lugar que el
obligado pueda cumplir sin ningún inconveniente, y dejando a salvo los derechos de los
otros hijos procreados fuera de matrimonio; en ese sentido se considera justo y prudente
fijar la cantidad de DOS MIL CUATROCIENTOS QUETZALES, a razón de SEISCIENTOS
CINCUENTA QUETZALES para cada uno de los menores SWANY YARYBELY, JACKELYN
SABRINA ELIZABETH y ERWIN ALBERTO DE JESÚS, de apellidos CHOC PERALTA en calidad
de hijos, y CUATROCIENTOS CINCUENTA QUETZALES para SABRINA ELIZABETH PERALTA
CHAVEZ en calidad de cónyuge, que el demandado ERWIN ADALBERTO CHOC CHUN deberá
proporcionar en forma mensual y consecutiva, a partir del mes de agosto de dos mil nueve.
Por otro lado, el apelante también manifestó su inconformidad con la sentencia apelada,
específicamente en cuanto al numeral V) de la parte resolutiva, en el cual se le condena
en costas, argumentando que en ningún momento fue vencido dentro del proceso ni hubo
evidente mala fe. Al respecto, esta Sala estima, que de conformidad con la ley, en todo
el juicio, el juzgador debe decidir sobre las costas del mismo, tomando en cuenta las
diversas actitudes de los litigantes, y no necesariamente debe condenarse siempre a la
parte vencida. Aunque ciertamente el artículo 573 del Código Procesal Civil y Mercantil
establece la condena en costas a la parte vencida, como regla general, también el artículo
574 del mismo código dispone la facultad del juez de eximir al vencido del pago de las
costas, total o parcialmente, conforme a las condiciones reguladas; asimismo, el artículo
575 del mismo código establece con precisión las actitudes en donde no se podrá estimar
que una de las partes haya litigado de buena fe; en el presente caso no consta que la parte
vencida haya incurrido en cualesquiera de los presupuestos establecidos en dicha norma,
como para no ser eximido de las costas; por lo que se concluye que es procedente acoger
el Recurso de Apelación en el sentido de eximir al demandado del pago de las costas
procesales causadas en este juicio, y así debe resolverse.

NORMAS APLICABLES:

Artículos citados y: 28, 29, 51, 55, 203, 204, de la Constitución Política de la República
de Guatemala; 78, 81, 101, 109, 110, 253, 261, 278, 279, 282, 287, 292 del Código Civil.
25, 26, 27, 28, 29, 31, 44, 50, 51, 62, 63, 64, 66, 67, 68, 69, 70, 72, 73, 75, 79, 199, 200,
201, 203, 204, 205, 206, 207, 208, 209, del Código Procesal Civil y Mercantil. 3, 9, 10, 13,
15, 16, 17, 22, 57, 64, 88, 89, 142, 142bis, 143, 147, 148 de la Ley del Organismo Judicial.

POR TANTO:

Esta Sala, con fundamento en lo considerado y leyes citadas, al resolver DECLARA: A) CON
LUGAR el Recurso de Apelación interpuesto por ERWIN ADALBERTO CHOC CHUN, en contra
de la sentencia de fecha VEINTITRES DE DICIEMBRE DE DOS MIL NUEVE, dictada por el
Juzgado de Primera Instancia de Familia del Departamento de Alta Verapaz; B) Como
consecuencia, se MODIFICAN LOS NUMERALES romanos II y V de la sentencia apelada,
quedando así: II) El demandado deberá proporcionar la suma de DOS MIL CUATROCIENTOS
QUETZALES MENSUALES (Q.2,400.00), a favor de la actora Sabrina Elizabeth Peralta
Chávez en calidad de cónyuge, y de sus menores hijos Swany Yaribely, Jackelyn Sabrina
Elizabeth, Erwin Alberto de Jesús, todos de apellidos Choc Peralta, en la proporción de
seiscientos cincuenta quetzales (Q.650.00) para cada uno de los hijos y de cuatrocientos
cincuenta quetzales (Q.450.00) para la cónyuge, en concepto de pensión alimenticia en
forma mensual y anticipada a partir del mes de agosto de dos mil nueve, monto que hará
efectivo a la actora mediante depósitos en la cuenta bancaria que será aperturada a su
nombre por el sistema implementado en el Organismo Judicial; V) Se exime al demandado
del pago de las costas procesales; C) Se confirman los demás numerales de la sentencia
apelada. Notifíquese y con certificación de lo resuelto devuélvase los antecedentes al
juzgado de procedencia.
Hérman Rigoberto Tení Pacay, Magistrado Presidente; Rogelio Can Si, Magistrado Vocal
Primero; Gustavo Adolfo Morales Duarte, Magistrado Vocal Segundo. Víctor Armando
Jucub Caal, Secretario.

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