Fractura de tibia y peroné

Las fracturas se dan por múltiples situaciones o patologías, los golpes, la sobrecarga de
peso o ejercer una gran presión en el hueso son los mayores causantes de fractura de tibia y
peroné. Esta lesión generalmente se genera de manera conjunta.
La mayoría de las rupturas implican a la parte proximal del hueso o bien a la parte distal.
Debido a la fina cobertura de piel que cubre la tibia y el peroné, las fracturas en general son
abiertas, esto es, el hueso roto rasga la piel volviéndola una fractura expuesta.

Se tomaran dos proyecciones de la pierna afectada estas serán en AP y Lateral para evaluar
el nivel del daño del hueso
Revisando las imágenes podemos evidenciar tibia y peroné fracturados ambos con
desplazamiento del hueso y una clasificación de fractura conminuta.
Las fracturas conminuta son aquellas donde el hueso o los huesos presentan
desprendimiento de fragmentos mas pequeños y esto hace que se vuelva mas inestable y sea
mas evidente la deformidad de la zona afectada
El tratamiento es netamente quirúrgico inicialmente se puede colocar una férula de yeso
pero esta no sirve como algo definitivo ya que la posición del hueso y sus fragmentos deben
ser organizados, esto es mas como manera de inmovilizar y estabilizar la extremidad con el
fin de evitar mas desplazamiento.
Las opciones quirúrgicas son varias, el uso de fijadores externos es muy común estos están
diseñados para dar estabilidad al hueso y también ayuda a unir los fragmentos.
Las placas anatómicas son una buena opción se ajustan a la forma de la tibia y el peroné
permitiendo una alineación mas precisa del hueso y de algunos de los fragmentos.
Y la otra opción son los clavos intramedulares estos se usan cuando la fractura se presenta
en 2 o mas partes del hueso son especiales ya que estos van dentro de la tibia o el peroné se
ajusta y sostiene con tornillos especiales que atraviesan el hueso se ajustan al clavo y
quedan bien fijados estos ya permiten que todas las partes se consoliden nuevamente en un
solo hueso