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María se encuentra nerviosa y con sangre en la frente tras un desastre natural que ha destruido su casa. Alfredo la atiende y la acompaña a la zona de primeros auxilios mientras llaman a su marido Pablo para informarle. Más tarde, Alfredo le da a María consejos psicoeducativos sobre las emociones normales que puede experimentar, la importancia de buscar ayuda profesional si los síntomas persisten, y recursos disponibles para obtener información sobre la pérdida de su hogar.
María se encuentra nerviosa y con sangre en la frente tras un desastre natural que ha destruido su casa. Alfredo la atiende y la acompaña a la zona de primeros auxilios mientras llaman a su marido Pablo para informarle. Más tarde, Alfredo le da a María consejos psicoeducativos sobre las emociones normales que puede experimentar, la importancia de buscar ayuda profesional si los síntomas persisten, y recursos disponibles para obtener información sobre la pérdida de su hogar.
María se encuentra nerviosa y con sangre en la frente tras un desastre natural que ha destruido su casa. Alfredo la atiende y la acompaña a la zona de primeros auxilios mientras llaman a su marido Pablo para informarle. Más tarde, Alfredo le da a María consejos psicoeducativos sobre las emociones normales que puede experimentar, la importancia de buscar ayuda profesional si los síntomas persisten, y recursos disponibles para obtener información sobre la pérdida de su hogar.
DESASTRE NATURAL A) Fase previa de diseño de la intervención, en la que se
realizarán siguientes tareas: Al llegar al lugar de los hechos donde hay varios muertos y heridos en un barrio medio de la ciudad, nos distribuimos y yo atiendo a una mujer que está sola , sentada en un rincón. Parece nerviosa y tiene sangre en la frente. Me acerco y me presento. Me agacho delante de ella, manteniendo distancia suficiente como para que me oiga pero sin invadir su espacio. -Hola, me llamo Alfredo y he venido para ayudarte en todo lo que puedas necesitar. ¿Cómo te llamas? - María - María, te encuentras bien? Veo que tienes algo de sangre en la frente, recuerdas si puedes haberte golpeado? - No, la verdad es que no me duele nada, creo que no es mía. - Vale. Entonces no tienes ningún dolor físico, dolor de cabeza,... - Ahora mismo no, solo estoy muy nerviosa. Qué voy a hacer ahora sin casa?- Sé que es una situación delicada, lo primero que quiero es asegurarme de que estás bien. ¿Puedes decirme si estabas sola en el momento de la riada, había alguien contigo? - No, estaba sola, esperando a mi marido que viniera con los niños a casa. Ahora no hay casa a la que volver. - Ya,... María, te parece si le llamamos para informarle de lo que ha pasado saber dónde está él con los niños? - Sí, por favor. - Entonces, si te parece bien, pese a que ahora no sientas dolor, vamos a acercarnos a la zona de primeros auxilios para que te revisen los ATS frente y asegurarnos de que no es ninguna herida grave. ¿Te parece bien?- Si, pero quiero llamar a mi marido. - Claro, ¿cómo se llama tu marido? - Pablo. - Perfecto, porque hay un teléfono general justo al lado de la carpa vamos a usar para llamarle. Además hay una zona con cosas para comer y agua, por si te apetece. Los baños también están justo al lado y hay varias capillas para rezar si también lo quisieras. - No, gracias, no soy creyente. - De acuerdo, entonces, nos acercamos, llamamos a Pablo y podemos esperar mientras te revisan los ATS. Te parece bien? - Si, gracias. - Bien, te acompaño.
B) Fase de elaboración y entrega de las pautas psicoeducativas que ayuden y orienten a la
población afectada y que recojan: - María, ahora que ya te lleva Pablo a casa de tus padres, quiero que tengas en cuenta que es normal que durante los próximos días te sientas quizá abrumada y nerviosa, que te cueste dormir, o incluso que tengas regresiones al incidente, tipo un run run en la cabeza. Quizá estés más sensible e irascible, sea como sea quiero que sepas que todo eso es normal dada la situación. Vale? Es importante que entiendas lo que ha sucedido y te permitas las emociones que vengan para poder vivir este acontecimiento. Te recomiendo que si pasado un mes habiendo solventado un mes sientes que estas sensaciones no han disminuido puedas consultar con un profesional que te ayude a gestionarlas. Intentad abordarlo no más allá de los 6 meses. Te dejo esta tarjeta para que llames y te recomienden algún terapeuta específico para tu caso. El hecho de que podáis estar en casa de tus padres también os ayudará a mantener la rutina familiar que en estos casos es muy beneficiosa, poder volver a la rutina habitual, pese a no estar en el mismo hogar, sobre todoalos niños les va a ayudar mucho a sobrellevar mejor el cambio. Siendo Pequeños, puede que experimentan algunos síntomas en cuanto al cambio de vivienda y la pérdida del hogar, dada su edad es normal que hagan preguntas y se sientan quizá inquietos, eso también es normal, si veis que eso se prolonga en el tiempo consultad con el pediatra para que os comente cómo proceder. Para el tema de la casa, os comento que hay una zona habilitada justo al final de esta calle a la derecha que ha puesto el ayuntamiento con información específica para estas situaciones en referencia a la pérdida del hogar por desastres naturales, os dejo estos dos folletos informativos con los teléfonos de contacto. Además hay grupos de apoyo para personas que han pasado por estas situaciones que el ayuntamiento aún no han habilitado pero el número 5555 os podrán informar de todo. Poder compartir las vivencias con personas que han pasado por lo mismo es de gran ayuda también. - Gracias por todo.