YO SOY MICAELA

BASTIDAS
PUYUCAHUA
Nací en Tamburco distrito de Abancay el 23 de
junio de 1744, mi padre descendiente de
africanos y mi madre indígena, razón por la
cual me dicen la “Zamba”. Recibí una
educación básica y casera, a mis 15 años me
casé con José Gabriel Condorcanqui,
descendiente de Túpac Amaru, con quien tuve
3 hijos: Hipólito, Mariano y Fernando además
que se convirtió en mi tutor intelectual. En
1764 mi esposo fue nombrado Cacique de
Pampamarca, Tungasuca y Surimana, de modo
que a nuestro matrimonio nos tuvimos que
instalar en la localidad de Tinta, cerca del
Cusco.
En 1780 ya cansados de los abusos de los
españoles, que imponían las injustas alzas
fiscales a los locales y explotando a los
indígenas hasta el punto de esclavizarlos, José
Gabriel tomó el nombre de Túpac Amaru II y comenzó la rebelión de Tinta (La Gran
rebelión anticolonial), en la cual lo apoyé. Me encargué de proveer a las tropas rebeldes
de armas. Como estratega organicé una retaguardia indígena, implementé un servicio de
chasquis a caballo para transferir información y levanté un escuadrón de luchadoras
quechuas y aimaras. Por mi gran coraje en los enfrentamientos me nombraron jefa
interina de la rebelión tras el triunfo de Sangarará.
A comienzos de 1781 contábamos con un ejército de siete mil hombres y mujeres, en
ese mismo año junto a mi esposo y dos de mis hijos caímos en una emboscada española
en la cual nos trasladaron a Cuzco, donde nos torturaron en busca de información, pero
sin éxito. Nos condenaron a muerte y nos condujeron a la Plaza de Armas, donde luché
contra mis verdugos los cuales terminaron cortándome la lengua y golpeándome hasta
morir. Lo mismo con mi marido. Nuestros cuerpos fueron desmembrados y partes de
ellos enviados a diferentes pueblos para mostrar las posibles consecuencias del
levantamiento.
Y acabando así con nuestras vidas un 18 de mayo de 1781.

Baltazar Valera Yasira || 5to Pre Optimismo