El método de casos es un modo de enseñanza en el que los alumnos construyen
su aprendizaje a partir del análisis y discusión de experiencias y situaciones de la vida real. El aprendizaje basado en casos enfrenta al estudiante con ‘circunstancias’ de la vida real aplicadas a las materias de cada nivel educativo y que tiene que resolver a través del análisis, el pensamiento crítico y el trabajo colaborativo. A continuación, mostramos en qué consiste y su aplicación en el aula. El aprendizaje basado en casos es una estrategia didáctica gracias a la cual los estudiantes modulan su aprendizaje a través del análisis, la investigación, la propuesta de soluciones y el debate en grupo. Para ello, hacen uso de casos prácticos (en su mayoría reales) que les ayuda a fomentar habilidades como el pensamiento crítico y el trabajo colaborativo de cara a su futuro profesional. Según la pedagoga y escritora estadounidense Selma Wassermann, una reconocida experta en la metodología, en este tipo de aprendizaje «los casos se consideran instrumentos educativos complejos que aparecen en forma de narrativas». Dichas narrativas se generan en torno a problemas o situaciones que ocurren en la vida real (aunque también pueden ser ficticios). De este modo, los casos se centran en distintas materias y asignaturas y cada uno de ellos incluye información y datos (de tipo psicológico, sociológico, científico, antropológico, histórico u observacional), además de material técnico.
A nivel de aprendizaje, este tipo de enseñanza proporciona a los
estudiantes una serie de capacidades y habilidades de gran utilidad para su futuro profesional. Así, el alumnado debe tomar sus propias decisiones ante un caso práctico, en el que a partir de una descripción general y una serie de conocimientos previos (basados en los contenidos teóricos de la materia en cuestión) tiene que aplicar una serie de soluciones al mismo. Para llegar a dichas soluciones, pone en práctica el análisis y la reflexión, además de promover la creatividad. Por otro lado, el trabajo colaborativo es fundamental para llegar a la resolución del caso.
Claves didácticas para renovar la enseñanza: Planificar estratégicamente. Diseñar materiales y entornos estimulantes. Gestionar un aula activa. Evaluar con sentido