Es la acción y efecto de expropiar. Este verbo hace referencia a la conducta
desarrollada por la administración pública para privar a una persona de la titularidad de un bien (como una casa, una empresa o una fábrica) o de un derecho, a cambio de una indemnización. La expropiación se lleva a cabo bajo el argumento del interés social o la utilidad pública, lo que generalmente quiere decir que se encuentra dentro del marco de la ley. La Expropiación es una institución de Derecho Público, constitucional y administrativo, que consiste en la transferencia coactiva de la propiedad privada desde su titular al Estado, mediante indemnización: concretamente, a un ente de la Administración Pública dotado de patrimonio propio. Puede expropiarse un bien para que este sea explotado por el Estado o por un tercero. La expropiación es una figura consistente en la transferencia del derecho de propiedad de un bien de manos de su titular a favor del Estado o de un tercero. Dicho acto debe encontrarse basado en causas de utilidad pública o interés social debidamente justificadas, recibiendo el expropiado una justa indemnización. El procedimiento a seguir para llevar a cabo una expropiación se encuentra regido por la Ley No. 344 sobre Procedimiento de Expropiación de fecha 31 de julio de 1943 y legislaciones complementarias. Dentro del ámbito del derecho de inversión, una expropiación paulatina se refiere a una forma indirecta de expropiación en donde una serie de actos atribuibles al Estado dentro de un lapso determinado culminan en la expropiación de un bien objeto de una inversión. Bajo esta premisa, se entiende que la realización de la inversión o adquisición del bien, según sea el caso, tuvo lugar bajo situaciones particulares y que actuaciones subsecuentes atribuibles al Estado han perjudicado los derechos del inversionista y disminuido el valor de su inversión hasta el punto de considerarse una violación a sus derechos adquiridos frente al mismo. Dichos actos discrecionales, analizados de forma aislada en lugar del contexto del flujo global de acontecimientos pueden parecer inofensivos de cara a la potencial expropiación. No obstante, en retrospectiva se hará evidente que los mismos conformaron parte de una acumulación de actos perjudiciales y omisiones que en conjunto equivalen a la expropiación de los derechos del inversionista. Cabe destacar que el grueso de las inversiones se encuentran protegidas bajo acuerdos específicos con el Estado receptor, cubriendo aspectos tales como impuestos, regulaciones aduanales, así como regulación de precios, entre otros. Dichos acuerdos forman el fundamento legal y financiero de la inversión, así como la base de las decisiones de negocios tomadas en virtud de estos, por lo que su obstaculización o incumplimiento pueden hacer colapsar el proyecto como tal y dar lugar a una demanda bajo la correspondiente corte internacional, bajo la premisa de que el Estado receptor llevó a cabo medidas adversas, incluyendo renegociaciones infructíferas y dilaciones o suspensiones de las actividades lucrativas del inversionista que desembocaron en la cancelación del proyecto. La expropiación es una potestad pública innovativa (extintiva de derecho).
Es una institución de Derecho Público. Es un proceso ablatorio, imperativo, coactivo, forzoso,
unilateral, la forma coactiva con que opera la expropiación, es quizás su característica más resaltante. Es un medio o modo de adquisición de Derecho Público, necesario para la realización del Estado Social; se constituye en una limitación al derecho de propiedad, que implica la pérdida del derecho de propiedad, y el bien jurídico afectado, es la totalidad del derecho. Es “… un procedimiento especial que facilita al Estado la realización de obras y servicios en cumplimiento de sus altos fines y de la específica función social de la propiedad…” Como limitación al derecho de propiedad, surge como un “ataque exterior”
emanado de un acto de poder, a través de un acto administrativo declaratorio. Siendo una
potestad, tiene como garantía (frente al despojo total de la propiedad), la intervención de 3 poderes.
Artículo 113. Expropiación. El asiento de inscripción de la transferencia de
dominio por expropiación se extenderá en mérito a la escritura pública o al formulario registral respectivo, en el que debe consignarse la ley autoritativa de la expropiación, la norma legal que la ejecuta y el monto de la indemnización justipreciada, precisándose si el justiprecio fue pagado o consignado, Simultáneamente a la inscripción de la transferencia. el Registrador procederá a cancelar los asientos de inscripción de los derechos reales y personales que resulten incompatibles con la expropiación.
Pueden ser objeto de expropiación por el Estado todos los bienes inmuebles de dominio privado.
El tratamiento de los locales y bienes de las misiones diplomáticas, oficinas
consulares y organizaciones internacionales está sujeto a lo dispuesto en los tratados de los que el Perú es parte y otras normas de derecho internacional que puedan ser aplicables al Estado peruano. Cuando corresponda, se considerará también respecto de dichos locales y bienes el principio de reciprocidad
Introducción al derecho internacional privado: Tomo III: Conflictos de jurisdicciones, arbitraje internacional y sujetos de las relaciones privadas internacionales