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Condiciones de validez y requisitos de

fondo para contraer matrimonio


El matrimonio en la República Dominicana puede ser celebrado tanto
civilmente, por ante un Oficial del Estado Civil, como a través del rito de la
Iglesia Católica. El art. 55 de la ley 659 estable lo siguiente: “El
matrimonio es una institución que se origina en un contrato celebrado
entre un hombre y una mujer que han dado su libre consentimiento para
casarse, y que tienen capacidad requerida para certificar este acto».
Las Condiciones de validez y requisitos de fondo para contraer matrimonio
son los siguientes:
1.La heterosexualidad de la pareja: La doctrina, la jurisprudencia y la
legislación están de acuerdo en que los contrayentes deben ser de sexo
opuesto. (Art. 55 de la ley 659. requisito de fondo.)
2.Capacidad jurídica de los contrayentes. Plena capacidad de goce y de
ejercicio de sus derechos. Restricciones para los menores de edad, los
estados de demencia, o los declarados interdictos por la justicia.
3.Consentimiento matrimonial. “El consentimiento forma o hace el
matrimonio entre dos personas interesadas en darse o recibirse como
marido y mujer.” Tiene que estar exento de alteraciones, simulaciones o de
maniobras fraudulentas pasibles de llegar a viciar tal declaración de
voluntad de los contrayentes, es decir, debe darse sin violencia, al margen
de error y libre de dolo.
4.La edad núbil. (Es decir, que está en edad de contraer matrimonio).
5.La ausencia de impedimentos para contraer matrimonio.
6.Intervención del oficial del estado civil.

EI CONTRATO DE MATRIMONIO EN LA REPÚBLICA DOMINICANA Y SUS


PRINCIPIOS.

El contrato de matrimonio, no es más que un instrumento en virtud del


cual los futuros cónyuges van a regular las relaciones patrimoniales que
regirán durante el matrimonio, y así mismo determinar el destino de sus
bienes al momento de la disolución.
PRINCIPIOS QUE RIGEN EL CONTRATO DE MATRIMONIO.

El principio de la libertad, que permite a los futuros cónyuges escoger el


régimen matrimonial de su elección siempre que respeten la ley y las
buenas costumbres, y el principio de inmutabilidad, el cual establece que
luego de ser efectuado el contrato de matrimonio no puede hacerse
ninguna modificación en el mismo.

La inobservancia de la inmutabilidad, como de cualquier otro principio para


el perfeccionamiento del contrato, afecta no solo a las partes, sino también
a la familia y a los terceros.

El contrato de matrimonio al igual que los demás contratos, precisa para


su validez ciertos requisitos de fondo y de forma, establecidos por la ley.
REQUISITOS DE FONDO.

Los requisitos de fondo se relacionan con el consentimiento y la


capacidad, de manera que, en lo que respecta al consentimiento, el
mismo debe existir y ser libre, es decir, excento de vicios. El
consentimiento debe ser expresado por todas las partes, al momento de
la conformación del contrato, no sólo por los cónyuges, sino también por
todas las personas que intervienen en el contrato. Por otro lado tenemos
la capacidad, según el artículo 1398 del código civil, la capacidad para
contraer el contrato de matrimonio, está en relación con la capacidad
para contraer matrimonio.

REQUISITOS DE FORMA.
El artículo 1394 del código civil, le da un carácter solemne al contrato de
matrimonio, al establecer que éstas convenciones deberán realizarse
antes del matrimonio y únicamente por ante notario público.

Artículo 1394.- Todas las convenciones matrimoniales deberán


extenderse antes del matrimonio, por acto ante notario. El notario dará
lectura a las partes del último párrafo del artículo 1391, así como
también de la última parte del presente artículo. Se hará mención de ésta
lectura en el contrato, bajo la pena de dos pesos de multa al notario que
contravenga. El notario expedirá a las partes, en el momento de la firma
del contrato, un certificado en papel simple y sin gastos, expresando sus
nombres y lugar de residencia, los nombres, apellidos, cualidades y
domicilio de los futuros esposos, así como la fecha del contrato. Este
certificado indicará que debe llevarse al Oficial del Estado Civil, antes de
la celebración del matrimonio.

La publicidad es importante para saber qué régimen matrimonial tienen


los cónyuges respecto a terceros. En toda inscripción de matrimonio en
el Registro Civil se hará mención, en su caso, de las capitulaciones
matrimoniales que se hubieren otorgado, así como de
los pactos, resoluciones judiciales y demás hechos que modifiquen
el régimen económico del matrimonio.

No es obligatorio inscribir las capitulaciones matrimoniales en el Registro


Civil, pero sí recomendable, porque si los acreedores acuden a él y no
están recogidas, no podrán saber qué régimen económico
matrimonial tienen. Por otra parte se ordena que si existen
modificaciones en las capitulaciones, se indique mediante una nota en la
escritura anterior.

La publicidad puede darse en tres registros:

1) Registro Civil. Si no se inscriben las capitulaciones matrimoniales aquí


no significa que no existan, puesto que su inscripción no es obligatoria; y
lo no escrito es oponible a terceros de buena fe.
2) Registro de la Propiedad. Cuando se trate de capitulaciones que
vienen a modificar el régimen económico del matrimonio. Lo que accede
a este Registro son los títulos que constituyen, modifican o
extinguen derechos reales sobre bienes inmuebles ya inscritos. Cuando
se trata de estas capitulaciones respecto a bienes inmuebles concretos, sí
se exige su inscripción en el Registro Civil.

3) Registro Mercantil. Para que los bienes privativos del cónyuge no


comerciante no se vean afectados por las deudas del cónyuge
comerciante.

NULIDAD MATRIMONIAL EN REPÚBLICA DOMINICANA.


Para empezar a tratar el tema de la nulidad del matrimonio, es vital,
indicar que en la nulidad matrimonial, el matrimonio queda como si
nunca se hubiere realizado, por lo que, al declararse la nulidad, las
partes regresan a su estado civil inicial, asumiéndose que nunca existió
la condición de casado en este caso.
Es importante aclarar que los derechos y obligaciones que existe por
parte de cada padre con los hijos seguirán siendo los mismos, si en este
matrimonio se procreó hijos.
La nulidad matrimonial se puede solicitar solo en los casos en que haya
existido un vicio grave presente al momento de contraer el matrimonio.
La Ley establece causales muy reducidas, y resulta difícil probar dichos
casos. Esta es la razón del por qué muchas personas
prefieren simplemente divorciarse, y no pasar por el proceso de nulidad
matrimonial, el cual resulta ser más complejo.
En este artículo estableceremos sobre la Nulidad de Matrimonio sobre lo
referente a lo siguiente:

1. QUIÉNES PUEDEN IMPUGNAR UN MATRIMONIO.


2. PROCEDIMIENTO A SEGUIR.
3. CONSECUENCIAS DE LA NULIDAD MATRIMONIAL.

En la República Dominicana, los Actos del Estado Civil pueden ser


anulados mediante Sentencia, por lo que un matrimonio puede ser
anulado, si cumple las formalidades establecidas en la Ley.
Además del Código Civil Dominicano, la Ley No. 659, sobre Actos del
Estado Civil, establece todo lo relativo a las oposiciones y nulidades del
matrimonio, ambos son la base para realizar el procedimiento.
Quienes pueden solicitar la impugnación o Nulidad Matrimonial
En la Ley No. 659 el Art. 61, se establece quienes pueden impugnar un
matrimonio:
A) En el caso de ser realizado sin el consentimiento libre de ambos
esposos o de uno de ellos, estableciendo que en este caso solo podría
ser impugnado por los contrayentes o por aquel de ellos cuyo
consentimiento no haya sido libre.
B) Cuando haya habido error en la persona, el matrimonio podrá
únicamente ser impugnado por el cónyuge que haya padecido el error.
C) El matrimonio contraído sin el consentimiento de los padres, de los
ascendientes, del tutor o del Consejo de Familia, puede ser impugnado
por las personas cuyo consentimiento era requerido, o simplemente por
uno de los cónyuges que entienda requería este consentimiento.
En resumen pueden solicitar la nulidad del matrimonio:
– Los cónyuges.
– El Ministerio Público.
– Cualquier persona que tenga un interés directo en el asunto.
Es bueno tener en cuenta que no es admisible la demanda de nulidad
del matrimonio, si los esposos hubieren hecho vida común continuada
durante los seis meses posteriores al momento en que el cónyuge
hubiera recobrado su plena libertad de acción o que hubiere reconocido
el error.
El matrimonio declarado nulo puede producir, efectos civiles lo mismo
respecto a los cónyuge que a los hijos nacidos dentro de este
matrimonio, cuando se ha contraído de buena fe, pero si únicamente uno
de los esposos hubiere actuado de buena fe, el matrimonio produce,
sólo en su favor y en el de los hijos, efectos civiles.
El procedimiento a seguir para una demanda en nulidad de matrimonio,
es un proceso parecido a una demanda de divorcio, ante los Tribunales
de Familia, donde se requiere:
– Demanda introductiva.
– Acta de matrimonio a impugnar.
– Documentos de identidad.
Se deberá de depositar todos los documentos que puedan demostrar la
causa invocada para la nulidad del matrimonio, siendo esto muchas
veces difícil de probar, por lo que antes de realizar cualquier paso para
la demanda tener a mano la prueba de la misma.
El Art. 62, de la Ley, establece sanciones para el funcionario que haya
celebrado el matrimonio declarado nulo.
Por ejemplo el oficial del estado civil o funcionario, que hubiere
autorizado matrimonio según las prescripciones de esta ley que d ejare
de cumplir lo dispuesto sobre la inscripción de los certificados y pruebas
de matrimonio, se le impondrá una multa de cien pesos ($100.00), o
prisión de uno a tres meses.
Si existe alguna falsedad de documentos, y fuera atribuible al funcionario
que hubiere autorizado un matrimonio, se castigarán como falsedades en
documentos públicos, de acuerdo a lo establecido en el Código Penal
Dominicano.
El que autorizare o celebrare un matrimonio, no siendo un funcionario
autorizado por la ley, se castigará con una pena de uno a dos años de
prisión.
En el caso de los cónyuges, a sabiendas de que en su persona existen
una o varias de las causas de impedimento para la celebración del
matrimonio consiguiera engañar al funcionario que deba autorizar el
matrimonio, será castigado en la siguiente forma:
A) Si el matrimonio no hubiere llegado a efectuarse, la tentativa se
castigará con pena de uno a dos años de prisión.
B) Si el matrimonio se hubiere celebrado, con penas de trabajos públicos
de cinco a diez años.
C) Estas penas no se aplicarán al cónyuge que resultase inocente en el
delito.
IMPUGNAR UN MATRIMONIO POR LA EXISTENCIA DE UN MATRIMONIO
ANTERIOR.
El contraer un segundo matrimonio, cuando existe un primer matrimonio,
es lo que se define como bigamia.
La bigamia, por tratarse de un estado en el cual una persona se
encuentra casada con otra al mismo tiempo, caracteriza un matrimonio
que afecta al orden público, por lo que además de las partes ligadas en
el doble vínculo matrimonial, estar interesadas en impugnar el mismo,
también el Estado puede perseguir la impugnación del mismo.
La ley núm. 659, sobre Actos del Estado Civil, prohíbe terminantemente
a los ciudadanos, en su artículo 55, la celebración de un segundo en
caso de existir uno anterior.
El artículo 61, establece el derecho a cualquier persona interesada de
demandar la nulidad de un matrimonio cuando éste no ha cumplido con
las formalidades exigidas por la ley, concernientes al consentimiento
libre de vicios o ante la existencia de un matrimonio anterior.
Los artículos 147 y 184 del Código Civil, bajo el Título V Matrimonio,
consagran lo siguiente: Art. 147, establece que no se puede contraer
segundo matrimonio antes de la disolución del primero (que este se
disuelve mediante el divorcio), por otro lado el artículo 184 dispone
que, todo matrimonio contraído en contravención a las prescripciones
contenidas los artículos 147 puede ser impugnado por los mismos
esposos, o por todos aquellos que en ello tengan interés.
Por lo que de acuerdo a la Ley un segundo matrimonio, se declarará sin
efecto alguno y nulo.
LA INFIDELIDAD COMO CAUSA DE NULIDAD EN EL MATRIMONIO
CANÓNICO
Muchas personas se preguntan si la infidelidad dentro del matrimonio
canónico es una causa justificable para iniciar un proceso de nulidad de
matrimonio.
La Iglesia católica tiene estructurado Tribunales Eclesiásticos que se
dedican a dictaminar las causas justificables para la ejecución de una
solicitud de nulidad matrimonial eclesiastica.
Los Tribunales Eclesiásticos, en nuestro país son exclusivamente de tipo
matrimonial, y se encargan de dar una respuesta a los asuntos que
tienen que ver con las dudas que una persona tenga o pueda tener
sobre la validez de su vínculo matrimonial.
Pero la pregunta más importante en este punto es, ¿Los matrimonios
que tienen situaciones de infidelidad, podrían solicitar la declaración de
nulidad en base a dicha infidelidad?
La respuesta a esta pregunta, es qué NO, la infidelidad no es una causa
de nulidad, para la iglesia católica, pero sí puede ser un indicador de
que algo no funciona bien, o sea mediante esto se podría probar quizás
que hay un desequilibrio hasta de naturaleza psíquica, psicológica y
hasta psiquiátrica en unos de los contrayentes.
Una vez comprobada la infidelidad el juez, podría entender que la
persona no puede cumplir con lo que prometió, y que quizá el
consentimiento matrimonial pudiera estar viciado.
Los pasos a seguir para solicitar la nulidad matrimonial, son los
siguientes:
– La parte interesada debe de acercarse al obispado que le
corresponde, y preguntar por el oficial responsable del tribunal, otra
opción podría ser hacer una carta narrando su historia.
– Se deberá de anexar: carta de solicitud, acta de matrimonio, acta
de bautismo de los dos cónyuges y acta de bautismo de los testigos.
Es importante que sepan que para la Iglesia el matrimonio es para toda
la vida, por lo que es difícil solicitar la nulidad de dicho vínculo.
En el caso de que una persona que se someta ante un tribunal de la
iglesia para pedir la nulidad de su matrimonio, no esté conforme con la
decisión del tribunal, puede acudir a un segundo tribunal, o sea puede
apelar la decisión, y si aún sigue inconforme puede acudir al Tribunal
Supremo de la Rota Romana que es la última instancia.
En caso de no aplicar la anulación de su matrimonio, el único camino
cierto y seguro que le quedara es el Divorcio en la República Dominicana,
y nuestra legislación le da opciones de que se pueda realizar aun una de
las partes no esté de acuerdo, por ejemplo Divorcio por Incompatibilidad
de Caracteres en República Dominicana o también el Divorcio por Mutuo
Consentimiento en República Dominicana que es cuando ambos están de
acuerdo y es bastante rápido.

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