Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
En Estados Unidos llegó a ser casi el clérigo nacional: leyó partes de la Biblia durante el
funeral de Richard Nixon en California, en 1994; elevó oraciones en la Catedral
Nacional en Washington, D. C. en honor a las víctimas de los atentados del 11 de
septiembre de 2001, y, pese a que su salud estaba deteriorada para entonces, viajó a
Nueva Orleans en el 2006 para predicar ante sobrevivientes del huracán Katrina.
Pero su alcance también fue global. Fue recibido incluso por líderes de regímenes
represivos y cerrados como el norcoreano Kim Il-sung, que invitó a Graham a predicar
en las iglesias de Pionyang sancionadas por el Estado.
Cuando era más joven, Graham también era visto como un modelo a seguir por
evangelistas: muchos querían copiar su cadencia al predicar, sus gestos e incluso su
peinado.
Aunque también llegó a ser criticado: al principio de su carrera algunos líderes y
teólogos protestantes lo acusaron de predicar con un mensaje simplista de salvación
personal que no tomaba en cuenta temas complejos de la sociedad como el racismo o
la pobreza. Los críticos también dijeron que había demostrado ser ingenuo por
asociarse tan públicamente con el expresidente estadounidense Nixon incluso después
de que este ya había sido implicado en el escándalo de escuchas a la oposición
demócrata en Watergate.
CONCLUSIÓN
A partir de la cruzada de Los Ángeles en 1949, con la que Graham salió a la luz pública,
llevó a cientos de miles de personas a tomar decisiones personales de seguir a Cristo,
el cual fue objetivo principal de su ministerio durante décadas.