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Pequeñas Comunidades Eclesiales Octubre 2022

TEMA: JESÚS DE NAZARET, ACONTECIMIENTO CENTRAL DE LA HISTORIA DE SALVACIÓN

BIENVENIDA: Queridos hermanos y hermanas, una oportunidad más que el Señor Jesús nos
regala para encontrarnos en nuestra Pequeña pero alegre Comunidad Eclesial. Ahora si ya
podemos darnos un abrazo de bienvenida y como hermanos.
El Señor Jesús es quien nos llama y conduce nuestro caminar: seguir construyendo la Iglesia:
Comunidad de Comunidades.
SIGNOS: En su altar colocar la Palabra de Dios y una vela. Poner una imagen de Jesús: la que
tengan o la que les llame más la atención; puede ser un crucifijo, una imagen de Jesús pescador,
etc…
CANTO INICIAL: ¿Quién eres tú, quién eres tú? Quiero saber Jesús quién eres tú…

ORACIÓN INICIAL POR LAS PEQUEÑAS COMUNIDADES ECLESIALES


Señor Dios y Padre nuestro, que nos has llamado a ser pueblo tuyo en esta Diócesis de Ciudad
Altamirano.
Concédenos vivir la alegría de la fe y el compromiso cristiano en las pequeñas comunidades; y
así experimentar en nuestras relaciones fraternas la comunión que nos haga sensibles a servir a
todos en sus alegrías, tristezas y esperanzas.
Que nos una la oración hecha en tu nombre. Que la escucha de la Palabra de tu Hijo nos ayude a
discernir y actuar como verdaderos discípulos-misioneros que anuncian la justicia y la paz en
nuestras familias, pueblos y comunidades.
Danos tu Espíritu Santo, a fin de que vivamos la experiencia de ser más hermanos entre
nosotros y seamos signos de tu reino en el mundo de hoy.
Ayúdanos a caminar juntos en esta experiencia de ser Iglesia que llega a todos y no excluye a
nadie; y así dar razón de nuestra esperanza. Virgen de san Lucas acompáñanos en este camino
de fe e intercede por nosotros tus hijos. Amén.
 

  EXPERIENCIA HUMANA
 

 Compartamos en un primer momento cómo hemos pasado estas semanas….cómo nos


sentimos ahora que los chicos ya regresan a clases presenciales... ¿Qué ha favorecido y qué no
está favoreciendo—sea en lo económico, social... Conocemos sus libros de texto…? El trabajo en
casa o en otros lugares fuera de casa...

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Pequeñas Comunidades Eclesiales Octubre 2022

Ahora escuchamos la siguiente historia y tratamos de responder, al final, las preguntas.

Se busca imagen de Jesús

- De que quiere usted la imagen, preguntó el imaginero. - Tenemos de pino. Hay imágenes
de yeso. Mire este Cristo yacente de madera de puro cedro. Depende de quien la encarga: una
familia o un templo, o si el único objetivo es ponerla en un museo.

- Déjeme, pues, le explique lo que de verdad deseo: - yo necesito una imagen de Jesús el
galileo que refleje su fracaso intentando un mundo nuevo, que conmueva las conciencias y
cambie los pensamientos.

- Yo no quiero la imagen encerrada en iglesias y conventos, ni en casa de una familia para


presidir sus rezos. No es para llevarla en andas, cargada por costaleros.

- Yo quiero una imagen viva de un Jesús hombre, sufriendo, que ilumine a quien la mire el
corazón y el cerebro. Que den ganas de bajarlo de la cruz y del tormento, y quien contemple esa
imagen, no quede mirando un muerto. Ni que con ojos de artista sólo contemple un objeto ante
el que exclame admirado ¡qué torturado más bello!

- Perdone, si le digo, - responde el imaginero, - que aquí no hallará seguro la imagen del
Nazareno. Vaya a buscarla en las calles, entre las gentes sin techo, en hospicios y hospitales
donde haya gente muriendo. En los centros de acogida en que abandonan a viejos, en el pueblo
marginado entre niños hambrientos, en mujeres maltratadas, en personas sin empleo.

Pero la imagen de Cristo no la busque en los museos, no la busque en la es estatuas, en los


altares y templos. Ni siga en las procesiones los pasos del Nazareno. No la busque de madera, de
bronce, de piedra o yeso. Mejor busque entre los pobres su imagen de carne y hueso.

Silencio y reflexión

¿Qué imagen de Jesús tengo?


¿Qué conozco de la vida de Jesús? ¿En qué lugares o dónde o cómo puedo conocer a Jesús?
¿Quién es Jesús para mí?
 

  ILUMINACION. NOS DEJAMOS ILUMINAR POR LA PALABRA DE DIOS


  MINA
Tomamos nuestra Biblia y leemos la carta a los Hebreos 1, 1-4 y leemos el texto.
Vamos a distinguir dos tiempos o momentos en el hablar de Dios: en el pasado y en el ahora.
- ¿Cómo habló Dios en el pasado y por medio de quién?
- En el ahora, ¿por medio de quién nos habla?
- ¿Cómo define o qué cosas se dicen del Hijo? Los versículos del 2-4 nos dicen quién es el
Hijo.
- De esas cosas que se dicen del Hijo, ¿cuál te gusta más y por qué?
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Hemos venido reflexionando algunos temas de la historia de salvación. Ahora nos toca meditar
sobre el acontecimiento central de nuestra fe, el acontecimiento JESUS-CRISTO.
Cuando decimos acontecimiento cristo nos referimos a la vida de Jesús, a su misterio de
salvación que llevó a cabo con su pasión, muerte y resurrección; y a lo que siguió después, es
decir, a la vida de la Iglesia. Por eso vamos a iniciar nuestra reflexión siguiendo estos puntos:

a) La Encarnación del Hijo de Dios en el seno de María (Lc 1, 26-38; 2,1-21; Mt 1,18-25; Jn
1,1-27; Gal 4,4) Los evangelios nos dicen que Jesús se encarnó por obra del Espíritu Santo en
María y ella lo dio a luz. Este es uno de los misterios centrales de nuestra fe. por eso decimos
que Jesús es verdadero Dios y verdadero Hombre.

b) Otro misterio de la vida de Jesús es su ministerio de predicación del Reino de Dios. Jesús
anuncia y realiza el reino de Dios con sus palabras y obras. Reino de Dios significa vivir la unidad
y el amor, la justicia y la verdad, la solidaridad y la fraternidad. Reino de Dios que implica la
liberación de todo lo que oprime y esclaviza (Mt 8, 16-17). Un reino que exige respuesta radical
de conversión y seguimiento de Jesús.

Para hacer visible la presencia del reino en este mundo, Jesús reúne a un grupo de
personas, hombres y mujeres que lo seguían, que vivían como él, que estaban de parte de él: los
doce (Mt 10,1-4); 11,1), los 72 (Lc 10, 1-20) y todavía un grupo más abundante (Lc 6,17; 19,37;
Jn 6,60) compuesto de hombres (Mc 2,14; Mt 27,57) y mujeres (Lc 8,1-3; Mc 15,40-41). Es la
comunidad de los discípulos y seguidores, es la Iglesia.

c) Jesús constituye definitivamente a la Iglesia. La culminación de su ministerio en el


misterio pascual de su muerte y gloriosa resurrección. La nueva alianza se sella en la sangre de
Cristo que es salvación para todos (Mt 26,28; Mc 14,24; Lc 22,20; Jn 19,34)

d) A partir de la resurrección de Cristo inicia el anuncio de la Iglesia. La iglesia tiene la tarea


de anunciar el Evangelio, la Buena Noticia para todos. Quienes inician este primer anuncio son
los apóstoles, testigos de Jesús. Los apóstoles convivieron con Jesús en su ministerio de
predicación y convivieron con Él después de su resurrección.

El anuncio de Cristo, de su evangelio no es una noticia del pasado, es un anuncio presente, un


ahora. Dios nos sigue hablando. La salvación del hombre depende de si aceptamos a Jesús o no
lo acepamos.

La enseñanza de Jesús a cerca del reino de Dios tiene vigencia ahora. Se nos dice ahí cómo
podemos entrar desde ahora en ese reino. Pues los valores del reino son justicia, paz, gozo,
alegría, vida….

Por eso la vida cristiana es un seguimiento de Jesús. Este seguimiento lo haremos cuando nos
dediquemos a conocer más y más a Jesús en los evangelios, en la oración, en la eucaristía, en el
apostolado, en los pobres… muchas personas y circunstancias que nos dan a conocer también a

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Jesús: cuando lo hicieron con el más insignificante de mis hermanos más pequeños, conmigo lo
hicieron (Mt 25,40)

COMPROMISO

Desde nuestro Bautismo (aunque éramos muy pequeños), aceptamos EL SEGUIMIENTO DE


JESÚS…
¿Qué me gusta más de la vida de Cristo y que me sea más fácil imitarlo?
¿Por qué nos cuesta seguir a Jesús?
Por qué nuestro compromiso cristiano sólo lo dejamos en algunos Sacramentos como la
Primera Comunión o Confirmación como un compromiso de días o semanas...y ahí termina…?
La semilla “La Palabra de Dios” que es JESUCRISTO, la dejamos morir y no da fruto…
 
4. CELEBRAMOS NUESTRA FE
Nos ponemos alrededor del altar y hacemos nuestra oración.
Invocamos a Jesús según los títulos con que conocemos de Él, a manera de letanía, según la
experiencia de nuestra relación con Jesús. Por ejemplo:
Señor Jesús, Hijo de Dios Todos: ten piedad de nosotros
Señor Jesús, mi salvador Todos: te piedad de nosotros
Se pueden agregar más y decirlas según la experiencia de cada uno …….
Al final todos cantamos: tú has venido a la orilla…

5. MEMORIZACION
El acontecimiento Cristo: su pasión, muerte y resurrección nos dan vida y salvación.

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