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Es muy común querer ocultar vigas y columnas dentro de losas o muros

respectivamente. Sin embargo, muchas veces no entendemos en cabalidad el riesgo


y pormenores de tomar la decisión de ocultar las vigas dentro de las losas.
Uno de los problemas más obvios del uso de vigas planas son sus altas deflexiones o
deformaciones bajo carga. Más aún si la carga es constante y prolongada en el
tiempo.

Tal vez en un tono gracioso indico que la única ventaja de las vigas planas es que no
se ven en los acabados arquitectónicos de la planta. Sin embargo, existe una ventaja
más, y es la de facilitar el paso de instalaciones por el entretecho o cielo falso de la
planta de análisis. Al no existir vigas colgadas, el paso de tuberías de alcantarillado
sanitario o ductos de aire acondicionado o calefacción por debajo de la losa es mucho
más cómodo.
Si bien las altas cantidades de material hacen a la viga plana un elemento caro de
construir, el aspecto más alarmante es sin duda el de la excesiva deformación que
sufren.

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