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ESTRUCTURA Y FUNCIÓN DEL SISTEMA ESQUELÉTICO

El esqueleto (parte pasiva del


aparato locomotor), formado por
los huesos y las estructuras
complementarias -
articulaciones, cápsulas y
ligamentos- que permiten el
ensamblaje de los mismos,
cumple las siguientes funciones:

● Sirve de armazón al
cuerpo.
● Protege los órganos
delicados.
● Permite el anclaje de
los músculos.
● Actúa como un
conjunto de brazos de
palanca en los
movimientos.
● Produce células
sanguíneas (médula
ósea roja).
● Sirve como almacén
de calcio y fósforo y
regula su
concentración en la
sangre.
● Almacena grasas en
su interior (médula
ósea amarilla)
TIPOS DE HUESOS 

Las piezas óseas del esqueleto están constituidas por tejido óseo.

Según su forma y estructura, pueden


clasificarse en:

● Huesos largos: Fémur, tibia,


peroné, húmero, etc.
● Huesos cortos: Huesos de la
muñeca y del tobillo.
● Huesos planos: Omóplato,
huesos del cráneo, etc.
● Huesos
irregulares: Vértebras, huesos
de la base del cráneo.

En los huesos largos se distingue la diáfisis,  parte central larga del hueso, hueca, formada por tejido óseo compacto, en
cuyo interior se encuentra la médula ósea y la epífisis, más ancha, formada por hueso esponjoso recubierto por una
capa de hueso compacto. Entre ambas se sitúa la metáfisis en la que se localiza la zona de crecimiento.

FORMACIÓN Y CRECIMIENTO OSTEOGÉNESIS

La osteogénesis (proceso de formación de los huesos) está regulada genéticamente y es controlada por la hormona
del crecimiento y las hormonas sexuales y puede alterarse por factores bioquímicos, biofísicos y alimentarios.

El esqueleto del embrión está formado por cartílago hialino y tejido conjuntivo. La osificación es la sustitución de estos
tejidos por tejido óseo. Empieza alrededor de la sexta semana de vida intrauterina y continua hasta la edad adulta.

Inicialmente el hueso está constituido por un esbozo cartilaginoso (1), en el que


van apareciendo puntos de osificación (2 y 3), que lo ocupan totalmente. Surge en
el centro una pequeña cavidad  (4) que se va ampliando (5) hasta formar el
conducto que albergará la médula amarilla o tuétano (6).
En los huesos largos, la osificación encondral -formación de hueso en el cartílago hialino- se inicia en el centro y
continúa en los extremos. El crecimiento posterior de los huesos en longitud, sigue en los cartílagos de conjunción o de
crecimiento, situados entre la epífisis y la diáfisis. Estos cartílagos, a medida que van creciendo, van osificándose en los
lugares de contacto con la diáfisis y la epífisis. Entre los 20 — 25 años de edad finaliza el crecimiento, al osificarse
completamente los cartílagos de conjunción.

El crecimiento de los huesos en grosor se lleva a cabo mediante la superposición de nuevas capas de tejido óseo
compacto, que se forman a partir de la proliferación del periostio. Al aumentar la edad del individuo, la actividad del
periostio va disminuyendo, con lo que el crecimiento en grosor se detiene. A medida que el hueso se va ensanchando,
el canal medular se va agrandando debido a que las capas internas de la diáfisis van siendo eliminadas por la acción de
la médula amarilla o tuétano, que es un tejido adiposo que rellena el canal de la diáfisis.

Los huesos planos del cráneo y las clavículas se desarrollan directamente a partir de membranas de tejido
conjuntivo: osificación membranosa.

LAS ARTICULACIONES

Las articulaciones son las uniones de los huesos entre sí. Según el grado de movilidad que permiten se clasifican en:

• Inmóviles o sinartrosis: se trata de uniones fijas, que no permiten el movimiento relativo de los huesos; tal es el
caso de los huesos del cráneo.

• Semimóviles o anfiartrosis: articulaciones  que poseen un pequeño movimiento. Entre los huesos existen unas
piezas cartilaginosas y un conjunto de ligamentos. Un ejemplo lo constituyen las articulaciones intervertebrales: entre
las vértebras se encuentran los discos intervertebrales, formados por un anillo externo de cartílago fibroso, llamado
anillo fibroso y una estructura interna blanda muy elástica llamada núcleo pulposo. Los discos permiten los
movimientos de la columna vertebral y absorben los choques verticales.

• Móviles o diartrosis: articulaciones que permiten un considerable movimiento relativo de los huesos. Entre las
superficies de articulación de los huesos, que están tapizadas con una lámina cartilaginosa, existe la bolsa sinovial, la
cual contiene un líquido incoloro y viscoso -líquido sinovial- que actúa a modo de lubricante y nutre al cartílago que
recubre el hueso. Los huesos, en este tipo de articulaciones, se hallan unidos entre sí por medio de ligamentos de tejido
conjuntivo fibroso. A este tipo pertenecen las articulaciones de la rodilla, del codo, del fémur con la cadera, del húmero
con la escápula y de las falanges.
En función del movimiento, las articulaciones móviles pueden ser de varios tipos:

EL ESQUELETO DE LA CABEZA

El cráneo

Es la caja que protege al encéfalo y está constituido por ocho huesos soldados entre sí. Estos huesos son los siguientes:

● El frontal, situado en la frente. Presenta en la parte inferior unos rebordes pronunciados llamados arcos
superciliares.
● Dos parietales, situados en la parte superior y lateral del cráneo.
● El occipital, situado en la nuca. Presenta en su base el agujero occipital, por donde pasa la médula espinal.

A los lados de este orificio están los cóndilos occipitales, que permiten la articulación del cráneo con la primera vértebra
de la columna.

●  Dos temporales, situados a los lados del cráneo, presentan tres porciones: la porción escamosa o concha
(que posee la apófisis cigomática y la cavidad glenoidea o mandibular para la articulación de la mandíbula), la
porción petrosa, situada debajo de la anterior en la que se aloja el órgano estatoacústico, y la porción
timpánica, que contiene el conducto auditivo externo.
● El etmoides, situado en el fondo de las fosas nasales. Presenta una lámina vertical, que separa las fosas
nasales, y una lámina horizontal o cribosa, atravesada por los orificios de los nervios olfatorios, de la que
sobresalen dos masas laterales y los cornetes nasales.
● El esfenoides, situado en la base del cráneo, sirve de unión a muchos huesos de la cabeza. Está formado
por el cuerpo cuboideo, que posee en su parte superior la silla turca (donde se aloja la hipófisis), y por tres
pares de apófisis en forma de alas.
8 Nasal
1 Frontal
9 Mandíbula
2 Parietal
10 Arco cigomático
3 Occipital
11 Apófisis estiloides 
4 Temporal
12 Apófisis mastoides 
5 Esfenoides
13 Lagrimal
6 Pómulo o malar
14 Etmoides
7 Maxilar superior 
15 Vómer

EL ESQUELETO DE LA CABEZA

La cara

Está formada por un conjunto de huesos que protegen los órganos de los sentidos y la cavidad bucal. Son los
siguientes:

● El vómer, que forma parte del tabique nasal junto con la lámina vertical del etmoides.
● Los cornetes inferiores, en el interior de las fosas nasales, debajo de los cornetes del etmoides.
● Dos nasales, que forman la parte superior de la nariz.
● Dos lacrimales, que forman parte de las órbitas oculares y contienen los conductos lacrimales.
● Dos pómulos o malares, en las mejillas, cada uno de los cuales presenta una apófisis que se suelda con la
apófisis cigomática del temporal, formando el arco cigomático.
● Dos maxilares superiores, cada uno presenta una apófisis ascendente que se articula con el frontal,
constituyendo el tabique externo de la nariz. Su cara inferior forma parte del paladar y en el borde presenta
los alvéolos, donde se insertan los dientes.
● Dos palatinos, que forman la parte superior del paladar.
● El maxilar inferior, que constituye la mandíbula inferior y presenta en su borde superior los alvéolos
dentarios.
● El hioides, situado en la base de la lengua, con forma de U, es el único hueso que no está articulado con
otros.
● Los huesecillos del oído medio: martillo, yunque, lenticular y estribo.
DESVIACIÓN DEL TABIQUE NASAL

Se produce cuando éste se encuentra desplazado lateralmente en relación a la línea media de la nariz. La desviación
suele producirse en la unión del tabique cartilaginoso con el óseo (El tabique nasal está formado por la lámina
perpendicular del etmoides, el tabique cartilaginoso el vomer y parte de los huesos palatinos y maxilares). Si la
desviación es importante, dificulta el paso del aire y facilita el desarrollo de infecciones.

EL ESQUELETO DEL TRONCO

La columna vertebral

La columna vertebral se extiende desde la cabeza hasta la pelvis; protege a la médula espinal y sirve de anclaje para
otros huesos. Está situada en la parte posterior del tronco, tiene forma de S alargada y está constituida por 33 —
34 vértebras, separadas entre sí por unas porciones cartilaginosas llamadas discos intervertebrales.

Cada vértebra está constituida por una porción anterior discoidal y maciza denominada cuerpo vertebral y un arco
posterior —arco vertebral—, que limita el orificio vertebral. El conjunto de orificios vertebrales forman el conducto
vertebral, en el que se halla alojada la médula espinal. El arco vertebral presenta la apófisis espinosa, en posición
posterior, un par de apófisis transversas en posición lateral y cuatro apófisis articulares, dos hacia arriba y dos hacia
abajo, que encajan las vértebras entre sí.

La columna vertebral presenta cuatro curvaturas, que permiten una posición del cuerpo vertical y equilibrada y
aumentan la resistencia de la misma: 2 convexas hacia delante: (cervical y lumbar) y 2 convexas hacia atrás: (dorsal y
sacra).

      En la columna vertebral, de arriba abajo, se distinguen cinco regiones:

● Cervical, en el cuello, comprende 7 vértebras; la primera, denominada atlas, presenta en la cara superior


dos superficies sobre las que se apoyan los cóndilos del occipital. La segunda, el axis, presenta un
pronunciado saliente vertical ue encaja en el agujero vertebral del atlas y actúa a modo de eje para el giro
lateral de la cabeza.
● Dorsal, en la espalda; formada por 12 vértebras, en las que se articulan las costillas.
● Lumbar, en la parte inferior de la espalda, con 5 vértebras.
● Sacra, debajo de la lumbar, con 5 vértebras soldadas entre sí, formando el denominado hueso sacro.
● Coxígea, al final de la columna, que comprende 4 — 5 vértebras constituidas únicamente por el cuerpo
vertebral, soldadas entre sí y que forman un hueso denominado cóxis.

 La caja torácica

La caja torácica, en la que están alojadas las vísceras del tórax, está formada por las vértebras
dorsales, el esternón y las costillas.

El esternón, situado en la parte anterior del tórax, es un hueso alargado en forma de espada, en el que
pueden distinguirse una parte superior denominada mango o manubrio, una parte central llamada hoja y una
parte inferior, en punta, cartilaginosa, denominada apófisis xifoides.

Las costillas son 12 pares de huesos alargados en forma de arco y con la concavidad hacia dentro. Existen
tres tipos de costillas:

o Verdaderas o esternales: los siete primeros pares, unidas al esternón mediante cartílagos.
o Falsas (tres pares), unidas entre sí por un cartílago que, a su vez, se une al del séptimo par.
o Flotantes (los dos últimos pares), que presentan su extremo anterior libre.

PUNCIÓN ESTERNAL

Como el esternón alberga médula ósea roja durante toda la vida y es fácilmente accesible y la corteza de hueso
compacto es fina, es un lugar ideal para la extracción de médula ósea para biopsia mediante punción.
EL ESQUELETO DE LAS EXTREMIDADES

 La cintura escapular

Une las extremidades superiores al tronco; está formada por la clavícula, hueso alargado situado en la parte anterior
del hombro, y el omóplato, hueso plano de la parte posterior.

● La clavícula tiene
forma de S alargada;
por un extremo se
articula con el mango
del esternón y por el
otro con la apófisis
acromion del
omóplato.
● El omóplato es un
hueso plano de forma
triangular que
presenta en su cara
externa una cresta
acabada en la apófisis
acromion, y en su
vértice exterior la
cavidad glenoidea.
Las extremidades superiores

Las extremidades superiores poseen los siguientes huesos: el húmero, en el brazo, el radio y cúbito, en el antebrazo,
los huesos del carpo, en la muñeca, los del metacarpo, en la palma y las falanges en los dedos. Todos estos huesos
son largos, excepto los del carpo, que son cortos.

● El húmero tiene en la
epífisis superior una
cabeza semiesférica
que se articula con la
cavidad glenoidea del
omóplato. En su
epífisis inferior
presenta la tróclea y
el cóndilo para la
articulación con el
cúbito y el radio.
● El cúbito presenta en
su epífisis superior la
cavidad sigmoidea,
que se articula con la
tróclea del húmero, y
la apófisis olécranon,
que constituye el
saliente del codo y
cuya función consiste
en impedir que el
brazo se doble hacia
atrás.
● El radio, en su
epífisis superior,
posee una cabeza
discoidal que se
articula con el cóndilo
del húmero y se
apoya en el cúbito,
pudiendo girar sobre
él. En su epífisis
inferior presenta la
cavidad escafoidea,
que se articula con los
huesos del carpo.

● Los 8 huesos
del carpo están
dispuestos en
dos filas: el
escafoides, el
semilunar, el
piramidal y el
pisiforme, que
constituyen la
fila superior; y
el trapecio, el
trapezoide, el
hueso grande y
el hueso
ganchoso, que
forman la fila
inferior.
● Los
5 metacarpian
os se articulan
con la segunda
fila del carpo.
● Las falanges so
n los huesos de
los dedos. En
cada dedo
existen tres
falanges, a
excepción del
pulgar, que
solamente posee
dos.
La cintura Pélvica

La cintura pélvica está formada por dos huesos coxales y el hueso sacro, al cual están soldados. Constituyen un anillo
óseo que aloja las vísceras del abdomen. Cada coxal está formado por la unión de tres huesos: ilión, isquión y pubis.

● El ilión,
situado en
posición
postero-
superior, está
soldado al
sacro y
constituye la
cadera.
● El isquión, en
posición
inferior, sirve
de apoyo para
sentarse.
● El pubis, en
posición
anterior,
cierra la
cavidad
pelviana por
delante. El
lugar de
soldadura de
los dos pubis
se
denomina sínf
isis púbica.

En el punto donde se sueldan los tres huesos del coxal se halla la cavidad cotiloidea o acetábulo, en donde se articula el
fémur.

Las extremidades Inferiores

Constituidas por los siguientes huesos: el fémur en el muslo, la rótula en la rodilla, la tibia y el peroné en la pierna y
las falanges en los dedos. Todos estos huesos son largos, a excepción de la rótula y los huesos del tarso, que son
cortos.
● El fémur presenta en su epífisis superior una
cabeza semiesférica que se articula con la
cavidad cotiloidea del coxal. En su epífisis
inferior posee una tróclea.
● La rótula, situada sobre la parte anterior de
la tróclea menor del fémur, impide que la
pierna se doble hacia adelante.
● La tibia presenta en su epífisis superior dos
cóndilos que se articulan con la tróclea del
fémur. En su parte anterior posee una cresta
o espinilla. En su epífisis inferior presenta una
cavidad en la que encaja el astrágalo del
tarso.
● El peroné se apoya sobre los extremos de la
tibia.
● El tarso está formado por 7 huesos: el
calcáneo, que forma la punta del talón, el
astrágalo, que se articula con la tibia y
peroné, el escafoides, el cuboides y 3 cuñas.
● El metatarso: formado por 5 huesos que se
articulan con los del tarso.

● Las falanges son
los huesos de los
dedos. Cada dedo
tiene tres
falanges, a
excepción del
pulgar, que sólo
tiene dos.

Músculos de la cabeza

MÍMICOS Frontal Levanta las cejas y arruga la frente.


(Intervienen en la producción Nasales Arrugan la nariz.
de los gestos faciales) Risorios Elevan la comisura de los labios en la risa.
Bucinadores Hinchan los carrillos (soplar, silbar, etc).
Orbiculares de los ojos Elevan y bajan los párpados.
Orbiculares de los labios Elevan y bajan los labios.
MASTICADORES Temporales Intervienen en el movimiento, elevación y
Maseteros (cuadrangulares) presión de la mandíbula inferior respecto a la
superior.

Músculos del cuello

NUCA Trapecios Mantienen erecta la cabeza.


ANTERIOR Y Cutáneo del cuello Extiende el cuello.
Escalenos Elevan las dos primeras costillas.
Esternocleidomastoideos Giran la cabeza hacia los lados y adelante.
POSTERIOR Digástrico. Baja el maxilar inferior.

Músculos de las extremidades superiores

HOMBRO Deltoides (forma triangular) Eleva el brazo y lo desplaza hacia


adelante y hacia atrás.
BRAZO Bíceps braquial Flexiona el antebrazo hacia el
brazo.
Tríceps braquial Pronadores Extiende el antebrazo respecto del
ANTEBRAZO brazo (es antagónico del bíceps).
Giran la mano situando hacia abajo
la palma de la mano.
Supinadores Antagónicos de los pronadores;
giran la mano situando hacia arriba
  la palma de la mano.
Palmares Flexionan la mano sobre el
  antebrazo.
Flexores de los dedos Doblan los dedos.
Extensores de los dedos Desdoblan los dedos; son, pues,
 
antagonistas de los flexores.

 
MANO Músculos cortos Mueven los dedos.

Músculos de las extremidades inferiores

PELVIS Glúteos. Mantienen la posición erecta del cuerpo.


Ilíaco y Psoas mayor. Elevan el muslo.
MUSLO Sartorio. Flexiona la rodilla; permite cruzar una
pierna sobre la otra.
Cuadríceps femoral Extiende la pierna.
Bíceps femoral. Flexiona la pierna (antagonista del
cuadríceps).
PIERNA Tibial anterior Flexiona el pie.
Flexor común de los dedos Flexiona los dedos del pie.
Extensor común de los dedos Extiende los dedos del pie.
  Gastrocnemio (Gemelos) Su cuerpo está dividido en los dos
gemelos, que extienden y levantan el
  talón; este músculo se inserta en el
calcáneo mediante el tendón de Aquiles.

 
PIE Músculos cortos Mueven los dedos.

Músculos del tronco

PARTE ANTERIOR
Pectorales mayores, en forma de abanico Mueven los brazos hacia adelante.
Pectorales menores Elevan las primeras costillas.
Serratos mayores Elevan el hombro.
Intercostales Elevan las costillas en la inspiración.
Rectos mayores del abdomen Intervienen en la flexión del cuerpo hacia
adelante y en los movimientos del aparato
digestivo (evacuación del intestino, vómitos,
etc.).
Oblicuos externos o mayores del abdomen Intervienen en la flexión del cuerpo hacia
adelante.
   
PARTE POSTERIOR
Trapecios (forma triangular) Elevan el hombro.
Grandes dorsales o dorsales anchos Desplazan los brazos hacia delante y hacia
trás.
Pequeños serratos posteriores superiores Elevan las costillas.
Pequeños serratos posteriores inferiores Bajan las costillas.

Entre la cavidad torácica y la abdominal se encuentra el diafragma, músculo circular


abovedado con la convexidad dirigida hacia el tórax. Interviene en los movimientos
respiratorios, ampliando o reduciendo la cavidad torácica. El diafragma se encuentra
perforado para que a su través pase el esófago.

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