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Planificación radiológica preoperatoria de la cirugía implantaria
Control de calidad de
las prótesis existentes Ajuste escaso o
Ajuste óptimo nulo
Realinea-
ción de la
prótesis
Marcadores radiopacos en Fabricación de una
las prótesis existentes plantilla radiopaca
Guía de perforación
Navegación mental Navegación por estereolitográfica
ordenador mediante
localización óptica o
magnética
Guía de perforación
Planificación y transferencia
basadas en la tomografía espiral Planificación y transferencia basadas en la TC espiral
en espiral (tabla 1). Esta última, obviamente, propor- bargo, cuando se trata de huesos maxilares en situa-
ciona más información y posibilidades, a costa de un ción de riesgo, la selección del método por imágenes
aumento de la dosis de radiación y del precio. Sin em- basado en la TC tridimensional parece justificada. Ésta
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permite utilizar programas informáticos específicos ej., implantes de cigoma, procedimientos de injertos,
para una estructuración tridimensional exacta, una distracción osteogénica, modelado de membranas ba-
planificación tridimensional interactiva y una simu- rrera) (62, 70, 71).
lación de la cirugía implantaria (72, 73). Se dispone
de diversas herramientas de planificación, aunque la Radiografía intrabucal
validación clínica y el análisis de la precisión y la fia- La radiografía intrabucal permite la evaluación de
bilidad in vivo están poco documentados en la bi- los maxilares y de la dentadura remanente en dos di-
bliografía odontológica (34, 35). Asimismo, se han de- mensiones. En los pacientes que presentan una pe-
sarrollado herramientas de planificación concretas riodontitis avanzada, esto ofrece una información
para procedimientos quirúrgicos más complejos (p. clave en el pronóstico de los dientes remanentes. La
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Planificación radiológica preoperatoria de la cirugía implantaria
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Jacobs
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Planificación radiológica preoperatoria de la cirugía implantaria
Tabla 2. Niveles de emisión de la TC tomografía y espiral expresados en relación con el nivel medio de
radiació de fondo o dosis de emisión medias de una radiografía intrabucal
Región para inspeccionar Técnica
Tomografía espiral convencional Radiotomografía espiral
N.º de cortes N.º equivalente Nivel N.º equivalente Nivel
tomográficos de radiografías equivalente de TC de la de radiografías equivalente de
propuesto intrabucales dosis de fondo mandíbula intrabucales dosis de fondo
Única 1-2 10-40 1-4 días TC del 300-400 30-40 días
maxilar
Parcialmente dentada 4-6 40-160 4-16 días TC del 300-400 30-40 días
maxilar
Desdentada 2-8 20-200 2-20 días TC del 300-400 30-40 días
maxilar
Datos extrapolados del trabajo realizado por Bou Serhal y cols. (7, 8), Gijbels y cols. (28) y Jacobs y Gijbels (28).
del hueso maxilar de riesgo más extensas o en situa- Planificación basada en la TC tridimensional
ciones muy complejas, se justifica el trabajo en un en-
Los datos de la TC contienen información en tres di-
torno de planificación de imagen tridimensional real
mensiones, lo que permite la visualización de la zona
(33).
quirúrgica en un entorno tridimensional; puede re-
sultar útil la fabricación de modelos estereolitográfi-
Tomografía computarizada
cos en tres dimensiones (70-73). En especial desde la
En la actualidad, la radiotomografía informatizada se introducción de la TC espiral, las posibilidades de
realiza generalmente por TC en espiral. Esta técnica se la modelación tridimensional se han incrementado
distingue de la TC incremental (convencional), que con- notablemente. Esto último es importante cuando se
siste en la exploración sucesiva de láminas axiales uni- tratan maxilares muy resorbidos o con una deficiente
tarias. La TC espiral (helicoidal) es una tecnología más morfología ósea. La planificación exacta mejora las in-
reciente, en la cual el paciente es sometido a una tras- dicaciones para los tratamientos basados en implan-
lación simultaneamente a la rotación de la fuente de ra- tes bucales. Por lo general se dispone de diversos pro-
yos X, permitiendo una corriente de información conti- gramas informáticos destinados a la planificación
nua durante la exploración. La TC espiral ofrece una preoperatoria que permiten simular la cirugía im-
reducción del tiempo de barrido, mayor precisión, me- plantaria en dos dimensiones o en un entorno que
jor detección de lesiones y unas reconstrucciones tridi- combine dos y tres dimensiones. Evidentemente, este
mensionales optimizadas. La exploración axial de los último prevalece y permite una mejor transferencia al
huesos maxilares requiere el formateado posterior para campo operatorio, sobre todo cuando se integra el mo-
permitir la visualización de unas imágenes transversa- delo protésico óptimo en las imágenes tridimensiona-
les fiables. Se han confeccionado programas informáti- les (35, 73). Los maxilares pueden verse prácticamente
cos específicos para aplicaciones bucales y maxilofacia- desde cualquier perspectiva en la pantalla del orde-
les (p. ej., Dental CT®, Siemens Erlangen Germany; Denta nador, y la colocación del implante puede realizarse
Scan®, ISG Technologies, Missisaugua, Ontario, Canadá), de forma interactiva (fig. 4). En los casos en que se
para evitar los problemas relacionados con la imagen practica una TC de una prótesis, ésta puede visuali-
orofacial y para crear imágenes más estandardizadas de zarse al mismo tiempo que el maxilar. Esto permite re-
los maxilares. Últimamente, se ha diseñado también alizar ajustes estéticos y biomecánicos. También se eli-
equipos informáticos de TC con aplicaciones específi- mina la necesidad de análisis adicionales sobre las
cas para las imágenes dentomaxilofaciales. Tales técni- exigencias anatómicas y protésicas, dado que el pro-
cas ofrecen las ventajas de la imagen tridimensional a grama busca una planificación preoperatoria de riesgo.
unos precios y dosis razonablemente menores que la TC Tiene múltiples indicaciones, especialmente en la co-
espiral. Estas técnicas requieren la posterior validación locación de implantes bucales o cirugía maxilofacial.
clínica para demostrar su utilidad, sus ventajas y sus in- Cuando se trabaja con este tipo de programas infor-
convenientes (1, 51). Independientemente del tipo de máticos de planificación tridimensional, la anatomía y
programas o equipos informáticos utilzados, el empleo el análisis cualitativo de los huesos pueden presentarse
de plantillas de barrido con marcadores radiopacos está, en imágenes bidimensionales, en tanto que puede ser
definitivamente, recomendada durante el procedi- preferible realizar los ajustes estéticos y biomecánicos
miento, para permitir una mejor orientación de los po- en planos tridimensionales. Es esencial que las correc-
tenciales sitios y eje implantarios. ciones en las imágenes bidimensionales se traduzcan
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(A)
de forma automática en la visualización de estas adap- este tipo de planificación informatizada (tabla 1) (59,
taciones en imágenes tridimensionales, y viceversa (35, 69, 70).
73). En esta fase se prefiere la incorporación del diseño La reabsorción extrema del hueso maxilar puede
protésico ideal para permitir la completa integración conducir a una opción de tratamiento que implique
de los factores anatómicos, biomecánicos y estéticos. la colocación de implantes en el cigoma. En estos ca-
Evidentemente, la selección de la TC tridimensio- sos, la planificación basada en la TC tridimensional
nal y de la transferencia a la cirugía asistida por or- podría no sólo describir la compleja topografía ana-
denador está justificada para la rehabilitación del ma- tómica que hay que considerar en tales casos, sino
xilar deficitario. Aunque la dosis total de radiación de también ayudar a seguir las estructuras óseas crucia-
la TC es mayor que la de la tomografía convencional, les a lo largo de la trayectoria del implante (70). Para
el aumento de la cantidad de información requerida los procedimientos de injerto complicados, es posible
puede compensarse con los crecientes costes y el ni- simular el abordaje quirúrgico durante el preoperato-
vel de radiación. rio, con una determinación precisa de la forma y el
Cuando aumenta el riesgo de dañar estructuras ana- volumen del injerto requerido (69).
tómicas vitales o disminuye notablemente la probabi-
lidad de éxito del tratamiento, es necesario obtener más Transferencia quirúrgica tridimensional
información. Como es obvio, los complejos procedi- asistida por ordenador
mientos quirúrgicos como la colocación de un implante
cigomático o los procedimientos de injerto en los ma- Una vez realizada la planificación interactiva del im-
xilares muy atrofiados pueden también beneficiarse de plante, queda otro asunto crucial: la transferencia a la
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Planificación radiológica preoperatoria de la cirugía implantaria
cirugía. Muchos médicos todavía optan por una nave- riorado, las desviaciones de la planificación durante la
gación mental basándose en la planificación del im- colocación real del implante entrañan el riesgo de da-
plante visualizada o bien por una plantilla quirúrgica ñar estructuras vitales.
basada en una transferencia mental de los datos de la
planificación. Es evidente que tales acciones confieren
gran libertad al cirujano, pero aumentan intrínsica-
Dosis de radiación y selección
mente la variabilidad y disminuyen el carácter previsi- de la técnica
ble de la planificación en la localización intraoperato- Tanto si el objetivo es explorar una única zona im-
ria del implante. En especial cuando se tratan casos plantaria como un maxilar totalmente desdentado, la
límites o se realizan procedimientos quirúrgicos más TC requiere la irradiación de todo el maxilar. Por lo
complicados, es recomendable evitar dicha variabili- tanto, cualquier comparación entre los niveles de do-
dad y optar por una transferencia informatizada. Di- sis de la TC y de la tomografía debe incluir los niveles
versas publicaciones clínicas han abordado la fabri- de dosis de radiación por la TC de todo el maxilar (ta-
cación de plantillas protéticas y/o quirúrgicas que bla 1). Cuando se comparan las dosis emitidas en una
permitan la transferencia del lugar elegido y de la di- TC del maxilar con las emitidas en las secciones to-
rección de los implantes que se van a colocar (4, 12, 50, mográficas múltiples de toda la arcada maxilar, la do-
52). La transferencia de datos para la planificación me- sis procedente de la TC es relativamente menor (7, 8,
diante la elaboración de una plantilla convencional si- 18, 22). En regiones desdentadas limitadas es preferi-
gue siendo, a pesar de todo, una fuente de variabilidad ble la utilización de la tomografía por su menor dosis
e imprecisión. La predicción del desenlace clínico del de radiación (16, 36). Se han realizado intentos para
tratamiento sigue siendo limitada (34, 35). reducir dichas dosis. La disminución de la configura-
La programación implantaria tridimensional interac- ción en mA durante el examen con TC puede reducir
tiva informatizada ha abierto una puerta a la transfe- las dosis de forma significativa (7, 15, 18, 23). Asimismo,
rencia real del ordenador al campo operatorio. En la puede ser válido reducir la dosis disminuyendo los
transferencia asistida por ordenador pueden utilizarse ajustes de mA para la tomografía espiral cuando se
dos métodos: navegación y guías de perforación. La na- cambia de exámenes tomográficos convencionales a
vegación quirúrgica se aplica en la cirugía implantaria digitales (27, 28).
maxilofacial y bucal (5, 75-77) e, incluso, se ha descrito
para la colocación de implantes cigomáticos (59). La téc-
nica puede minimizar el campo operatorio y aumentar Planificación de la colocación
la precisión de la transferencia desde su proyección hasta del implante en el maxilar deficiente
la colocación de los implantes en los maxilares. Los maxilares pueden resultar insuficientes a causa
De manera alternativa, la transferencia asistida por de alteraciones cuantitativas o cualitativas. En el pri-
ordenador puede realizarse con guías de perforación mer caso debería considerarse la influencia tanto del
estereolitográficas. Incluso con este tipo de técnica in- reducido volumen óseo como de su desfavorable mor-
formatizada, la transferencia de la planificación a la ci- fología. En el segundo deberían tenerse en cuenta la
rugía sigue siendo muy complicada. Cuando se utiliza estructura trabecular del hueso, el grosor cortical y la
una transferencia tridimensional informatizada me- densidad ósea real. Las alteraciones que afectan a los
diante guías de perforación, puede obtenerse mayor aspectos de cantidad o calidad del hueso pueden ser
precisión (1,1.º de rotación y 0,2 mm de traslación) (25) locales o sistémicos, y deben considerarse durante la
que con la transferencia convencional procedente de fase de planificación preoperatoria.
las imágenes de TC bidimensionales (4, 52). Bou Ser-
hal y cols. (10) encontraron errores de transferencia in-
feriores a los 2 mm entre la planificación basada en las
Atrofia mandibular extensa
TC tridimensionales y la localización real del implante La modalidad de diagnóstico por imagen preferida
por medio de plantillas estereolitográficas en una man- para la planificación preoperatoria del implante en la
díbula gravemente resorbida (fig. 5). En un estudio re- mandíbula completamente desdentada es una imagen
ciente sobre la transferencia basada en la TC tridi- panorámica, combinada con algunas secciones tomo-
mensional con guías de perforación estereolitográficas, gráficas en espiral en la región interforaminal. Esto úl-
van Cleynenbreugel y cols. (71) constataron que la des- timo permite no sólo la planificación del emplaza-
viación angular estaba habitualmente por debajo de miento del implante en imágenes bidimensionales,
los 3.º y las desviaciones lineales por debajo de 2,5 mm sino también la inspección de la morfología del hueso,
para los implantes cigomáticos. Considerando los da- de la anchura bucolingual y de la localización del con-
tos mencionados sobre la transferencia por navega- ducto incisivo, si éste está presente. Este conducto
ción o por guía de perforación, los errores de transfe- puede contener un paquete neurovascular, con el con-
rencia se hallan, habitualmente, dentro de límites siguiente posible riesgo de que se produzcan daños
clínicos aceptables. Sin embargo, en el maxilar dete- quirúrgicos (29). En algunos casos, la colocación del
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(A)
(B) (C)
Fig. 5. Las guías de perforación estereolitográficas permiten das anatómicas y los requisitos protésicos. B) Guías de per-
la transferencia asistida por ordenador desde el programa foración estereolitográficas con cilindros metálicos para
informático de planificación tridimensional al campo ope- guiar los taladros (trépanos) de diversos diámetros durante
ratorio. A) Planificación tridimensional de la ubicación de el procedimiento quirúrgico. C) Utilización quirúrgica de las
un implante en un maxilar superior desdentado, que mues- guías de perforación para una transferencia informatizada
tra la posición de los implantes en relación con las deman- de la planificación preoperatoria.
implante se combina con tratamientos quirúrgicos tridimensional. Cuando el volumen del hueso disponi-
muy complejos, involucrando no solo la región inter- ble es escaso o insuficiente, el programa informático de
foraminal sino otras estructuras (p. ej., injertos, ciru- planificación tridimensional puede permitir que se lo-
gía ortognática). En este punto, el equilibrio entre los gre el tratamiento planeado o la simulación de otros pro-
beneficios y los riesgos puede decantarse por las ex- cedimientos quirúrgicos como el injerto. Las dimensio-
ploraciones de TC (36). nes y la configuración del injerto pueden evaluarse
cuidadosamente durante la planificación preoperatoria.
Es más, el principio de la planificación y transferencia
Atrofia maxilar extensa preoperatorias permite también la utilización de mem-
La modalidad de técnica diagnóstica por la imagen branas de titanio individualizadas para aumentar el vo-
preferible para el maxilar completamente desdentado es lumen del hueso, en lugar del injerto (62). Se ha desa-
la TC espiral. Éste permite planificar la colocación del rrollado también una herramienta de planificación
implante en imágenes bidimensionales y tridimensio- concreta para la proyección preoperatoria de los im-
nales. También admite la posterior transferencia de da- plantes cigomáticos (70). Es esencial llevar a cabo una
tos a los programas informáticos específicos para la si- planificación preoperatoria meticulosa de los implantes
mulación de la colocación del implante en un espacio cigomáticos, ya que este tipo de cirugía es más compli-
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Planificación radiológica preoperatoria de la cirugía implantaria
cada y difícil que la planificación del implante bucal con- respuesta al tratamiento. La absorciometría de doble fo-
vencional. En esta zona, los implantes no sólo son tres tón (DPA) y la absorciometría radiográfica de energía
o cuatro veces más largos que los implantes bucales, sino dual (DXA) son, en la actualidad, las más utilizados, con
que la trayectoria del implante a través del hueso es más un coeficiente de variación de las determinaciones in
delicada. La visibilidad intraoperatoria es muy escasa, lo vivo no superior al 3 % para la precisión y al 7 % para
cual exige, habitualmente, la preparación de un surco la exactitud (74). Es preferible la DXA, ya que es más rá-
lateral en la pared sinusal para controlar la dirección del pida, más precisa, más exacta y más barata que los de-
eje del implante con respecto a las estructuras anató- más métodos. Los datos obtenidos sobre la densidad
micas circundantes (63, 68). Este surco en la pared si- ósea se expresan en unidades/cm2, longitud/cm2 (DPA)
nusal puede no ser necesario cuando se utilizan la pro- o g/cm2 (DXA) (19).
yección y la transferencia tridimensional a la cirugía La tomografía computarizada cuantitativa (TCC)
implantaria mediante guías de perforación estereolito- mide la densidad volumétrica y los resultados se dan
gráficas (70, 71) y el pronóstico de la técnica también en g/cm2 (2). La TCC periférica (TCCp) permite la eva-
puede mejorar. luación de la densidad del hueso esponjoso y cortical,
la microtextura esponjosa y la anchura cortical (42).
Comparada con la DXA, tiene una buena precisión (1-
Mala calidad del hueso 3 %) pero menor exactitud (14 %) (42). La TCC se ha
Datos clínicos recientes han indicado una relación sig- utilizado también en la valoración de la densidad del
nificativa entre las enfermedades generalizadas y el fra- hueso maxilar (47). Los exámenes in vivo de la micro-
caso de los implantes (24, 61). Durante la planificación estructura ósea mediante la tomografía computarizada
preoperatoria del tratamiento deben tenerse en cuenta de alta resolución (TCC-3D) puede abrir nuevas posi-
todos los factores sistémicos asociados con un aumento bilidades en la diferenciación de los diversos tipos de
del fracaso implantario. La mala calidad del hueso po- pérdida ósea (67).
dría ser el factor causal relacionado con dicha enferme- Los ultrasonidos cuantitativos (USC) constituyen un
dad. Mientras haya dientes, los factores locales pueden método alternativo para determinar la calidad del hueso
ser predominantes en el maxilar, pero si éste carece de maxilar (55). Esta técnica no emite radiaciones, es sen-
dientes, los factores sistémicos pueden ser más impor- cilla y económica y puede proporcionar información so-
tantes (74). bre la calidad del hueso. Por lo general, se realizan me-
Diversas enfermedades generalizadas entrañan fac- diciones de la atenuación ultrasónica de banda ancha
tores de riesgo de osteoporosis. Algunos ejemplos son (AUBA) y de la velocidad del sonido. Los USC parecen
la artritis reumatoide, afecciones gastrointestinales ser un factor pronóstico de las fracturas por osteoporo-
(mala absorción o hepatopatías crónicas), trastornos sis tan bueno como la DMO, y también han demostrado
hematológicos (p. ej., mieloma múltiple, leucemia, lin- ser útiles en el seguimiento de los pacientes.
foma), enfermedades endocrinas (p. ej., hiperparati-
roidismo) o la terapia farmacológica (tratamiento con Diagnóstico de la calidad ósea de los maxilares
corticoides) (20). Otros factores de riesgo para la os- En el hueso maxilar dentado también pueden ma-
teoporosis están relacionados con la edad y el sexo, la nifestarse factores generales, aunque los factores loca-
predisposición genética y el estilo de vida (consumo les son predominantes cuando hay ligamentos perio-
de tabaco, abuso de alcohol, sedentarismo) (68). Al su- dontales y dientes. En el caso de un maxilar desdentado,
perar los 65 años de edad, casi un tercio de la pobla- los efectos sistémicos sobre la calidad del hueso pue-
ción femenina occidental sufre osteoporosis (21). Esta den desempeñar un papel principal (74). En concreto,
enfermedad se caracteriza por alteraciones en la mi- se ha establecido una relación entre la densidad mine-
croestructura ósea y por un descenso de la masa ósea, ral ósea esquelética y la mandibular (para una revisión,
que determinan una mayor fragilidad del hueso y, por v. 74, 78). Sin embargo, la correlación puede no ser su-
consiguiente, un aumento del riesgo de fractura. ficientemente estrecha (32, 64) como para basarse en
la evaluación de la densidad ósea esquelética para pro-
nosticar la densidad ósea mandibular (74).
Métodos diagnósticos para valorar la Por lo tanto, para la valoración de la densidad ma-
mala calidad del hueso xilar hay que considerar herramientas específicas. Es
necesario hacer una clara distinción entre las herra-
Diagnóstico de la calidad ósea del esqueleto
mientas clínicas sencillas para la identificación siste-
Los análisis del contenido mineral óseo (CMO) y de mática de la densidad ósea y los métodos más com-
la densidad mineral ósea (DMO) son esenciales para plejos, pero muy precisos, para la determinación de
predecir la escasa calidad del hueso, la osteoporosis y la densidad y la morfometría ósea.
el posible riesgo de fractura (21, 38), no sólo con pro- Las modalidades habituales de diagnóstico por la
pósitos diagnósticos, sino también para llevar un con- imagen maxilofacial ofrecen la posibilidad de realizar
trol de los individuos que padecen osteoporosis y de su un sencillo cribado y clasificación de la calidad ósea
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mandibular en la consulta. A menudo se utilizan ba- fométricos son, por lo general, menos pronunciadas
remos subjetivos de la calidad maxilar durante el pro- en esta área (65). Los métodos de medición cuantita-
cedimiento de planificación preoperatoria. El método tiva incluyen las determinaciones de la densidad del
más tradicional aplicado durante la valoración preo- hueso utilizando una radiografía intrabucal, con un
peratoria implantaria es el utilizado por Lekholm y programa de análisis de imagen o una trama de cali-
Zarb (43), que clasifica el estado radiográfico real de la bración ósea (32, 41). Los escáneres de DXA se han uti-
calidad del hueso en cuatro grupos según el grado de lizado en el examen de la densidad mandibular (13,
corticalización y morfología ósea trabecular. La idea 31). Lo mismo puede decirse de los escáneres de TCC
básica que subyace a esta gradación cualitativa es que de todo el cuerpo (40, 64), con el inconveniente de emi-
la calidad del hueso aumenta cuanto mayores son la tir elevadas dosis de radiación y colocar al paciente en
densidad y el grosor corticales (grados 1 y 2 ), mien- una posición poco confortable. Los escáneres de TCC
tras que un hueso cortical más fino (grado 3) combi- pueden evitar los inconvenientes de los otros méto-
nado con grandes espacios trabeculares y la escasez
del hueso cortical (grado 4) ofrecen condiciones me-
nos adecuadas para la sujeción del implante. La dis-
tinción de la calidad ósea entre los extremos bueno
(grado 1) y malo (grado 4) no supone, por lo general,
ningún problema para el observador. Existe mayor di-
ficultad y variación del observador cuando se intenta
distinguir entre los grados 2 y 3.
Algunos métodos de clasificación se basan en la gra-
dación de la estructura ósea trabecular (47). No obs-
tante, otras puntuaciones de evaluación subjetivas se
centran sólo en la corteza, proporcionando una clasi-
ficación para la porosidad cortical del borde inferior,
de la estructura o de la anchura cortical inferior (3,
40). Siempre que se disponga de material de TC, sería
necesario también considerar un análisis posterior de
las unidades Hounsfield (UH). Cuando se calculan los
valores UH en un área de interés concreta, puede ob-
tenerse información relativa sobre los aspectos de la
densidad ósea local. La aplicación de programas in-
formáticos interactivos para la planificación preope-
ratoria del implante puede ayudar al odontólogo a
efectuar dichas evaluaciones. Todavía no se dispone
de directrices absolutas para estos valores UH, ya que
las observaciones de la densidad dependerán del es-
cáner y variarán según la configuración concreta de
cada exposición y el nivel de intervalo aplicado. Las
mediciones permiten cuantificar el hueso en uno de
los grados de calidad de Lekholm y Zarb (43, 54). Es
evidente que las variaciones UH observadas en el
mismo maxilar reflejan variaciones locales de la den-
sidad ósea, con valores UH bajos para la mala calidad
del hueso (p. ej., región de la tuberosidad). Otra apro-
ximación que utiliza información calibrada sobre la
DMO consiste en superponer la información, codifi-
cada por colores, sobre la mineralización ósea del lu-
gar en imágenes de TC axiales y formateadas (30). Es
necesaria la normalización de una trama de calibra-
ción y de un conjunto de valores normativos de la den-
sidad maxilar para realizar mediciones diagnósticas
objetivas sobre la buena o mala calidad del hueso.
Cuando se requiere una estimación de la calidad ma- Fig. 6. La gammagrafía ósea mediante difosfonato de me-
xilar global, el análisis se centra en la parte basal de la tileno con tecnecio-99m es una técnica de diagnóstico por la
mandíbula detrás del agujero mentoniano, porque las imagen funcional que permite visualizar el aumento de ac-
variaciones en la estructura, la forma y el volumen mor- tividad metabólica en diferentes estructuras esqueléticas.
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Planificación radiológica preoperatoria de la cirugía implantaria
dos, pero no se dispone de un TCCp adaptado a la ex- nificación basada en la TC tridimensional. Otra cuestión
ploración in vivo de los maxilares. crucial es la transferencia exacta de esta planificación al
Por otra parte, la estructura del hueso trabecular tam- campo operatorio. Una transferencia informatizada evita
bién puede analizarse mediante el análisis fractal u otras la variabilidad relacionada con la transferencia y la in-
mediciones morfológicas (14, 26). Habitualmente, las terpretación mentales. Especialmente en los casos límite,
variables citadas se relacionan con la osteoporosis. No una desviación menor puede tener importantes reper-
obstante, las poblaciones con osteoporosis y las sanas cusiones clínicas. Además de las mediciones óseas vo-
muestran una superposición considerable, y los estu- lumétricas y morfológicas, es decisivo establecer clíni-
dios normativos para el análisis de la densidad de los camente la calidad o la densidad ósea. Esta última puede
maxilares son poco frecuentes. Por ello, estos métodos estar relacionada con un índice de éxitos más bajo para
no pueden determinar el umbral clínico definitivo para los implantes. Desgraciadamente, todavía no existen he-
distinguir el maxilar sano del patológico. rramientas clínicas sencillas disponibles para una iden-
tificación exacta y fiable de la calidad del hueso maxilar.
Control de los cambios en la calidad de los A menudo, los métodos cuantitativos más complejos son
maxilares demasiado exigentes, en tanto que los sistemas de gra-
Para controlar los cambios en la densidad ósea que dación de la calidad están sujetos a una importante va-
se producen con tiempo, la comparación de los per- riación según el observador.
files en la escala de grises y la sustracción digital de
Periodontology 2000, Vol. 33, 2003, 12-25
las siguientes radiografías intrabucales estandarizadas
puede ofrecer posibilidades para la evaluación clínica
(32). Los USC cuantitativos constituyen un procedi- Bibliografía
miento no agresivo y no ionizante que también puede
controlar los cambios del hueso que ocurren con el
tiempo (55).
En un limitado número de casos, la evaluación de
los cambios óseos puede ser crucial y exigir la utiliza-
ción de técnicas complejas, pero también de mayor do-
sis. La gammagrafía ósea mediante difosfonato de me-
tileno con tecnecio-99m o, preferiblemente, la tomografía
por emisión de fotón único (SPECT) es conocida como
un método útil y fiable para medir el aumento de ac-
tividad metabólica de los tejidos óseos (fig. 6). Por lo
tanto, puede aplicarse para llevar un control de la ci-
catrización postoperatoria de los maxilares o la remo-
delación ósea periimplantaria (39, 48, 58). Esto último
resulta útil en los tratamientos quirúrgicos sumamente
complicados de los maxilares deficitarios, en los que la
evaluación de la reestructuración ósea y de la oseoin-
tegración son cruciales.
Conclusiones
Para la cirugía implantaria bucal en el paciente de
riesgo, la planificación radiológica preoperatoria debe
incluir una evaluación tanto cuantitativa como cualita-
tiva de los maxilares. Estas valoraciones son imprescin-
dibles para que el resultado clínico del tratamiento sea
un éxito. Al seleccionar la técnica radiológica apropiada,
la dosis de radiación debe sopesarse con la información
requerida y alcanzada. Considerando las dosis de radia-
ción implicadas y la información obtenida, la radioto-
mografía transversal se considera el examen de elección
en el maxilar deficiente. El diagnóstico mediante tomo-
grafía convencional y por imágenes bidimensionales
sigue estando indicado para determinadas áreas limita-
das, en tanto que para las áreas extensas o los procedi-
mientos quirúrgicos complicados es preferible una pla-
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Planificación radiológica preoperatoria de la cirugía implantaria
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