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Copyright © Grupo Ars XXI de Comunicación, S.L. Periodontology 2000 (Ed Esp), Vol.

l. 8, 2004, 12-25 Copyright © Blackwell Munksgaard


PERIODONTOLOGY 2000 (Ed Esp) PERIODONTOLOGY 2000
ISSN 1695-1808 ISSN 0906-6713

Planificación radiológica preoperatoria de la


cirugía implantaria en los pacientes de riesgo
REINHILDE JACOBS

La técnica de la oseointegración asegura la supervi- nadas a la planificación preoperatoria. Cada una de


vencia a largo plazo de los implantes endoóseos y per- estas técnicas tiene sus propios puntos fuertes y sus
mite mantener un nivel de hueso marginal estable. El defectos, ofreciendo una cantidad de información a
carácter previsible de esta metodología puede correr un coste y una dosis de radiación concretos (para una
peligro con la mala calidad o cantidad del hueso ma- revisión, v. 17, 33). La selección de la técnica debería
xilar que alberga los implantes. Es preferible seleccio- basarse en la ponderación de la calidad de la imagen
nar zonas con suficiente hueso cortical o esponjoso requerida con los riesgos y costes implicados (tabla 1)
para asegurar una buena estabilidad primaria. Debe te- (36). En el caso de un hueso receptor insuficiente, la
nerse en cuenta que una fijación deficiente puede pro- cirugía es más exigente y aumenta la cantidad de in-
ducir micromovimientos durante la cicatrización del formación requerida. Habitualmente, esto último jus-
implante, los cuales causarán, con toda probabilidad, tifica la elección de técnicas de diagnóstico por ima-
una encapsulación fibrosa. Los implantes alojados en gen más complejas y específicas, equilibrando riesgos
el maxilar superior o en huesos de mala calidad (au- y beneficios. La aplicación de los cortes radiológicos
sencia de corticalización, escasa mineralización del transversales dirigidas a este propósito ha recibido
hueso trabecular y procesos patológicos residuales) se gran atención en la bibliografía odontológica. La co-
asocian a índices de fracaso más elevados. rrecta identificación del conducto mandibular es de
Un examen radiográfico minucioso puede propor- vital importancia (33). El potencial riesgo de dañar el
cionar una información valiosa sobre la altura y la an- nervio alveolar inferior durante la cirugía implantaria
chura del hueso, el grado de corticalización, la densi- es considerable. La visualización de las otras estruc-
dad de la mineralización y la cantidad de hueso turas anatómicas, como el seno maxilar o la fosa na-
esponjoso en las zonas consideradas. Esta planifica- sal, ha recibido menor atención en la bibliografía, dado
ción puede convertirse en una necesidad en los pa- que la agresión de estas estructuras no causa efectos
cientes de riesgo e influir en el plan del tratamiento. secundarios graves (11). Existen pruebas de que, in-
En definitiva, el examen radiográfico ayuda a selec- cluso en la parte anterior de los maxilares superior e
cionar los implantes basándose en las dimensiones, la inferior, la morfología maxilar y las variaciones en las
localización, la orientación y el número de implantes estructuras anatómicas pueden repercutir en la colo-
que han de colocarse. Si las características del hueso cación del implante (37). Un ejemplo típico es el con-
parecen inadecuadas después de un análisis radiográ- ducto nasopalatino, en cuya inmediata proximidad la
fico detallado, podría ser preferible una rehabilitación inserción de implantes se asocia a índices de fracaso
alternativa, sin utilización de implantes. La disponibi- más elevados (57). El contacto de la superficie del im-
lidad actual de complejos programas informáticos de plante con el contenido del conducto (grasa) puede
planificación tridimensionales (3D), que permiten re- evitar la oseointegración o conducir a una disfunción
presentar fielmente el campo operatorio, aumenta las sensorial. Es más, alrededor del 1 % de la población
posibilidades de una transferencia fiable al campo ope- presenta quistes en el conducto nasopalatino, que de-
ratorio y ayuda al odontólogo a colocar los implantes ben identificarse y tratarse antes de la cirugía im-
incluso en este tipo de casos que presentan mayor com- plantaria (fig. 1) (53). En la mandíbula, la presencia
plejidad (72, 73). de una morfología vestibulo-lingual desfavorable o de
un conducto incisivo bien definido puede presentar
Técnicas para la planificación del otros desafíos (37, 56). También puede ser necesario
realizar cortes radiograficos transversales en las áreas
implante bucal
maxilares anteriores.
En la actualidad se dispone de diversas modalida- Las imágenes transversales se obtienen con la to-
des de técnicas de diagnóstico por la imagen desti- mografía en espiral o tomografía computarizada (TC)

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Planificación radiológica preoperatoria de la cirugía implantaria

Tabla 1. Estrategias para la planificación preoperatoria y la transferencia intraoperatoria de la colocación del


implante en el maxilar deteriorado. En estos casos, se recomienda la radiotomografía transversal. La extensión
del área y la complejidad de la cirugía determinarán la elección de la técnica de planificación. En los maxilares
deficientes, con frecuencia prevalece la planificación basada en la TC tridimensional. Los datos de esta
planificación pueden entonces transferirse con exactitud utilizando la navegación informatizada o las guías de
perforación estereolitográficas.

Estrategias para la planificación preoperatoria y la transferencia


intraoperatoria del implante en el maxilar deteriorado

Área desdentada Área desdentada


limitada extensa

Tomografía espiral TC espiral

Control de calidad de
las prótesis existentes Ajuste escaso o
Ajuste óptimo nulo
Realinea-
ción de la
prótesis
Marcadores radiopacos en Fabricación de una
las prótesis existentes plantilla radiopaca

Tomografías con TC espiral basada TC espiral con


la prótesis en el método de la plantilla
marcada in situ exploración doble radiopaca
in situ

Planificación basada Planificación basada


en la TC bidimensional en la TC tridimensional
para colocación del para la colocación del
implante implante

Transferencia mental Transferencia


de la planificación al informatizada de la
lugar del implante planificación al lugar
del implante

Guía de perforación
Navegación mental Navegación por estereolitográfica
ordenador mediante
localización óptica o
magnética

Guía de perforación

Planificación y transferencia
basadas en la tomografía espiral Planificación y transferencia basadas en la TC espiral

en espiral (tabla 1). Esta última, obviamente, propor- bargo, cuando se trata de huesos maxilares en situa-
ciona más información y posibilidades, a costa de un ción de riesgo, la selección del método por imágenes
aumento de la dosis de radiación y del precio. Sin em- basado en la TC tridimensional parece justificada. Ésta

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Jacobs

Fig. 1. Imágenes de radiotomografía di-


(A) gital con el Dental CT® del maxilar des-
dentado de un varón de 44 años de
edad. Se aprecia una notable radio-
transparencia en la parte anterior del
maxilar superior, en las imágenes axial,
panorámica y transversal. A) Al ins-
peccionar las imágenes axiales, la le-
sión radiolúcida se localiza en una zona
paramediana de la región del conducto
nasopalatino (círculo negro). Los cor-
tes horizontales muestran una forma
monocular redonda, con un diámetro
aproximado de 10 mm y un contorno
(B) liso y bien definido. Obsérvese que la
mucosa del seno maxilar derecho su-
perior aparece engrosada. B) La vista
panorámica confirma la presencia de
la radiotransparencia paramedia (lá-
minas transversales nº 19-26), que se
extiende en dirección vertical desde el
suelo nasal hasta el paladar. Puede
verse también la mucosa engrosada del
seno maxilar derecho. C) Las imágenes
transversales formateadas en esta re-
gión ilustran la extensión vertical y ho-
rizontal de la lesión en su localización
en el conducto nasopalatino (flecha ne-
(C) gra).

permite utilizar programas informáticos específicos ej., implantes de cigoma, procedimientos de injertos,
para una estructuración tridimensional exacta, una distracción osteogénica, modelado de membranas ba-
planificación tridimensional interactiva y una simu- rrera) (62, 70, 71).
lación de la cirugía implantaria (72, 73). Se dispone
de diversas herramientas de planificación, aunque la Radiografía intrabucal
validación clínica y el análisis de la precisión y la fia- La radiografía intrabucal permite la evaluación de
bilidad in vivo están poco documentados en la bi- los maxilares y de la dentadura remanente en dos di-
bliografía odontológica (34, 35). Asimismo, se han de- mensiones. En los pacientes que presentan una pe-
sarrollado herramientas de planificación concretas riodontitis avanzada, esto ofrece una información
para procedimientos quirúrgicos más complejos (p. clave en el pronóstico de los dientes remanentes. La

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Planificación radiológica preoperatoria de la cirugía implantaria

técnica de proyección en paralelo debería utilizarse Radiografía panorámica


para proporcionar una proyección fiable de las es-
Esta técnica se ha convertido en una importante he-
tructuras anatómicas sobre radiografías simples. La
rramienta diagnóstica en la práctica clínica diaria. Se
buena calidad de las radiografías intrabucales ayuda
dispone de una amplia selección tanto de sistemas
a revelar los pequeños cambios patológicos del pe-
convencionales como digitales. Con objeto de la pla-
riodonto y de los dientes, que pueden interferir en la
nificación preoperatoria, la radiografía panorámica
inserción del implante. Sin embargo, esta técnica
permite la visualización de las estructuras anatómicas
puede ser difícil de utilizar en los maxilares desden-
críticas con una cobertura más amplia que la de las ra-
tados y resorbidos, debido a la imposibilidad de en-
diografías intrabucales. La colocación óptima del pa-
contrar un soporte adecuado para colocar los instru-
ciente es crucial a este respecto, ya que se producen
mentos. Sujetar un chasis portapelículas al tubo,
con bastante facilidad errores de posición del maxilar
mientras se coloca cuidadosamente el maxilar que se
en el plano sagital, especialmente en los pacientes des-
está investigando paralelo a la película, puede ofrecer
dentados. Puede resultar útil el empleo de un molde
una solución. De forma alternativa, se ha propuesto
dental (stent) o una plantilla con marcadores radiopa-
adaptar un dispositivo de posición conectado a los
cos, lo cual proporciona una idea de los errores o am-
implantes para garantizar el paralelismo entre la ra-
pliaciones de la posición local. Incluso cuando la po-
diografía y el implante (49).
sición es la adecuada, deben considerarse otros
Incluso con la metodología más rígida, esta técnica
aspectos. Normalmente, el haz radiográfico se dirige
sigue quedando por debajo del nivel óptimo para la
7-8.º hacia arriba, lo que implica que la verdadera re-
planificación preoperatoria en los maxilares grave-
lación entre las estructuras anatómicas puede estar al-
mente resorbidos. Puede estar justificado el empleo
terada desde tal enfoque. Además, se trata de una ima-
adicional de la radiología transversal para obtener in-
gen bidimensional, que carece de información sobre
formación fiable sobre el volumen y la morfología del
el grosor del hueso. La radiografía panorámica se con-
hueso bucolingual y la localización precisa de los pun-
sidera, a menudo, adecuada para la planificación pre-
tos de referencia anatómicos.
operatoria del emplazamiento del implante en el área
Radiografía oclusal interforaminal mandibular. Esta área se considera
como zona quirúrgica segura, que habitualmente
La radiografía oclusal se aplica, en ocasiones, para ofrece suficiente volumen óseo sin riesgo de dañar al-
evaluar la forma y la anchura externa de la mandíbula. gún paquete neurovascular. Sin embargo, cada vez hay
Sin embargo, la utilidad de estas imágenes es limitada. más datos de que, en algunos casos, no está justificada
No es posible valorar la altura vertical del hueso y su la elección única de esta técnica para la planificación
morfología, y la formación de una imagen bidimen- preoperatoria en el área interforaminal mandibular. En
sional enmascarará determinados aspectos de la mor- primer lugar, se ha confirmado la presencia de un ver-
fología ósea (como las fosas y las concavidades). dadero conducto incisivo en este maxilar en más del
90 % de los casos (fig. 2) (37). En segundo lugar, la mor-
Vista cefalométrica lateral real del cráneo fología del maxilar en esta área puede también pre-
sentar importantes variaciones, algunas de las cuales
Con respecto a la planificación preoperatoria de la
pueden hacer que sea arriesgado la colocación del im-
colocación del implante, la vista lateral del cráneo úni-
plante (fig. 3) (56). En el maxilar deteriorado, esta téc-
camente proporciona información sobre la morfolo-
nica debería considerarse insuficiente. El hecho de que
gía del hueso bucolingual en el área sinfisaria de la
el hueso sea insuficiente desde un punto de vista cuan-
mandíbula. Se requiere una adecuada colimación para
titativo o cualitativo obliga a realizar técnicas de diag-
reducir la dosis de radiación y limitar la exposición al
nóstico por imágenes adicionales en dos o en tres di-
área de la mandíbula en cuestión. Los planos tan-
mensiones. Debería tenerse en cuenta que el cirujano
genciales pueden ofrecer un método alternativo en la
trabaja en un entorno tridimensional, en tanto que la
consulta cuando no se dispone de equipo extrabucal
información radiográfica relacionada a las estructuras
(60). Para obtener tales imágenes, se coloca una ra-
anatómicas, habitualmente, sólo se proporciona de
diografía oclusal lateralmente, en posición vertical, al
forma bidimensional. Cuando surgen riesgos y dudas
nivel del área sinfisaria. Es importante destacar que
acerca del desenlace clínico del tratamiento, puede ser
la información obtenida no es demasiado precisa ni
necesaria la información tridimensional.
es siempre clínicamente relevante debido a la super-
posición bidimensional de la imagen. Cuando se pla-
Tomografía convencional
nifica la colocación de los implantes mandibulares la-
terales estrictamente al plano sagital, debería tenerse Con la radiotomografía digital es posible comple-
en cuenta que las concavidades anatómicas pueden mentar la naturaleza bidimensional de las radio-
reducir de forma considerable el volumen de hueso grafías anteriormente mencionadas. La tomografía
disponible localmente. convencional ofrece información sobre el aspecto bu-

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Jacobs

tructuras quedan difusas. Esto se consigue trabajando


con diferentes movimientos tomográficos: lineal, cir-
cular, espiral, elíptico e hipocicloidal. Los movimien-
tos tomográficos complejos (p. ej., espiral e hipoci-
cloidal) son los utilizados con mayor frecuencia.
Para todas las técnicas mencionadas anterior-
mente, sólo es posible realizar una interpretación fia-
ble de la imagen mediante una geometría de pro-
yección óptima. La posición del paciente es un factor
crucial y debe permitir la proyección perpendicular
(A) del haz de rayos X a través del hueso en la zona pre-
vista para el implante. La férulas dentales con mar-
cadores radiopacos ayudan a su localización, tanto
en las dimensiones bucolinguales como en las verti-
cales, lo que optimiza los aspectos estéticos y bio-
mecánicos del plan preoperatorio. Las imágenes por
tomografía digital ofrecen mayor calidad de imagen
mediante la mejora del contraste, la reducción de
(B) manchas borrosas y la manipulación de la imagen.
Fig. 2. La presencia de un conducto incisivo evidente, como El posterior procesado de la imagen puede propor-
continuación del conducto mandibular en la parte maxilar cionar una información más exacta sobre el volumen
anterior, puede apreciarse con claridad tanto en las imá- del hueso y la densidad ósea (relativa), y ayudar a si-
genes panorámicas (A) como en la tomografía espiral (B) mular la cirugía implantaria visualizando el implante
correspondientes a una paciente desdentada de 66 años con planificado en relación con las estructuras anatómi-
una mandíbula muy resorbida.
cas.
La radiotomografía digital proporciona la mejor in-
colingual del hueso en zonas de posible implantación; formación para la visualización radiográfica del con-
pueden determinarse con facilidad la localización de ducto mandibular. Al comparar la radiotomografía in-
las estructuras anatómicas, como el conducto man- formatizada con la convencional (hipocicloidal y
dibular, y la anchura del hueso. espiral) para medir las distancias del conducto, la TC
Durante las últimas dos décadas se han introducido no parece ser más exacta (45). La tomografía en es-
las máquinas tomográficas convencionales en la asis- piral ofrece mejor resultado que la hipocicloidal, ya
tencia bucodental. Algunos equipos de rayos X extra- que los bordes del conducto se identifican mejor con
bucales ofrecen también posibilidades para la radio- aquélla que con ésta (46). La imprecisión es mayor
tomografía digital. El principio de la tomografía se basa cuando se utilizan imágenes panorámicas (44, 46).
en la visualización claramente destacada de estructu- Para la planificación preoperatoria implantaria, es re-
ras en el plano focal, mientras que todas las otras es- comendable utilizar la tomografía en espiral, dado
que esta técnica ofrece un método preciso y fiable
para visualizar los huesos maxilares y las estructuras
anatómicas relacionadas en el aspecto bucolingual
(6, 9). También conlleva una menor dosis de radia-
ción que la tomografía espiral computarizada en de-
terminadas áreas desdentadas (7, 8). Vale de la pena
mencionar que los valores de las dosis de radiacio-
nes de la tomografía en espiral con el Cranex Tome®
(Soredex, Helsinki, Finlandia) son, en general, entre
un 50 y un 60 % menores que con el Scanora® (Sore-
dex), alcanzando niveles de dosis efectivas en la re-
gión del primer molar de 0,06 mSv frente a 0,12 mSv
en la mandíbula y de 0,04 mSv frente a 0,08 mSv en
el maxilar superior (18).
Cuando la zona maxilar en la que se va a realizar el
implante es un área restringida e insuficiente con res-
pecto a la calidad o la cantidad de hueso, o ambas, la
Fig. 3. A pesar de una altura ósea suficiente, la presencia de tomografía espiral puede ser la herramienta de plani-
una morfología ósea bucolingual desfavorable puede po- ficación preferible, manteniendo equilibrada la pro-
ner en peligro la colocación del implante. porción dosis-coste/beneficio (tabla 2). Para las áreas

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Planificación radiológica preoperatoria de la cirugía implantaria

Tabla 2. Niveles de emisión de la TC tomografía y espiral expresados en relación con el nivel medio de
radiació de fondo o dosis de emisión medias de una radiografía intrabucal
Región para inspeccionar Técnica
Tomografía espiral convencional Radiotomografía espiral
N.º de cortes N.º equivalente Nivel N.º equivalente Nivel
tomográficos de radiografías equivalente de TC de la de radiografías equivalente de
propuesto intrabucales dosis de fondo mandíbula intrabucales dosis de fondo
Única 1-2 10-40 1-4 días TC del 300-400 30-40 días
maxilar
Parcialmente dentada 4-6 40-160 4-16 días TC del 300-400 30-40 días
maxilar
Desdentada 2-8 20-200 2-20 días TC del 300-400 30-40 días
maxilar
Datos extrapolados del trabajo realizado por Bou Serhal y cols. (7, 8), Gijbels y cols. (28) y Jacobs y Gijbels (28).

del hueso maxilar de riesgo más extensas o en situa- Planificación basada en la TC tridimensional
ciones muy complejas, se justifica el trabajo en un en-
Los datos de la TC contienen información en tres di-
torno de planificación de imagen tridimensional real
mensiones, lo que permite la visualización de la zona
(33).
quirúrgica en un entorno tridimensional; puede re-
sultar útil la fabricación de modelos estereolitográfi-
Tomografía computarizada
cos en tres dimensiones (70-73). En especial desde la
En la actualidad, la radiotomografía informatizada se introducción de la TC espiral, las posibilidades de
realiza generalmente por TC en espiral. Esta técnica se la modelación tridimensional se han incrementado
distingue de la TC incremental (convencional), que con- notablemente. Esto último es importante cuando se
siste en la exploración sucesiva de láminas axiales uni- tratan maxilares muy resorbidos o con una deficiente
tarias. La TC espiral (helicoidal) es una tecnología más morfología ósea. La planificación exacta mejora las in-
reciente, en la cual el paciente es sometido a una tras- dicaciones para los tratamientos basados en implan-
lación simultaneamente a la rotación de la fuente de ra- tes bucales. Por lo general se dispone de diversos pro-
yos X, permitiendo una corriente de información conti- gramas informáticos destinados a la planificación
nua durante la exploración. La TC espiral ofrece una preoperatoria que permiten simular la cirugía im-
reducción del tiempo de barrido, mayor precisión, me- plantaria en dos dimensiones o en un entorno que
jor detección de lesiones y unas reconstrucciones tridi- combine dos y tres dimensiones. Evidentemente, este
mensionales optimizadas. La exploración axial de los último prevalece y permite una mejor transferencia al
huesos maxilares requiere el formateado posterior para campo operatorio, sobre todo cuando se integra el mo-
permitir la visualización de unas imágenes transversa- delo protésico óptimo en las imágenes tridimensiona-
les fiables. Se han confeccionado programas informáti- les (35, 73). Los maxilares pueden verse prácticamente
cos específicos para aplicaciones bucales y maxilofacia- desde cualquier perspectiva en la pantalla del orde-
les (p. ej., Dental CT®, Siemens Erlangen Germany; Denta nador, y la colocación del implante puede realizarse
Scan®, ISG Technologies, Missisaugua, Ontario, Canadá), de forma interactiva (fig. 4). En los casos en que se
para evitar los problemas relacionados con la imagen practica una TC de una prótesis, ésta puede visuali-
orofacial y para crear imágenes más estandardizadas de zarse al mismo tiempo que el maxilar. Esto permite re-
los maxilares. Últimamente, se ha diseñado también alizar ajustes estéticos y biomecánicos. También se eli-
equipos informáticos de TC con aplicaciones específi- mina la necesidad de análisis adicionales sobre las
cas para las imágenes dentomaxilofaciales. Tales técni- exigencias anatómicas y protésicas, dado que el pro-
cas ofrecen las ventajas de la imagen tridimensional a grama busca una planificación preoperatoria de riesgo.
unos precios y dosis razonablemente menores que la TC Tiene múltiples indicaciones, especialmente en la co-
espiral. Estas técnicas requieren la posterior validación locación de implantes bucales o cirugía maxilofacial.
clínica para demostrar su utilidad, sus ventajas y sus in- Cuando se trabaja con este tipo de programas infor-
convenientes (1, 51). Independientemente del tipo de máticos de planificación tridimensional, la anatomía y
programas o equipos informáticos utilzados, el empleo el análisis cualitativo de los huesos pueden presentarse
de plantillas de barrido con marcadores radiopacos está, en imágenes bidimensionales, en tanto que puede ser
definitivamente, recomendada durante el procedi- preferible realizar los ajustes estéticos y biomecánicos
miento, para permitir una mejor orientación de los po- en planos tridimensionales. Es esencial que las correc-
tenciales sitios y eje implantarios. ciones en las imágenes bidimensionales se traduzcan

17
Jacobs

(A)

Fig. 4. Con el programa informático de pla-


nificación tridimensional es posible ob-
servar los maxilares virtualmente desde
cualquier punto en la pantalla del orde-
nador, y el emplazamiento del implante
puede realizarse de forma interactiva. A)
La ubicación del implante en imágenes
transversales formateadas permite com-
probar el implante en todos sus cortes. B)
Puede realizarse el ajuste posterior sobre
las imágenes tridimensionales de las es-
tructuras anatómicas. La presencia de un
modelo protésico tridimensional permite
la integración de los factores estéticos,bio-
mecánicos y anatómicos en la planifica-
ción preoperatoria de la colocación del im-
(B) plante.

de forma automática en la visualización de estas adap- este tipo de planificación informatizada (tabla 1) (59,
taciones en imágenes tridimensionales, y viceversa (35, 69, 70).
73). En esta fase se prefiere la incorporación del diseño La reabsorción extrema del hueso maxilar puede
protésico ideal para permitir la completa integración conducir a una opción de tratamiento que implique
de los factores anatómicos, biomecánicos y estéticos. la colocación de implantes en el cigoma. En estos ca-
Evidentemente, la selección de la TC tridimensio- sos, la planificación basada en la TC tridimensional
nal y de la transferencia a la cirugía asistida por or- podría no sólo describir la compleja topografía ana-
denador está justificada para la rehabilitación del ma- tómica que hay que considerar en tales casos, sino
xilar deficitario. Aunque la dosis total de radiación de también ayudar a seguir las estructuras óseas crucia-
la TC es mayor que la de la tomografía convencional, les a lo largo de la trayectoria del implante (70). Para
el aumento de la cantidad de información requerida los procedimientos de injerto complicados, es posible
puede compensarse con los crecientes costes y el ni- simular el abordaje quirúrgico durante el preoperato-
vel de radiación. rio, con una determinación precisa de la forma y el
Cuando aumenta el riesgo de dañar estructuras ana- volumen del injerto requerido (69).
tómicas vitales o disminuye notablemente la probabi-
lidad de éxito del tratamiento, es necesario obtener más Transferencia quirúrgica tridimensional
información. Como es obvio, los complejos procedi- asistida por ordenador
mientos quirúrgicos como la colocación de un implante
cigomático o los procedimientos de injerto en los ma- Una vez realizada la planificación interactiva del im-
xilares muy atrofiados pueden también beneficiarse de plante, queda otro asunto crucial: la transferencia a la

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Planificación radiológica preoperatoria de la cirugía implantaria

cirugía. Muchos médicos todavía optan por una nave- riorado, las desviaciones de la planificación durante la
gación mental basándose en la planificación del im- colocación real del implante entrañan el riesgo de da-
plante visualizada o bien por una plantilla quirúrgica ñar estructuras vitales.
basada en una transferencia mental de los datos de la
planificación. Es evidente que tales acciones confieren
gran libertad al cirujano, pero aumentan intrínsica-
Dosis de radiación y selección
mente la variabilidad y disminuyen el carácter previsi- de la técnica
ble de la planificación en la localización intraoperato- Tanto si el objetivo es explorar una única zona im-
ria del implante. En especial cuando se tratan casos plantaria como un maxilar totalmente desdentado, la
límites o se realizan procedimientos quirúrgicos más TC requiere la irradiación de todo el maxilar. Por lo
complicados, es recomendable evitar dicha variabili- tanto, cualquier comparación entre los niveles de do-
dad y optar por una transferencia informatizada. Di- sis de la TC y de la tomografía debe incluir los niveles
versas publicaciones clínicas han abordado la fabri- de dosis de radiación por la TC de todo el maxilar (ta-
cación de plantillas protéticas y/o quirúrgicas que bla 1). Cuando se comparan las dosis emitidas en una
permitan la transferencia del lugar elegido y de la di- TC del maxilar con las emitidas en las secciones to-
rección de los implantes que se van a colocar (4, 12, 50, mográficas múltiples de toda la arcada maxilar, la do-
52). La transferencia de datos para la planificación me- sis procedente de la TC es relativamente menor (7, 8,
diante la elaboración de una plantilla convencional si- 18, 22). En regiones desdentadas limitadas es preferi-
gue siendo, a pesar de todo, una fuente de variabilidad ble la utilización de la tomografía por su menor dosis
e imprecisión. La predicción del desenlace clínico del de radiación (16, 36). Se han realizado intentos para
tratamiento sigue siendo limitada (34, 35). reducir dichas dosis. La disminución de la configura-
La programación implantaria tridimensional interac- ción en mA durante el examen con TC puede reducir
tiva informatizada ha abierto una puerta a la transfe- las dosis de forma significativa (7, 15, 18, 23). Asimismo,
rencia real del ordenador al campo operatorio. En la puede ser válido reducir la dosis disminuyendo los
transferencia asistida por ordenador pueden utilizarse ajustes de mA para la tomografía espiral cuando se
dos métodos: navegación y guías de perforación. La na- cambia de exámenes tomográficos convencionales a
vegación quirúrgica se aplica en la cirugía implantaria digitales (27, 28).
maxilofacial y bucal (5, 75-77) e, incluso, se ha descrito
para la colocación de implantes cigomáticos (59). La téc-
nica puede minimizar el campo operatorio y aumentar Planificación de la colocación
la precisión de la transferencia desde su proyección hasta del implante en el maxilar deficiente
la colocación de los implantes en los maxilares. Los maxilares pueden resultar insuficientes a causa
De manera alternativa, la transferencia asistida por de alteraciones cuantitativas o cualitativas. En el pri-
ordenador puede realizarse con guías de perforación mer caso debería considerarse la influencia tanto del
estereolitográficas. Incluso con este tipo de técnica in- reducido volumen óseo como de su desfavorable mor-
formatizada, la transferencia de la planificación a la ci- fología. En el segundo deberían tenerse en cuenta la
rugía sigue siendo muy complicada. Cuando se utiliza estructura trabecular del hueso, el grosor cortical y la
una transferencia tridimensional informatizada me- densidad ósea real. Las alteraciones que afectan a los
diante guías de perforación, puede obtenerse mayor aspectos de cantidad o calidad del hueso pueden ser
precisión (1,1.º de rotación y 0,2 mm de traslación) (25) locales o sistémicos, y deben considerarse durante la
que con la transferencia convencional procedente de fase de planificación preoperatoria.
las imágenes de TC bidimensionales (4, 52). Bou Ser-
hal y cols. (10) encontraron errores de transferencia in-
feriores a los 2 mm entre la planificación basada en las
Atrofia mandibular extensa
TC tridimensionales y la localización real del implante La modalidad de diagnóstico por imagen preferida
por medio de plantillas estereolitográficas en una man- para la planificación preoperatoria del implante en la
díbula gravemente resorbida (fig. 5). En un estudio re- mandíbula completamente desdentada es una imagen
ciente sobre la transferencia basada en la TC tridi- panorámica, combinada con algunas secciones tomo-
mensional con guías de perforación estereolitográficas, gráficas en espiral en la región interforaminal. Esto úl-
van Cleynenbreugel y cols. (71) constataron que la des- timo permite no sólo la planificación del emplaza-
viación angular estaba habitualmente por debajo de miento del implante en imágenes bidimensionales,
los 3.º y las desviaciones lineales por debajo de 2,5 mm sino también la inspección de la morfología del hueso,
para los implantes cigomáticos. Considerando los da- de la anchura bucolingual y de la localización del con-
tos mencionados sobre la transferencia por navega- ducto incisivo, si éste está presente. Este conducto
ción o por guía de perforación, los errores de transfe- puede contener un paquete neurovascular, con el con-
rencia se hallan, habitualmente, dentro de límites siguiente posible riesgo de que se produzcan daños
clínicos aceptables. Sin embargo, en el maxilar dete- quirúrgicos (29). En algunos casos, la colocación del

19
Jacobs

(A)

(B) (C)

Fig. 5. Las guías de perforación estereolitográficas permiten das anatómicas y los requisitos protésicos. B) Guías de per-
la transferencia asistida por ordenador desde el programa foración estereolitográficas con cilindros metálicos para
informático de planificación tridimensional al campo ope- guiar los taladros (trépanos) de diversos diámetros durante
ratorio. A) Planificación tridimensional de la ubicación de el procedimiento quirúrgico. C) Utilización quirúrgica de las
un implante en un maxilar superior desdentado, que mues- guías de perforación para una transferencia informatizada
tra la posición de los implantes en relación con las deman- de la planificación preoperatoria.

implante se combina con tratamientos quirúrgicos tridimensional. Cuando el volumen del hueso disponi-
muy complejos, involucrando no solo la región inter- ble es escaso o insuficiente, el programa informático de
foraminal sino otras estructuras (p. ej., injertos, ciru- planificación tridimensional puede permitir que se lo-
gía ortognática). En este punto, el equilibrio entre los gre el tratamiento planeado o la simulación de otros pro-
beneficios y los riesgos puede decantarse por las ex- cedimientos quirúrgicos como el injerto. Las dimensio-
ploraciones de TC (36). nes y la configuración del injerto pueden evaluarse
cuidadosamente durante la planificación preoperatoria.
Es más, el principio de la planificación y transferencia
Atrofia maxilar extensa preoperatorias permite también la utilización de mem-
La modalidad de técnica diagnóstica por la imagen branas de titanio individualizadas para aumentar el vo-
preferible para el maxilar completamente desdentado es lumen del hueso, en lugar del injerto (62). Se ha desa-
la TC espiral. Éste permite planificar la colocación del rrollado también una herramienta de planificación
implante en imágenes bidimensionales y tridimensio- concreta para la proyección preoperatoria de los im-
nales. También admite la posterior transferencia de da- plantes cigomáticos (70). Es esencial llevar a cabo una
tos a los programas informáticos específicos para la si- planificación preoperatoria meticulosa de los implantes
mulación de la colocación del implante en un espacio cigomáticos, ya que este tipo de cirugía es más compli-

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Planificación radiológica preoperatoria de la cirugía implantaria

cada y difícil que la planificación del implante bucal con- respuesta al tratamiento. La absorciometría de doble fo-
vencional. En esta zona, los implantes no sólo son tres tón (DPA) y la absorciometría radiográfica de energía
o cuatro veces más largos que los implantes bucales, sino dual (DXA) son, en la actualidad, las más utilizados, con
que la trayectoria del implante a través del hueso es más un coeficiente de variación de las determinaciones in
delicada. La visibilidad intraoperatoria es muy escasa, lo vivo no superior al 3 % para la precisión y al 7 % para
cual exige, habitualmente, la preparación de un surco la exactitud (74). Es preferible la DXA, ya que es más rá-
lateral en la pared sinusal para controlar la dirección del pida, más precisa, más exacta y más barata que los de-
eje del implante con respecto a las estructuras anató- más métodos. Los datos obtenidos sobre la densidad
micas circundantes (63, 68). Este surco en la pared si- ósea se expresan en unidades/cm2, longitud/cm2 (DPA)
nusal puede no ser necesario cuando se utilizan la pro- o g/cm2 (DXA) (19).
yección y la transferencia tridimensional a la cirugía La tomografía computarizada cuantitativa (TCC)
implantaria mediante guías de perforación estereolito- mide la densidad volumétrica y los resultados se dan
gráficas (70, 71) y el pronóstico de la técnica también en g/cm2 (2). La TCC periférica (TCCp) permite la eva-
puede mejorar. luación de la densidad del hueso esponjoso y cortical,
la microtextura esponjosa y la anchura cortical (42).
Comparada con la DXA, tiene una buena precisión (1-
Mala calidad del hueso 3 %) pero menor exactitud (14 %) (42). La TCC se ha
Datos clínicos recientes han indicado una relación sig- utilizado también en la valoración de la densidad del
nificativa entre las enfermedades generalizadas y el fra- hueso maxilar (47). Los exámenes in vivo de la micro-
caso de los implantes (24, 61). Durante la planificación estructura ósea mediante la tomografía computarizada
preoperatoria del tratamiento deben tenerse en cuenta de alta resolución (TCC-3D) puede abrir nuevas posi-
todos los factores sistémicos asociados con un aumento bilidades en la diferenciación de los diversos tipos de
del fracaso implantario. La mala calidad del hueso po- pérdida ósea (67).
dría ser el factor causal relacionado con dicha enferme- Los ultrasonidos cuantitativos (USC) constituyen un
dad. Mientras haya dientes, los factores locales pueden método alternativo para determinar la calidad del hueso
ser predominantes en el maxilar, pero si éste carece de maxilar (55). Esta técnica no emite radiaciones, es sen-
dientes, los factores sistémicos pueden ser más impor- cilla y económica y puede proporcionar información so-
tantes (74). bre la calidad del hueso. Por lo general, se realizan me-
Diversas enfermedades generalizadas entrañan fac- diciones de la atenuación ultrasónica de banda ancha
tores de riesgo de osteoporosis. Algunos ejemplos son (AUBA) y de la velocidad del sonido. Los USC parecen
la artritis reumatoide, afecciones gastrointestinales ser un factor pronóstico de las fracturas por osteoporo-
(mala absorción o hepatopatías crónicas), trastornos sis tan bueno como la DMO, y también han demostrado
hematológicos (p. ej., mieloma múltiple, leucemia, lin- ser útiles en el seguimiento de los pacientes.
foma), enfermedades endocrinas (p. ej., hiperparati-
roidismo) o la terapia farmacológica (tratamiento con Diagnóstico de la calidad ósea de los maxilares
corticoides) (20). Otros factores de riesgo para la os- En el hueso maxilar dentado también pueden ma-
teoporosis están relacionados con la edad y el sexo, la nifestarse factores generales, aunque los factores loca-
predisposición genética y el estilo de vida (consumo les son predominantes cuando hay ligamentos perio-
de tabaco, abuso de alcohol, sedentarismo) (68). Al su- dontales y dientes. En el caso de un maxilar desdentado,
perar los 65 años de edad, casi un tercio de la pobla- los efectos sistémicos sobre la calidad del hueso pue-
ción femenina occidental sufre osteoporosis (21). Esta den desempeñar un papel principal (74). En concreto,
enfermedad se caracteriza por alteraciones en la mi- se ha establecido una relación entre la densidad mine-
croestructura ósea y por un descenso de la masa ósea, ral ósea esquelética y la mandibular (para una revisión,
que determinan una mayor fragilidad del hueso y, por v. 74, 78). Sin embargo, la correlación puede no ser su-
consiguiente, un aumento del riesgo de fractura. ficientemente estrecha (32, 64) como para basarse en
la evaluación de la densidad ósea esquelética para pro-
nosticar la densidad ósea mandibular (74).
Métodos diagnósticos para valorar la Por lo tanto, para la valoración de la densidad ma-
mala calidad del hueso xilar hay que considerar herramientas específicas. Es
necesario hacer una clara distinción entre las herra-
Diagnóstico de la calidad ósea del esqueleto
mientas clínicas sencillas para la identificación siste-
Los análisis del contenido mineral óseo (CMO) y de mática de la densidad ósea y los métodos más com-
la densidad mineral ósea (DMO) son esenciales para plejos, pero muy precisos, para la determinación de
predecir la escasa calidad del hueso, la osteoporosis y la densidad y la morfometría ósea.
el posible riesgo de fractura (21, 38), no sólo con pro- Las modalidades habituales de diagnóstico por la
pósitos diagnósticos, sino también para llevar un con- imagen maxilofacial ofrecen la posibilidad de realizar
trol de los individuos que padecen osteoporosis y de su un sencillo cribado y clasificación de la calidad ósea

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Jacobs

mandibular en la consulta. A menudo se utilizan ba- fométricos son, por lo general, menos pronunciadas
remos subjetivos de la calidad maxilar durante el pro- en esta área (65). Los métodos de medición cuantita-
cedimiento de planificación preoperatoria. El método tiva incluyen las determinaciones de la densidad del
más tradicional aplicado durante la valoración preo- hueso utilizando una radiografía intrabucal, con un
peratoria implantaria es el utilizado por Lekholm y programa de análisis de imagen o una trama de cali-
Zarb (43), que clasifica el estado radiográfico real de la bración ósea (32, 41). Los escáneres de DXA se han uti-
calidad del hueso en cuatro grupos según el grado de lizado en el examen de la densidad mandibular (13,
corticalización y morfología ósea trabecular. La idea 31). Lo mismo puede decirse de los escáneres de TCC
básica que subyace a esta gradación cualitativa es que de todo el cuerpo (40, 64), con el inconveniente de emi-
la calidad del hueso aumenta cuanto mayores son la tir elevadas dosis de radiación y colocar al paciente en
densidad y el grosor corticales (grados 1 y 2 ), mien- una posición poco confortable. Los escáneres de TCC
tras que un hueso cortical más fino (grado 3) combi- pueden evitar los inconvenientes de los otros méto-
nado con grandes espacios trabeculares y la escasez
del hueso cortical (grado 4) ofrecen condiciones me-
nos adecuadas para la sujeción del implante. La dis-
tinción de la calidad ósea entre los extremos bueno
(grado 1) y malo (grado 4) no supone, por lo general,
ningún problema para el observador. Existe mayor di-
ficultad y variación del observador cuando se intenta
distinguir entre los grados 2 y 3.
Algunos métodos de clasificación se basan en la gra-
dación de la estructura ósea trabecular (47). No obs-
tante, otras puntuaciones de evaluación subjetivas se
centran sólo en la corteza, proporcionando una clasi-
ficación para la porosidad cortical del borde inferior,
de la estructura o de la anchura cortical inferior (3,
40). Siempre que se disponga de material de TC, sería
necesario también considerar un análisis posterior de
las unidades Hounsfield (UH). Cuando se calculan los
valores UH en un área de interés concreta, puede ob-
tenerse información relativa sobre los aspectos de la
densidad ósea local. La aplicación de programas in-
formáticos interactivos para la planificación preope-
ratoria del implante puede ayudar al odontólogo a
efectuar dichas evaluaciones. Todavía no se dispone
de directrices absolutas para estos valores UH, ya que
las observaciones de la densidad dependerán del es-
cáner y variarán según la configuración concreta de
cada exposición y el nivel de intervalo aplicado. Las
mediciones permiten cuantificar el hueso en uno de
los grados de calidad de Lekholm y Zarb (43, 54). Es
evidente que las variaciones UH observadas en el
mismo maxilar reflejan variaciones locales de la den-
sidad ósea, con valores UH bajos para la mala calidad
del hueso (p. ej., región de la tuberosidad). Otra apro-
ximación que utiliza información calibrada sobre la
DMO consiste en superponer la información, codifi-
cada por colores, sobre la mineralización ósea del lu-
gar en imágenes de TC axiales y formateadas (30). Es
necesaria la normalización de una trama de calibra-
ción y de un conjunto de valores normativos de la den-
sidad maxilar para realizar mediciones diagnósticas
objetivas sobre la buena o mala calidad del hueso.
Cuando se requiere una estimación de la calidad ma- Fig. 6. La gammagrafía ósea mediante difosfonato de me-
xilar global, el análisis se centra en la parte basal de la tileno con tecnecio-99m es una técnica de diagnóstico por la
mandíbula detrás del agujero mentoniano, porque las imagen funcional que permite visualizar el aumento de ac-
variaciones en la estructura, la forma y el volumen mor- tividad metabólica en diferentes estructuras esqueléticas.

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Planificación radiológica preoperatoria de la cirugía implantaria

dos, pero no se dispone de un TCCp adaptado a la ex- nificación basada en la TC tridimensional. Otra cuestión
ploración in vivo de los maxilares. crucial es la transferencia exacta de esta planificación al
Por otra parte, la estructura del hueso trabecular tam- campo operatorio. Una transferencia informatizada evita
bién puede analizarse mediante el análisis fractal u otras la variabilidad relacionada con la transferencia y la in-
mediciones morfológicas (14, 26). Habitualmente, las terpretación mentales. Especialmente en los casos límite,
variables citadas se relacionan con la osteoporosis. No una desviación menor puede tener importantes reper-
obstante, las poblaciones con osteoporosis y las sanas cusiones clínicas. Además de las mediciones óseas vo-
muestran una superposición considerable, y los estu- lumétricas y morfológicas, es decisivo establecer clíni-
dios normativos para el análisis de la densidad de los camente la calidad o la densidad ósea. Esta última puede
maxilares son poco frecuentes. Por ello, estos métodos estar relacionada con un índice de éxitos más bajo para
no pueden determinar el umbral clínico definitivo para los implantes. Desgraciadamente, todavía no existen he-
distinguir el maxilar sano del patológico. rramientas clínicas sencillas disponibles para una iden-
tificación exacta y fiable de la calidad del hueso maxilar.
Control de los cambios en la calidad de los A menudo, los métodos cuantitativos más complejos son
maxilares demasiado exigentes, en tanto que los sistemas de gra-
Para controlar los cambios en la densidad ósea que dación de la calidad están sujetos a una importante va-
se producen con tiempo, la comparación de los per- riación según el observador.
files en la escala de grises y la sustracción digital de
Periodontology 2000, Vol. 33, 2003, 12-25
las siguientes radiografías intrabucales estandarizadas
puede ofrecer posibilidades para la evaluación clínica
(32). Los USC cuantitativos constituyen un procedi- Bibliografía
miento no agresivo y no ionizante que también puede
controlar los cambios del hueso que ocurren con el
tiempo (55).
En un limitado número de casos, la evaluación de
los cambios óseos puede ser crucial y exigir la utiliza-
ción de técnicas complejas, pero también de mayor do-
sis. La gammagrafía ósea mediante difosfonato de me-
tileno con tecnecio-99m o, preferiblemente, la tomografía
por emisión de fotón único (SPECT) es conocida como
un método útil y fiable para medir el aumento de ac-
tividad metabólica de los tejidos óseos (fig. 6). Por lo
tanto, puede aplicarse para llevar un control de la ci-
catrización postoperatoria de los maxilares o la remo-
delación ósea periimplantaria (39, 48, 58). Esto último
resulta útil en los tratamientos quirúrgicos sumamente
complicados de los maxilares deficitarios, en los que la
evaluación de la reestructuración ósea y de la oseoin-
tegración son cruciales.

Conclusiones
Para la cirugía implantaria bucal en el paciente de
riesgo, la planificación radiológica preoperatoria debe
incluir una evaluación tanto cuantitativa como cualita-
tiva de los maxilares. Estas valoraciones son imprescin-
dibles para que el resultado clínico del tratamiento sea
un éxito. Al seleccionar la técnica radiológica apropiada,
la dosis de radiación debe sopesarse con la información
requerida y alcanzada. Considerando las dosis de radia-
ción implicadas y la información obtenida, la radioto-
mografía transversal se considera el examen de elección
en el maxilar deficiente. El diagnóstico mediante tomo-
grafía convencional y por imágenes bidimensionales
sigue estando indicado para determinadas áreas limita-
das, en tanto que para las áreas extensas o los procedi-
mientos quirúrgicos complicados es preferible una pla-

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