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Medicina en la postmodernidad 3
Rafael Padrón
Explicatio 11
Caleb Olvera
LUXMEDICA
AÑO 10, NÚM.TREINTA,
MAY-AGO 2015
Contamos con algunos ejemplares del libro Ars Médica, editado este año por la
UAA, a disposición de los autores de algún texto u obra en el dossier cultural.
Interesados, favor de comunicarse con la Sra. Martha Reyes al tel... 9-108443,
departamento de medicina de nuestra Universidad.
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Medicina en
la postmodernidad *
Rafael Padrón
H
ablar de la Postmodernidad, lor que ella ostenta y persigue: El Dine-
una fracción del tiempo cós- ro. Irremediablemente, vienen a la mente
mico, resulta una aventura épocas pasadas de la humanidad en las
y temeridad de grado extre- cuales el reparto de los bienes, la opción
mo, pues apenas la civiliza- por los desposeídos, el trueque y nuestros
lejanos 60s’, hicieron ensoñar al hombre
más, una gran porción de ella, ignora que común, que efectivamente los recursos
existe una época humana que así se nom-
bra, y si acaso ubica el tiempo que viven cualquiera únicamente por sus talentos o
en ella, en el mejor de los casos le llaman méritos intelectuales podría alcanzar esos
moderno o actual. -
Sin embargo, renglones adelante, de- nes políticos, pensamiento individual y
social, lo hacían posible en sus mensajes
darán cuenta de su existencia apartada de y con ello creaban la ilusión de que por el
su predecesora, la modernidad. hecho único de ser habitantes de la tierra,
Les mencionaba que resulta aventu- resultábamos merecedores de sus bienes
rado hablar de ella y aún más ligarla a y que incluso para nuestros descendien-
la medicina, porque la modernidad no tes, siempre habría agua, pan, abrigo,
se ha completado, menos concluido. Sin respeto y libertad, satisfactores a los que
* Texto presentado durante la entrega del libro Ars Medica, abril 2015.
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nebre introducción hablaremos de esta casos, aparecen las fugas existenciales:
malformación del desarrollo humano y su neurosis, depresión, alcoholismo y adic-
liga con la medicina. ciones en general, apatía y demás estados
Sucede que estamos viviendo el punto que contradicen a la vida.
más álgido de la convivencia humana a Hablando en forma general, el desa-
nivel mundial. Por doquier el hombre de rrollo del hombre es el camino que reco-
la calle se entera de sucesos que ensom- rre durante su existencia hacia su integra-
brecen su día y su futuro.
Por otro lado una juventud inerte, sin En nuestra adolescencia, época de
proyectos y sentidos aparece ciega ante tantas indecisiones y pasiones hubimos
entre tantos caminos, que decidir aquel
lesiva sino porque no tienen un referente que según nuestros apetitos y regímenes
contrastante que les informe como po- familiares y sociales nos conducirían a
drían vivir de otra manera, no hay sig- una época adulta y de ella a la realización
personal de una manera ética, de producir
satisfechos. Para Hegel y Marx, la ena- a través del trabajo, el sustento propio y
jenación es tomada como el extravío del el de nos nuestros.
hombre, la ausencia de su dignidad, de su Los ahora reunidos, quizá inconscien-
desarrollo. Y esta es la misma propues- temente nos apropiamos de una parte del
ta de Víctor Frenkl como una propuesta camino de Quirón, el centauro bendecido
terapéutica al recuperar el sentido de la por Zeus, que a pesar de estar herido pro-
vida. digaba la curación, el servicio y el con-
Es en la postmodernidad que suceden suelo a los humanos. Todavía quisimos
las idolatrías o creencias que se practican ofrecernos, desprendernos hacia los de-
solo porque la moda las impone. más, acompañar en un acto de auténtica
Vista así, la postmodernidad, conse- compasión al que frente a nosotros decla-
cuencia y causa debido a la multitud y raba su sufrir.
facilidad de los recursos ofrecidos por la El hecho es que esta vocación hacia el
desinformación, nos muestra otra de sus auxilio del otro, aquel que frente a noso-
tros sufre, nos invita a la acción compa-
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se genera una sociedad fragmentada, es- siva. Por este acto visible, repetido tantas
quizofrénica y por lo tanto lejana de la veces, nace de estructuras profundas en
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butos humanos de una vida digna. estas energías y las conjunto en la cate-
Por esta razón ha perdido su valor la goría de arquetipos, fuerza impulsoras
vida y por eso también se incrementa el que conforman nuestra unidad igual a
consumo en la persecución de espejismos aquellas que hacen permanecer unida la
que el aparato productivo presenta como molécula del ADN, o bien las aprendidas
e introyectadas cuando hacemos uso del
el consumidor alcanza estos valores apa- pensamiento crítico.
Así, los arquetipos resultan modelos
si no es así, viene la ansiedad, la angus- de muchas características humanas, en-
tia porque no se han logrado. En ambos tonces la bondad, la compasión, la ge-
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nerosidad conforman el arquetipo de la remos la conciencia a esa dimensión ge-
luz. Y en el de la sombra, quedarían entre nuina de desarrollo humano.
otros, el egoísmo, la vileza, la envidia. Tal vez ese vacío que pretendemos
En ambos casos, la carga de energía obturar con el acúmulo de objetos empie-
psíquica, es intensa y extensa. “El sana- ce a ser convertido cada vez más en una
-
co en servicio, a la vocación para el que integración.
sufre. Es el conocimiento habilidades
y acciones dedicados al enfermo, pero somos más que huesos, sangre., tendones
también necesarias para quien las prac- y demás elementos de un cuerpo, agrade-
cidos poseedores del conocimiento para
congruente trascendente de la vida, solo sanarnos sanando, o para acompañar a
aparece cuando actúa de esta manera. nuestros enfermos a vivir el trance de la
La verdadera cura ocurre en el enfermo muerte con dignidad.
y también en el médico. En el fondo, el ¡Médico, despierta! Tu vocación, tu
sufrimiento es la fuente del poder cura- destino, no terminan en el dinero. Re-
tivo en ambos. El verdadero médico, no cuerda a tus antecesores que trascendie-
es un hábil manipulador de tecnologías, ron su época y su mortalidad, todos fue-
un memorioso que publica en revistas ron humildes. Reconócete en aquel que
arbitradas. sufre y está en tus manos como uno igual
Quizá si ahora vemos a la profesión
médica como una oportunidad vital, abri- compasión.
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Mujeres visionarias: Hannah
Arendty Los Orígenes del
totalitarismo
Néstor Duch-Gary
E
l 8 de marzo de este 2015 se Es autora de una vasta obra en la que
celebró el día internacional de destacan La Condición Humana, La Ba-
la mujer. Para contribuir a esa nalidad del Mal, Los Orígenes del Totali-
conmemoración se ofrecen en tarismo entre otros libros famosos. Decía
este escrito algunos comenta- de sí misma que su trabajo debía enmar-
rios sobre el pensamiento de una dama
no en el de la Filosofía. Hemos atendido
han sido sugeridas por la obra de Hannah su sugerencia. Por consiguiente, los co-
Arendt, a quien se debe ideas incisivas mentarios se le dedican a las ideas políti-
cas expuestas en el último libro citado. Se
escrito es, entonces, examinar algunos de trata, por supuesto, de una interpretación
sus planteamientos y evaluar la vigencia personal a partir de lecturas de sus traba-
que podrían tener en los tiempos presen- jos y de algunos otros textos de distintos
tes. autores que escribieron sobre aquellos.
A manera de una brevísima semblanza Según Arendt, el totalitarismo se ca-
- racteriza por una condición paradójica
tos: Hannah Arendt nació en Linden Lin- que consiste en admitir que la dualidad
ner, Alemania, en el seno de una familia legalidad-autoritarismo se resuelve “ra-
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histórico o a las condiciones del mundo procesos de articulación social. Se crea
natural o a los mandatos de alguna otra así un ambiente propicio para incubar un
abstracción fuera del alcance de la volun- movimiento que funde su desarrollo en
tad de los seres humanos. Con base en mecanismos que trasciendan las capaci-
esta concepción del mundo y de la socie- dades del pensar humano. Pero esta de-
formación implica un grave riesgo: si se
la fuerza para “salvar” a los “herejes”, a acepta que el bien perseguido por el tota-
aquellos que no acaten las verdades su- litarismo es el bien común, se renuncia a
premas y opten por una vida sin sentido,
al margen de esos designios irrecusables. renuncia a otras posibles formas de go-
Queda claro que a partir de esta concep- bierno más ajustadas a la pluralidad y a
los deseos de la sociedad.
medios. La legalidad y el respeto de los dere-
Transcribo enseguida uno de los jui- chos individuales deben ser las condicio-
cios de Arendt, tomado de la obra citada: nes esenciales de los gobiernos no tirá-
nicos. En contraste, el terror, el miedo,
legitimidad y pretendiendo establecer el los castigos “ejemplares” son los instru-
- mentos que en la concepción totalitaria
rra ejecuta la Ley de la Historia o de la se emplean para evitar los desvíos de las
Naturaleza sin traducirla en normas de lo conductas de los individuos. Se procede
justo o lo injusto para el comportamiento así para eliminar la pluralidad de la socie-
individual. Aplica directamente la Ley a dad y homogeneizar a los ciudadanos. Se
la Humanidad sin preocuparse del com- trata de que se plieguen a los supremos
portamiento de los hombres”. designios de los hombres en el poder. El
De los planteamientos de Arendt se campo de concentración es el paradigma
desprenden otras consideraciones acerca -
del totalitarismo. En primer lugar, están da, permanentemente, el terrible y cruel
las que apelan a una visión “total” de la castigo cotidiano a quienes son “diferen-
sociedad que explica todo. (Lo cual no es tes”.
muy riguroso que digamos). Además, los Las medidas totalitarias inducen a los
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a entendimientos sobre sus diferencias. persecuciones y castigos en los Estados
Le impide también emprender acciones Unidos a quienes se consideraba “antia-
orientadas a la búsqueda del bien común, mericanos” en la época de McCarthy.
elegido por la sociedad misma, mediante Ahora bien, los orígenes del totalita-
rismo y de sus manifestaciones están en
libremente las preferencias individuales. la pérdida del espacio público, producto
Como secuela de esas imposibilidades,
los individuos se someten a los dictados a una representatividad democrática sin
del poder como única opción para dispo- garantía de expresar la pluralidad social y
ner del orden social necesario para vivir la búsqueda del bien común. La situación
bajo las “seguridades” que impone el go- anterior sugiere una posible solución,
bierno. aunque en este caso se trata de una es-
Años después de la publicación de la peculación personal. La solución es, evi-
obra comentada, Arendt cree encontrar dentemente, recuperar el espacio público
una comprobación empírica de sus ideas, y usarlo para expresar directamente la
que expone en La Banalidad del Mal. En voluntad de la sociedad. Se amplía así la
alguna parte de este texto, que describe el democracia directa como quería Arendt.
juicio del criminal nazi Adolf Eichmann Una pregunta que surge ahora natu-
en Israel, sostiene un punto de vista que ralmente es la siguiente: ¿El actual cre-
desconcierta a la opinión pública, espe- cimiento acelerado en el uso de las redes
cialmente a la judía. Sostiene que el acu- sociales en materia política en el mundo,
sado no es el monstruo que se ha querido no será una manifestación del anhelo so-
hacer creer que es. Se trata simplemente, cial de recuperar el espacio público y de
dice, de un ejemplar arquetípico del hom- contribuir a una concepción democrática
más directa de las que disponemos aho-
cumplido, sujeto a una autoridad inape- ra? ¿No será este proceso una forma de
lable que le ha impuesto una misión que defensa de la sociedad ante las eventua-
cree trascendente. Este punto de vista le les amenazas del totalitarismo? Si esto es
valió a Hannah Arendt muy severas des- así, no cabe duda que los argumentos de
Hannah Arendt en ese sentido tienen un
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Explicatio
Caleb Olvera
U
n problema fundamen- mento donde las premisas incluyen las
conclusiones, por el simple hecho de
¿Qué se entiende por expli- sujetarse a leyes. Así que la explicación
cación? no es más que la descripción de cómo
Aristóteles crea la teoría operan estas leyes en los fenómenos. Se
de las causas, para intentar responder a observan dos tipos de explicaciones bajo
esta pregunta. Son 4 formas predicativas esta idea: las deductivas (Nomológico
las que pueden contestar el porqué de deductivas N-D) y las inductivas. En las
primeras, las premisas ya contienen la
E es una explicación de Q, si y sólo si, conclusión, mientras que en las segundas
E es una propuesta de la forma “X tiene (inductivas estadísticas) al ser probabi-
P porque r”, en la que r pretende dar una lísticas, solo hacen probable la conclu-
o más de las cuatro causas de Aristóte- sión sin implicarla.
les por la que X tiene P. Su expresión lógica sería: E es una ex-
Cuando decimos que explicamos plicación de q, si y solo si E, es un argu-
algo ¿qué es lo que queremos decir? La mento valido y deductivo, con premisas
que incluyen su conclusión.
cual indica que no es la única. Esto es O en el otro caso. E es una explicación
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EXPANDIR matical precisa de responder. Si pregun-
Explicar tiene su raíz en el latín expli- tamos ¿dónde?, la respuesta debe ser un
- indicativo. Si preguntamos ¿cuándo?, la
gar, Mostrar lo que se encuentra ocul- respuesta es un adverbio de tiempo, esto
es: un momento, una frecuencia, una fe-
y decir más, “expandir” lo dicho en busca cha, etc. Si a la pregunta ¿cuánto? se con-
de que se entienda mejor. testa con un lugar o frecuencia, se crea un
La explicación es el momento poste- sinsentido, según la analítica primaria.
rior al acto de comprender, es la exposi-
alguien más entienda. Aunque algunos SOBRE LA PREGUNTA ¿CÓMO? (DE LO QUE
creen que no es posterior sino simultáneo, PODEMOS HACER)
comprender es haber entendido la expli-
cación. Sin embargo el cómo de la acción, es un
Nuestro proceso cognitivo necesita ejemplo paradigmático. Nuestro lengua-
observar cómo se concatena, cómo se je no se ha desarrollado para poder dar
une un evento con otro para poder crear explicación de cómo es que podemos ha-
sentido, para poder entender. Explicar,
en este sentido, tiene la forma lógica de pueda ser explicada en términos de cómo
la concatenación y ésta unión o subor- se realiza. Todo termina en: “mando”,
“impulsos nerviosos”, o “el cerebro man-
génesis del fenómeno explicado, las cau- da la información”, etc. Lo cual, obser-
sas que lo generan, la forma en que se vado detenidamente, no explica nada, ya
construye, las leyes que lo rigen, y el por- que la problemática sigue siendo la mis-
qué tiene una permanencia o una desa- ma: cómo haces para enviar impulsos
parición. (Siguiendo a Aristóteles con eléctricos o cómo hace el cerebro para
su teoría del movimiento, donde más re- mandarlos?. De alguna manera, éste es
quizá el eje de las explicaciones menta-
Este tipo de explicación tiene una for- les. Cuando en 1643, la princesa Eliza-
ma gramatical interesante, que en espa- beth de Bohemia le escribe a Descartes,
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ñol se fragua: ¿qué?, ¿para qué? o ¿por para pedirle la explicación de cómo la
qué?. La respuesta también implica esta “sustancia” pensante puede causar movi-
forma al contestar: porque... Pero tam- mientos... En términos lacónicos: ¿cómo
bién se puede dar explicación con otras puedo mover un brazo?. ¿Cómo lo inma-
modos como son: el cómo, dónde, cuán- terial afecta lo material?. La respuesta en
do, etc. En inglés es un poco menos com- -
plejo ya que la pregunta Why se contes- -
ta con because. Interesante que la forma ción que no satisfacería a nadie, ni a la
gramatical de la respuesta sea el ver- princesa, ni siquiera a Descartes, por lo
bo ser (to be) precediendo la palabra cau-
su respuesta, moviendo su dualismo radi-
A cada una de las formas gramaticales cal a otro no tan radical: termina diciendo
de preguntar, corresponde una forma gra- que no sabe bien, como si la naturaleza de
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estas cosas (la mente o el yo), es no que- forma gramatical no basta para explicar
rerse dejar atrapar, no dejarse teorizar. el cómo de la acción, no basta para ex-
La respuesta es que no podemos plicar: ¿cómo muevo un brazo?. Incluso
dar explicación a este tipo de preguntas si somos estrictos, no basta ni para ex-
en particular, pues no hay forma gramati- plicar cómo se hace mole, ya que esto
cal precisa para ello. El lenguaje no se ha supone saber cómo hago para moverme,
desarrollado en esta área. supone el cómo de la acción. Ya se había
Veámoslo así. Si pregunto ¿Dón- advertido que la forma gramatical de la
de?, la respuesta es un lugar, pero explicación es muy diferente entre lo que
si pregunto ¿Cómo?, ¿cuál es la puedo hacer y lo que puedo explicar de lo
respuesta?,¿qué debo responder?. ¿Un que hago. Entre saber qué y saber cómo.
proceso, una serie de pasos? Si pregunto: De manera larvaria, esta problemática ya
¿cómo hacer mole?, la respuesta aparen- se encontraba en la indagación de la vir-
te será una serie de pasos, es decir, una tud hecha por Platón en boca de Sócra-
receta. Si preguntamos ¿cómo hago tes, ya que sostiene que la virtud no se
mole?, la respuesta sería algo más o me- puede enseñar: solo se muestra. Así, lo
nos así: que sabemos hacer, no sabemos expli-
Pase los chiles por 300 gramos de man- carlo: sólo podemos mostrarlo. No sabe-
teca caliente, los coloca en una cazuela mos cómo movemos un brazo, simple-
con agua muy caliente y se deja que mente lo hacemos.
den un hervor para que se suavicen. En
la misma manteca se acitronan el ajo y básicamente a dos cosas: por un lado, a
la cebolla, se añaden la tortilla, el pan, lo que hago en el mundo, donde soy el
las pasas, las almendras, las pepitas de responsable de la acción, y por el otro a lo
chile, la mitad del ajonjolí, el anís, el que hago conmigo, donde debo inventar
clavo, la canela, las pimientas, el cho- un responsable de la acción distinto a mí.
colate y el jitomate, y se fríe todo muy Invento un homúnculo, la acción quines-
tésica es el núcleo de la problemática del
se fríe unos segundos más. Todo esto se cómo de la acción. Obsérvese que sólo se
muele en la licuadora, con el caldo don- ha trasplantado la problemática del mun-
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recipiente, o lo que las metáforas espacia- gión o la brujería, se suman a esta lista.
les como “dentro de mi mente”, o “sacar- Utilizan ésta estructura pero a medias, ya
te de mi mente”, son simples palabras que que subordinan efectos a causas, pero no
hay leyes. Por ello, “la explicación” en
El cómo de la acción proviene de un estas disciplinas suele tener esta aparien-
mal entendido lingüístico, quizá el más
complicado de todos: la idea del homún- Esto pasa así, por esto, a veces, pero no
culo, la idea de que hay un responsable de en todos los casos.
la acción independiente de la acción mis- En vez de leyes ponen lo volitivo,
ma, independiente del cuerpo. Es suponer la idea de libertad, del sujeto o de los
que soy algo distinto del cuerpo, y que dioses, está presente en este tipo de ex-
por ello soy yo quien mueve el brazo. Si plicación que termina por no expli-
suponemos que no hay un ente indepen- car nada. Así hemos generado un gran
diente de la acción de la cuál es el origen, número de seudo explicaciones, donde
el responsable de la misma, la pregunta gramaticalmente la estructura se man-
se diluye: cómo muevo un brazo no tiene
sentido, ya que la pregunta supone que embargo, el agregado: pero no en to-
soy algo distinto del brazo que muevo. dos los casos, o en cada caso es dife-
La explicación clásica había aceptado que rente, hace de ésta explicación solo una
no se puede explicar lo que se sabe hacer: apariencia. No es que no tengan un saber
no es posible explicarlo. sobre el mundo, que quizá dentro de sus
En resumen, pedir el cómo de una ac- propio parámetros encuentre legitima-
ción, es pedir una serie de pasos que ha- ción, pero lo inquietante es que se aferren
cen responsable a un actor: el que realiza a querer aparentar que poseen un méto-
la acción. Si la pregunta es por la acción do similar al de las demás ciencias. Bas-
quinestésica, para responderla inventa- ta citar a Feyerabend para darnos cuenta
mos un actor que es responsable del mo- de que, incluso, tal método no se aplica
vimiento, un actor diferente al cuerpo. a cabalidad ni en las ciencias denomina-
Inventamos un “hombrecillo” como res- das exactas. De ahí el sinsentido de que
ponsable del inicio de la acción. otros saberes quieran comportarse como
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Parece que nuestra vida cotidiana está las ciencias duras para arroparse bajo este
plagada de estos ejemplos en donde no concepto de ciencia. Nadie quiere redu-
podemos dejar de referirnos al yo como cir la explicación electrónica a la mecá-
una entidad independiente, como el ori- nica. Ni es posible explicar la biología
gen de la acción, como el homúnculo en con la geometría o el cálculo, menos con
el cual radica la libertad. la mecánica. ¿Porqué aparentar que és-
tas explicaciones posen la estructura de
EXPLICACIÓN Y LEGITIMACIÓN CIENTÍFICA las otras?, ¿sólo para utilizar un supues-
to prestigio? Esto solo demuestra su ca-
Las explicaciones que no muestran la rencia fundamental. Si en sí mismas son
causa y las leyes que rigen los fenómenos explicaciones que funcionan, no deberían
no pueden ser llamadas explicaciones. El tratar de legitimarse o de investirse con
psicoanálisis es un claro ejemplo, la reli- el prestigio que no les es propio.
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La explicación de un fenómeno tie- realidad no está a la vista o al entendi-
ne como supuesto, que puede ser ex- miento de todos, y que ésta naturaleza
plicado. Esto a simple vista parece una del mundo aplicativa puede ser expresa-
tautología por no decir una perogrulla- da por el lenguaje. Supone que el simple
da, sin embargo, lo que estamos dicien- acomodo de las piezas puede crear el sen-
do es que tiene como supuesto que exis-
te un orden, un proceso que implica
cosas más simples o complejas que pue- mundo, etc.
den ser analizadas. Dar una explicación De cualquier manera siempre se acep-
es de alguna manera suponer que existe tan cosas o cuestiones que no se pueden de-
un orden y que lo que se explica puede mostrar, y es en esta implicación donde se
ser introducido en este orden. De ahí la fragua la comprensión. Dime qué aceptas
importancia que le da Heráclito al térmi- como básico en el mundo y entonces, sa-
no logos, cuando dice que el logos es la bré decirte que es una explicación, esto
ley que regula el universo, lo que deter- es, reduciré lo explicado a esas partículas
mina si el sol sale y se mete según me- gramaticales básicas, esas verdades que
se aceptan dentro del sistema de creen-
es hacer ver a los demás, cómo los fenó- cias planteado.
menos se ajustan a esa ley del universo, a Explicar es expandir lo dicho sobre
éste logos. Si se prescinde de la idea de algo, para logar reducirlo a las verdades
leyes universales, se tienen solo seudoex- básicas del sistema que recibe la explica-
plicaciones, muy parecidas a los mitos, ción.
donde todo recae en la volición o libertad Lo interesante en este momento es
de algo o alguien. En esa medida estas cómo construimos esas verdades básicas,
explicaciones tienen algo de fe. Se basan pues son ellas las responsables de que
en dogmas... tengamos algo como explicación. Son
Pero cada tipo de explicación tiene denominadas evidencia, y algunos sos-
sus dogmas. tienen que son innatas: verdades a priori.
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fenómeno o evento a las condiciones de
Así que explicar se reduce a mostrar aceptación previas, esto es, al marco refe-
las partes del problema que son evidentes rencial de creencias aceptadas, y el terce-
para que al unirlas cobre sentido. Se trata ro es introducir el concepto dentro de una
de una reducción lógica de una oración a oración o juego para que se revele la utili-
un grupo previo de oraciones ya estable- -
cidas y aceptadas. nalmente también explicar es mostrar su
Aristóteles nos dice que explicar es uso, su función.
reducir los fenómenos a sus causas. Tie- La tercera no es muy clara: no es claro
ne la forma gramatical de un discurso que
muestra o explicita (despliega) las leyes una palabra cuando la utilizamos dentro
que se encuentran detrás de lo explicado. de esta oración. Pero para ello tenemos
Siempre que se dan las mismas condicio- el auxilio teórico de la pragmática. Y es
quizá de lo más común: cuando no en-
es mostrar las leyes mediante las cuales tendemos una palabra, pedimos que se
ésto sucede en todos los casos. La expre- nos explique lo que se hace, utilizando
sión “en todos los casos”, supone preci- ejemplos donde esa palabra es introduci-
samente un orden en que las cosas suce- da en varias oraciones y ahí se revela su
den de esta manera. Así, la explicación
es mostrar las leyes detrás de los hechos. Un criterio que se le exige a cierto tipo
de explicaciones es el carácter predictivo,
EXPLICACIÓN Y FUNCIÓN esto es, una explicación debe proveer
las herramienta necesarias para poder
decir en cuales casos sucede el fenóme-
como decía Wittgenstein, lo que procede no explicado. Si esto es así, la predicción
es introducirlos a la maquinaria gramati- funciona como criterio de legitimación,
pues valida la explicación. Se cree que es
es en el uso donde adquieren su referen- correcto lo que se dice de algo, cuando el
te: explicar es mostrar cómo se compor- mundo demuestra que ha sucedido con-
ta una palabra dentro de una oración. forme se ha predicho que sucedería. Este
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tomado como la condición de verdad pre- Aquí hay una confusión, aunque el
ponderante. lenguaje permite pensar en futuro o en
Aristóteles decía que la verdad era pasado, el pensamiento sucede en pre-
la adecuación entre el dicho y el hecho,
entre el concepto y el objeto, entre la pa- de la acción, la pegunta es sobre el pa-
sado: las causas que han determinado
se valida en esta manipulación de los he- esta acción, y aunque esto se exprese
chos, cuando la explicación puede incidir en futuro, no dejan de ser eventos en el
en el mundo prediciéndolo o transfor- pasado: causas. Quisiera hablar contigo,
- no es más que en aquel momento tuve la
ces se acepta como verdadera. (Muchas necesidad de hablar contigo. Todas las
son las críticas al carácter predictivo de la formas gramaticales expresadas en futu-
ciencia, pero en éste caso solo nos ocupa ro pueden ser reducidas a su expresión
el que sea una manera más de explicar). pasada. Por lo cual, la explicación en fu-
turo podría traducirse a ideas en un mo-
PRECEDENTES Y CONSECUENTES mento pasado, los motivos fueron ideas
pasadas que nos llevaron a la acción. De
Curioso que el término de “verdad” se cualquier forma lo importante es obser-
encuentre ligado a un tipo de explicación, var, como ya lo hacia Aristóteles, que
pues supone que existe otro tipo de expli- cuando preguntamos el porqué de la ac-
cación que no tiene esta relación, o que ción, la respuesta pueden ser de dos tipos,
tiene otros criterios de legitimación que causas o metas. Determinantes o estimu-
no son los de manipulación o predicción lantes que determinan.
de la naturaleza.
Vemos con esto que la explica- EXPLICACIÓN RACIONAL Y EXPLICACIÓN
ción puede consistir en reducir un fe- MITOLÓGICA
nómeno a sus causas, esto es, reducirlo
a las verdades aceptadas, o por el con- Heráclito de Éfeso, introduce la creencia
de que el universo tiene un orden y con
explicar es reducir los antecedentes o -
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los consecuentes. Por ello se vuel- mos. Cuando dice que el logos es la medi-
ve aún más confuso este concepto. Cuan- da de todas las cosas, la ley por la cual el
do le digo a alguien, explícame porqué sol sale y se pone según medida, introdu-
has venido, la explicación pude ser de ce en el marco referencial una nueva for-
dos tipos: le pido que me muestre los an- ma de legitimación, el logos. La invasión
tecedentes (causas) que lo han llevado a romana a Grecia da como resultado que
tomar la decisión de venir, o los conse- la palabra logos sea traducida al vocablo
cuentes (motivos) por los que ha venido. latino ratio, pero la semántica se despla-
La respuesta puede ser de dos tipos. He za. Mientras que antes de la conquista ra-
venido porque no me podía quedar en -
casa solo, o he venido porque quisiera
hablar contigo. cual las cosas son reguladas. Explicar en
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la tradición latina tiene que ver con po- lída una explicación desde otro paradig-
ner el orden del universo en concordan- ma? o ¿cómo se puede sostener el valor
cia con el evento o fenómeno explicado del paradigma explicativo propio? Fi-
(muy parecida a la primera exposición de nalmente que el universo tenga un or-
este término). Así, la explicación racio- den, no es más que un acto de fe, el acto
nal, nació en contra de otro tipo de ex- denominado inductivismo. Otro dogma
plicación, la mítico-mágica. Si la expli- sobre el cual se ha construido la denomi-
dogma que el universo tiene una forma de Que corresponda lo explicado con este
ser, un comportamiento único e invaria- dogma también es algo muy difícil de
ble (leyes), la explicación mítico-religiosa comprobar, ya que no se pueden aislar to-
supone la volición como principio expli- das las variantes de una explicación. Si
cativo de los fenómenos. Es el querer de
los dioses lo que se encuentra detrás de -
que las cosas ocurran de cierta manera. tas se puedan aislar o determinar, cual-
Todo tiene que ver con que las entidades
sobrenaturales lo quieran de un modo o cero. No es posible tener la certeza de que
de otro, por ello el mundo es tan cam- esa sea la causa de que las cosas suceden
biante. Ambas explicaciones gramatical- por eso y no por otra causa.Y sin embar-
mente mantiene la misma estructura lógi- go tenemos la evidencia en contra de que
ca, concatena un evento a una causa. Pero las cosas suceden de manera contraria. El
lo interesante es que esta causa en vez hecho de que podamos fabricar aviones
de ser una ley, es un querer, un deseo de o celulares, da cuenta de que de algu-
na manera nuestras explicaciones sobre
me fue bien porque los dioses así lo han
querido, o me enfermé como castigo di- Cuando menos en esa parte técnica donde
vino. Vemos cómo el evento es reduci- nos permiten manipular el mundo y crear
do a un conjunto de enunciados, (marco la tecnología. Siendo prudentes, aná-
referencial) que cierta comunidad tiene logos, por un lado nos consta que el in-
- ductivismo es un dogma, pero por el otro
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que se denomina como Explicación re- desaparece a la anterior, solo la supera en
ligiosa, o mítico-mágica, de la Explica- -
-
predicción y manipulación de la natura-
leza. Anterior a este cambio ya teníamos postmoderna de explicación que -sin es-
tar del todo clara-, pudiera volverse el
la explicación mítico-mágica por la ra- paradigma explicativo más difundido.
cional y lógica, solo que en el siglo XVI,
- EXPLICACIÓN INTENSIONAL
pulación y la técnica, que es propio del
Brentano a mediados del siglo XIX dis-
juicio antes de la experiencia, cobra una tinguió, basándose en la tradición es-
semántica peyorativa. El término de cien- colástica, dos grupos ontológicos. El
- primero es el de las cosas extensas y el
miento o saber. segundo es el de los pensamientos (no
Pero este tipo de explicación, tam- se les puede ni siquiera llamar cosas,
bién parece estar siendo superado por pues son algo distinto). Sugirió denomi-
otro modelo explicativo. Ambos coexis- nar al segundo grupo bajo la idea de fe-
- nómenos que poseen inexistencia. ¿Qué
ca otra forma de explicar nos hace pen-
sar que la antigua forma dejará lugar a la Brentano lo tenía claro. Pero el punto
nueva, cuando menos en hegemonía. es que los pensamientos no pueden ser
Lo importante de la explicación radica analizados o tratados, incluso, no pueden
en dos cosas, los supuestos básicos que se ser categorizados con los atributos de la
tienen por verdaderos, esto es leyes, co- materia. Ni siquiera de la existencia. Si el
sas, eventos y hechos del mundo, y la se- yo no es más que pensamiento, la frase de
gunda serían la manera de concatenar las Descartes de Pienso, por tanto existo, es
frases para que esto sea una explicación. falsa, pues los pensamientos no existen,
Cada vez que ambos factores cambian, solo poseen inexistencia. Brentano no
la explicación cambia. Habrá que ver lo llevó tan lejos. Sin embargo, agrega
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que no podemos reducir a sus causas, le mos dejar las cosas así, tenemos que decir
conferimos intencionalidad, esto es, tra- algo más al respecto, algo que mantiene
tamos de hacer explicaciones que le con- la apariencia de causal (de argumento)
pero que en absoluto lo es. A esta explica-
así o de otra manera. A este tipo de ex- ción es a la que llamamos explicación in-
plicación, que no explica nada, pues no tencional, y a todo este grupo de enuncia-
puede mostrar las causas de los eventos dos es a lo que denominamos mental. Lo
o fenómenos que pretende explicar, lo mental no es más que la apariencia de una
hemos denominado explicación intencio- explicación causal que introduce la idea
nal. Trata de concatenar eventos a causas, de libertad, y por ello no explica nada. Si
pero las causas son volitivas, intenciona- el universo es causa-efecto, si todo tiene
les y bien podrían ser de otra manera. Por una razón de ser, un evento que lo genera,
ello la explicación bien podría ser de otra que lo determina, entonces no hay cabida
manera. Es la estructura de las religiones: a la idea de libertad, y la mente no es más
explican eventos sujetándolos a los de- que un parche sobre la ignorancia del fun-
seos de los dioses, a la voluntad de los cionamiento del sistema nervioso central.
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to orden del mundo puede ser violenta- tado como válido. Aristóteles establece
do, o simplemente que las cosas pueden cuatro principios explicativos: dos in-
suceder de manera caprichosa. No suje-
tas a leyes. La explicación posmoderna causa del ser, y son las causas: material,
tiene mucho de narrativa poética, bajo la -
idea de que la racionalidad es un dogma, ras son constituyentes del ser, y susten-
y que la legalidad de la lógica solo des- -
cansa sobre ella misma. Se ha dado lugar so. Las dos segundas nos sirven para dar
a una nueva forma de explicar los fenó- cuenta de su devenir.
menos sociales, una forma en parece Re- La causa material es aquella de lo que
ducida a leyes, en principio denomina- algo surge y por lo cual llega a ser. La
das económicas pero que hoy en día son formal es aquello que determina la ma-
de los más diversas: leyes históricas, que teria y le da su esencia. Es intrínseca a
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do. Porque no sabía qué hacer con ella,
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Ars
médica