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Este documento debate si el aborto es un derecho o un acto inhumano. Por un lado, hay quienes están en contra del aborto porque consideran que es un acto cruel que termina con una vida humana. Por otro lado, están los que defienden el derecho de las mujeres sobre su cuerpo y sexualidad. El documento también discute las posturas de la iglesia sobre el aborto a lo largo de la historia y su creciente defensa del respeto a toda vida humana. Algunos argumentan que en casos de embarazos no deseados o circunstancias difíciles
Este documento debate si el aborto es un derecho o un acto inhumano. Por un lado, hay quienes están en contra del aborto porque consideran que es un acto cruel que termina con una vida humana. Por otro lado, están los que defienden el derecho de las mujeres sobre su cuerpo y sexualidad. El documento también discute las posturas de la iglesia sobre el aborto a lo largo de la historia y su creciente defensa del respeto a toda vida humana. Algunos argumentan que en casos de embarazos no deseados o circunstancias difíciles
Este documento debate si el aborto es un derecho o un acto inhumano. Por un lado, hay quienes están en contra del aborto porque consideran que es un acto cruel que termina con una vida humana. Por otro lado, están los que defienden el derecho de las mujeres sobre su cuerpo y sexualidad. El documento también discute las posturas de la iglesia sobre el aborto a lo largo de la historia y su creciente defensa del respeto a toda vida humana. Algunos argumentan que en casos de embarazos no deseados o circunstancias difíciles
El aborto es un tema que debido a nuestras concepciones sociales polarizadas ha
sido siempre razón de debate. Por un lado, quienes estamos en contra de este argumento entre otras cosas el carácter cruel e injusto para con la vida humana de los más indefensos, que son los niños en el vientre de la madre, y por otro se encuentran los llamados “defensores del derecho sobre el cuerpo y su sexualidad” como si ignoran que cada acto genera consecuencias, sobre los demás y sobre uno mismo, que nos convierten en acreedores de responsabilidad. Este es una práctica que lejos de mejorar la calidad debida de las personas las lleva a la devolución de la vida humana, esto es también es un homicidio. Por ello la iglesia pre constantiniana no solo condenaba este acto, si no que tenía actitudes muy críticas sobre la pena de muerte, la participación del ejército y la misma defensa propia e inexperta para traer un bebe al mundo. Hoy existe una creciente conciencia en amplios sectores de la iglesia de que se hace necesaria una actitud general de coherencia en el respeto a toda la vida humana. Las afirmaciones de Jesús sobre la dignidad de todo ser humano, sobre el amor al enemigo y de no responder a la violencia con la misma violencia, de que no se vence al mal con el mal, sino con el bien.... Tuvieron un eco muy importante en las actitudes violentas y el resto debido muy importante en las actitudes violentas y el respeto debido a todo ser humano. El don de la vida no debe ser relativizado por el hecho de que se trate de una persona culpable. Así mismo, hay quienes piensan que, si es un embarazo no deseado y aun se es joven e inexperta para traer un bebé al mundo, no debemos estar el resto de nuestras vidas con la carga que conlleva un hijo y no poder formarlo o educarlo como es debido. Un ejemplo de esto es: Una chica de apenas 17 años mantiene relaciones sexuales y se queda embarazada sin desearlo. El chico que tiene el papel de padre la abandona. No vive en un entorno adecuado. La gente que está en contra del aborto pretende que el hijo de esta chica crezca en estas duras circunstancias haciendo así sufrir a la madre y también al niño/a. En el mundo que nos rodea hay muchas situaciones similares y con un aborto estas historias pueden evitarse.