Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
PRUEBAS
DE LABORATORIO
Y FUNCIONALES
MANUAL NORMON
CAPITULO 1
1
CAPITULO
ORINA
Prof. José María Ladero Quesada
Primera semana 30 a 50 ml 5 a 10 ml
Un mes 200 a 400 ml 70 a 80 ml
Un año 600 a 700 ml 65 a 70 ml
10 años 900 a 1100 ml 40 a 50 ml
Adultos 1200 a 1500 ml 20 a 25 ml
CAPITULO 1: ORINA 67
CAPITULO 1
— Tubulopatía de la hipopotasemia
— Polidipsia primaria (potomanía)
Oliguria es la disminución de la eliminación de orina. Aparece en situacio-
nes de insuficiencia renal aguda, insuficiencia cardiaca, descompensación hidró-
pica de las cirrosis y deshidratación por diarrea, ausencia de ingesta o pérdidas
percutáneas excesivas.
b) Olor: La orina normal recién emitida no huele, salvo si se han ingerido
determinados alimentos (espárragos). En las infecciones por microorganismos que
degradan la urea la orina huele amoníaco. En los enfermos con cetoacidosis huele a
acetona. Un olor dulzón desagradable sugiere inflamación o focos supurativos uri-
narios. Hay errores congénitos del metabolismo en los que adquiere un olor pecu-
liar (fenilcetonuria, enfermedad del jarabe de arce, malabsorción de metionina) con
el ejemplo característico del olor a pies sudados de la acidemia isovalérica.
c) Aspecto (color y turbidez): La orina normal tiene color amarillo. La inten-
sidad es inversamente proporcional a la concentración de solutos. La orina muy dilui-
da es muy pálida y si está concentrada adquiere un color amarillo intenso, debido a la
mayor concentración de pigmentos excretados por el riñón, como la riboflavina.
El color de la orina varía en numerosas situaciones fisiológicas y patológi-
cas:
CAUSAS ENDÓGENAS COLOR DE LA ORINA
— Bilirrubina (conjugada) Amarillo intenso
— Hemoglobina y mioglobina Rojo-parduzco
— Hematuria Rojo turbio
— Porfirinas y sus precursores Rojo
— Melanógenos Pardo negruzca
— Ácido homogentísico Pardo negruzca
— Indicanes Verde azulada
— Quiluria Blanquecina (láctea)
— Piuria Blanquecina (turbia)
FACTORES EXÓGENOS
— Antocianinas (remolacha) Roja
— Antraquinonas (laxantes) Anaranjada (pH alcalino)
— Rifampicina Anaranjada
— Azul de metileno Verde
— L-dopa Pardusca
La orina recién emitida suele ser clara, pero con el paso del tiempo puede
volverse turbia por la precipitación de fosfatos amorfos (solubles a 6º C en medio
ácido), oxalatos (solubles en ClH diluido) y uratos (solubles a 6º C en medio alca-
lino). La orina con piuria suele ser turbia.
d) Densidad: La densidad urinaria indica la capacidad de concentración /
dilución del riñón. En los adultos sanos varía entre 1,002 y 1,035 g/ml. En situa-
ciones de deshidratación extrema puede alcanzar 1,040 g/ml. La densidad urina-
ria es un parámetro muy variable en condiciones fisiológicas, y por lo tanto de
poco valor diagnóstico, por lo que sólo hay que tenerla en cuenta si es discordan-
te con la situación clínica que se sospeche:
— Debe ser mayor de 1,025 en situaciones de baja perfusión renal con
función tubular conservada: deshidratación, diabetes mellitus mal
controlada, insuficiencia cardiaca.
— Debe ser menor de 1.010 en enfermos con diabetes insípida, polidip-
sia o bajo tratamiento diurético.
— Es constante (alrededor de 1,010) en enfermos en la fase isostenúrica
de la insuficiencia renal crónica.
Hay diversos métodos para medir la densidad urinaria, como el clásico den-
sitómetro de vidrio. Actualmente las tiras reactivas proporcionan una lectura apro-
ximada.
e) Osmolalidad: Está en relación directa con la densidad, por lo que una
densidad de 1,032 corresponde a una osmolalidad de 1.200 mOsm/kg. Como
aquélla, oscila entre límites muy amplios, aunque generalmente varía entre 300 y
1.200 mOsm/kg en adultos y 200 y 220 mOsm/kg en lactantes. Es característico
que aumente en el síndrome de secreción inadecuada de hormona antidiurética
(SIADH) y en las situaciones de azotemia prerrenal, mientras que disminuye por
efecto de diuréticos y se mantiene en valores uniformemente bajos en enfermos
con insuficiencia renal crónica en fase isostenúrica.
CAPITULO 1: ORINA 69
CAPITULO 1
CAPITULO 1: ORINA 71
CAPITULO 1
CAPITULO 1: ORINA 73
CAPITULO 1
2.1. Cristales
Su presencia es habitual, su significado clínico escaso y su tipo depende del pH.
— ácido úrico: más abundantes en sujetos con gota y sometidos a quimio-
terapia. Aparecen en orinas ácidas.
— ácido oxálico: escasa trascendencia, aunque aumentan en la enferme-
dad de Crohn extensa y en la intoxicación por glicoles.
— Cistina: presentes en la cistinuria, tienen forma hexagonal.
— Otras sustancias que pueden formar cristales en orina, aunque con un
significado patológico incierto, son: colesterol, que puede indicar daño
renal; fosfatos, carbonatos y uratos, que aparecen en orinas alcalinas;
tirosina y leucina, propios de algunas aminoacidurias, etc.
CAPITULO 1: ORINA 75
CAPITULO 1
2.2. Células
Se realiza un centrifugado de 10 ml de orina fresca a 2.000 r.p.m., desechan-
do 9 ml del sobrenadante para efectuar en el resto un examen en campo de gran
aumento. Hay técnicas especiales, como la citocentrifugación de Papanicolau,
para reconocer células específicas. Los elementos formes que se suelen detectar
son los siguientes:
a) Hematíes: Menos de 5 por campo (véase más arriba).
b) Leucocitos: máximo de 5 a 10 leucocitos por campo, que representan
de 50 a 100 células/mm3. Por encima de este límite se considera que existe piuria,
que sugiere, aunque no de forma categórica, la presencia de infección.
c) Células epiteliales tubulares: son poligonales y munonucleadas, algo
mayores que los leucocitos y no suelen pasar de 2 por campo. Si hay más, indican
daño tubular renal.
d) Células epiteliales transicionales: redondas u ovales, con un núcleo
central, muy escasas. Aumentan si hay inflamación o neoplasia o tras sondaje.
e) Células epiteliales escamosas: Tamaño grande, núcleo pequeño.
Proceden de la vagina en las mujeres o de la vejiga si hay metaplasia escamosa en
ambos sexos.
f) Espermatozoides: sin significado alguno en el varón.
g) Cuerpos grasos: son células tubulares cargadas de lípidos. Aparecen en
el síndrome nefrótico y suelen asociarse a lipiduria.
2.4. Cilindros
Los cilindros son moldes que se originan por precipitación de la mucoproteí-
na de Tamm-Horsfall en la porción distal de los túbulos contorneados y en los colec-
tores; esta precipitación se ve facilitada si la orina está concentrada y el pH es ácido.
Pueden incluir diversos elementos, lo que les puede conferir significado patológico.
— Hialinos: de aspecto traslúcido, sin significado patológico.
— Granulosos: contienen otras proteínas y detritus celulares e indican
algún tipo de daño glomerular
3.1. Creatinina
La creatinina (Cr) procede del metabolismo de la creatina del músculo
esquelético. Se filtra libremente a través del glomérulo y no se reabsorbe en el
túbulo. El calculo del aclaramiento de creatinina (CCr) se realiza mediante la fór-
mula general de aclaramiento de una sustancia:
CCr = Cr urinaria (mg/ml) x volumen de orina (ml/minuto)/Cr plasmática
(mg/ml)
La creatinina se filtra en pequeña proporción a través del túbulo, tanto más
cuanto más elevada sea su concentración sanguínea, por lo que en casos de insu-
ficiencia renal avanzada el aclaramiento de creatinina es algo superior al filtrado
glomerular verdadero.
La eliminación urinaria de creatinina es bastante constante, de 0,8 a 1,8 g/24
horas, y disminuye en la insuficiencia renal, mientras que aumenta en situaciones
de rabdomiolisis o ingesta proteica excesiva.
3.2. Urea
La urea es el principal metabolito de las proteínas, se filtra con facilidad por
el glomérulo y se reabsorbe en un 40-50 % en el túbulo, aunque este porcentaje
varía en función del grado de hidratación y de la diuresis. Por lo tanto el cálculo
del aclaramiento de urea tiene mucho menos interés que el de creatinina y no se
utiliza.
CAPITULO 1: ORINA 77
CAPITULO 1
La excreción urinaria de urea oscila entre límites muy amplios: 6-20 g/día
en adultos, 13-15 g/día en niños y 2-3 g/día en lactantes. Aumenta en estados de
hipercatabolismo proteico y en dietas ricas en proteínas y disminuye en la insufi-
ciencia hepática (por reducción de la síntesis) y en la insuficiencia renal.
3.3. Sodio
Se filtra libremente por el glomérulo y es reabsorbido a nivel tubular. La
reabsorción de sodio es un proceso regulado estrictamente por diversos factores
hormonales y depende del aporte dietético y de las pérdidas extrarrenales. La
excreción diaria de sodio oscila entre limites muy amplios, normalmente entre
100 y 200 mEq/24 horas. Tiene gran interés su determinación para diferenciar
situaciones de insuficiencia renal aguda. En la insuficiencia renal “prerrenal”, por
disminución del flujo sanguíneo renal, así como en el síndrome hepatorrenal, el
riñón reabsorbe ávidamente el sodio y su concentración en orina suele ser inferior
a 10 mEq/l. En la insuficiencia renal intrínseca el túbulo pierde su capacidad de
reabsorción de sodio y la concentración supera los 20 mEq/l.
3.4. Cloruro
En general, el cloro sigue al sodio pero esta norma se ve alterada si el riñón
debe eliminar un exceso de otros aniones. La excreción diaria oscila normalmen-
te entre 80 y 180 mEq/24 horas. Sus oscilaciones en condiciones patológicas sue-
len ir paralelas a las del sodio.
3.5. Potasio
Lo mismo que sodio y cloro se filtra libremente por el glomérulo y se reab-
sorbe por el túbulo. La excreción depende de la ingesta y está controlada por los
mismos factores que actúan en la homeostasis de sodio, pero de forma inversa.
Por lo tanto en la insuficiencia suprarrenal (enfermedad de Addison) y en los hipo-
aldosteronismos su eliminación disminuye, mientras que aumenta en las situacio-
nes de hiperaldosteronismo primario (síndrome de Conn) y por efecto del trata-
miento con diuréticos, excepto de los inhibidores de la aldosterona.
3.6. Calcio
La calciuria depende de la ingesta y es controlada por la hormona paratiroi-
dea, que facilita su reabsorción por el túbulo proximal. Oscila entre límites muy
amplios (55-220 mg/día o 2,7-22 mEq/día). Se considera que hay hipercalciuria
con cifras superiores a 300 mg/día; la hipercalciuria puede ser secundaria a hiper-
calcemia, como ocurre en el hiperparatiroidismo primario, las situaciones de oste-
3.7. Amonio
La amoniuria oscila entre 20 y 70 mEq/día, pero está en proporción con la
ingesta proteica. Aumenta en situaciones de acidosis y disminuye en las de alca-
losis, como mecanismo compensador del desequilibrio ácido-base.
3.8. Fosfatos
La fosfaturia (fosfatos bicálcico y, tricálcico y amónico-magnésico) depen-
de de la dieta y de la homeostasis del calcio, a través de la regulación por la hor-
mona paratiroidea. Oscila entre límites amplios, entre 500 mg y 3 g/24 horas.
Aumenta en situaciones de hiperparatiroidismo primario, déficit de vitamina D y
síndrome de Fanconi. Disminuye en la insuficiencia renal, en el hipoparatiroidis-
mo y por efecto del tratamiento con bifosfonatos.
3.9. Magnesio
El magnesio urinario representa alrededor de la tercera parte de la ingesta y osci-
la entre 100 y 150 mg/24 horas. Disminuye en la insuficiencia renal y se eleva por tra-
tamiento con diuréticos de asa y tiacídicos y en el hiperaldosteronismo primario.
3.10. Amilasa
La amilasuria nunca debe superar las 9 U.I./hora. Aumenta en las pancreati-
tis, pero su valor diagnóstico no es superior al de la amilasemia.
3.11. Lisozima
Puede aumentar en la leucemia de células mielomonocíticas.
CAPITULO 1: ORINA 79
CAPITULO 1
3.13. Hierro
La sideruria normal no supera los 0,3 mg/24 horas y es un valor muy cons-
tante. La homeostasis del hierro depende de la absorción, no de la excreción.
3.14. Cobre
Normalmente la cupruria no excede los 40 μg/24 horas. No hay límite infe-
rior. Aumenta en la enfermedad de Wilson, generalmente por encima de 100
μg/24 horas, pero no es un parámetro fiable para el diagnóstico, ya que también
puede aumentar en el síndrome nefrótico, la cirrosis biliar primaria o la necrosis
hepática aguda de cualquier etiología.
3.15. Hidroxiprolina
La hidroxiprolina es un componente de la colágena y se libera si hay resor-
ción ósea. Normalmente oscila entre 6 y 17 mg/24 h/m2 de superficie corporal y
es mucho mayor en niños, tanto más cuanto menor sea su edad.
Aumenta en la enfermedad de Paget ósea, la osteoporosis, el mieloma y en
general en todas las situaciones en las que aumente la resorción ósea. Su descen-
so es un índice precoz de respuesta terapéutica en la enfermedad de Paget y en la
osteoporosis.
3.16. Aminoácidos
Los aminoácidos filtrados por el glomérulo se absorben casi por comple-
to en el túbulo proximal por diferentes sistemas de transporte activo específicos
para aminoácidos dibásicos, dicarboxílicos, neutros, etc. Las aminoacidurias
pueden ser generalizadas, afectando a múltiples aminoácidos, como ocurre en
las alteraciones del túbulo renal (por ejemplo, en el síndrome de Fanconi), o
bien por defectos metabólicos específicos para uno o unos pocos aminoácidos
que incrementan su producción y eliminación o alteran su proceso de reabsor-
ción, como ocurre en la cistinuria, la enfermedad del jarabe de arce y la enfer-
medad de Hartnup, entre otros muchos errores congénitos del metabolismo
(tabla 1.3, 1.4).
PM μmol/24 h mg/24 h
Acido aspártico 133,1 90 a 196 12 a 26
Hidroxiprolina 131,1 2a7 0,3 a 0,9
Treonina 119,1 110 a 380 13 a 45
Serina 105,1 220 a 740 23 a 79
Acido glutámico 147,1 20 a 80 3 a 12
Glutamina 146,2 180 a 570 26 a 83
Prolina 115,1 2 a 15 0,2 a 1,7
Glicina 75,1 370 a 2.000 28 a 150
Alfa-amino-butírico 103,1 10 a 40 1 a 4,1
Cistina 240,3 4 a 30 1 a 7,2
Valina 117,2 15 a 75 1,8 a 8,8
Metionina 149,2 20 a 55 3 a 8,2
Isoleucina 131,2 15 a 100 2 a 13
Leucina 131,2 25 a 145 3,3 a 19
Tirosina 181,2 40 a 115 7,2 a 21
Fenilalanina 166,2 35 a 140 5,8 a 23
Homocistina 268,5 ausencia ausencia
Triptófano 204,2 ausencia ausencia
Ornitina 132,2 ausencia ausencia
Lisina 146,2 80 a 300 12 a 44
Histidina 155,2 500 a 1.000 76 a 155
1-Metilhistidina 170,2 50 a 550 8,5 a 93
3-Metilhistidina 170,2 80 a 330 14 a 56
Arginina 174,2 5 a 40 0,9 a 7
CAPITULO 1: ORINA 81
CAPITULO 1
μmol/24 h mg/24 h
Acido aspártico 20 a 130 0,7 a 17
Hidroxiprolina trazas trazas
Treonina 125 a 450 15 a 53
Serina 200 a 630 21 a 68
Acido glutámico 40 a 120 6 a 12
Glutamina 220 a 550 32 a 80
Prolina trazas trazas
Glicina 800 a 2.500 60 a 180
Alanina 110 a 540 9,8 a 48
Alfa-amino-butírico ausencia ausencia
Cistina 25 a 95 6 a 12
Valina 45 a 105 5,3 a 12
Metionina 20 a 75 3 a 11
Isoleucina 60 a 180 7,9 a 24
Leucina 40 a 160 5,2 a 21
Tirosina 75 a 165 13,6 a 30
Fenilalanina 60 a 165 9,9 a 2,7
Homocistina ausencia ausencia
Triptófano ausencia ausencia
Ornitina trazas trazas
Lisina 50 a 240 7,3 a 35
Histidina 500 a 1.200 78 a 186
1-Metilhistidina 200 a 950 34 a 161
3-Metilhistidina 180 a 420 30 a 71
Arginina 10 a 60 1,7 a 10
3.19. Indican
Es un metabolito del triptófano que aparece normalmente en la orina (20-60
mg/24 horas). Aumenta en la enfermedad de Hartnup y también de forma inespe-
cífica como producto del metabolismo bacteriano en situaciones de sobrecreci-
miento de la flora intestinal.
CAPITULO 1: ORINA 83