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Asociación Interciencia
interciencia@ivic.ve
ISSN (Versión impresa): 0378-1844
VENEZUELA
2003
José Luis Villaseñor
DIVERSIDAD Y DISTRIBUCIÓN DE LAS MAGNOLIOPHYTA DE MÉXICO
Interciencia, marzo, año/vol. 28, número 003
Asociación Interciencia
Caracas, Venezuela
pp. 160-167
éxico ocupa una superfi- más ampliamente tal riqueza florística. Las diferencias notables
cie de casi 2 millones de Rzedowski (1991), al analizar la relación entre las estimaciones indicadas sugieren
km2. Esta superficie tiene entre el número de géneros y especies re- que la riqueza florística de México está
una historia geológica compleja (Ferrus- portados en varias partes del país, y com- lejos de ser bien conocida y todavía no
quía-Villafranca, 1993), la cual es responsa- pararla con la misma relación que hay se puede proponer una estimación confia-
ble de su abrupta topografía y de un am- entre las especies y los géneros de la fa- ble. Este trabajo proporciona una cuarta
plio mosaico de climas y de tipos de vege- milia Asteraceae, estimó una cifra de aproximación a tales estimaciones de la
tación que incluye prácticamente todos los 18800 especies. Este autor consideró que riqueza florística de México. También se
registrados a nivel mundial (Rzedowski, todavía se desconocía alrededor del 20% presenta un panorama de la distribución
1978). Por ello no sorprende que el país de nuestra flora y estimó que la riqueza de esta riqueza en los estados en que se
cuente con una flora y una fauna muy di- florística del país alcanzaría unas 22800 divide el país, con el fin de examinar la
versas (ver Gío-Argáez y López-Ochotere- especies de plantas vasculares, 21600 de diversidad conocida actualmente en tales
na, 1993; Ramamoorthy et al., 1993; Flores ellas plantas con flores. Toledo (1993) es- entidades políticas.
y Gerez, 1994). Desde hace mucho tiempo timó la riqueza florística con base en los
se ha discutido su riqueza biológica; de he- inventarios publicados de diversos lugares Material y Métodos
cho, México es ubicado por diversos auto- del país. Contrastó las cifras reportadas
res entre los países con la mayor riqueza en esos trabajos con la riqueza registrada Para estimar la riqueza
florística (Mittermeier, 1988; Akeroyd y en otras partes del mundo y, paralela- florística existente en el país se revisó la
Synge, 1992; Mittermeier y Goettsch, 1992; mente, evaluó los patrones ecogeográficos literatura sobre el tema desde 1989. Ini-
Heywood y Davis, 1997; Neyra y Durand, de la distribución de las especies. A par- cialmente se buscó determinar la diversi-
1998; Tabla I). Además, México es quizá el tir de esos ejercicios, concluyó que la ri- dad de la familia Asteraceae en México;
país americano con el mayor nivel de ende- queza florística nacional debería de estar sin embargo, se hizo evidente que con el
mismo registrado en su territorio. Desafor- en el orden de las 30000 especies. Final- mismo esfuerzo se podría también regis-
tunadamente, como ocurre con muchos paí- mente, Dirzo y Gómez (1996) contaron el trar la diversidad florística total según los
ses subdesarrollados, un conocimiento con- número de especies descritas en México trabajos revisados. La literatura revisada
fiable de su riqueza biológica está lejos de y registradas en el Kew Index y el Gray incluye descripciones originales, revisiones
ser asequible. Hasta la fecha es difícil de- Index; posteriormente definieron un factor taxonómicas, listados florísticos, floras o
terminar con exactitud el número de fami- de corrección para minimizar el sesgo manuales. Entre los trabajos consultados
lias, géneros o especies de plantas mexica- causado por la sinonimia. Como resultado están los de Standley (1920-1926) sobre la
nas. de ello estimaron que la flora de México flora leñosa del país, los de Espejo y Ló-
Algunos ejercicios para consistía en unas 16870 especies. Conclu- pez sobre las monocotiledóneas mexicanas
estimar la riqueza florística de México yen, siguiendo la idea de Rzedowski (Espejo y López, 1992, 1993, 1994, 1995,
proporcionan cifras dentro de un amplio (1991) de la incertidumbre en el conoci- 1996, 1997a, 1997b, 1998, 2000), los fas-
espectro, que varía desde 18000 a 30000 miento florístico de alrededor del 20%, cículos o volúmenes publicados por dife-
especies (Toledo et al., 1997). En los úl- que su flora debería estar en el orden de rentes proyectos florísticos en curso (Flora
timos 11 años, tres trabajos han discutido las 20244 especies. Novo-Galiciana, Flora de Veracruz, Flora
José Luis Villaseñor. Biólogo, Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Maestro
en Ciencias en Biología Vegetal, UNAM. Ph.D., The Claremont Graduate School, California, EEUU. Investigador Titular, De-
partamento de Botánica, Instituto de Biología, UNAM. Dirección: Apartado Postal 70-367, 04510 México, D.F., México. e-
mail: vrios@ibiologia.unam.mx
IV), de las cuales 28 son monogenéricas como Europa (7,8; Goldblatt, 1978), Ha- trastemonaceae (1 y 2), Nelumbonaceae
a nivel mundial. También se registran 29 waii (7,5; Goldblatt, 1978), Malasia (4,9; (1 y 2) y Tovariaceae (1 y 2). Por otra
familias con una sola especie, tres de Turner, 1997), Estados Unidos y Canadá parte, las familias con más del 80% de
ellas monoespecíficas a nivel mundial (8,1; Qian, 1999) o Nueva Zelanda (7,4; sus especies presentes en México son
(Hippuridaceae, Lacandoniaceae y Sim- Goldblatt, 1978). Fouquieriaceae (11 y 11), Hippuridaceae
mondsiaceae) y otras cuatro con dos es- Solamente dos familias, (1 y 1), Krameriaceae (12 y 15), Juliania-
pecies (Bataceae, Mitrastemonaceae, Ne- Lacandoniaceae y Setchellanthaceae (am- ceae (4 y 5), Lennoaceae (4 y 4), Nolina-
lumbonaceae y Tovariaceae). Por otra bas monotípicas), son endémicas del te- ceae (50 y 50), Simmondsiaceae (1 y 1)
parte, ocho familias registran 50 géneros rritorio nacional. Sin embargo, otras 28 y Ticodendraceae (1 y 1).
o más: Malvaceae (50 en México, 75 en familias tienen en el país un centro im- Se ha discutido amplia-
todo el mundo), Scrophulariaceae (56 y portante de diversificación, con la mitad mente la relación entre la riqueza biológi-
190), Cactaceae (74 y 100), Rubiaceae de sus especies o más. Entre las familias ca y el área (ver Rosenzweig, 1995): el
(93 y 450), Fabaceae (93 y 440), Orchi- con el 50-70% del total de sus especies número de taxones incrementa al aumentar
daceae (155 y 730), Poaceae (168 y 750) presentes en México están Achatocarpa- el área. En la Tabla V se indica el número
y Asteraceae (361 y 1535). La proporción ceae (4 especies en México, 8 en todo el de especies de plantas vasculares para al-
de 8,4 especies por género es una cifra mundo), Agavaceae (239 y 410), Bata- gunos sitios de América. Tales cifras han
solamente superada por la flora de la re- ceae (1 y 2), Cabombaceae (4 y 7), Cac- sido transformadas mediante un ajuste de
gión del Cabo en Sudáfrica, de 8,9 taceae (946 y 1500), Ceratophyllaceae (4 los valores de la riqueza, dividiendo el nú-
(Goldblatt, 1978), y es superior a la de y 6), Crossosomataceae (5 y 10), Garrya- mero de especies por el área (km2), usan-
otras regiones florísticamente importantes ceae (9 y 13), Lemnaceae (19 y 30), Mi- do una escala logarítmica. Los valores
transformados brindan una idea más clara
TABLA III de la diversidad en tales regiones; Brasil
LAS QUINCE FAMILIAS CON MAYOR NÚMERO DE ESPECIES es la región con la mayor densidad de es-
NATIVAS EN LA FLORA DE MÉXICO* pecies por unidad de área, seguido por
Colombia; ambos países son considerados
Familia Géneros Especies Var. o ssp. como los de mayor riqueza florística del
planeta. México, aunque ubicado en el ex-
Asteraceae 361 3021 (65,9) 613 tremo boreal del neotrópico, presenta valo-
Fabaceae 93 1274 (59,5) 242 res de diversidad parecidos a los de otros
Poaceae 168 1187 (41,0) 106 países, como Ecuador o Venezuela. De he-
Orchidaceae 155 1145 (63,1) 31 cho, el país tiene un valor de diversidad li-
Cactaceae 74 946 (82,6) 239 geramente menor al registrado para toda la
Euphorbiaceae 44 782 (58,6) 83 región Mesoamericana (sur de México y
Rubiaceae 93 593 (48,7) 40 Centroamérica) y superior al de Bolivia,
Lamiaceae 30 530 (67,5) 64 Costa Rica y Perú.
Mimosaceae 35 463 (54,4) 75
Scrophulariaceae 56 437 (56,5) 44 Estimaciones de la riqueza de especies
Solanaceae 33 430 (46,7) 60
Cyperaceae 22 426 (27,2) 34 Las cifras de las fuentes
Acanthaceae 47 384 (58,8) 23 bibliográficas (Tabla II) representan sola-
Malvaceae 50 356 (50,6) 18 mente los datos de la diversidad reporta-
Bromeliaceae 20 333 (67,6) 43 da a lo largo de la historia en los trabajos
publicados por los taxónomos. Aunque
*Entre paréntesis se indica el porcentaje de endemismo. permiten proponer un valor mínimo de la
diversidad conocida hasta la fecha, no re- del país. La mayoría de los taxones, tanto
presentan la verdadera riqueza de la flora los endémicos de México como los no en- Número de Total de Taxones
fanerogámica mexicana. La cifra de démicos, se registran en uno o pocos esta- estados taxones endémicos
22351 especies rebasa substancialmente dos, mientras que muy pocos tienen una
1 8228 5566
las estimaciones de Rzedowski (1991) y distribución amplia. Hasta ahora, 8228
2 4459 2751
Dirzo y Gómez (1996), aunque está lejos taxones (5566 endémicos) han sido regis-
3 2737 1353
de las 30000 especies estimadas por trados en un solo estado, y 4459 (2751 en-
4 1803 816
Toledo (1993). Es difícil saber, por otra démicos) en dos estados. Estas cifran indi-
5 1249 548
parte, si 11 años después de la propuesta can que el 53% de ellos (62% del ende-
6 989 406
de Rzedowski, todavía hay un 20% de in- mismo nacional) son raros en el territorio,
7 750 326
certidumbre en el conocimiento de la flo- pues solamente se conocen de uno o dos
8 631 253
ra nacional. El número de géneros y es- estados. En el otro extremo, únicamente se
9 508 176
pecies que se continúan describiendo no han registrado ocho taxones en los 32 es-
10 445 147
sugieren que el desconocimiento de la tados (Amaranthus hybridus L., Anoda
11 360 117
flora haya sido revertido notablemente en cristata (L.) Schltdl., Cardiospermum hali-
12 318 100
estos dos lustros. En la Figura 1 se puede cacabum L., Chenopodium ambrosioides
13 317 79
observar la frecuencia con la que se han L., Evolvulus alsinoides L., Phytolacca
14 269 61
descrito los géneros y las especies de al- icosandra L., Tradescantia zebrina Bosse
15 222 52
gunos grupos importantes de la flora de y Typha domingensis Pers.) y el taxón en-
16 194 45
México. Las pendientes de las líneas no démico con mayor extensión en su área de
17 163 27
permiten sugerir que se haya llegado a un distribución se registra para 28 estados
18 154 26
punto donde el número de taxones nue- (Stevia origanoides Kunth).
19 127 17
vos ha terminado; algunas familias como Los valores de riqueza
20 129 12
Fabaceae y Poaceae, en lo que respecta al de especies estimada, utilizando las fór-
21 105 10
conocimiento de sus géneros, casi pare- mulas de Jacknife de primer orden (1) y
22 85 3
cen haber llegado a la asíntota, lo que de Chao2 (2) son los siguientes:
23 91 4
pudiera indicar que su conocimiento
24 70 3
florístico-taxonómico es mejor y cada vez (1) Sest=22351 + [7093 x 31]/32=29222
25 66 1
se incorporan a la flora menos taxones
26 43 0
nuevos de estas familias. Otros grupos, (2) Sest=22351 + (7093)2/2(3752)=29055
27 26 0
como Asteraceae y Orchidaceae, conti-
28 24 1
núan aportando un importante número de Con ambas fórmulas se
29 23 0
taxones nuevos para la flora mexicana. obtienen cifras bastante semejantes, indi-
30 21 0
En la Tabla VI se indica cando que a la flora conocida de México
31 12 0
la frecuencia de presencia de las especies le faltan por incorporar entre 6704 a
32 8 0
y taxones subespecíficos en los 32 estados 6871 taxones. Con ello, dicha flora