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VIERNES, TEMA 2: CONSECUENTE CON MI PRIMER AMOR

VINCULACIÓN
Adivinemos el personaje: cortar las siguientes pistas en pedacitos de papel (cada
una por separado) y repetirlas cuantas veces sea necesario conforme al número de
asistentes, de modo que cada asistente quede con una de las cinco pistas, de
manera aleatoria.

Pedirles que quienes tengan la pista A digan quién creen que es el personaje, sin
decir la pista. Luego pedir a los que tengan la pista B que digan, y así sucesivamente
hasta llegar a la 5.

Finalmente, leer todas las pistas y revelar el nombre correcto: Caleb

A. Integraba el pueblo que salió de Egipto hacia la tierra prometida.


B. Estuvo en Cades Barnea.
C. Habló bien de la tierra prometida.
D. Acompañó a su compañero, quien recibiría el legado de Moisés para
introducir al pueblo de Israel a la tierra prometida.
E. Pidió el Monte Hebrón para conquistarlo, cuando tenía 85 años.

CONCIENTIZACIÓN

En la biblia encontramos muchos personajes sorprendentes, y Caleb es uno de


ellos, pues a sus 85 años pide el Monte de Hebrón para conquistarlo con su
descendencia. Solícitamente se quedó con Josué creyéndole a Dios, y después de
45 años le cumple a Dios, enfrentándose a los gigantes y conquistando el Monte de
Hebrón, con la misma fuerza de su juventud, gracias a su extraordinaria fe y
fortaleza espiritual.

Ahora bien, Jehová me ha hecho vivir, como él dijo, estos cuarenta y cinco años,
desde el tiempo que Jehová habló estas palabras a Moisés, cuando Israel andaba
por el desierto; y ahora, he aquí, hoy soy de edad de ochenta y cinco años. Josué
14:10

La historia de este hombre es fascinante, y la hemos abordado en muchos


momentos, porque en diferentes etapas de su vida nos enseña cosas maravillosas,
y dentro de la visión del Primer Amor también tenemos mucho que aprender de él,
porque la biblia nos mostró siempre a un hombre que evidentemente permaneció
en su primer amor, dispuesto de manera permanente a hacer la voluntad de Dios.

1. VIVIR COMO DIOS DICE


"Dios me ha hecho vivir como Él dijo", fueron las palabras de Caleb, cuando se
acercó a Josué a pedirle que le permitiera conquistar el Monte Hermón. Aquí vale
la pena que nos preguntemos de manera personal: ¿He vivido cómo Dios ha dicho
de mí?

Dependiendo de cuál sea el centro de mi proyecto de vida, podemos estarlo viviendo


de diferentes maneras:

• Otros me han hecho vivir


• Yo he vivido a mi manera
• Dios me ha hecho vivir

Por supuesto la respuesta ideal es la tercera. Quien pueda afirmar que ha vivido
como Dios lo ha hecho vivir es muy afortunado. En términos neotestamentarios esto
significa "ya no vivo yo, más Cristo vive en mí”; y esto solo es posible si en verdad
Él ha sido mi Señor porque yo me he sometido a Él.

Entonces, mi plan de vida no puede ser otro que el que Dios tiene para mí.

2. ¿DÓNDE ESTAMOS HOY?

"He aquí, hoy..." continúa diciendo Caleb, porque no solo se presentó hablando de
su pasado, sino que se refirió a su vida en el presente. No se quedó con las glorias
alcanzadas en otros momentos de su vida, porque su decisión de vivir como Dios le
había indicado le permitía permanecer en pie, dispuesto a continuar.

Entonces partiendo de esta enseñanza, se hace necesario que también nos


preguntemos: ¿dónde estoy hoy? No es solo cómo he vivido en el pasado, sino
dónde estoy en este momento. Quien ha vivido firme con Dios, así debe estar en el
presente, y más que nunca debería estar anhelando seguir adelante conquistando
cada desafío que tiene por delante, por supuesto de la mano de Dios.
3. LA CLAVE PARA PERMANECER

¿Por qué Caleb tenía 85 años y seguía entero? Porque tuvo calidad de vida, ya que
fue Dios quien lo había hecho vivir hasta ese día. Esa era la clave de su fuerza, vivir
haciendo la voluntad de Dios.
Josué conocía a Caleb. La experiencia de los 12 en Cades Barnea, seguramente le
permitió ver desde tiempo atrás quién era él; y en este momento tenía frente a sus
ojos a un hombre que tenía su fuerza "Como al Principio".

4. EL QUE PERMANECE VA MÁS ALLÁ


Pero ahí no nos podemos quedar. Caleb no solo estaba firme, también estaba
planificando sus años por venir. Lo que el pueblo de Israel no hizo con 12 tribus,
Caleb lo quería hacer con una sola.

¿Qué hizo Caleb esos 40 años? Seguramente hizo discípulos, y sabía que no iría
solo, porque había formado un pueblo que lo apoyaría. Qué bonito que hoy cada
uno de nosotros podamos decir: "Todavía estoy tan fuerte para discipular, para
cuidar mi ministerio, para ser útil en mi distrito”.

La decisión que cada uno tomamos cuando decidimos aceptar a Cristo y servir a
Dios, fue que sea Dios quien "nos haga vivir" (“Haz de mí la persona que tú quieres
que yo sea”). En esto consiste la vida abundante, en hacer la voluntad de Dios, y
por supuesto esto implica ser instrumentos en sus manos.

5. EL CASO DE MOISÉS
Nadie como él en todas las señales y prodigios que Jehová le envió a hacer en tierra
de Egipto, a Faraón y a todos sus siervos y a toda su tierra. Deuteronomio 34:11

Moisés vivió algo similar. Comenzó su ministerio a los 80 años, y hay que ser muy
vigoroso para vivir lo que él vivió por 40 años, que fueron los años que condujo al
pueblo por el desierto.

Moisés tuvo varios momentos de crisis. Un día le dijo a Dios que si eso iba a
continuar así le quitara la vida. Y es normal que nosotros tengamos también
momentos difíciles, pero esto sucede porque mientras estemos en esta tierra
seguiremos siendo criados por Dios. Sin embargo, ni en medio de la crisis Moisés
dejó a Dios, ni lo provocó, y tampoco se le ocurrió volver atrás, como sí se le ocurrió
a su pueblo. A Moisés jamás se le ocurrió adorar un becerro.

APLICACIÓN TEOTERÁPICA

Si buscáramos una conclusión común a todas las enseñanzas de la Palabra de Dios


podríamos decir que “Permanecer” es casi una regla. En Caleb vemos a un hombre
que se mantuvo como al principio, porque permaneció siempre delante de Dios. Por
eso siempre fue de bendición para el pueblo de Israel, por eso entró a la tierra
prometida, y por eso a sus 85 años fue capaz de enfrentar el enorme desafío de
seguir conquistando la tierra que Dios le había entregado.

Es momento de decidir volver a vivir nuestra relación “Como al Principio”,


rindiéndonos por completo delante de Él, y permitiendo que su voluntad se haga en
nuestras vidas, para que podamos decir siempre que “hemos vivido como Dios ha
dicho”.

DETERMINACIÓN
Dado aplicativo: se invita a que 4 o 5 personas, voluntariamente pasen al frente

Se debe tener un cubo que en cada cara contenga las siguientes opciones:

1. Aplicación: a la persona que le corresponda este aspecto deberá decir de


manera resumida una aplicación de lo que aprendió.
2. Compromiso: decir cuál es el compromiso que este tema le lleva a adquirir hoy.
3. Ceda el turno: claramente quién saque esta cara debe permitir que lance el dado
la siguiente persona.
Estas tres opciones se deben repetir, lo que indica que cada opción estará en dos
caras.

En caso de que se dificulte hacer el dado, se pueden hacer fichas pequeñas


numeradas, y se escriben las tres opciones mencionadas al azar. Luego, la persona
a cargo dice un número, y quien lo tenga deberá hablar sobre la aplicación, el
compromiso, o ceder el turno, según aparezca en su ficha.

CONSAGRACIÓN
Llevar a los asistentes a proponer de corazón a volver al primer amor, como al
principio, haciendo todo lo que sea necesario para ello. (Previamente pegar debajo
de las sillas el versículo Josué 14:12, y en medio de la oración pedirles que tomen
la promesa que está pegada en la parte inferior de sus asientos).

Terminar con la canción “Dame ese Monte” de Jesús Adrián Romero, e invitarlos a
pensar en cuál es el desafío que saben que deben asumir delante de Dios, y que le
pidan que les entregue ese Monte para conquistarlo.

https://www.youtube.com/watch?v=aSJccBmfNTU

REPRODUCCIÓN
Subir a las redes sociales una enseñanza el seminario de Semana Santa, con el
Hashtag #SemanaSanta2022

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