Está en la página 1de 3

INDICE

Introducción Pág. 3
Elementos de trabajo Pág. 7
Preparación Pág. 11
Recomendaciones de seguridad Pág. 14

Ejercicios de Guardia y Protección.

Nivel 1 Pág. 15
Nivel 2 Pág. 21
Nivel 3 Pág. 24
Nivel 4 Pág. 28
Nivel 5 Pág. 32
Nivel 6 Pág. 37
Nivel 7 Pág. 43
Nivel 8 Pág. 46
Nivel 9 Pág. 48
Resumen de actividades Pág. 52
Lista de ordenes sugeridas Pág. 53

2
Introducción.

Al realizar este manual nuestra principal interrogante era decidir si


hacíamos lo correcto al dar información sobre esta disciplina al público
en general.

La respuesta a esta pregunta se hizo evidente cuando paseaba con


uno de mis perros y en un parque cercano unos jóvenes estaban
“adiestrando” a un American Pit Bull Terrier en lo que ellos llamaban
“ataque”.

Un joven, que conocía al perro y era amigo del dueño hacía el papel
del “malo” y lo golpeaba con una jerga, el dueño le daba de “nalgadas”
a su perro para hacerlo enojar más, por supuesto el ayudante no
contaba con la mínima protección.

Sin saberlo, y en una de las demostraciones más grandes de


ignorancia que he visto, este jovencito le estaba enseñando a su perro
a enojarse y atacar incluso a sus propios amigos, después de esto no
es raro poder explicar porque oímos tan seguido en las noticias que un
Pit o un Rottweiler o un Doberman atacaron a personas conocidas o a
los propios miembros de su familia; por supuesto, los que menos eran
culpables de esta situación eran los perros.

El adiestramiento en guardia y protección


es una gran responsabilidad, no es un
juego y no se debe tomar a la ligera, el
objetivo de esta disciplina es que nuestro
perro nos defienda en caso necesario
pero nunca se adiestra a un perro con la
finalidad de atacar y hacerlo agresivo.

Un perro mal adiestrado es como una


pistola cargada en las manos de un niño
de 5 años, deberemos de estar bien
conscientes de nuestra responsabilidad
antes de comenzar a adiestrar a nuestro
perro.

También podría gustarte