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1.

CRIMINAL COMPLIANCE:
1.1. DEFINICIÓN DEL CRIMINAL COMPLIANCE
Coca Vila define el criminal compliance como: “Un mecanismo interno que las
empresas implementan y que consiste en un conjunto de medidas tendentes a
asegurar que cada uno de sus miembros, desde los directivos hasta el último
empleado, cumplan con las normas penales” (Coca, 2013 citado (Sota, 2018))

De esta manera se puede mencionar que este mecanismo tiene como finalidad,
dar cumplimiento a la normativa penal vigente, de ese modo evitar incurrir en
la comisión de delitos dentro del marco de las actividades que realiza la
empresa, también detectar aquellas infracciones que se hayan cometido para
denunciarlos y sancionarlos. (Sota, 2018)

1.2. NATURALEZA DEL CRIMINAL COMPLIANCE


Según Goñi Sein alude que la naturaleza del criminal compliance es mixta,
como en el marco público y privado, dado que considera que:

Si bien es la empresa la que establece el contenido, en diversas ocasiones los


parámetros de actuación los determina el Estado a través de sus normas y
reglamentos internos; sin embargo, algunos autores señalan que en la medida
en que persigue el respeto de la legalidad y la neutralización de los riesgos
penales, asume también cierto carácter de orden público (Goñi, 2014 citado
(Guevara, 2020)).

Sin embargo, en el caso de referirse a la implementación se encuadra en el


punto de vista de lo que se denomina autorregulación regulada, y la
contribución por parte del sector privado y el Estado en el siguiente punto
importante: prevención y detectar la comisión de delitos como producto de la
ejecución del desempeño económico dentro de la empresa. (Guevara, 2020)

1.3. OBJETIVO DEL CRIMINAL COMPLIANCE


El objetivo central del criminal compliance es el cumplimiento de la
normatividad penal del ordenamiento jurídico en el cual la empresa ejecute sus
actividades o se detectar su estructura, dado que son estos elementos los que
son proclives a generar transgresiones a la normativa penal.

Por otra parte, como consecuencia del objetivo central, este mecanismo debe
ser competente de examinar y reducir los riesgos que la actividad de una
empresa pueda generar, se busca combatir la infracción a la ley penal, es decir,
prevenir la comisión de delitos. (Sota, 2018)

1.4. FUNCIONES DEL CRIMINAL COMPLIANCE

García sostiene las siguientes funciones desde el punto de vista de cómo


repercuten en el sistema jurídico penal (García, 2017 citado (Sota, 2018)):

 FUNCIÓN DE PREVENCIÓN DE DELITOS

Esta función es considerada como la principal, del cual radica en


prevenir y descubrir las actividades ilícitas que puedan ejecutar los
miembros de la empresa (directivos y empleados), mediante las medidas
preventivas que se adopten.

 FUNCIÓN DE CONFIRMACIÓN DE LA NORMATIVA PENAL

Consiste en que, si un delito es cometido dentro de la actividad de la


empresa pese a la labor de prevención, le será competente a la empresa
mostrar una actitud de adhesión al derecho, a través de la adopción de
medidas de mitigación y compensación de los daños ocasionados como
resultado del ilícito penal.

 FUNCIÓN DE COADYUVAR EN LA FORMACIÓN DE UNA


CULTURA DE CUMPLIMIENTO, PERO EN EL ÁMBITO
PENAL

Se da cuando hay un efectivo compromiso de la Alta Dirección en guiar


la actividad de la empresa produciendo un valor compartido y
respetando, y de esa forma haciendo respetar en el marco de la empresa,
los valores y principios propios que tiene, que se ha definido en su
Código ético, promoviéndose una cultura de cumplimiento.
1.5. DIFERENCIA ENTRE EL COMPLIANCE Y EL CRIMINAL
COMPLIANCE
Según (Cueva, 2020) precisa la diferencia entre el compliance y el criminal
compliance, del cual el compliance es la categoría general como guía de
prevención aplicada a todos los campos del derecho y del avance de las
actividades empresariales. Y por otra parte el criminal compliance que también
se denomina compliance penal, consiste en que es un rango especial del
compliance en general, del cual es específico en el área penal. Asimismo, la
competencia en su implementación y aplicación por parte de las empresas
permite determinar responsabilidades penales o eximirlas, según se presenten
los casos. (Cueva, 2020, pág. 6)

1.6. LA RESPONSABILIDAD PENAL EN EL ORDENAMIENTO


JURÍDICO
En nuestro ordenamiento jurídico se ha cimentado el principio de
responsabilidad penal individual, vale decir que las personas naturales son
quienes serán sancionadas en el ámbito penal por los ilícitos incurridos.
(Clavijo, 2014, pág. 641)

Con respecto a la criminalidad empresarial, el legislador ha precisado ciertas


reglas para evitar conductas ilícitas. Como ejemplo se podría decir, si en el
marco del desempeño de una empresa, sus miembros (gerentes, directores,
accionistas) cometen un ilícito, estos van a responder penalmente conforme a
lo estipulado en el artículo 27° (Código Penal peruano).

En ese sentido, los funcionarios de la empresa pueden ser responsables penales


directos, ya sea como autor o partícipe, cuando incurran en delitos por
intermedio de la sociedad o si el ejercicio ilícito de sus funciones constituye un
delito en daño de terceros o de la propia sociedad. (Clavijo, 2014, pág. 641)
Por consiguiente, en el artículo 105° de nuestro Código Penal, trata de las
medidas aplicables a las personas jurídicas, involucradas en conductas
penalmente reprochables, de forma accesoria y dependiente de la condena que
se aplique a las personas físicas sentenciadas por el accionar de un delito en
ejercicio de su actividad en la empresa o en uso de la organización. Por ello
cabe decir, que no se basan en un defecto de la organización de la persona
jurídica, sino en la actividad ilícita de sus funcionarios o representantes.
(Clavijo, 2014, pág. 644)

CONCLUSIONES

 El Criminal Compliance es un mecanismo interno que las empresas


implementan y que consiste en un conjunto de medidas tendentes a asegurar que
cada uno de sus miembros, desde los directivos hasta el último empleado,
cumplan con las normas penales.

 El Criminal Compliance debe buscar el cumplimiento de toda la normativa penal


que pueda ser aplicable a la empresa, sea por la actividad en la cual se
desempeña o por su compleja estructura. Esto quiere decir, el referido Programa
de Cumplimiento Normativo Penal debe ser capaz de adaptarse a distintos
ordenamientos jurídicos para los casos de empresas que operan en distintos
países. Asimismo, debe ser flexible en el sentido de poder adecuarse a los
distintos rumbos que tome el giro del negocio de la empresa.

REFERENCIAS

 Clavijo, C. (2014). Criminal compliance en el derecho penal peruano.


Derecho PUCP (73), 625-647.
https://revistas.pucp.edu.pe/index.php/derechopucp/article/view/11321

 Cueva, W. C. (2020). Compliance y criminal compliance. SSIAS, 13(2).

 Guevara, L. (2020). Criminal compliance, prevención y detección de delitos


para las empresas públicas en el Perú. Universidad Nacional del Altiplano De
Puno.
http://repositorio.unap.edu.pe/bitstream/handle/UNAP/14126/Guevara_Lupaca
_ Lenin.pdf?sequen
 Sota, P. A. (2018). Compliance penal y su función en la atribución de
responsabilidad penal / administrativa de las personas jurídicas. Advocatus
(037), 91-110.doi:

https://doi.org/10.26439/advocatus2018.n037.4575

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