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CRANMER, THOMAS (1489-1556)

Wenceslao Calvo (23-03-2010)

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Evangélica Pueblo Nuevo

Thomas Cranmer nació en Aslacton, Nottinghamshire, Inglaterra, el 2 de julio de 1489 y murió en la hoguera en
Oxford el 21 de marzo de 1556.

Pasó ocho años en Jesus College, Cambridge, donde obtuvo su licenciatura en filosofía y letras en 1510 o 1511
y su máster en filosofía y letras en 1515. Hacia el tiempo de la publicación del Nuevo Testamento de Erasmo
(1516) y las tesis de Lutero (1517), comenzó a estudiar sistemáticamente las Escrituras; fue ordenado antes de
1520, siendo predicador y examinador en teología. Hacia 1525 había comenzado a 'orar en privado por la
abolición del poder papal en Inglaterra', pero no se comprometió abiertamente.

Relación con el divorcio real.


En el verano de 1529, hablando sobre la cuestión del divorcio con los principales emisarios del rey, Fox y
Gardiner, Cranmer sugirió sacar el asunto de las manos de los juristas y ponerlo en las de los teólogos de las
universidades. Enrique se aferró a la sugerencia, citando a Cranmer y ordenando la preparación de un tratado
sobre la cuestión, haciendo uso de la influencia de Cranmer también en otras maneras, al incluirle en la
embajada que salió de Inglaterra en 1530 para ver al papa y al emperador. Trajo pocos resultados definidos,
pero el rey le recompensó nombrándole archidiácono de Taunton y en 1532 embajador ante el emperador.
Durante su viaje por Alemania se puso en contacto con el dirigente luterano Osiander, casando a su sobrina
Margarita. En el otoño de ese año, Enrique determinó designarle para el arzobispado de Canterbury, vacante tras
la muerte de Warham, siendo consagrado el 30 de marzo de 1533, tras haber elaborado una protesta formal en la
que consideraba el juramento de obediencia al papa una legalidad pero no una realidad, no atándose a nada que
fuera contrario al rey y a la comunidad inglesa, o que recortara su libertad en cuestiones pertenecientes a la
reforma de la religión cristiana y al gobierno de la Iglesia de Inglaterra. En abril pidió permiso al rey para
proceder en el caso de Catalina, abriendo el juicio en mayo y pronunciando sentencia el día 23 de ese mes,
declarando que el matrimonio de Enrique y Catalina era vacío desde el principio. Cinco días más tarde declaró
el matrimonio de Enrique con Ana Bolena válido, coronándola como reina el 1 de junio.

Comienzos de la Reforma.
La brecha con Roma por el lado jurídico se había ensanchado considerablemente, mientras que el aspecto
doctrinal también iba a agrandarse. En 1534 Cranmer publicó una pastoral pidiendo silencio sobre las misas de
difuntos, oraciones por los santos, peregrinaciones y celibato, cuestiones en las que esperaba alcanzar una
decisión en el curso de un año. En 1536, aunque hablaba con el mayor aprecio personal por Ana Bolena, fue
obligado oficialmente a declarar el matrimonio de Enrique con ella también vacío, publicando una licencia, el
mismo día en que ella era decapitada, para que él se casara con Jane Seymour. La revisión de la doctrina
sucedió paso a paso, ayudando a tal efecto la publicación de la versión inglesa de la Biblia, que era un proyecto
Thomas Cranmer, por G. Fliccius. National Gallery, Londres
favorito de Cranmer. Permaneció en su puesto durante el reaccionario sistema de los Seis Artículos, estando
sujeto a continuos asaltos de la facción católica durante los últimos años del reinado de Enrique. Protegido por
éste, Cranmer maduró lentamente sus planes de reforma religiosa. Trabajó en la preparación de los cultos, en los
cuales la letanía que apareció en 1545 fue el primero en entrar en uso. El primer libro de Oración de Eduardo VI
era obra de Cranmer, tal como fue presentado ante el Parlamento, aunque después sería modificado para
alcanzar un compromiso entre las dos facciones. Durante el reinado de Eduardo VI, estuvo constantemente
ocupado con proyectos para acabar el nuevo orden de cosas, incluyendo la revisión de la ley canónica conocida
como Reformatio legum ecclesiasticarum y los Cuarenta y Dos Artículos, que después serían reducidos a
Treinta y Nueve.

Caída bajo María y muerte.


El segundo Libro de Oración de Eduardo VI representaba el avance de Cranmer hacia el protestantismo
continental, pero se adhirió firmemente a esa postura tras la ascensión de María, sabiendo que ponía en riesgo su
vida. Un manifiesto que él escribió definiendo su postura, se puso en circulación sin su permiso, lo que condujo
a su arresto en septiembre de 1553 y a su juicio por traición dos meses más tarde, sobre la base de su
complacencia con el plan de proclamar a Lady Jane Grey como reina. Fue condenado a muerte, pero su carácter
eclesiástico hacía imposible ejecutar la sentencia, tal como la ley entonces prescribía. Durante meses estuvo
preso en la Torre, hasta que la aprobación del estatuto De hæretico comburendo, en enero de 1555, precipitó su
fin. Fue llevado a Oxford y allí sometido a un interrogatorio ante un tribunal de jurisdicción papal. El 25 de
noviembre fue declarado contumaz por el papa al no presentarse en Roma, excomulgándolo solemnemente.
Reginald Pole fue designado para cubrir su puesto, creándose una comisión para degradar a Cranmer y
entregarlo al brazo secular. Él apeló en vano a un concilio general y en febrero Bonner y Thirlby fueron a
Oxford para ejecutar la sentencia. Cranmer firmó los documentos que han sido conocidos como sus sucesivas
retractaciones, aunque los tres primeros, al menos, no son realmente retractaciones sino sometimientos a la
autoridad, tal como sus principios políticos siempre le impulsaron a hacer. Su quinta, o real, retratación fue
firmada más bajo la influencia de seductoras esperanzas que por el miedo. Capitulaba en cada punto por los que
había luchado, se anatematizaba la herejía de Lutero y Zwinglio y se reconocía al papa como cabeza suprema de
la Iglesia en la tierra. Una sexta y más humillante confesión la firmó el 18 de marzo. Cuando vio que no había
conseguido nada y que su fin estaba resuelto, se preparó para un esfuerzo final, retractándose públicamente de
sus retractaciones y enfrentando valientemente su destino final, muriendo en la hoguera en Broad Street,
Oxford, en el mismo lugar donde Ridley y Latimer ya habían sido ajusticiados.
Fue un hombre sencillo y de carácter afable, teólogo entendido y un gran promotor del saber. Aunque de
temperamento apocado y sensible y con una mente lenta y vacilante, una vez que captó su deber no mostró falta
de valor. Si al final estuvo dispuesto a ceder en el cambio de creencias que sus inquisidores le demandaban,
redimió su falta mediante un heroísmo a la hora de la muerte que tiene pocos paralelos en la Historia.

De su obra Prefacio a la Biblia es el siguiente pasaje:

'Si algo es necesario saber, lo aprenderemos de la Sagrada Escritura. Si se ha de rechazar la


falsedad, es de ella que obtendremos los modos para hacerlo. Si algo ha de corregirse y
enmendarse, si hay necesidad de exhortación o de consolación,
Cranmer enselasretracta
Escrituras
anteaprenderemos
sus acusadoreslo
necesario. En ellas se encuentran los pastos verdes del alma; en ella no hay carne venenosa ni nada
insalubre; ella es el alimento puro y delicioso. El ignorante encontrará en ella lo que ha de aprender.
El pecador perverso encontrará allí su condenación, que le hará temblar de temor. Quien se esfuerce
por servir a Dios encontrará allí su gloria y las promesas de vida eterna, que le exhortan a continuar
más diligentemente en su labor.'

Muerte de Cranmer en la hoguera

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