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UNIVERSIDAD SIGLO 21

Carrera: Abogacía

Trabajo Práctico N°2

Cátedra: DCHO. AMBIENTAL

Alumna: MARIA VICTORIA PEREYRA LAGO


1.- La proliferación de los carpinchos en Nordelta ha vuelto a poner en agenda la
necesidad de una ley de protección ambiental. Se trata de una especie autóctona de
ese ambiente, desplazada por un emprendimiento inmobiliario que avanzó sobre un
humedal natural. El impacto de la urbanización de las zonas que bordean los
humedales ha generado conmoción y cambios en esos ambientes naturales, se rompe
el ecosistema y eso genera diversos problemas ambientales. Para detener esa
degradación y destrucción, es necesario plantear la necesidad de contar con una "Ley
de presupuestos mínimos para la conservación y uso sostenible de Humedales", la cual
consista en determinar un inventario de los humedales, protegerlos y tipificar como
delito penal su destrucción.
El principio in dubio pro natura establece que en caso de duda, todos los procesos ante
tribunales, órganos administrativos y otros tomadores de decisión deberán ser
resueltos de manera tal que favorezcan la protección y conservación del medio
ambiente, dando preferencia a las alternativas menos perjudiciales.
El carpincho es una especie silvestre y como tal se encuentra protegida por la ley
nacional N.º 22.421 de 1981 y por el Código Rural-Decreto Ley 10081/83 de la
provincia de Buenos Aires. Este marco normativo declara de interés público a la fauna
silvestre: “Declárase de interés público la fauna silvestre que temporal o
permanentemente habita el Territorio de la República, así como su protección,
conservación, propagación, repoblación y aprovechamiento racional. Todos los
habitantes de la Nación tienen el deber de proteger la fauna silvestre, conforme a los
reglamentos que para su conservación y manejo dicten las autoridades de aplicación”
(Art. 1 Ley 22.421) “Declárese de interés público la fauna silvestre, que incluye a todas
las especies animales que viven fuera del contralor del hombre, en ambientes naturales
o artificiales” (art. 264 Código Rural-Decreto Ley 10081/83). Dado su carácter de
especie silvestre, no se puede ejercer ninguna acción sobre estos animales en el
territorio de la provincia sin previa intervención y autorización de la Dirección de Flora y
Fauna.
2.-El Estado justifica su negativa de información amparándose en el artículo 7 de la ley
25831: ARTICULO 7° — Denegación de la información. La información ambiental
solicitada podrá ser denegada únicamente en los siguientes casos: a) Cuando pudiera
afectarse la defensa nacional, la seguridad interior o las relaciones internacionales; b)
Cuando la información solicitada se encuentre sujeta a consideración de autoridades
judiciales, en cualquier estado del proceso, y su divulgación o uso por terceros pueda
causar perjuicio al normal desarrollo del procedimiento judicial; c) Cuando pudiera
afectarse el secreto comercial o industrial, o la propiedad intelectual; d) Cuando pudiera
afectarse la confidencialidad de datos personales; e) Cuando la información solicitada
corresponda a trabajos de investigación científica, mientras éstos no se encuentren
publicados; f) Cuando no pudiera determinarse el objeto de la solicitud por falta de
datos suficientes o imprecisión; g) Cuando la información solicitada esté clasificada
como secreta o confidencial por las leyes vigentes y sus respectivas reglamentaciones.
La denegación total o parcial del acceso a la información deberá ser fundada y, en caso
de autoridad administrativa, cumplimentar los requisitos de razonabilidad del acto
administrativo previstos por las normas de las respectivas jurisdicciones.
Tiene por objeto garantizar el efectivo ejercicio del derecho de acceso a la información
pública, promover la participación ciudadana y la transparencia de la gestión pública.

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