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Predica; 05 de Junio del 2022

SOMOS DE JEHOVÁ DIOS, PUES ÉL NOS COMPRÓ
Nuestro Padre Celestial, pagó un precio muy alto (1 Corintios 7:23) “Por precio
fuisteis comprados; no os hagáis esclavos de los hombres”. Por esta razón no debemos
hacernos esclavos de nadie. Justo antes de morir dijo estas palabras (Juan 19:30)
“Cuando Jesús hubo tomado el vinagre, dijo: Consumado es. Y habiendo inclinado la
cabeza, entregó el Espíritu”. Nuestro Padre Celestial, realiza la compra por medio de
este sacrificio de muerte. Por lo tanto…, Como Jehová Dios nos ha comprado con la
Sangre de Cristo, debemos reconocer que ya no tenemos el control de nuestras
vidas. Pues hemos sido comprados y ahora estamos bajo el Señorío de nuestro
nuevo Dueño Jehová Dios. Por medio de la muerte de Jesucristo, Jehová Dios
nos ha perdonado nuestros pecados: (Apocalipsis 1:5,6) “5 y de Jesucristo el
testigo fiel, el primogénito de los muertos, y el soberano de los reyes de la tierra. Al que
nos amó, y nos lavó de nuestros pecados con su sangre, 6 y nos hizo reyes y sacerdotes
para Dios, su Padre; a ÉL sea gloria e imperio por los siglos de los siglos. Amén”.
Además, Jesucristo nos permite gobernar como reyes, y nos ha puesto como sacerdotes
al servicio de Jehová Dios su Padre. Por esta razón, ¡¡alabemos todos a Jesucristo, y
que sólo ÉL tenga todo el Poder en el mundo dónde nos movemos!!!

Jehová Dios nos ha comprado a ustedes y a mí. (1 Corintios 6:19) “¿O ignoráis
que vuestro cuerpo es templo del Espíritu Santo, el cual está en vosotros, el cual tenéis
de Dios, y que no sois vuestros?”. Ustedes no son sus propios dueños, porque Dios
los ha comprado. (1 Corintios 6:20) “Porque habéis sido comprados por precio;
glorificad, pues, a Dios en vuestro cuerpo y en vuestro espíritu, los cuales son de Dios”.
Cuando alguna tentación o algún ataque de nuestro enemigo en común que
tengamos, entonces debemos de tomar la Espada del Espíritu que es la Palabra
de Dios: (Tito 2:15) “Esto habla, y exhorta y reprende con toda autoridad. Nadie te
menosprecie”. Aprendamos a luchar contra el diablo, reprendiéndolo en el Nombre de
Jesucristo, pues tenemos un dueño que se llama Jehová Dios, quien a su vez nos entregó
a su Hijo Jesucristo: (Juan 10:27,28) “27 Mis ovejas oyen mi voz, y yo las conozco, y
me siguen, 28 y YO les doy vida eterna; y no perecerán jamás, ni nadie las arrebatará
de mi mano”. Jesús describió la disposición de Gracia y el estado de dicha de sus ovejas;
Nosotros como sus ovejas, oímos y creemos en Su Palabra, le seguimos como sus fieles
discípulos, y ninguno de nosotros perecerá, porque el cómo Hijo y el Padre son uno.
(Tito 2:14) “quien se dio a sí mismo por nosotros para redimirnos de toda iniquidad y
purificar para sí un pueblo propio, celoso de buenas obras”. Por esta razón, puede
defendernos cómo sus ovejas contra todos nuestros enemigos, lo cual prueba tener poder
y perfección divinos iguales al Padre.

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Predicador de la Sana Doctrina de Cristo: Víctor R. Preciado Balderrama. Si usted

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